El Padre,el Hijo y el Espiritu Santo en la Biblia(parteII)
El Padre,el Hijo y el Espiritu Santo en la Biblia(parteII)
La primera parte del estudio se enxcuentra aqui... http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php?s=&threadid=12614&perpage=15&pagenumber=30
La Deidad de Jesucristo es el Padre
La deidad residente en Jesucristo es nada menos que el Padre. En otras palabras, el Espíritu en el Hijo es el Padre. La Deidad de Jesucristo es el Espíritu Santo El Espíritu Santo se llama el Espíritu de Jesucristo (Filipenses 1:19), y el Espíritu del Hijo (Gálatas 4:6). II Corintios 3:17 dice del Espíritu, “El Señor es el Espíritu.” En breve, el Espíritu que es residente en Jesucristo es
nada menos que el Espíritu Santo. El Espíritu en el Hijo es el Espíritu Santo. Abajo hay algunos versículos paralelos de Escritura
que revelan aun más que el Espíritu de Cristo es el Espíritu Santo.
1- El Espíritu de Cristo estaba en los profetas de la antigüedad (I Pedro 1:10-11), sin embargo sabemos que el Espíritu Santo se movía en ellos (II Pedro 1:21).
2- Jesús levantará al creyente de la muerte (Juan 6:40), sin embargo, el Espíritu vivificará (dará vida) a los muertos (Romanos 8:11).
3- El Espíritu le levantó a Cristo de los muertos (Romanos 8:9-11), sin embargo, Jesús dijo que El se levantaría a Sí mismo de los muertos (Juan 2:19-21).
4- Juan 14:16 dice que el Padre enviaría a otro Consolador, a saber, el Espíritu Santo, pero en Juan 14:18 Jesús dijo, “no os dejaré huérfanos: vendré a vosotros.” En otras palabras, el otro Consolador es Jesús en otra forma—en el Espíritu más bien que en la carne. Jesús
explicó esto en el versículo 17, diciendo que el Consolador estaba con los discípulos ya, pero que pronto estaría en ellos.
En otras palabras, el Espíritu Santo estaba con ellos en la persona de Jesucristo, pero el Espíritu Santo, el Espíritu de Jesucristo, pronto estaría en ellos. Jesús explicó este punto aun más en Juan 16:7, diciendo que El tuvo que irse o bien el Consolador no vendría.
¿Porqué? Mientras Jesús estaba presente con ellos en la carne El no estaría presente espiritualmente en sus corazones, pero después de que El saliera físicamente enviaría a su propio Espíritu para estar con ellos.
5- El Espíritu Santo mora en los corazones de los Cristianos (Juan 14:16), sin embargo, Jesús prometió que El habitaría con sus seguidores hasta el fin del mundo (Mateo 28:20). De igual manera, los creyentes se llenan del Espíritu Santo (Hechos 2:4, 38), sin embargo, es Cristo que mora en nosotros (Colosenses 1:27).
6- Efesios 3:16-17 dice que cuando tenemos el Espíritu en el hombre interno, tenemos a Cristo en nuestros corazones.
7- Cristo santifica a la iglesia (Efesios 5:26), pero lo hace el Espíritu (I Pedro 1:2).
8- El Espíritu Santo es el parakletos prometido en Juan 14:26 (la palabra griega traducida “Consolador”), sin embargo, Jesús es nuestros parakletos en I Juan 2:1 (la misma palabra griega traducida “abogado”). Debemos observar que el mismo escritor humano—el Apóstol Juan—escribió ambos versículos, entonces supuestamente
él estaba enterado del paralelo.
9- El Espíritu es nuestro intercesor (Romanos 8:26),
sin embargo Jesús es nuestro intercesor (Hebreos 7:25).
10- El Espíritu Santo nos dará las palabras que debemos decir en épocas de persecución (Marcos 13:11), sin embargo Jesús dijo que El haría lo mismo (Lucas 21:15). Padre, Hijo, y Espíritu Santo
Está claro que los términos Padre, Hijo, y Espíritu Santo no pueden significar tres personas, personalidades, voluntades, o seres distintos. Pueden denotar solamente diversos aspectos o papeles de un ser espiritual el único Dios. Ellos describen las relaciones de Dios
para con el hombre, no personas en una Deidad. Usamos a Padre para enfatizar los papeles de Dios como Creador, Padre de espíritus, Padre de los creyentes nacidos de nuevo, y Padre de la humanidad de Jesucristo.
Usamos a Hijo para significar tanto la humanidad de Jesucristo
como a Dios como El se manifestó en carne con el propósito de la salvación del hombre. Usamos a Espíritu Santo para enfatizar el poder activo de Dios en el mundo y entre los hombres, particularmente su obra en la regeneración.
Debemos observar que estos tres títulos no son los únicos que Dios tiene. Muchos otros títulos o nombres para Dios son muy significativos y aparecen con frecuencia en la Biblia, incluyendo los términos tales como Jehová, Señor, Verbo, Dios Omnipotente, y el Santo de Israel. La creencia en la Unicidad no niega al Padre, ni el Hijo, ni el Espíritu Santo, pero sí refuta la idea que estos términos denotan personas en la Deidad. Dios tiene muchos títulos, pero El es un ser. En cuanto a su existencia.El es indivisible, pero Su revelación de Sí mismo a la humanidad se ha expresado a través de muchos canales, incluyendo Su revelación como el Padre, en el Hijo, y
como el Espíritu Santo. Efesios 3:14-17, que hemos usado varias veces en este capítulo, demuestra que el Padre, el Espíritu, y Cristo son uno en el sentido apenas descrito. “Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo, de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra, para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu; para que habite Cristo por la fe en vuestros
corazones . . .” Así entonces, este pasaje identifica al Espíritu en el corazón de un Cristiano como el Espíritu del Padre y también como a Cristo. El Padre, Cristo, y el Espíritu todos se refieren al único Dios indivisible.
