Dilema de Romanos 7 y Romanos 8: "dos hombres y un destino" desde el prisma de la Vida Interior.

IBERO

Ibero de Iberia
26 Noviembre 2005
6.337
660
Iberia
INTRODUCCIÓN:
Durante buen número de años, tenía metida en la cabeza la idea de que Romanos 7 era el "estado inmaduro" de un creyente (casi en los límites del incrédulo), y Romanos 8 era ese mismo creyente que por fin de alguna forma milagrosa y sacrosanta había conseguido alcanzar "la victoria" o un "avanzado estado espiritual maduro". Si bien es cierto que hay muy distintos estados espirituales y la madurez es una realidad para el creyente en esta tierra (día a día... minuto a minuto), la enseñanza de estos dos capítulos es bien distinta. Aunque muchos de vosotros compartís esta visión, dejad que resuma ambos capítulos para facilitar el entendimiento. Aunque no me gusta limitar el texto a estos dos capítulos (porque como he dicho en algunas ocasiones, las cartas son un "cuerpo" que debe asimilarse en su conjunto), lo hago por razones de espacio y tiempo limitados. También advierto que he resumido muchísimo.


CAPITULO 7 de Romanos:

Rom 7:1-6
Cristo me mató en la cruz y esta muerte también me ha hecho morir ante "los mandamientos de Dios" que se enseñoreaban de mí porque no podía cumplirlos.

Rom 7:7-14
De hecho, estos mandamientos de Dios "avivan" mi pecado, es decir: me muestran crudamente en las narices que SIEMPRE estoy lejos de cumplir lo que a Dios le agrada, que es ser santo, perfecto y bueno. La ley de Dios es perfecta, pero yo no lo soy; soy un "error" y una "imperfección" andante; es algo que está en mi naturaleza, en mi esencia, en mi ADN, por lo que esta "Ley Suya" SIEMPRE mostrará mi incapacidad para cumplirla tal y como el Autor quiere que se cumpla. NO PUEDO CUMPLIR lo que a Él le gusta. No tengo remedio.

Rom 7:15-25
Y cuidado, no es una cuestión de que yo "no quiera" cumplir Sus leyes. Yo quiero y amo la ley de Dios con todas mis fuerzas y la pasión de mi corazón, y la reconozco y veo como justa y buena, pero siempre veo una extraña "ley en mí" que me arrastra continuamente al error, haciéndome un esclavo perpetuo del error. No puedo quitarme esta ley de encima. Se me pega como una sanguijuela y me chupa la sangra la muy... pend***. Es como la ley de la gravedad. Siempre está ahí y no te puedes librar de ella seas pobre o rico, listo o tonto de remate.


CAPITULO 8 de Romanos

Rom 8:1-13
No obstante, en la persona de Jesús hay una cosa "milagrosa" que se llama Vida. Esta extraña y "mágica" Vida actúa como "otra ley" que me libra de la muerte que merezco por no ser capaz de obedecer lo correcto y perfecto. Sabiendo todo esto (habiendo comprobado mi fracaso por la experiencia diaria)... ¿me voy a hacer siervo de una serie de leyes que muestran que soy un fracasado día a día y minuto a minuto? ¡De ninguna manera! Más bien lo que me interesa y lo que voy a buscar es a esta Persona que dice que es capaz de darme a comer esta Vida (es decir, de conocerle en lo íntimo de mi estómago, asimilando el poder de este Alimento en mí mismo) . No me interesan mis esfuerzos para cumplir Sus leyes. Eso no tiene futuro. Ahí sólo hay muerte.

Rom 8:14-17
Se hace obvio que los que prestan atención y oídos a este Pan de Vida son los que realmente están a buenas con Jesús. El miedo quedó atrás, pues ahora este Pan Espiritual nos hace clamar como un niño a su Padre, "¡Papá, Papá!", porque ciertamente este Padre nos ha adoptado como hijos Suyos. Imagínate... "¡Hijo de Dios!"... El Espíritu que Jesús nos dio como promesa nos da testimonio de que esto es así: de que tenemos un Papá, y por tanto todo lo Suyo es nuestro. Ya que compartimos los mismos sufrimientos que su Hijo Jesús, compartiremos las mismas recompensas que Dios le va a dar...

Rom 8:18-27
Así que todos estos sufrimientos que soportamos los que en esta tierra comemos y testificamos del Pan de Vida, son insignificantes comparados con la recompensa. Y todo el Universo espera esta recompensa porque el Cosmos también sufre como nosotros de verse a sí mismo corrompido y sujeto a la muerte y al sufrimiento. Pero esperamos con fe (no por vista ni estúpidos milagritos) de que Dios nos dará un cuerpo sin corrupción y sin debilidad. En esta debilidad no sabemos ni qué debemos orar, pero el Espíritu del Pan de Vida nos ayuda, porque Él sabe orar y sabe qué pedir...

Rom 8:27-39
Si hasta Dios ora por nosotros, ¡mucho más Dios lo sabe todo y nos conoce desde la eternidad, y desde allí nos predestinó y llamó en Su Omnisciencia! Así que, ¿qué podemos decir a todas estas cosas? Si Dios mismo fue capaz de dar lo más preciado que tenía para que nosotros le diéramos una muerte horrible, ¿cómo no nos dará todo lo demás? ¿Quién... quién nos podrá separar de este amor de Dios que no puede expresarse con palabras? No hay nada ahora ni mañana, ni en este mundo ni en el otro, que nos pueda separar de un Amor como este que hay en Cristo Jesús.


