Re: DE SU OPINION PERSONAL O ESCRITURAL
Estimado manuel5. Saludos cordiales.
Tú dices:
Estimado gabriel47:
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Hace pocas semanas descubrí que lo que yo escribía tú o no lo entendías o lo tergiversaba. Lo achaqué al hecho de que yo uso un castellano español y tal vez, tú utilices un castellano latinoamericano.
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...Pero ahora veo que NO. Que no es así.
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Leyendo lo anterior (escrito por tí) veo que a tí te pasa algo (que no tiene nada que ver con los modismos del idioma).
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..(Que conste que no te quiero insultar). Pero me da la impresión de que te ocurre algo mental, psicológico...No se cómo llamarlo.
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..¿Es posible que una persona como tú, cristiana, tropiece con algo tan sencillo de entender como la frase de PATRICIO CÉSPEDES?
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.¿Te la tendré que explicar YO para que la entiendas?
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..Céspedes está diciendo EXACTAMENTE lo que escribió la Sra White, a saber: Que, en la visión, le PUSIERON UNAS ALAS que les permitieron viajar a otros mundos donde había OTROS SERES con los que HABLÓ.
...Y de ello da fe el texto de PRIMEROS ESCRITOS.
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Se nota que la Sra White lo escribió en un año en el que todavía no se había inventado la AVIACIÓN y se creía , entonces, que la manera de viajar de un mundo a otro (de un planeta a otro) era CON ALAS.
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La observación de Céspedes no tiene nada de extraño, ni de mentiroso. Sólo que a cualquiera que no sea adventista del séptimo día le resultará ridículo el texto de la Sra White....Nada más.
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Saludos. ¡Cuidate la salud!
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(Soy ex-miembro de la IASD)
Respondo: Se ve que aunque eres español, te cuesta entender el lenguaje de Cervantes.
El punto es que patricio miente al decir que Ellen White
"tuvo la necesidad de tener ALAS para VOLAR de la tierra a otros mundos, para hablar con los extraterrestres"
Las citas que tu has puesto anteriormente son correctas, pero deberías haberte dado cuenta del papelón de este seudo reformador que intenta engañar tergiversando los escritos de quién critica.
"El Señor me mostró en visión otros mundos.
Me fueron dadas alas y un ángel me acompañó desde la ciudad a un lugar brillante y glorioso. La hierba era de un verde vivo y las aves gorjeaban un dulce canto. Los moradores de aquel lugar eran de todas estaturas; eran nobles, majestuosos y hermosos. Llevaban, la manifiesta imagen de Jesús, y su semblante refulgía de santo júbilo, como expresión de la libertad y dicha que en aquel lugar disfrutaban.
Pregunté a uno de ellos por qué eran mucho más bellos que los habitantes de la tierra, y me respondió: "Hemos vivido en estricta obediencia a los mandamientos de Dios, y no incurrimos en desobediencia como los habitantes de la tierra." Después vi dos árboles, uno de los cuales se aprecia mucho al árbol de vida de la ciudad. El fruto de ambos era hermoso, pero no debían comer de uno de ellos. Hubieran podido comer de los dos, pero les estaba vedado comer de uno. Entonces el ángel que me acompañaba me dijo: "Nadie ha probado aquí la fruta del árbol prohibido, y si de ella comieran, caerían."
Después me transportaron a un mundo que tenía siete lunas; donde vi al anciano Enoc, que había sido trasladado. Llevaba en su brazo derecho una esplendente palma, en cada una de cuyas hojas se leía escrita la palabra: "Victoria." Ceñía sus sienes una brillante guirnalda blanca con hojas, en el centro leía: "Pureza." Alrededor de la guirnalda había piedras preciosas de diversos colores que resplandecían más vivamente que las estrellas y , reflejando su fulgor en las letras, las magnificaban. En la parte posterior de la cabeza llevaba un moño que sujetaba la guirnalda, y en él estaba escrita la palabra: "Santidad." Sobre la guirnalda ceñía Enoc una corona más brillante que el sol
. Le pregunté si aquel era el lugar adonde lo habían transportado desde la tierra. El me respondió: "No es éste. Mi morada es la ciudad, y he venido a visitar este sitio." Andaba por allí como si estuviese en casa. Supliqué a mi ángel acompañante que me dejara permanecer allí. No podía sufrir el pensamiento de volver a este tenebroso mundo. El ángel me dijo entonces: "Debes volver, y si eres fiel, tendrás, con los 144,000, el privilegio de visitar todos los mundos y ver la obra de las manos de Dios." PE 40,41.
Según el relato, las alas se le dieron
a.- En la Tierra.
b. En la ciudad que se encontraba en ese lugar.
c. En Saturno.
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.