Juan 20,23
A los que perdonareis los pecados, les son perdonados; a los que los retuviereis, serán retenidos.
El verbo usado es aphiemi (863 Strong). Y es EXACTAMENTE EL MISMO que el que usamos en el PADRENUESTRO, cuando decimos:
Perdónanos (aphiemi) nuestras deudas como también nosotros perdonamos (aphiemi) a nuestros deudores
Es decir, la cosa es clarísima. Pero claro, ya tienen que llegar los "protes" a retorcer el asunto.
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Maripaz:
La Biblia no puede contradecirse.
Por un lado, y en infinidad de ocasiones AFIRMA QUE SOLO DIOS PERDONA PECADOS.
Luis:
¿ah sí? ¿dónde?
¿Quizás en Marcos 2,7?
¿en ese versículo te basas Maripaz?
¿dónde está esa INFINIDAD de versículos en los que se afirma que SOLO Dios perdona pecados?
Me interesa lo del SOLO, ¿ok?
Maripaz:
El texto de Juan 20:23 que citas, parece decir lo contrario
Luis:
Sin duda dice lo contrario de lo que TÚ DICES
Maripaz:
¿Cómo entender esa aparente contradicción?
Luis:
Muy sencillo. Maripaz dice una cosa. La Biblia otra. Pero claro, Maripaz necesita apoyarse en las interpretaciones falsas de hombres como el tal Hayford, Jack W, que va y dice:
20.23 Los discípulos deben predicar tanto sobre el camino de salvación como sobre el camino de perdición. Deben explicar cómo los pecadores pueden alcanzar el perdón y presentar los peligros de rechazar el evangelio. Que los pecados de los que escuchan sean o no perdonados, depende de su aceptación o rechazo de Cristo.
Y el señor Barton, Dr Bruce B, viene a decir lo mismo:
20.23 Jesús detalla la misión de los discípulos: predicar las buenas nuevas de Jesús de modo que los pecados de la gente pudieran perdonarse. Los discípulos no tenían el poder para perdonar pecados (solo Dios puede perdonarlos, pero Jesús les dio el privilegio de decir a los nuevos creyentes que sus pecados fueron perdonados por aceptar el mensaje de Jesús (véanse las notas a Mateo 16.19 y 18.18). Todos los creyentes tienen este mismo privilegio. Podemos anunciar el perdón de pecados cuando con certeza hemos encontrado el arrepentimiento y la fe.
O sea, que esos señores dicen que lo de perdonar pecados consiste en predicar el evangelio. Curioso. Sobre todo porque Cristo después de haberles dicho que pueden perdonar pecados (supuestamente predicar el evangelio), va y les dice que los pueden retener, lo cual significaría, siguiendo la hermenéutica loca de esta gente, que podrían no predicar el evangelio.
O sea, si usamos la absurda interpretación de ese señor, Jesús les está diciendo a sus discípulos:
Podéis predicar el evangelio y podéis no predicar el evangelio
Es decir, esta gente, con tal de no aceptar la claridad con que se expresa Cristo en ese versículo, es capaz de hacerle decir tonterías. Y se quedan tan anchos los muchachos/as
Lo cierto es que el contexto de Juan 20, 23 es muy claro
Juan 20,21-23
Entonces les dijo otra vez: Paz tengáis; como me envió el Padre, así también yo os envío. Y como hubo dicho esto, les sopló, y les dijo: Tomad el Espíritu Santo: A los que perdonareis los pecados, les son perdonados; a los que se los retuviereis, les serán retenidos.
Hay muchas claves en esos versículos, sobre todo una:
¿Acaso Cristo no está enviando a sus apóstoles con la misma autoridad con la que Él fue enviado por el Padre?
Los apóstoles tienen la autoridad de Cristo y hacen lo que Cristo hizo. Por eso Cristo había dicho en Mateo 10, 40 que "El que os recibe a vosotros, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió"
Recibir a los apóstoles era recibir a Cristo. Recibir a la Iglesia es recibir a Cristo. Rechazar a los apóstoles es rechazar a Cristo. Rechazar a la Iglesia es rechazar a Cristo. Y los apóstoles, y a través de ellos la Iglesia, tenían, y la Iglesia tiene, la autoridad de Cristo. Y si Cristo tiene autoridad para perdonar pecados, los apóstoles recibieron de Él esa autoridad. Porque Él así lo dispuso aunque vengan ahora 800 millones de protestantes a negar las palabras del Señor con interpretaciones retorcidas de Juan 20,23
Por otra parte, es falso que en el Nuevo Testamento no haya ejemplos de cómo la Iglesia juzgaba a los pecadores, perdonándolos o condenándolos.
En 1ª Corintios 6 hay un ejemplo bien clarito para todo el que lo quiera ver. Fijémonos en lo que dice Pablo en 1ª Cor 5,4:
que en el nombre de nuestro Señor Jesús,
reunidos vosotros y mi espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesús, sea entregado a Satanás semejante individuo para destrucción de la carne
¿Qué? ¿hay o no hay juicio de pecado y sentencia?
Y ¿qué es lo que ocurre al final con ese individuo según 2ª Cor 2,5-11? ¿Acaso la Iglesia no le perdona?
¿Y qué pasa con Santiago 5,14-15 donde se habla de la oración de los presbíteros que salva de la enfermedad y perdona los pecados (sacramento de la Unción de enfermos)?
¿También van a venir los protestantes a decir que eso tiene algo que ver con la predicación del evangelio a los incrédulos para que sus pecados les puedan ser perdonados?