PLANTEAMIENTO del DILEMA:
Hay un versículo en estos dos capítulos que indica claramente que esa "ley" de Romanos 7 sigue activa en el creyente y que nunca se desactiva... este es el versículo mágico y liberador del que os hablaba con pasión en el otro hilo. Más aún teniendo en cuenta que lo está escribiendo el apóstol que Dios nos dio a los gentiles durante el primer siglo, y cuya herencia hemos recibido por sus "cartas": Pablo de Tarso. El que encuentre el versículo tiene premio. Hay que escoger un versículo y explicar por qué crees que esa es la solución para ti. Si no fuera correcto, expondré las razones por las que "no". Puede ser que alguien haya visto algo en un versículo que lleve a lo mismo... eso también enriquecería el hilo y yo así lo reconocería.

PREMIO al GANADOR:
El ganador conseguirá que cambie mi querido "proverbio persa" que a tantos irrita. Es decir, me comprometo a cambiar mi firma y que el tema de mi nueva firma se base en el tema que el ganador me indique, y que mantendré al menos 1 año (aceptaré que el ganador me permita seguir usando el que ahora tengo, si eso desea). Esperaré al menos una semana para resolver y dar tiempo a que intervengan todos los que quieran, y yo mientras tanto estoy atento y participaré todo lo que pueda.

Amor,
Ibero
 
Última edición:
Hola.

Te deseo éxito en tu reto. Yo no hallo un estímulo aquí como para masturbar el ego. Esto puede ser peligroso.

Solo te puedo compartir mi frase, acuñada por las hijas de mi pasado:

EN MEDIO DEL FRACASO Y LA CONFUSIÓN,

DIOS ES LO ÚNICO REAL.

Dios te bendice :)
 
Ibero, pensè en castigo y no en premio.
Pensè que te ibas a cortar la cabellera si dábamos con el verso. està bien lo de la firma, a mi no me molesta ni irrita.
Por otro lado, dejas abierta una posibilidad, es decir, que no demos con el verso, para explayarnos en otro, algo en lo cuàl Dios no ha dado luz.
Y aportar para ver que si tenemos soluciòn al hombre corrupto y fariseo que vive dentro del creyente.
 
Horizonte:

Naturalmente... pero yo no tengo la culpa de tu frigidez. Eso es cosa tuya y de tus trastornos. Si no quieres bailar ni jugar, ni bailes ni juegues, amigo. Pero por amor de Dios.... no me aburras.

:)

¡Amor!,
Ibero
 
Ibero, pensè en castigo y no en premio.
Pensè que te ibas a cortar la cabellera si dábamos con el verso. està bien lo de la firma, a mi no me molesta ni irrita.
Por otro lado, dejas abierta una posibilidad, es decir, que no demos con el verso, para explayarnos en otro, algo en lo cuàl Dios no ha dado luz.
Y aportar para ver que si tenemos soluciòn al hombre corrupto y fariseo que vive dentro del creyente.

Lo del premio de la firma está escrito en clave de humor para reírme un poco de Salmo51, a quien le irrita la firma. Mañana vuelvo por aquí. :)

Amor,
Ibero
 
Última edición:
Yo creo que el verso ganador es el ultimo del cap7 ,,luego lo explico segun lo entiendo .

Umm ,, la solucion no gira en torno a que la naturaleza del viejo hombre cambia sino en que la hacemos inoperante cuando vivimos y nos revestimos de la vida que se nos otorga por la fe desde el cielo .
 
Lo del premio de la firma está escrito en clave de humor para reírme un poco de Salmo51, a quien le irrita la firma. Mañana vuelvo por aquí. :)

Amor,
Ibero
No me irrita la firma. Para nada. Podés morirte con ella al pie y nada ocurrirá fuera de lo que deba ocurrir.
Me da lástima el pobre Persa que se mató para crear esa porquería de proverbio.
Es obvio que el hombre jamás conoció a Jesucristo.
Pero que alguien que se autoproclama cristiano ponga ese proverbio persa teniendo tantos proverbios en nuestra querida biblia, no deja de ser una señal bastante clara.
 
INTRODUCCIÓN:
Durante buen número de años, tenía metida en la cabeza la idea de que Romanos 7 era el "estado inmaduro" de un creyente (casi en los límites del incrédulo), y Romanos 8 era ese mismo creyente que por fin de alguna forma milagrosa y sacrosanta había conseguido alcanzar "la victoria" o un "avanzado estado espiritual maduro".
¿Y ahora ya no piensas así?
Lo cierto es que Romanos 7 no nos habla de un creyente inmaduro sino del viejo hombre.
Pablo va haciendo un derrotero de su vida antes de que la ley viniera a su vida, luego bajo el imperio de esa ley y más tarde como redimido por Cristo.


Porque mientras estábamos en la carne
(Antes de nacer de nuevo), las pasiones pecaminosas que eran por la ley obraban en nuestros miembros llevando fruto para muerte.
Pero ahora estamos libres de la ley (Después de nacer de nuevo), por haber muerto para aquella en que estábamos sujetos, de modo que sirvamos bajo el régimen nuevo del Espíritu y no bajo el régimen viejo de la letra.

¿De que Ley nos está hablando Pablo?
¿De la ley del pecado que obra en nuestros miembros o de la ley dada a Israel por Dios en el monte Sinaí?