¿Qué de los pasajes de Escritura que parecen describir a más de una persona en la Deidad? Debido a años de uso por los que creen en más de una persona en la Deidad, estos pasajes solo parecen describir a más de una persona en la Deidad. Cuando una persona limpia su
mente de todas las interpretaciones, connotaciones, y doctrinas de los hombres, y puede ver estos versículos a través de los ojos de los escritores originales (quienes eran judíos monoteístas devotos), entenderá que estos versículos describen o los atributos y papeles múltiples de Dios o la doble naturaleza de Jesucristo. Solamente dos versículos de Escritura en la Biblia entera mencionan a Padre, Hijo (o Verbo), y Espíritu Santo de una manera que podría sugerir tres personas o una significado especial del número tres en lo referente a
la Deidad.
Ellos son Mateo 28:19 y I Juan 5:7. Sin embargo, ambos pasajes presentan unos problemas serios para la opinión trinitaria.
Mateo 28:19
“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.”
En este pasaje, Jesús ordenó a sus discípulos a bautizar “en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.” Sin embargo, este versículo de Escritura no enseña que Padre, Hijo, y Espíritu Santo son tres personas distintas. En cambio, enseña que los títulos Padre, Hijo, y Espíritu Santo identifican a un nombre y por lo tanto a un ser. El versículo expresamente dice “en el nombre,” no “en los nombres.”
Para contestar a cualquier duda que la distinción singular- plural es significativa o que fue planeada deliberadamente por Dios, necesitamos solamente leer Gálatas 3:16, donde Pablo enfatiza el significado singular de la frase “tu simiente” en Génesis 22:18.
Muchos eruditos trinitarios han reconocido por lo menos parcialmente el significado del singular en Mateo 28:19. Por ejemplo, el
profesor presbiteriano, James Buswell, dice, “el ‘nombre,’ no los ‘nombres’ del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo en el cual debemos ser bautizados, debe entenderse como Yahweh, el nombre del Dios Trino.” 1 Su discernimiento del singular está correcto, aunque su identificación del nombre singular está en error. Jehová o Yahweh era el nombre revelado de Dios en el Antiguo Testamento, pero
Jesús es el nombre revelado de Dios en el Nuevo Testamento. Sin embargo, el nombre de Jesús incluye a Jehová puesto que Jesús significa Jehová-Salvador. Padre, Hijo, y Espíritu Santo todos describen al único Dios, entonces la frase en Mateo 28:19 simplemente
describe el único nombre del único Dios. El Antiguo Testamento prometió que vendría una época en que Jehová tendría un solo nombre y que ese único nombre se daría a conocer (Zacarías 14:9; Isaías 52:6).
Sabemos que el único nombre de Mateo 28:19 es Jesús, porque Jesús es
el nombre del Padre (Juan 5:43; Hebreos 1:4), del Hijo (Mateo 1:21), y del Espíritu Santo (Juan 14:26). La iglesia del Nuevo Testamento entendía esto como la verdad, porque ellos bautizaban en el nombre de Jesucristo (Hechos 2:38; 8:16; 10:48; 19:5; I Corintios 1:13).
Mateo mismo endosó esta interpretación estando en pié con
Pedro y los otros apóstoles durante el sermón en el cual Pedro mandó a la gente que se bautizaran en el nombre de Jesucristo (Hechos 2:14-38). Algunos dicen que las referencias en los Hechos realmente no significan que el nombre de Jesús fue pronunciado oralmente como parte de la fórmula bautismal. Sin embargo, esto parece ser una tentativa de torcer el lenguaje para conformarse con una doctrina erronea y una práctica equivocada. Los Hechos 22:16 dice, “Levántate
y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre.” Por lo tanto este versículo de Escritura indica que el nombre de Jesús era invocado en el bautismo. Santiago 2:7 dice, “¿No blasfeman ellos el buen nombre que fue invocado sobre vosotros?” La frase griega indica que ese nombre fue invocado sobre los Cristianos a tiempo
especifico. Mas La Biblia Amplificada dice, “Que no son ellos quien blasfemaron ese precioso nombre en el cual fuiste distinguidos y llamados (el nombre de Cristo invocado en el bautismo)?”
Para un ejemplo de lo que “en el nombre de Jesús” significa, solamente tenemos que ver la historia de la sanidad del hombre cojo en Hechos 3. Jesús dijo que deberíamos orar por los enfermos en Su nombre (Marcos 16:17-18), y Pedro dijo que el nombre de Jesús
curó al hombre cojo (Hechos 4:10). ¿Cómo sucedió esto? Pedro actualmente pronunció las palabras, “en el nombre de Jesucristo” (Hechos 3:6). El nombre de Jesús invocado con fe produjo el resultado. El nombre significa poder o autoridad, pero este significado no detrae del hecho de que Pedro invocó oralmente el nombre de Jesús para efectuar la sanidad.
Si los muchos pasajes de Escritura en los Hechos que se refieren al bautismo en agua en el nombre Jesús no describen una fórmula bautismal, entonces es igualmente verdadero que Mateo 28:19 no indica una fórmula. Esta interpretación dejaría a la iglesia sin una fórmula bautismal para hacer una distinción entre el bautismo Cristiano, el
bautismo de los prosélites judíos, y el bautismo pagano.
