-Escribes demasiado pero piensas poco. Si te atienes a la Biblia verás que pensarás mejor y escribirás menos.
Cuando el Señor fue tentado por el diablo, no pensó mucho, como tu pretendes, en el caso mío.
¿Qué hizo el Señor?
Citó la Escritura.
Y eso es lo que he hecho, citar la Escritura, y sobre ella construir el significado de las Palabras, Padre, Hijo y Espíritu Santo, no como algo etéreo, sino como Personas que hablaron.
Así de esta forma sencilla entiendo la Trinidad como Doctrina fundamental del Cristianismo, citando la Escritura, aquí está de nuevo:
Gén_1:3 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz.
Mat_3:17 Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
Mat_15:16 Jesús dijo: ¿También vosotros sois aún sin entendimiento?
Hch 13:2 Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado.
Las tres voces distintas que escuchamos (Mt.3:17; 15:16; Hch.13:2) forman UNA SOLA VOZ EN GÉNESIS 1:3
YO NO TENGO QUE PENSAR MUCHO ACERCA DE LA TRINIDAD, PUES LAS ESCRITURAS PRESENTADAS, DONDE HABLÓ DIOS, Y LUEGO LAS TRES PERSONAS, ASÍ LO ENSEÑAN.
Los problemas de interpretación surgen,
cuando evitamos permitir que la Escritura hable por sí misma, entonces surgen las interpretaciones humanas, las cuales dan origen a muchos grupos religiosos, cada uno pretendiendo usar su propia interpretación como la "verdad" por ellos establecida.
Ahí están los "solo Jesús", los "Testigos de Jehová", los "católicos romanistas", los "mormones", etcétera, todos ellos conforman la "Cristiandad profesante", donde Padre, Hijo, y Espíritu Santo, solo son conceptos abstractos, a los cuales se les puede interpretar a su conveniencia, para sus propios intereses de captación de personas.
El caso reciente del video que sube Julio Parada, apela a Hechos 4:12 para enseñar que el nombre de Jesús es el nuevo nombre revelado solo a este grupo, en el cual podamos ser salvos, fuera de su contexto natural:
Hch 4:12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
La salvación no es por el bautismo en agua en el nombre de Jesús, ni tampoco por Mateo 28:19, aquí se equivocan estos seguidores de este "Jesús bautismal" o "Trinitario"; de ninguna manera, debemos aceptar que "Jesús" es una palabra mágica que perdona pecados y da vida eterna, usando el bautismo en agua como medio salvífico.
La Salvación no es por la Obra del bautismo, trasciende el escenario terrenal y va mucho más allá hasta Eternidad antes del comienzo de los siglos.
Es allí donde se planeó la Obra de la Redención (2Tim.1:9; 1P.1:18-20).
El elemento escogido para la limpieza del pecado es la sangre (Lev.17:11) y la muerte del Cordero de Dios, pone fin a la ley (Ro.10:4) para dar paso a la Justicia de Dios (2Cor.5:21) donde las demandas de la Justicia Divina fueron completamente satisfechas por el Hijo de Dios.
El largo camino transcurrido desde antes del comienzo de los siglos, desde antes de la fundación del mundo, había finalizado con la expresión "CONSUMADO ES".
Su Resurrección, lo transforma en la Cabeza Federal de una nueva civilización que no pertenece a la tierra, la lucha ha ganado, allí sentado está, el Salvador Jesús, a la diestra de su Padre.
Los solo Jesús, solo ven un Trono, sin el Padre, ocupado solo por el Hijo, esto es lo que se desprende de la predicación de Julio Parada, en Linares, Chile.
Su Obra terminada ya, él intercede siempre allá, por los que creen en él.
El mismo volverá, pues su palabra es fiel, y su promesa cumplirá pues nuestros cuerpos cambiará a semejanza del cuerpo de él (Fil.3:20-21).
Y cuando el venga por su iglesia, el Padre estará esperando su retorno para que se siente de nuevo a su Diestra, donde ha permanecido eternamente y para siempre, pero ya con una gloria nueva, con cuerpo de Hombre Perfecto, glorificado, que ya posee.
No obstante, la expresión "inmolado" que hallamos en el capítulo 5 de Apocalipsis en la adoración universal al Cordero, nos da a entender que todavía conserva las huellas en su manos costado y pies, del precio que pagó por nuestra salvación, para que vengan estos "espíritus inmundos" a pretender reducir su Altísima dignidad en el cielo y en la tierra, a un sencillo bautismo en el nombre de Jesús, para reemplazar su sangre preciosa por la física agua, como si el perdón de pecados fuese cosa de chasquear los dedos en el nombre de Jesús.
Ojalá entiendan.