7 ¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera.
Pero yo no conocí el pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la ley no dijera: No codiciarás.
8 Mas el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, produjo en mí toda codicia; porque sin la ley el pecado está muerto.
9 Y yo sin la ley vivía en un tiempo; pero venido el mandamiento, el pecado revivió y yo morí.
10 Y hallé que el mismo mandamiento que era para vida, a mí me resultó para muerte;
11 porque el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, me engañó, y por él me mató.
12 De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, justo y bueno.


Acá Pablo no está contando lo que le ocurrió a él antes de su encuentro con Jesús camino a Damasco, entendiéndolo ahora, con la mente de Cristo.
Y aún antes de la ley también.
Parece que hubo un tiempo en que también vivió sin ley, pero cuando se le reveló la ley, está, en vez de vivificarlo lo mató.


13 ¿Luego lo que es bueno, vino a ser muerte para mí?
¿Para quien fue muerte la ley, para el Pablo nacido de nuevo, o para el viejo Pablo?
En ninguna manera; sino que el pecado, para mostrarse pecado, produjo en mí la muerte por medio de lo que es bueno, a fin de que por el mandamiento el pecado llegase a ser sobremanera pecaminoso. 14 Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado.
¿De quien produjo la muerte el pecado? ¿Del Pablo nacido de nuevo? No.

Sino del Pablo carnal vendido al pecado.


Si bien es cierto que hay muy distintos estados espirituales y la madurez es una realidad para el creyente en esta tierra (día a día... minuto a minuto), la enseñanza de estos dos capítulos es bien distinta. Aunque muchos de vosotros compartís esta visión, dejad que resuma ambos capítulos para facilitar el entendimiento. Aunque no me gusta limitar el texto a estos dos capítulos (porque como he dicho en algunas ocasiones, las cartas son un "cuerpo" que debe asimilarse en su conjunto), lo hago por razones de espacio y tiempo limitados. También advierto que he resumido muchísimo.
Solo hay más fe o menos fe. Punto.


CAPITULO 7 de Romanos:

Rom 7:1-6
Cristo me mató en la cruz y esta muerte también me ha hecho morir ante "los mandamientos de Dios" que se enseñoreaban de mí porque no podía cumplirlos.

Rom 7:7-14
De hecho, estos mandamientos de Dios "avivan" mi pecado, es decir: me muestran crudamente en las narices que SIEMPRE estoy lejos de cumplir lo que a Dios le agrada, que es ser santo, perfecto y bueno. La ley de Dios es perfecta, pero yo no lo soy; soy un "error" y una "imperfección" andante; es algo que está en mi naturaleza, en mi esencia, en mi ADN, por lo que esta "Ley Suya" SIEMPRE mostrará mi incapacidad para cumplirla tal y como el Autor quiere que se cumpla. NO PUEDO CUMPLIR lo que a Él le gusta. No tengo remedio.

Rom 7:15-25
Y cuidado, no es una cuestión de que yo "no quiera" cumplir Sus leyes. Yo quiero y amo la ley de Dios con todas mis fuerzas y la pasión de mi corazón, y la reconozco y veo como justa y buena, pero siempre veo una extraña "ley en mí" que me arrastra continuamente al error, haciéndome un esclavo perpetuo del error. No puedo quitarme esta ley de encima. Se me pega como una sanguijuela y me chupa la sangra la muy... pend***. Es como la ley de la gravedad. Siempre está ahí y no te puedes librar de ella seas pobre o rico, listo o tonto de remate.


CAPITULO 8 de Romanos

Rom 8:1-13
No obstante, en la persona de Jesús hay una cosa "milagrosa" que se llama Vida. Esta extraña y "mágica" Vida actúa como "otra ley" que me libra de la muerte que merezco por no ser capaz de obedecer lo correcto y perfecto. Sabiendo todo esto (habiendo comprobado mi fracaso por la experiencia diaria)... ¿me voy a hacer siervo de una serie de leyes que muestran que soy un fracasado día a día y minuto a minuto? ¡De ninguna manera! Más bien lo que me interesa y lo que voy a buscar es a esta Persona que dice que es capaz de darme a comer esta Vida (es decir, de conocerle en lo íntimo de mi estómago, asimilando el poder de este Alimento en mí mismo) . No me interesan mis esfuerzos para cumplir Sus leyes. Eso no tiene futuro. Ahí sólo hay muerte.

Rom 8:14-17
Se hace obvio que los que prestan atención y oídos a este Pan de Vida son los que realmente están a buenas con Jesús. El miedo quedó atrás, pues ahora este Pan Espiritual nos hace clamar como un niño a su Padre, "¡Papá, Papá!", porque ciertamente este Padre nos ha adoptado como hijos Suyos. Imagínate... "¡Hijo de Dios!"... El Espíritu que Jesús nos dio como promesa nos da testimonio de que esto es así: de que tenemos un Papá, y por tanto todo lo Suyo es nuestro. Ya que compartimos los mismos sufrimientos que su Hijo Jesús, compartiremos las mismas recompensas que Dios le va a dar...

Rom 8:18-27
Así que todos estos sufrimientos que soportamos los que en esta tierra comemos y testificamos del Pan de Vida, son insignificantes comparados con la recompensa. Y todo el Universo espera esta recompensa porque el Cosmos también sufre como nosotros de verse a sí mismo corrompido y sujeto a la muerte y al sufrimiento. Pero esperamos con fe (no por vista ni estúpidos milagritos) de que Dios nos dará un cuerpo sin corrupción y sin debilidad. En esta debilidad no sabemos ni qué debemos orar, pero el Espíritu del Pan de Vida nos ayuda, porque Él sabe orar y sabe qué pedir...