Pero el Señor no nos dejó sin una fórmula bautismal; la iglesia cumplió correctamente con las instrucciones que Jesús dió en Mateo 28:19 cuando los apóstoles usaron el nombre de Jesús en el bautismo en agua.
Muchas enciclopedias e historiadores de la iglesia convienen que la original fórmula bautismal en la antigua historia de la iglesia era “en el nombre de Jesús.” Por ejemplo, el profesor Luterano Otto Heick dice, “El primer bautismo fue administrado en el nombre de Jesús, pero gradualmente en el nombre del Dios Trino: Padre, Hijo y
Espíritu.” 2 Esto no era un resbalón de la pluma, porque más adelante el afirmó su opinión: “En el principio el bautismo se hacía en el nombre de Cristo.”3 Esta interpretación del único nombre en Mateo 28:19 como Jesús halla más apoyo en la descripción completa
de los acontecimientos de los cuales este versículo es una parte. En Mateo 28:18-19, Jesús dijo, “Toda potestad me es dada en el cielo, y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre . . .” En otras palabras, Jesús dijo, “Yo tengo todo el poder, entonces bauticen en mi nombre.” Torcería la lógica del pasaje si se leyera para significar, “tengo todo el
poder, entonces bauticen en los nombres de tres distintas personas.” En los otros relatos de la Gran Comisión, el nombre de Jesús figura prominentemente (Marcos 16:17; Lucas 24:47). Lo que escribió Mateo “del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo,” lo que escribió Marcos “en mi nombre,” y lo que escribió Lucas “en su nombre,” todo se
refiere al nombre de Jesús.
Debemos recordar que el bautismo en agua es administrado debido a nuestra vida pasada de pecado; es para “perdón de los pecados” (Hechos 2:38). Puesto que el nombre de Jesús es el único nombre salvador (Hechos 4:12), es lógico que el nombre se use en el bautismo.
Jesús mismo relacionó el perdón de pecados con Su nombre: “y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén” (Lucas 24:47).
Mateo 28:19 no enseña a tres personas en un Dios, pero da tres títulos de Dios, todos de los cuales se aplican correctamente a Jesucristo. Estos títulos resumen los diferentes papeles de Dios o modos de Su revelación; por su referencia singular al “nombre,” se enfoca sobre el único nombre de Dios revelado en el Nuevo Testamento.
Ese nombre es Jesús. Luz adicional sobre esta interpretación que el nombre de Dios es Jesús viene de una comparación de Apocalípsis
14:1 con 22:3-4. Hay un nombre para el Padre, para Dios, y para el Cordero. El Cordero es Jesús, entonces Jesús es el nombre de Dios y del Padre.
I Juan 5:7
“Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo, y el Espíritu Santo;y estos tres son uno.”
Aunque este verso de Escritura es usado a menudo por los que creen en tres personas de Dios, actualmente refuta esta idea, porque dice que “estos tres son uno.”
Algunos interpretan esta frase para significar uno en unidad como un hombre y su esposa son uno. Pero debe ser precisado que ésta idea es esencialmente politeísta. Si la palabra uno se refirió a la unidad en vez de a la designación numérica, entonces se puede ver a la deidad
como a muchos dioses en un concilio o gobierno unido. Si
se significaba la unidad, el versículo debe haberse leído,
“Estos tres convienen como uno.”
También es interesante observar que este versículo no usa la palabra Hijo, sino Verbo. Si Hijo era el nombre especial de una persona distinta en la Deidad, y si este versículo intentaba enseñar que había personas distintas, ¿por qué usó Verbo en vez de Hijo? Hijo no se refiere primariamente a la Deidad, pero Verbo sí. El Verbo no es una persona distinta al Padre así como que un hombre y su
palabra no son personas distintas. Al contrario, el Verbo es el pensamiento o el plan en la mente de Dios y también es la expresión de Dios.
De una manera similar, el Espíritu Santo no es un persona distinta al Padre así como que un hombre y su espíritu no son personas distintas. El Espíritu Santo solamente describe lo que es Dios. Primera de Juan 5:7 dice que los tres dan testimonio en el cielo; es decir, Dios se ha
registrado a Sí mismo en tres modos de actividad o se ha revelado a Sí mismo de tres maneras. El tiene por lo menos tres papeles celestiales: Padre, Verbo (no Hijo), y Espíritu Santo. Además, estos tres papeles describen al único Dios: “estos tres son uno.”*
*Acabamos de explicar I Juan 5:7 de una manera consistente con el resto de la Escritura. Sin embargo, ¡hay un acuerdo practicamente unánime entre los eruditos bíblicos de que este versículo realmente no forma parte de la Biblia!
