Por donde se vea, el ateísmo parece estar en banca rota.
Por un lado, bajo la definición de los nuevos ateos (ausencia de creencia teísta), el ateísmo no es una posición intelectual en lo absoluto. Solo describe el contenido o más bien, la ausencia de cierto contenido en la psique de una persona, en este caso, la ausencia de la creencia en Dios.
Del otro lado, bajo la definición tradicional de ateísmo (negación de la existencia de Dios), este nos lleva a una cosmovisión nihilista donde incluso una contradicción lógica es la realidad: “Es verdad que Dios no existe”. Pero considerando que el nihilismo es una realidad y por tanto, no hay verdades…No es verdad que Dios no existe…aun cuando lo es.
También podríamos señalar, que cuando el ateísmo tradicional se funde con otros criterios, se llegan a contradicciones. Por ejemplo, hay ateos que sostienen este “set” de ideas o criterios:
1) No se debe creer en nada para lo que no hay pruebas.
2) Los negativos universales no pueden probarse.
3) El ateísmo niega que Dios exista.
Por lo tanto, en vista de que los negativos universales no se prueban y no se debe creer en nada para lo que no hay prueba, entonces, la negación de la existencia de Dios, no debe tomarse por cierta.
Pero también existe otro tipo de ateísmo, el que clama que no creen en la existencia de Dios, porque no han encontrado evidencia que les permita aceptar dicha creencia. Hay 3 cosas que podríamos señalar sobre esta posición.
1) Si con evidencia se están refiriendo a evidencia científica, entonces, están tomando un criterio injusto y falso para evaluar la verdad de la hipótesis Dios existe. La razón es simple. Dios es considerado una entidad inmaterial. La metodología científica está diseñada exclusivamente para operar en el mundo material. Por lo tanto, no se puede esperar que la metodología científica que está diseñada para operar en lo material, ofrezca evidencia de lo inmaterial. Es una petición falaz.
2) Todos aceptamos la validez y existencia de cosas que no tienen evidencia empírica que las soporten. Por ejemplo, las reglas de la lógica son inmateriales. Lo valores y deberes morales también. Los números y operaciones matemáticas también son inmateriales. Aun así, nadie les niega porque no hay forma de experimentar empíricamente su existencia. Por el otro lado, nadie tiene evidencia de que sus capacidades cognitivas y sus sentidos no estén siendo totalmente engañados y viva en una completa ilusión desde el día en que nació. Aun así, nadie niega, ni aplica este criterio, cuando se trata de confiar en la validez de nuestras capacidades cognitivas y nuestros sentidos. Todos confiamos a priori en ellos.
3) Por último, quizá no hay evidencia científica a favor de la existencia de Dios, lo cual, es de esperarse. Sin embargo, tenemos una herramienta adecuada para indagar acerca de Dios, el raciocinio y reglas para llevar este de forma correcta, la lógica. Por medio del uso de la razón guiado por la lógica, podemos decir que existen pruebas lógicas de la existencia de Dios. No podrían ser comparados de ningún modo con la evidencia ofrecida por la metodología científica, ya que son dos cosas diferentes y los objetos que se estudian, son abismalmente distintos.