Rom 8:27-39
Si hasta Dios ora por nosotros, ¡mucho más Dios lo sabe todo y nos conoce desde la eternidad, y desde allí nos predestinó y llamó en Su Omnisciencia! Así que, ¿qué podemos decir a todas estas cosas? Si Dios mismo fue capaz de dar lo más preciado que tenía para que nosotros le diéramos una muerte horrible, ¿cómo no nos dará todo lo demás? ¿Quién... quién nos podrá separar de este amor de Dios que no puede expresarse con palabras? No hay nada ahora ni mañana, ni en este mundo ni en el otro, que nos pueda separar de un Amor como este que hay en Cristo Jesús.


PLANTEAMIENTO del DILEMA:
Hay un versículo en estos dos capítulos que indica claramente que esa "ley" de Romanos 7 sigue activa en el creyente y que nunca se desactiva... este es el versículo mágico y liberador del que os hablaba con pasión en el otro hilo. Más aún teniendo en cuenta que lo está escribiendo el apóstol que Dios nos dio a los gentiles durante el primer siglo, y cuya herencia hemos recibido por sus "cartas": Pablo de Tarso. El que encuentre el versículo tiene premio. Hay que escoger un versículo y explicar por qué crees que esa es la solución para ti. Si no fuera correcto, expondré las razones por las que "no". Puede ser que alguien haya visto algo en un versículo que lleve a lo mismo... eso también enriquecería el hilo y yo así lo reconocería.

PREMIO al GANADOR:
El ganador conseguirá que cambie mi querido "proverbio persa" que a tantos irrita. Es decir, me comprometo a cambiar mi firma y que el tema de mi nueva firma se base en el tema que el ganador me indique, y que mantendré al menos 1 año (aceptaré que el ganador me permita seguir usando el que ahora tengo, si eso desea). Esperaré al menos una semana para resolver y dar tiempo a que intervengan todos los que quieran, y yo mientras tanto estoy atento y participaré todo lo que pueda.

Amor,
Ibero
Estás entendiendo mal la epístola.
 
Yo creo que el verso ganador es el último del cap7 ,,luego lo explico según lo entiendo .

Umm ,, la solución no gira en torno a que la naturaleza del viejo hombre cambia sino en que la hacemos inoperante cuando vivimos y nos revestimos de la vida que se nos otorga por la fe desde el cielo .
Todo pasa por creerle a Dios.

El mismo negro que era esclavo en 1850 en EEUU pasó a ser libre en 1865 sin hacer absolutamente nada.
Fue declarado libre desde arriba. Desde el gobierno central.
Pero lo que se hizo ley en 1865 se tomó siglos en ser creído tanto por los mismo negros como por los blancos.


Si yo no creo que estoy muerto al pecado pues no lo voy a estar aunque sea cierto.
Dios ya hizo todo lo que debía hacer pero a nosotros nos toca creer.
Pero es lo que no terminamos de hacer y nos arrastramos.


Si yo creo que el pecado se puede enseñorear de mi porque no fue destruido en la cruz, pues se enseñoreará de mi porque yo le doy lugar.
Conforme a mi fe me será dado.
Es un tema de fe y de crecimiento en fe.
No es una ejercitación contra la tentación como si se tratara de entrenar un musculo en un gimnasio.
La santificación es un crecimiento en fe.


Conoceremos la verdad y nos hará libres pero si la creemos.

Yo soy natural carnal y vendido al pecado, pero recibo el evangelio y creo en las obras de Dios para mi salvación.
Me dice Dios que envió a su hijo a morir por mi y que en esa muerte el me va a ver muerto a mi.
Lo tomo a lo dejo.
Me dice que en la cruz ha sido sepultado el hombre carnal vendido al pecado para su destrucción y que por ende el pecado ya no se enseñoreará mas de mi.
Proclama divina.
La tomo o la dejo.


El nuevo hombre es un hombre mental y creado por la fe sobre las obras de Cristo.
Sin fe no hay nada.
No hay muerte ni nuevo nacimiento.
No fui sepultado con Cristo ni el pecado fue destruido en la carne.
Por ende el pecado me va a vencer aunque que yo intente resistirlo.


Pero si tengo fe entonces creo estar muerto y creo que el pecado ha sido destruido.

Debo creerle a Dios y eso es todo lo que el me pide.
Pero creerle hasta la victoria, porque la victoria nunca vendrá por ejercitar resistencia sino fe.
 
Siempre nuestra resistencia debe afirmarse en nuestra fe y nunca en nuestra carne.
RESISTID FIRMES EN LA FE.
 
INTRODUCCIÓN:
Durante buen número de años, tenía metida en la cabeza la idea de que Romanos 7 era el "estado inmaduro" de un creyente (casi en los límites del incrédulo), y Romanos 8 era ese mismo creyente que por fin de alguna forma milagrosa y sacrosanta había conseguido alcanzar "la victoria" o un "avanzado estado espiritual maduro". Si bien es cierto que hay muy distintos estados espirituales y la madurez es una realidad para el creyente en esta tierra (día a día... minuto a minuto), la enseñanza de estos dos capítulos es bien distinta. Aunque muchos de vosotros compartís esta visión, dejad que resuma ambos capítulos para facilitar el entendimiento. Aunque no me gusta limitar el texto a estos dos capítulos (porque como he dicho en algunas ocasiones, las cartas son un "cuerpo" que debe asimilarse en su conjunto), lo hago por razones de espacio y tiempo limitados. También advierto que he resumido muchísimo.


