Re: Diezmo = robando en nombre de Dios
1 Cor. 16:1,2 "En cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también de la manera que or*dené en las iglesias de Galacia. Cada primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces ofrendas".
Pablo recibió salario de iglesias (2 Cor. 11:8).
Aunque la ley de Cristo no requiere un porcentaje fijo que debiéramos ofrendar, es importante recordar que todo cristiano sí ofrenda algún porcentaje de su sueldo o ganancia (10% ó 20% ó 5% ó 100%). Pero la Biblia no especifica cuánto, sólo que seamos generosos. Es importante que el cristiano considere bien cuánto da al Señor. ¿Sembramos escasa*mente o generosamente?
"Según Haya Prosperado" (1 Cor. 16:2). Aquí está la ley de Dios: que cada cristiano haga su ofrenda "según haya prosperado". No quiere decir "según lo que le haya sobrado" después de comprar comida y ropa, y después de pagar deudas, etc. Significa lo que hayamos recibido de sueldo o como ganancia de nuestro nego*cio. Debemos dar según Dios nos haya prosperado, y no según lo que nos haya quedado después de todos los gastos.
"Conforme A Lo Que Tengáis" (2 Cor. 8:11). Dice Pablo "si primero hay la voluntad dispuesta, será acepta según lo que uno tiene". Hech. 11:29 dice, "los dis*cípulos, cada uno conforme a lo que tenía, determinaron enviar socorro a los her*manos que habitaban en Judea". Pero Dios alaba a los que dan más allá de sus fuerzas: Mar. 12:41-44, la viuda que "echó más que todos" porque "de su pobreza echó todo lo que tenía"
Dar Como Propuso. Otro pen*samiento clave para que la ofrenda sea aceptable a Dios es que "cada uno dé como propuso en su corazón" (2 Cor. 9:7); es decir, decidir en su corazón qué canti*dad o qué porcentaje de lo que reciba dará al Señor.
Escasamente, Generosamente. "El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosa*mente, generosamente también segará" (2
Cor. 9:6). El sembrador siembra ge*nerosamente, porque quiere cosecha abundante.
Respecto de las citas...ninguna de ellas dice nada parecido a lo que afirmas:
1 Los cristianos deben dar el 10% de sus ingresos
(citas)
2 Ese dinero debe darsele a los pastores y/o iglesias
(citas)
1 Cor. 16:1,2 "En cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también de la manera que or*dené en las iglesias de Galacia. Cada primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces ofrendas".
Pablo recibió salario de iglesias (2 Cor. 11:8).
Aunque la ley de Cristo no requiere un porcentaje fijo que debiéramos ofrendar, es importante recordar que todo cristiano sí ofrenda algún porcentaje de su sueldo o ganancia (10% ó 20% ó 5% ó 100%). Pero la Biblia no especifica cuánto, sólo que seamos generosos. Es importante que el cristiano considere bien cuánto da al Señor. ¿Sembramos escasa*mente o generosamente?
"Según Haya Prosperado" (1 Cor. 16:2). Aquí está la ley de Dios: que cada cristiano haga su ofrenda "según haya prosperado". No quiere decir "según lo que le haya sobrado" después de comprar comida y ropa, y después de pagar deudas, etc. Significa lo que hayamos recibido de sueldo o como ganancia de nuestro nego*cio. Debemos dar según Dios nos haya prosperado, y no según lo que nos haya quedado después de todos los gastos.
"Conforme A Lo Que Tengáis" (2 Cor. 8:11). Dice Pablo "si primero hay la voluntad dispuesta, será acepta según lo que uno tiene". Hech. 11:29 dice, "los dis*cípulos, cada uno conforme a lo que tenía, determinaron enviar socorro a los her*manos que habitaban en Judea". Pero Dios alaba a los que dan más allá de sus fuerzas: Mar. 12:41-44, la viuda que "echó más que todos" porque "de su pobreza echó todo lo que tenía"
Dar Como Propuso. Otro pen*samiento clave para que la ofrenda sea aceptable a Dios es que "cada uno dé como propuso en su corazón" (2 Cor. 9:7); es decir, decidir en su corazón qué canti*dad o qué porcentaje de lo que reciba dará al Señor.
Escasamente, Generosamente. "El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosa*mente, generosamente también segará" (2
Cor. 9:6). El sembrador siembra ge*nerosamente, porque quiere cosecha abundante.