Todas la traducciones mayores en el inglés desde la versión King James (KJV) la han omitido, incluso el Revised Standard Version, The Amplified Bible, y el New International Version. También lo omite el texto griego generalmente aceptado (el texto Nestle). El New International Version (La Nueva Versión Internacional) presenta I Juan 5:7-8 así: “Porque hay tres que testifican: el Espíritu, el agua y la sangre; y estos tres están de acuerdo.” La KJV incluyó el versículo 7 solamente porque la edición del texto griego de 1522, compilado por Erasmo, la incluía. Originalmente, Erasmo había excluido este pasaje de sus ediciones de 1516 y 1519 porque no se hallaba en cualquiera de 5000 manuscritos griegos, sino solamente en manuscritos recientes de la Vulgata—la versión en latín que usaba en ese entonces la Iglesia Católica Romana. Cuando la iglesia Católica presionó a Erasmo a incluir este versículo, él prometió hacerlo si ellos pudieran hallar aun un solo manuscrito griego que lo tenía. Por fin produjeron uno, y entonces Erasmo con renuencia incluyó el versículo, aunque el manuscrito producido fechaba desde 1520. (Véase Norman Geisler y William Nix, Una Introducción General a la Biblia [A General Introduction to the Bible], Chicago: Moody Press, 1968,
p. 370.) Por esta evidencia, parece ser creíble que algún copista sobremanera celoso vió “tres son los que dan testimonio” y decidio injertar un poco de su propia enseñanza. Por cierto, el pasaje en cuestión no se relaciona en nada al resto de la discusión aquí de Juan, e interrumpe el flujo de su propio argumento
lógico. Aunque toda la evidencia indica que este pasaje no formaba parte originalmente de I Juan, Dios tuvo Su mano de protección y preservación sobre Su Palabra. A pesar de los esfuerzos del hombre, Dios no permitió que el pasaje contradijera a Su Palabra. Ya que una persona crea o no que I Juan 5:7 era originalmente parte de la Biblia o que fue una interpolación más reciente, no enseña tres personas de Dios sino que afirma más bien la enseñanza de la Biblia de un solo Dios indivisible con varias manifestaciones.
¿Se Limita Dios A Tres Manifestaciones?
En este capítulo hemos discutido tres prominentes manifestaciones de Dios. ¿Significa esto que Dios está limitado a estos tres papeles? ¿Abarcan los términos Padre, Hijo, y Espíritu Santo todo lo que es Dios? A pesar de la prominencia que estas manifestaciones tienen en el plan de redención y salvación del Nuevo Testamento, no parece que Dios puede ser limitado a éstos tres papeles, títulos, o manifestaciones. Dios se manifestó a Sí mismo de muchas maneras en el Antiguo Testamento. El se reveló a Sí mismo en muchas teofanías, incluso en formas humanas y angélicas.
La Biblia usa muchos otros nombres y títulos de Dios. Por ejemplo, Jehová y Señor aparecen con frecuencia en la Biblia. Dios se ha revelado al hombre en muchas otras relaciones, también. Por ejemplo, El es Rey, Señor,Novio, Marido, Hermano, Apóstol, Sumo sacerdote, Cordero, Pastor, y Verbo. Mientras que Padre, Hijo, y Espritu Santo representan tres papeles, títulos, o manifestaciones importantes de Dios, Dios no está limitado a estos tres, tampoco tiene el número tres un significado especial con respecto a Dios.
Una explicación popular de Padre, Hijo, y Espíritu Santo es que hay un Dios quien se ha revelado como Padre en la creación, Hijo en la redención, y Espíritu Santo en la regeneración. El reconocimiento de estas tres manifestaciones no implica que Dios está limitado a tres
manifestaciones o que existen tres distinciones en la naturaleza de Dios. Además, no hay una distinción total entre una manifestación y otras. Por ejemplo, Dios era el Espíritu Santo en la creación y usó Su papel como Espíritu en la creación (Génesis 1:2). Además, Dios usó
su papel como Hijo—es decir, El dependió de Su plan para la Filiación futura—en la creación (Hebreos 1:2).
Dios es nuestro Padre en la regeneración así como en la creación, porque por medio del nuevo nacimiento llegamos a ser los hijos espirituales de Dios. No podemos confinar a Dios a tres o a ningún otro número de papeles y títulos específicos. Tampoco podemos dividirle agudamente porque El es uno. Incluso sus títulos y papeles se transponen entre sí. El puede manifestarse a Sí mismo de muchas maneras, pero El es un ser y solamente uno. ¿Cómo entonces podemos tratarle a Dios de una manera que describa todo lo que El es? ¿Qué nombre incluye los muchos papeles y atributos de Dios? Por supuesto,
podríamos simplemente usar el término Dios o el nombre Jehová del Antiguo Testamento. Sin embargo, tenemos un nuevo nombre que nos ha sido revelado—el nombre de Jesús. Cuando usamos el nombre de Jesús, abarcamos todo lo que es Dios. Jesús es Padre, Hijo, y Espíritu. Jesús
resume todos los nombres compuestos de Jehová. Jesús es todo lo que es Dios. Cualquier papel o manifestación que Dios tiene, están contenidos en Jesús (Colosenses 2:9). Podemos usar el nombre de Jesús para Dios mismo, porque denota la totalidad del carácter, de los atributos, y de la auto-revelación de Dios.
Conclusión
La Biblia habla de Padre, Hijo, y Espíritu Santo como diversas manifestaciones, papeles, modos, títulos, atributos, relaciones al hombre, o funciones del único Dios, pero no se refiere a Padre, Hijo, y Espíritu Santo como a tres personas, personalidades, voluntades, mentes, o dioses. Dios es el Padre de todos nosotros y de una manera
única el Padre del hombre Jesucristo. Dios se manifestó a Sí mismo en carne en la persona de Jesucristo, llamado el Hijo de Dios. Dios también se llama el Espíritu Santo, lo que enfatiza Su actividad en las vidas y los asuntos de la humanidad.
Dios no se limita a estas tres manifestaciones; sin embargo, en la revelación gloriosa del único Dios, el Nuevo Testamento no se desvía del monoteísmo estricto del Antiguo Testamento. En cambio, la Biblia presenta a Jesús como el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. Jesús no
es solamente la manifestación de una de tres personas en la Deidad, sino El es la encarnación del Padre, el Jehová del Antiguo Testamento. A la verdad, en Jesús habita toda la plenitud de la Deidad corporalmente.