CAPITULO 7 de Romanos:

Rom 7:1-6
Cristo me mató en la cruz y esta muerte también me ha hecho morir ante "los mandamientos de Dios" que se enseñoreaban de mí porque no podía cumplirlos.

Rom 7:7-14
De hecho, estos mandamientos de Dios "avivan" mi pecado, es decir: me muestran crudamente en las narices que SIEMPRE estoy lejos de cumplir lo que a Dios le agrada, que es ser santo, perfecto y bueno. La ley de Dios es perfecta, pero yo no lo soy; soy un "error" y una "imperfección" andante; es algo que está en mi naturaleza, en mi esencia, en mi ADN, por lo que esta "Ley Suya" SIEMPRE mostrará mi incapacidad para cumplirla tal y como el Autor quiere que se cumpla. NO PUEDO CUMPLIR lo que a Él le gusta. No tengo remedio.

Rom 7:15-25
Y cuidado, no es una cuestión de que yo "no quiera" cumplir Sus leyes. Yo quiero y amo la ley de Dios con todas mis fuerzas y la pasión de mi corazón, y la reconozco y veo como justa y buena, pero siempre veo una extraña "ley en mí" que me arrastra continuamente al error, haciéndome un esclavo perpetuo del error. No puedo quitarme esta ley de encima. Se me pega como una sanguijuela y me chupa la sangra la muy... pend***. Es como la ley de la gravedad. Siempre está ahí y no te puedes librar de ella seas pobre o rico, listo o tonto de remate.


CAPITULO 8 de Romanos

Rom 8:1-13
No obstante, en la persona de Jesús hay una cosa "milagrosa" que se llama Vida. Esta extraña y "mágica" Vida actúa como "otra ley" que me libra de la muerte que merezco por no ser capaz de obedecer lo correcto y perfecto. Sabiendo todo esto (habiendo comprobado mi fracaso por la experiencia diaria)... ¿me voy a hacer siervo de una serie de leyes que muestran que soy un fracasado día a día y minuto a minuto? ¡De ninguna manera! Más bien lo que me interesa y lo que voy a buscar es a esta Persona que dice que es capaz de darme a comer esta Vida (es decir, de conocerle en lo íntimo de mi estómago, asimilando el poder de este Alimento en mí mismo) . No me interesan mis esfuerzos para cumplir Sus leyes. Eso no tiene futuro. Ahí sólo hay muerte.

Rom 8:14-17
Se hace obvio que los que prestan atención y oídos a este Pan de Vida son los que realmente están a buenas con Jesús. El miedo quedó atrás, pues ahora este Pan Espiritual nos hace clamar como un niño a su Padre, "¡Papá, Papá!", porque ciertamente este Padre nos ha adoptado como hijos Suyos. Imagínate... "¡Hijo de Dios!"... El Espíritu que Jesús nos dio como promesa nos da testimonio de que esto es así: de que tenemos un Papá, y por tanto todo lo Suyo es nuestro. Ya que compartimos los mismos sufrimientos que su Hijo Jesús, compartiremos las mismas recompensas que Dios le va a dar...

Rom 8:18-27
Así que todos estos sufrimientos que soportamos los que en esta tierra comemos y testificamos del Pan de Vida, son insignificantes comparados con la recompensa. Y todo el Universo espera esta recompensa porque el Cosmos también sufre como nosotros de verse a sí mismo corrompido y sujeto a la muerte y al sufrimiento. Pero esperamos con fe (no por vista ni estúpidos milagritos) de que Dios nos dará un cuerpo sin corrupción y sin debilidad. En esta debilidad no sabemos ni qué debemos orar, pero el Espíritu del Pan de Vida nos ayuda, porque Él sabe orar y sabe qué pedir...

Rom 8:27-39
Si hasta Dios ora por nosotros, ¡mucho más Dios lo sabe todo y nos conoce desde la eternidad, y desde allí nos predestinó y llamó en Su Omnisciencia! Así que, ¿qué podemos decir a todas estas cosas? Si Dios mismo fue capaz de dar lo más preciado que tenía para que nosotros le diéramos una muerte horrible, ¿cómo no nos dará todo lo demás? ¿Quién... quién nos podrá separar de este amor de Dios que no puede expresarse con palabras? No hay nada ahora ni mañana, ni en este mundo ni en el otro, que nos pueda separar de un Amor como este que hay en Cristo Jesús.


PLANTEAMIENTO del DILEMA:
Hay un versículo en estos dos capítulos que indica claramente que esa "ley" de Romanos 7 sigue activa en el creyente y que nunca se desactiva... este es el versículo mágico y liberador del que os hablaba con pasión en el otro hilo. Más aún teniendo en cuenta que lo está escribiendo el apóstol que Dios nos dio a los gentiles durante el primer siglo, y cuya herencia hemos recibido por sus "cartas": Pablo de Tarso. El que encuentre el versículo tiene premio. Hay que escoger un versículo y explicar por qué crees que esa es la solución para ti. Si no fuera correcto, expondré las razones por las que "no". Puede ser que alguien haya visto algo en un versículo que lleve a lo mismo... eso también enriquecería el hilo y yo así lo reconocería.

