Re: Aguijon de Pablo: enfermedad?
Hermano, busca cualquier diccionario el Hebreo y lea Isa. 53:4-5. Después, puedes leer Mat. 8:17. Después, lees los 4 evangelios sobre la importancia de la sanidad. Después, puedes leer 1 Ped. 2:24, busca el griego, y vas a ver que por Su llaga fuimos 'sanados'. Busca la palabra 'sanado' en el Nuevo Testamento y en CADA ocasión que se usa la palabra, se refiere a la sanidad física.
Isa. 53 habla de la redención espíritu, alma y cuerpo. Por Su llaga fuimos sanados fisicamente. Salmo 103:1-3 profetiza lo mismo. Jesús manda que hagamos lo mismo (sanar a los enfermos). Jesús dio dones de sanidad a la iglesia. Santiago pregunta por si acaso hayan enfermos en la iglesia y explica como sanarlos (la oración de fe).
Los tipos de la redención en el A.T. con Israel revelan a Jehová el Sanador. Dios no cambia. Jesús es lo mismo. La sanidad es para todos. Es parte de la redención.
La evidencia es tanta que solamente alguién cegado voluntariamente por prejuicos no lo va a aceptar.
TU CREES QUE ESTE TU CUERPO DE CARNE ESTA REDIMIDO ???? SI ESTUVIERA REDIMIDO NO MORIRIA HERMANO...LA REDENCION DEL CUERPO VENDRA CUANDO SEAMOS TRANSFORMADOS .
LA ESCRITURA DICE QUE :
Romanos 8:3
Porque lo que era imposible á la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios enviando á su Hijo en semejanza de carne de pecado, y á causa del pecado, condenó al pecado en la carne;
Romanos 7
23 pero advierto otra ley en mis miembros que lucha contra la ley de mi razón y me esclaviza a la ley del pecado que está en mis miembros.
24 ¡Pobre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo que me lleva a la muerte?
25 ¡Gracias sean dadas a Dios por Jesucristo nuestro Señor! Así pues, soy yo mismo quien con la razón sirve a la ley de Dios, mas con la carne, a la ley del pecado.
1 Corintios 15
50 Os digo esto, hermanos: La carne y la sangre no pueden heredar el Reino de los cielos: ni la corrupción hereda la incorrupción.
51 ¡Mirad! Os revelo un misterio: No moriremos todos, mas todos seremos transformados.
52 En un instante, en un pestañear de ojos, al toque de la trompeta final, pues sonará la trompeta, los muertos resucitarán incorruptibles y nosotros seremos transformados.
53 En efecto, es necesario que este ser corruptible se revista de incorruptibilidad; y que este ser mortal se revista de inmortalidad.
54 Y cuando este ser corruptible se revista de incorruptibilidad y este ser mortal se revista de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: = La muerte ha sido devorada en la victoria. =
55 = ¿Dónde está, oh muerte, = tu victoria? = ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? =
56 El aguijón de la muerte es el pecado; y la fuerza del pecado, la Ley.
57 Pero ¡gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por nuestro Señor Jesucristo!
ALELUYA !
58 Así pues, hermanos míos amados, manteneos firmes, inconmovibles, progresando siempre en la obra del Señor, conscientes de que vuestro trabajo no es vano el Señor.
Bendiciones