El Padre,el Hijo y el Espiritu Santo en la Biblia(parteII)
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La Deidad de Jesucristo es el Padre
La deidad residente en Jesucristo es nada menos que el Padre. En otras palabras, el Espíritu en el Hijo es el Padre. La Deidad de Jesucristo es el Espíritu Santo El Espíritu Santo se llama el Espíritu de Jesucristo (Filipenses 1:19), y el Espíritu del Hijo (Gálatas 4:6). II Corintios 3:17 dice del Espíritu, “El Señor es el Espíritu.” En breve, el Espíritu que es residente en Jesucristo es
nada menos que el Espíritu Santo. El Espíritu en el Hijo es el Espíritu Santo. Abajo hay algunos versículos paralelos de Escritura
que revelan aun más que el Espíritu de Cristo es el Espíritu Santo.
1- El Espíritu de Cristo estaba en los profetas de la antigüedad (I Pedro 1:10-11), sin embargo sabemos que el Espíritu Santo se movía en ellos (II Pedro 1:21).
2- Jesús levantará al creyente de la muerte (Juan 6:40), sin embargo, el Espíritu vivificará (dará vida) a los muertos (Romanos 8:11).
3- El Espíritu le levantó a Cristo de los muertos (Romanos 8:9-11), sin embargo, Jesús dijo que El se levantaría a Sí mismo de los muertos (Juan 2:19-21).
4- Juan 14:16 dice que el Padre enviaría a otro Consolador, a saber, el Espíritu Santo, pero en Juan 14:18 Jesús dijo, “no os dejaré huérfanos: vendré a vosotros.” En otras palabras, el otro Consolador es Jesús en otra forma—en el Espíritu más bien que en la carne. Jesús
explicó esto en el versículo 17, diciendo que el Consolador estaba con los discípulos ya, pero que pronto estaría en ellos.
En otras palabras, el Espíritu Santo estaba con ellos en la persona de Jesucristo, pero el Espíritu Santo, el Espíritu de Jesucristo, pronto estaría en ellos. Jesús explicó este punto aun más en Juan 16:7, diciendo que El tuvo que irse o bien el Consolador no vendría.
¿Porqué? Mientras Jesús estaba presente con ellos en la carne El no estaría presente espiritualmente en sus corazones, pero después de que El saliera físicamente enviaría a su propio Espíritu para estar con ellos.
5- El Espíritu Santo mora en los corazones de los Cristianos (Juan 14:16), sin embargo, Jesús prometió que El habitaría con sus seguidores hasta el fin del mundo (Mateo 28:20). De igual manera, los creyentes se llenan del Espíritu Santo (Hechos 2:4, 38), sin embargo, es Cristo que mora en nosotros (Colosenses 1:27).
6- Efesios 3:16-17 dice que cuando tenemos el Espíritu en el hombre interno, tenemos a Cristo en nuestros corazones.
7- Cristo santifica a la iglesia (Efesios 5:26), pero lo hace el Espíritu (I Pedro 1:2).
8- El Espíritu Santo es el parakletos prometido en Juan 14:26 (la palabra griega traducida “Consolador”), sin embargo, Jesús es nuestros parakletos en I Juan 2:1 (la misma palabra griega traducida “abogado”). Debemos observar que el mismo escritor humano—el Apóstol Juan—escribió ambos versículos, entonces supuestamente
él estaba enterado del paralelo.
9- El Espíritu es nuestro intercesor (Romanos 8:26),
sin embargo Jesús es nuestro intercesor (Hebreos 7:25).
10- El Espíritu Santo nos dará las palabras que debemos decir en épocas de persecución (Marcos 13:11), sin embargo Jesús dijo que El haría lo mismo (Lucas 21:15). Padre, Hijo, y Espíritu Santo
Está claro que los términos Padre, Hijo, y Espíritu Santo no pueden significar tres personas, personalidades, voluntades, o seres distintos. Pueden denotar solamente diversos aspectos o papeles de un ser espiritual el único Dios. Ellos describen las relaciones de Dios
para con el hombre, no personas en una Deidad. Usamos a Padre para enfatizar los papeles de Dios como Creador, Padre de espíritus, Padre de los creyentes nacidos de nuevo, y Padre de la humanidad de Jesucristo.
Usamos a Hijo para significar tanto la humanidad de Jesucristo
como a Dios como El se manifestó en carne con el propósito de la salvación del hombre. Usamos a Espíritu Santo para enfatizar el poder activo de Dios en el mundo y entre los hombres, particularmente su obra en la regeneración.
Debemos observar que estos tres títulos no son los únicos que Dios tiene. Muchos otros títulos o nombres para Dios son muy significativos y aparecen con frecuencia en la Biblia, incluyendo los términos tales como Jehová, Señor, Verbo, Dios Omnipotente, y el Santo de Israel. La creencia en la Unicidad no niega al Padre, ni el Hijo, ni el Espíritu Santo, pero sí refuta la idea que estos términos denotan personas en la Deidad. Dios tiene muchos títulos, pero El es un ser. En cuanto a su existencia.El es indivisible, pero Su revelación de Sí mismo a la humanidad se ha expresado a través de muchos canales, incluyendo Su revelación como el Padre, en el Hijo, y
como el Espíritu Santo. Efesios 3:14-17, que hemos usado varias veces en este capítulo, demuestra que el Padre, el Espíritu, y Cristo son uno en el sentido apenas descrito. “Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo, de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra, para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu; para que habite Cristo por la fe en vuestros
corazones . . .” Así entonces, este pasaje identifica al Espíritu en el corazón de un Cristiano como el Espíritu del Padre y también como a Cristo. El Padre, Cristo, y el Espíritu todos se refieren al único Dios indivisible.
¿Qué de los pasajes de Escritura que parecen describir a más de una persona en la Deidad? Debido a años de uso por los que creen en más de una persona en la Deidad, estos pasajes solo parecen describir a más de una persona en la Deidad. Cuando una persona limpia su
mente de todas las interpretaciones, connotaciones, y doctrinas de los hombres, y puede ver estos versículos a través de los ojos de los escritores originales (quienes eran judíos monoteístas devotos), entenderá que estos versículos describen o los atributos y papeles múltiples de Dios o la doble naturaleza de Jesucristo. Solamente dos versículos de Escritura en la Biblia entera mencionan a Padre, Hijo (o Verbo), y Espíritu Santo de una manera que podría sugerir tres personas o una significado especial del número tres en lo referente a
la Deidad.
Ellos son Mateo 28:19 y I Juan 5:7. Sin embargo, ambos pasajes presentan unos problemas serios para la opinión trinitaria.
Mateo 28:19
“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.”
En este pasaje, Jesús ordenó a sus discípulos a bautizar “en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.” Sin embargo, este versículo de Escritura no enseña que Padre, Hijo, y Espíritu Santo son tres personas distintas. En cambio, enseña que los títulos Padre, Hijo, y Espíritu Santo identifican a un nombre y por lo tanto a un ser. El versículo expresamente dice “en el nombre,” no “en los nombres.”
Para contestar a cualquier duda que la distinción singular- plural es significativa o que fue planeada deliberadamente por Dios, necesitamos solamente leer Gálatas 3:16, donde Pablo enfatiza el significado singular de la frase “tu simiente” en Génesis 22:18.
Muchos eruditos trinitarios han reconocido por lo menos parcialmente el significado del singular en Mateo 28:19. Por ejemplo, el
profesor presbiteriano, James Buswell, dice, “el ‘nombre,’ no los ‘nombres’ del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo en el cual debemos ser bautizados, debe entenderse como Yahweh, el nombre del Dios Trino.” 1 Su discernimiento del singular está correcto, aunque su identificación del nombre singular está en error. Jehová o Yahweh era el nombre revelado de Dios en el Antiguo Testamento, pero
Jesús es el nombre revelado de Dios en el Nuevo Testamento. Sin embargo, el nombre de Jesús incluye a Jehová puesto que Jesús significa Jehová-Salvador. Padre, Hijo, y Espíritu Santo todos describen al único Dios, entonces la frase en Mateo 28:19 simplemente
describe el único nombre del único Dios. El Antiguo Testamento prometió que vendría una época en que Jehová tendría un solo nombre y que ese único nombre se daría a conocer (Zacarías 14:9; Isaías 52:6).
Sabemos que el único nombre de Mateo 28:19 es Jesús, porque Jesús es
el nombre del Padre (Juan 5:43; Hebreos 1:4), del Hijo (Mateo 1:21), y del Espíritu Santo (Juan 14:26). La iglesia del Nuevo Testamento entendía esto como la verdad, porque ellos bautizaban en el nombre de Jesucristo (Hechos 2:38; 8:16; 10:48; 19:5; I Corintios 1:13).
Mateo mismo endosó esta interpretación estando en pié con
Pedro y los otros apóstoles durante el sermón en el cual Pedro mandó a la gente que se bautizaran en el nombre de Jesucristo (Hechos 2:14-38). Algunos dicen que las referencias en los Hechos realmente no significan que el nombre de Jesús fue pronunciado oralmente como parte de la fórmula bautismal. Sin embargo, esto parece ser una tentativa de torcer el lenguaje para conformarse con una doctrina erronea y una práctica equivocada. Los Hechos 22:16 dice, “Levántate
y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre.” Por lo tanto este versículo de Escritura indica que el nombre de Jesús era invocado en el bautismo. Santiago 2:7 dice, “¿No blasfeman ellos el buen nombre que fue invocado sobre vosotros?” La frase griega indica que ese nombre fue invocado sobre los Cristianos a tiempo
especifico. Mas La Biblia Amplificada dice, “Que no son ellos quien blasfemaron ese precioso nombre en el cual fuiste distinguidos y llamados (el nombre de Cristo invocado en el bautismo)?”
Para un ejemplo de lo que “en el nombre de Jesús” significa, solamente tenemos que ver la historia de la sanidad del hombre cojo en Hechos 3. Jesús dijo que deberíamos orar por los enfermos en Su nombre (Marcos 16:17-18), y Pedro dijo que el nombre de Jesús
curó al hombre cojo (Hechos 4:10). ¿Cómo sucedió esto? Pedro actualmente pronunció las palabras, “en el nombre de Jesucristo” (Hechos 3:6). El nombre de Jesús invocado con fe produjo el resultado. El nombre significa poder o autoridad, pero este significado no detrae del hecho de que Pedro invocó oralmente el nombre de Jesús para efectuar la sanidad.
Si los muchos pasajes de Escritura en los Hechos que se refieren al bautismo en agua en el nombre Jesús no describen una fórmula bautismal, entonces es igualmente verdadero que Mateo 28:19 no indica una fórmula. Esta interpretación dejaría a la iglesia sin una fórmula bautismal para hacer una distinción entre el bautismo Cristiano, el
bautismo de los prosélites judíos, y el bautismo pagano.
Pero el Señor no nos dejó sin una fórmula bautismal; la iglesia cumplió correctamente con las instrucciones que Jesús dió en Mateo 28:19 cuando los apóstoles usaron el nombre de Jesús en el bautismo en agua.
Muchas enciclopedias e historiadores de la iglesia convienen que la original fórmula bautismal en la antigua historia de la iglesia era “en el nombre de Jesús.” Por ejemplo, el profesor Luterano Otto Heick dice, “El primer bautismo fue administrado en el nombre de Jesús, pero gradualmente en el nombre del Dios Trino: Padre, Hijo y
Espíritu.” 2 Esto no era un resbalón de la pluma, porque más adelante el afirmó su opinión: “En el principio el bautismo se hacía en el nombre de Cristo.”3 Esta interpretación del único nombre en Mateo 28:19 como Jesús halla más apoyo en la descripción completa
de los acontecimientos de los cuales este versículo es una parte. En Mateo 28:18-19, Jesús dijo, “Toda potestad me es dada en el cielo, y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre . . .” En otras palabras, Jesús dijo, “Yo tengo todo el poder, entonces bauticen en mi nombre.” Torcería la lógica del pasaje si se leyera para significar, “tengo todo el
poder, entonces bauticen en los nombres de tres distintas personas.” En los otros relatos de la Gran Comisión, el nombre de Jesús figura prominentemente (Marcos 16:17; Lucas 24:47). Lo que escribió Mateo “del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo,” lo que escribió Marcos “en mi nombre,” y lo que escribió Lucas “en su nombre,” todo se
refiere al nombre de Jesús.
Debemos recordar que el bautismo en agua es administrado debido a nuestra vida pasada de pecado; es para “perdón de los pecados” (Hechos 2:38). Puesto que el nombre de Jesús es el único nombre salvador (Hechos 4:12), es lógico que el nombre se use en el bautismo.
Jesús mismo relacionó el perdón de pecados con Su nombre: “y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén” (Lucas 24:47).
Mateo 28:19 no enseña a tres personas en un Dios, pero da tres títulos de Dios, todos de los cuales se aplican correctamente a Jesucristo. Estos títulos resumen los diferentes papeles de Dios o modos de Su revelación; por su referencia singular al “nombre,” se enfoca sobre el único nombre de Dios revelado en el Nuevo Testamento.
Ese nombre es Jesús. Luz adicional sobre esta interpretación que el nombre de Dios es Jesús viene de una comparación de Apocalípsis
14:1 con 22:3-4. Hay un nombre para el Padre, para Dios, y para el Cordero. El Cordero es Jesús, entonces Jesús es el nombre de Dios y del Padre.
I Juan 5:7
“Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo, y el Espíritu Santo;y estos tres son uno.”
Aunque este verso de Escritura es usado a menudo por los que creen en tres personas de Dios, actualmente refuta esta idea, porque dice que “estos tres son uno.”
Algunos interpretan esta frase para significar uno en unidad como un hombre y su esposa son uno. Pero debe ser precisado que ésta idea es esencialmente politeísta. Si la palabra uno se refirió a la unidad en vez de a la designación numérica, entonces se puede ver a la deidad
como a muchos dioses en un concilio o gobierno unido. Si
se significaba la unidad, el versículo debe haberse leído,
“Estos tres convienen como uno.”
También es interesante observar que este versículo no usa la palabra Hijo, sino Verbo. Si Hijo era el nombre especial de una persona distinta en la Deidad, y si este versículo intentaba enseñar que había personas distintas, ¿por qué usó Verbo en vez de Hijo? Hijo no se refiere primariamente a la Deidad, pero Verbo sí. El Verbo no es una persona distinta al Padre así como que un hombre y su
palabra no son personas distintas. Al contrario, el Verbo es el pensamiento o el plan en la mente de Dios y también es la expresión de Dios.
De una manera similar, el Espíritu Santo no es un persona distinta al Padre así como que un hombre y su espíritu no son personas distintas. El Espíritu Santo solamente describe lo que es Dios. Primera de Juan 5:7 dice que los tres dan testimonio en el cielo; es decir, Dios se ha
registrado a Sí mismo en tres modos de actividad o se ha revelado a Sí mismo de tres maneras. El tiene por lo menos tres papeles celestiales: Padre, Verbo (no Hijo), y Espíritu Santo. Además, estos tres papeles describen al único Dios: “estos tres son uno.”*
*Acabamos de explicar I Juan 5:7 de una manera consistente con el resto de la Escritura. Sin embargo, ¡hay un acuerdo practicamente unánime entre los eruditos bíblicos de que este versículo realmente no forma parte de la Biblia!
Todas la traducciones mayores en el inglés desde la versión King James (KJV) la han omitido, incluso el Revised Standard Version, The Amplified Bible, y el New International Version. También lo omite el texto griego generalmente aceptado (el texto Nestle). El New International Version (La Nueva Versión Internacional) presenta I Juan 5:7-8 así: “Porque hay tres que testifican: el Espíritu, el agua y la sangre; y estos tres están de acuerdo.” La KJV incluyó el versículo 7 solamente porque la edición del texto griego de 1522, compilado por Erasmo, la incluía. Originalmente, Erasmo había excluido este pasaje de sus ediciones de 1516 y 1519 porque no se hallaba en cualquiera de 5000 manuscritos griegos, sino solamente en manuscritos recientes de la Vulgata—la versión en latín que usaba en ese entonces la Iglesia Católica Romana. Cuando la iglesia Católica presionó a Erasmo a incluir este versículo, él prometió hacerlo si ellos pudieran hallar aun un solo manuscrito griego que lo tenía. Por fin produjeron uno, y entonces Erasmo con renuencia incluyó el versículo, aunque el manuscrito producido fechaba desde 1520. (Véase Norman Geisler y William Nix, Una Introducción General a la Biblia [A General Introduction to the Bible], Chicago: Moody Press, 1968,
p. 370.) Por esta evidencia, parece ser creíble que algún copista sobremanera celoso vió “tres son los que dan testimonio” y decidio injertar un poco de su propia enseñanza. Por cierto, el pasaje en cuestión no se relaciona en nada al resto de la discusión aquí de Juan, e interrumpe el flujo de su propio argumento
lógico. Aunque toda la evidencia indica que este pasaje no formaba parte originalmente de I Juan, Dios tuvo Su mano de protección y preservación sobre Su Palabra. A pesar de los esfuerzos del hombre, Dios no permitió que el pasaje contradijera a Su Palabra. Ya que una persona crea o no que I Juan 5:7 era originalmente parte de la Biblia o que fue una interpolación más reciente, no enseña tres personas de Dios sino que afirma más bien la enseñanza de la Biblia de un solo Dios indivisible con varias manifestaciones.
¿Se Limita Dios A Tres Manifestaciones?
En este capítulo hemos discutido tres prominentes manifestaciones de Dios. ¿Significa esto que Dios está limitado a estos tres papeles? ¿Abarcan los términos Padre, Hijo, y Espíritu Santo todo lo que es Dios? A pesar de la prominencia que estas manifestaciones tienen en el plan de redención y salvación del Nuevo Testamento, no parece que Dios puede ser limitado a éstos tres papeles, títulos, o manifestaciones. Dios se manifestó a Sí mismo de muchas maneras en el Antiguo Testamento. El se reveló a Sí mismo en muchas teofanías, incluso en formas humanas y angélicas.
La Biblia usa muchos otros nombres y títulos de Dios. Por ejemplo, Jehová y Señor aparecen con frecuencia en la Biblia. Dios se ha revelado al hombre en muchas otras relaciones, también. Por ejemplo, El es Rey, Señor,Novio, Marido, Hermano, Apóstol, Sumo sacerdote, Cordero, Pastor, y Verbo. Mientras que Padre, Hijo, y Espritu Santo representan tres papeles, títulos, o manifestaciones importantes de Dios, Dios no está limitado a estos tres, tampoco tiene el número tres un significado especial con respecto a Dios.
Una explicación popular de Padre, Hijo, y Espíritu Santo es que hay un Dios quien se ha revelado como Padre en la creación, Hijo en la redención, y Espíritu Santo en la regeneración. El reconocimiento de estas tres manifestaciones no implica que Dios está limitado a tres
manifestaciones o que existen tres distinciones en la naturaleza de Dios. Además, no hay una distinción total entre una manifestación y otras. Por ejemplo, Dios era el Espíritu Santo en la creación y usó Su papel como Espíritu en la creación (Génesis 1:2). Además, Dios usó
su papel como Hijo—es decir, El dependió de Su plan para la Filiación futura—en la creación (Hebreos 1:2).
Dios es nuestro Padre en la regeneración así como en la creación, porque por medio del nuevo nacimiento llegamos a ser los hijos espirituales de Dios. No podemos confinar a Dios a tres o a ningún otro número de papeles y títulos específicos. Tampoco podemos dividirle agudamente porque El es uno. Incluso sus títulos y papeles se transponen entre sí. El puede manifestarse a Sí mismo de muchas maneras, pero El es un ser y solamente uno. ¿Cómo entonces podemos tratarle a Dios de una manera que describa todo lo que El es? ¿Qué nombre incluye los muchos papeles y atributos de Dios? Por supuesto,
podríamos simplemente usar el término Dios o el nombre Jehová del Antiguo Testamento. Sin embargo, tenemos un nuevo nombre que nos ha sido revelado—el nombre de Jesús. Cuando usamos el nombre de Jesús, abarcamos todo lo que es Dios. Jesús es Padre, Hijo, y Espíritu. Jesús
resume todos los nombres compuestos de Jehová. Jesús es todo lo que es Dios. Cualquier papel o manifestación que Dios tiene, están contenidos en Jesús (Colosenses 2:9). Podemos usar el nombre de Jesús para Dios mismo, porque denota la totalidad del carácter, de los atributos, y de la auto-revelación de Dios.
Conclusión
La Biblia habla de Padre, Hijo, y Espíritu Santo como diversas manifestaciones, papeles, modos, títulos, atributos, relaciones al hombre, o funciones del único Dios, pero no se refiere a Padre, Hijo, y Espíritu Santo como a tres personas, personalidades, voluntades, mentes, o dioses. Dios es el Padre de todos nosotros y de una manera
única el Padre del hombre Jesucristo. Dios se manifestó a Sí mismo en carne en la persona de Jesucristo, llamado el Hijo de Dios. Dios también se llama el Espíritu Santo, lo que enfatiza Su actividad en las vidas y los asuntos de la humanidad.
Dios no se limita a estas tres manifestaciones; sin embargo, en la revelación gloriosa del único Dios, el Nuevo Testamento no se desvía del monoteísmo estricto del Antiguo Testamento. En cambio, la Biblia presenta a Jesús como el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. Jesús no
es solamente la manifestación de una de tres personas en la Deidad, sino El es la encarnación del Padre, el Jehová del Antiguo Testamento. A la verdad, en Jesús habita toda la plenitud de la Deidad corporalmente.