PREMIO al GANADOR:
El ganador conseguirá que cambie mi querido "proverbio persa" que a tantos irrita. Es decir, me comprometo a cambiar mi firma y que el tema de mi nueva firma se base en el tema que el ganador me indique, y que mantendré al menos 1 año (aceptaré que el ganador me permita seguir usando el que ahora tengo, si eso desea). Esperaré al menos una semana para resolver y dar tiempo a que intervengan todos los que quieran, y yo mientras tanto estoy atento y participaré todo lo que pueda.

Amor,
Ibero


Hola Ibero... me llamaste?
:)
Habia terminado mi cuenta aquí - y tuve que "reinventarme" para poder responderte. Y dejo mi participación en tu "juego". Si me pides de buena manera y cordialmente - porque mi elección de verso. Te contesto. Un beso gigante desde Suecia!

25 Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.
 
Yo creo que el verso ganador es el ultimo del cap7 ,,luego lo explico segun lo entiendo .

Umm ,, la solucion no gira en torno a que la naturaleza del viejo hombre cambia sino en que la hacemos inoperante cuando vivimos y nos revestimos de la vida que se nos otorga por la fe desde el cielo .

Estás cerca, pero NO exactamente. El último verso del capítulo 7:

Rom 7:25: (¡Gracias sean dadas a Dios por Jesús el Mesías, Señor nuestro!) Así pues, yo mismo sirvo con la mente a la ley de Dios, pero con la carne a la ley del pecado.

Si bien este versículo muestra el dilema (la realidad del asunto), no muestra la solución práctica en todo su "esplendor". El versículo del que hablo, muestra el dilema y la solución práctica. El dilema es la dualidad en nosotros... eso es lo que dice Romanos 7:25... pero, ¿cómo (de forma práctica) hacerlo?


Hola Ibero... me llamaste?
:)
Habia terminado mi cuenta aquí - y tuve que "reinventarme" para poder responderte. Y dejo mi participación en tu "juego". Si me pides de buena manera y cordialmente - porque mi elección de verso. Te contesto. Un beso gigante desde Suecia!

25 Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.

Hombre.... la señorita sueca Ester Kungens...

¿No has podido resistirte al juego de Ibero, verdad? ¡Demasiada tentación para el invierno sueco! ¡Ja! Has escogido el mismo versículo que Héctor, y él lo ha explicado bien. Así que te pido gentil y cordialmente que me expliques qué tenías en la cabeza para escoger ese versículo...

Amor,
Ibero
 
Última edición:
No me irrita la firma. Para nada. Podés morirte con ella al pie y nada ocurrirá fuera de lo que deba ocurrir.
Me da lástima el pobre Persa que se mató para crear esa porquería de proverbio.

La degradación del cristiano modernista que dice leer los "proverbios bíblicos" es tan grande.... que tengo que recurrir a la antigua sabiduría de los gentiles. Es una forma remover la conciencia. Si no entiendes un sencillo proverbio gentil que poco pretende, menos vas a entender un proverbio celestial que todo lo abarca.

Es obvio que el hombre jamás conoció a Jesucristo.

....

Pero que alguien que se autoproclama cristiano ponga ese proverbio persa teniendo tantos proverbios en nuestra querida biblia, no deja de ser una señal bastante clara.

Jesucristo no es felicidad. Es Gozo y Alegría, pero no felicidad. Hay una sima entre ambos conceptos. Y este es el mensaje de la firma: que la felicidad que se predica en el cristianismo modernista y humanista es una broma de mal gusto.

Amor,
Ibero
 
Última edición:
¿Y ahora ya no piensas así?

Es evidente que no. Mi lectura era religiosa y aproximativa. No era revelatoria ni interior: no había caminado la realidad de la vida que Pablo define porque no había aceptado hasta sus últimas consecuencias mi propia condición. Era una lectura sesgada por la religión... esa religión que hace ciegos a los hombres.

Lo cierto es que Romanos 7 no nos habla de un creyente inmaduro sino del viejo hombre.

No, aquí no habla del "viejo hombre". No es esta la enseñanza. Estás mezclando conceptos y no estás entendiendo la enseñanza de Pablo. Lo aplicas todo mentalmente.

Pablo va haciendo un derrotero de su vida antes de que la ley viniera a su vida, luego bajo el imperio de esa ley y más tarde como redimido por Cristo.

Falso. Como judío ortodoxo, Pablo estuvo sujeto a la ley y la cumplió en el "régimen de la letra" (es decir, en su cumplimiento religioso EXTERNO en abluciones, purificaciones, ritos, etc..) desde su niñez.

Porque mientras estábamos en la carne (Antes de nacer de nuevo), las pasiones pecaminosas que eran por la ley obraban en nuestros miembros llevando fruto para muerte.
Pero ahora estamos libres de la ley (Después de nacer de nuevo), por haber muerto para aquella en que estábamos sujetos, de modo que sirvamos bajo el régimen nuevo del Espíritu y no bajo el régimen viejo de la letra.

Claro... libres de la ley, no de las pasiones pecaminosas. :) NO inventes lo que no pone.

¿De que Ley nos está hablando Pablo?
¿De la ley del pecado que obra en nuestros miembros o de la ley dada a Israel por Dios en el monte Sinaí?

De la segunda (la ley de Dios)...

