Es claro que el pecado del arriarismo es la incredulidad
No pueden, simplemente no pueden creer que el Verbo de Dios sea Dios, no pueden creer que se hiciera carne.
No pueden creeR que Dios quiso hacerse hombre, dar su vida por la humanidad, por el mundo, por rescatar lo que se había perdido, para establecer Su tabernáculo con nosotros, por dar su vida por sus ovejas, para beber el vino nuevo con nosotros, para que pudiera morir en la carne e ir al Hades, vencer la muerte y ascender y retomar su gloria.
No lo creen no lo entienden, no lo soportan
Lo que quieren es negarlo, relativizarlo, hacerle ver como criatura, como solo un hombre, un ángel, un arcángel, como Miguel o lo que sea, menos como Aquel que Vive por los siglos, como el Todopoderoso que ha de venir a juzgar al mundo.
Son lo peor que ha parido la incredulidad
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