7 ¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera.
Pero yo no conocí el pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la ley no dijera: No codiciarás.
8 Mas el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, produjo en mí toda codicia; porque sin la ley el pecado está muerto.
9 Y yo sin la ley vivía en un tiempo; pero venido el mandamiento, el pecado revivió y yo morí.
10 Y hallé que el mismo mandamiento que era para vida, a mí me resultó para muerte;
11 porque el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, me engañó, y por él me mató.
12 De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, justo y bueno.
Acá Pablo no está contando lo que le ocurrió a él antes de su encuentro con Jesús camino a Damasco, entendiéndolo ahora, con la mente de Cristo.

MAL. Está contando exactamente eso desde la Nueva Luz que ahora tiene. Se da cuenta que cuando como judío ortodoxo cumplía la ley en el régimen de la letra (abluciones, ritos externos, incluso intentos morales), PECABA. La ley (reconoce y confiesa ahora un Pablo converso), le "mataba AYER" (Rom 7:11)... y "continuamente le mata HOY" (Rom 7:15).

Y aún antes de la ley también.
Parece que hubo un tiempo en que también vivió sin ley, pero cuando se le reveló la ley, está, en vez de vivificarlo lo mató.

Romanos 7:9 es un recurso literario en el que Pablo se mete en la piel de un hombre libre (no de un "judío"), y por extensión también lo aplica a sí mismo, porque en calidad de hombre (de ser humano, religión aparte), también supo en su conciencia lo que era el "antes" y el "después" de un mandamiento que debe cumplir y no puede. Pablo nació y creció como un hombre... y como hombre se dio cuenta de que "antes" de que el mandamiento le dijera "no codicies" el pecado estaba ahí pero no era señalado ni condenado. Cuando conoce el mandamiento de Dios en su vida (ese que dice "no codicies"), entonces el pecado "revive" porque él no puede evitar la codicia y la ley pone de RELIEVE que Pablo tiene codicia. Es decir, "cuando vino el mandamiento, el pecado revivió en mí".

13 ¿Luego lo que es bueno, vino a ser muerte para mí?
¿Para quien fue muerte la ley, para el Pablo nacido de nuevo, o para el viejo Pablo?

¡Para los dos! :) Ese es el mensaje de Romanos 7 y 8. Cuando hable del "versículo mágico", lo verás.

En ninguna manera; sino que el pecado, para mostrarse pecado, produjo en mí la muerte por medio de lo que es bueno, a fin de que por el mandamiento el pecado llegase a ser sobremanera pecaminoso. 14 Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado.
¿De quien produjo la muerte el pecado? ¿Del Pablo nacido de nuevo? No.
Sino del Pablo carnal vendido al pecado.

MAL. ..."SOY (AHORA) vendido al pecado".

Solo hay más fe o menos fe. Punto.

No... las Escrituras enseñan que la fe es una "medida" que no se mide por "grande" o "pequeña". Lee la parábola del grano de mostaza.

Estás entendiendo mal la epístola.

No. La estoy entendiendo perfectamente. :)


Amor,
Ibero
 
Última edición:
Todo pasa por creerle a Dios.

El mismo negro que era esclavo en 1850 en EEUU pasó a ser libre en 1865 sin hacer absolutamente nada.
Fue declarado libre desde arriba. Desde el gobierno central.
Pero lo que se hizo ley en 1865 se tomó siglos en ser creído tanto por los mismo negros como por los blancos.


Si yo no creo que estoy muerto al pecado pues no lo voy a estar aunque sea cierto.
Dios ya hizo todo lo que debía hacer pero a nosotros nos toca creer.
Pero es lo que no terminamos de hacer y nos arrastramos.



Si yo creo que el pecado se puede enseñorear de mi porque no fue destruido en la cruz, pues se enseñoreará de mi porque yo le doy lugar.
Conforme a mi fe me será dado.
Es un tema de fe y de crecimiento en fe.


¡NO! ¡MUY MAL, Salmo! Estás aplicando la fe como los predicadores que dicen "agarra tu promesa en fe" o "si crees Dios te dará un coche y una casa y te llenará el depósito de gasolina". Es una especie de discurso "siembra y recoge" (dos más dos son cuatro) corrompido por la mente natural. Ese no es el concepto de "fe" que Dios nos pide. Tu forma de hablar está a años luz de la enseñanza de Pablo y del espíritu de las Escrituras. Es una interpretación que sólo trae angustia, condenación y opresión. Esa onda mental de "creélo y lo tendrás", "no tienes eso porque no tienes fe" la he practicado y NO FUNCIONA. Y no funciona porque Dios no quiere que funcione. :)

Por eso este mensaje que estoy compartiendo (que es el que Pablo compartió) es tan importante para el Cuerpo de Cristo.


No es una ejercitación contra la tentación como si se tratara de entrenar un musculo en un gimnasio.

No es exactamente eso... pero sí tiene "algo" de eso. :)

La santificación es un crecimiento en fe.

Esto es lenguaje vacío. Ponme un ejemplo práctico de tu santificación y tu crecimiento en fe, y quizás te escuche.

Conoceremos la verdad y nos hará libres pero si la creemos.

Por supuesto...

Yo soy natural carnal y vendido al pecado, pero recibo el evangelio y creo en las obras de Dios para mi salvación.
Me dice Dios que envió a su hijo a morir por mi y que en esa muerte el me va a ver muerto a mi.
Lo tomo a lo dejo.
Me dice que en la cruz ha sido sepultado el hombre carnal vendido al pecado para su destrucción y que por ende el pecado ya no se enseñoreará mas de mi.
Proclama divina.
La tomo o la dejo.

Y sin embargo, parece ser que "lo has dejado", porque en este foro tú afirmas que pecas.

:)

Ufff... qué dilema, ¿eh?

El nuevo hombre es un hombre mental y creado por la fe sobre las obras de Cristo.

¿Por qué te haces tanto daño, Salmo? Es triste lo tuyo... un hombre mental, dices... madre mía.

Sin fe no hay nada.
No hay muerte ni nuevo nacimiento.
No fui sepultado con Cristo ni el pecado fue destruido en la carne.
Por ende el pecado me va a vencer aunque que yo intente resistirlo.

Salmo... NO. Mi "poca" o "mucha" fe no quita ni pone la obra de Cristo. Lo Suyo ES... a pesar de mí. Tienes que diferenciar dos cosas que estás mezclando continuamente. La "fe" no es algo que yo me saco de la chistera para conseguir cosas. ¿Quién te ha enseñado esta herejía? Por favor, con esa mentalidad, ¿cómo puedes aprender nada?

Pero si tengo fe entonces creo estar muerto y creo que el pecado ha sido destruido.

Salmo... necesitas liberación mental. Tienes una confusión enorme en tu vida.

Debo creerle a Dios y eso es todo lo que el me pide.
Pero creerle hasta la victoria, porque la victoria nunca vendrá por ejercitar resistencia sino fe.

¿En qué quedamos? Acabas de decir que "lo tomas o lo dejas". Si tu "viejo hombre" ha sido sepultado... ¿a qué procurar una victoria?

¿Ves el dilema?

:)

Amor,
Ibero
 
Siempre nuestra resistencia debe afirmarse en nuestra fe y nunca en nuestra carne.
RESISTID FIRMES EN LA FE.

Tienes el hilo en la mano y no sabes tirar de él.... y no sabes porque no crees. No estás creyendo lo que lees. Así no puedes avanzar. Siempre dando vueltas en círculos...

Amor,
Ibero
 
No puedo editar el mensaje dirigido a Kungens Ester, así que escribo de nuevo:

Has escogido el mismo versículo que Héctor, y se ha acercado bastante él lo ha explicado bien. Así que te pido gentil y cordialmente que me expliques qué tenías en la cabeza para escoger ese versículo...
 
Estoy editando mensajes hasta última hora porque he contestado algunas cosas sin meditarlas lo suficiente. Es fácil pasar por alto los errores, las mezclas y el caos mental de algunos foristas. Debo tener más cuidado.
 
La degradación del cristiano modernista que dice leer los "proverbios bíblicos" es tan grande.... que tengo que recurrir a la antigua sabiduría de los gentiles. Es una forma remover la conciencia. Si no entiendes un sencillo proverbio gentil que poco pretende, menos vas a entender un proverbio celestial que todo lo abarca.
....
Jesucristo no es felicidad. Es Gozo y Alegría, pero no felicidad. Hay una sima entre ambos conceptos. Y este es el mensaje de la firma: que la felicidad que se predica en el cristianismo modernista y humanista es una broma de mal gusto.

Amor,
Ibero
Ah... todo tenía que ver con la palabra "felicidad" y el "cristianismo modernista de españa".
No tomo cursos de adivinación.
La firma en si misma debería dar un mensaje sin tener que agregarle 10 hojas de explicación... Risas.
 
Romanos 7 comienza hablando de la muerte física del hombre.
La misma muerte física que sufrió Jesús a manos de sus verdugos cuando fue crucificado.


ROMANOS 7
1 ¿Acaso ignoráis, hermanos, que la ley se enseñorea del hombre
entre tanto que éste vive?


Dejemos un poco de lado el cristianismo y centrémonos en la vida natural humana.

Esta vida comienza en el vientre de una mujer y se prolonga hasta la muerte física de la persona en cuestión. Todos vivimos esta vida natural y Jesús tampoco fue una excepción. Su vida humana natural se extendió desde el vientre de María y hasta su muerte en la cruz del calvario.

Y esta vida natural es una sola.

HEBREOS 9
27 Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio...

Y esta única vida natural con la que contamos, estará influenciada y a veces hasta determinada, de muchas maneras diferentes, biológicamente, socialmente, geográficamente, culturalmente, psíquicamente... etc.

Pero a pesar de todas estas influencias o determinantes, la determinación más importante con la que la vida natural humana arranca es su destino de muerte.

Destino que heredamos de nuestro padre Adán.

Desafortunadamente, y hablo como hombre, nuestra vida natural ya nace condenada a muerte por la desobediencia de Adán.

La salvación de Dios no está dirigida a cambiar esto, de ninguna manera, sino a proveerle al hombre una segunda vida, más allá de está determinada e inevitable muerte.

Entonces decimos que la salvación de Dios no pasa por extender nuestra vida natural condenada a muerte, sino por conseguir que esa muerte no signifique nuestra extinción y final, sino que haya para nosotros, mas vida, mas allá.

Existe una gran diferencia entre abolir la muerte y vencerla.

Abolir la muerte vendría a ser extender nuestra natural vida indefinidamente y por siempre, mientras que vencer la muerte no implica el quitarla sino el atravesarla.

Creanme que si Dios hubiera podido sobreescribir Génesis 2:17, la muerte de Jesús no hubiera sido necesaria, pero la justicia de Dios y el "ciertamente morirás" que oportunamente decretó, se enseñorean de la vida del hombre hasta que este hombre ciertamente muere.
 
Última edición: