"Una definición teológica de la profecía cristiana puede ser obtenida sólo en el marco de un similar concepto dinámico de Revelación. Ya en 1993 el cardenal Joseph Ratzinger afirmaba que era urgente una profunda búsqueda para establecer lo que significaba ser o no ser profetas, en el sentido cristiano del término."
Eso nos dice Niels Christian Hvidt en una entrevista realizada al Cardenal Ratzinger en 1998 y publicada en 1999 en la revista 30giorni, cuyo texto completo puede ser leído aquí:
http://www.solidaridad.net/noticias.php?not=1923
(Nota: al final se refiere al caso Vassula Ryden. No se responderá sobre ella ni directa ni indirectamente en este tema. Para el que quiera tratar el tema se encuentran abierto dos tema donde puede hacerlo libremente)
En esa entrevista el teólogo José Ratzinger nos dice que "existe la tesis según la cual el fin del Apocalipsis pone término a toda profecía".
Para él, esta tesis encierra un doble malentendido:
a) El concepto que el cristianismo sea una presencia ya del todo completa y que no lleva en sí alguna estructura de esperanza es el primer error que es rechazado.
b) El segundo malentendido está constituido por una comprensión intelectualista y reductiva de la Revelación, la cual es considerada como un tesoro de verdades reveladas absolutamente completa en la que no se puede agregar nada.
"Pero la venida de Cristo es el inicio de un conocimiento siempre más profundo y de un descubrimiento gradual de lo que el Verbo nos ha donado. (...) La verdadera venida de Cristo se realiza en el momento en el que Él no está más ligado a un lugar fijo o a un cuerpo físico, pero como el Resucitado en el Espíritu capaz de ir hacia todos los hombres de todas las épocas, para introducirlos en la verdad en forma cada vez más profunda. El elemento profético, como elemento de esperanza y de actualización del don de Dios, no puede faltar ni venir a menos.
Y es contundente en afirmar que en sentido estricto, la teología no es profética, pero puede convertirse realmente en teología viva cuando se nutre de un impulso profético y es iluminada por éste.
Tengamos la esperanza que el tema no termine en las trifulcas habituales.
Bendiciones. Inés
Eso nos dice Niels Christian Hvidt en una entrevista realizada al Cardenal Ratzinger en 1998 y publicada en 1999 en la revista 30giorni, cuyo texto completo puede ser leído aquí:
http://www.solidaridad.net/noticias.php?not=1923
(Nota: al final se refiere al caso Vassula Ryden. No se responderá sobre ella ni directa ni indirectamente en este tema. Para el que quiera tratar el tema se encuentran abierto dos tema donde puede hacerlo libremente)
En esa entrevista el teólogo José Ratzinger nos dice que "existe la tesis según la cual el fin del Apocalipsis pone término a toda profecía".
Para él, esta tesis encierra un doble malentendido:
a) El concepto que el cristianismo sea una presencia ya del todo completa y que no lleva en sí alguna estructura de esperanza es el primer error que es rechazado.
b) El segundo malentendido está constituido por una comprensión intelectualista y reductiva de la Revelación, la cual es considerada como un tesoro de verdades reveladas absolutamente completa en la que no se puede agregar nada.
"Pero la venida de Cristo es el inicio de un conocimiento siempre más profundo y de un descubrimiento gradual de lo que el Verbo nos ha donado. (...) La verdadera venida de Cristo se realiza en el momento en el que Él no está más ligado a un lugar fijo o a un cuerpo físico, pero como el Resucitado en el Espíritu capaz de ir hacia todos los hombres de todas las épocas, para introducirlos en la verdad en forma cada vez más profunda. El elemento profético, como elemento de esperanza y de actualización del don de Dios, no puede faltar ni venir a menos.
Y es contundente en afirmar que en sentido estricto, la teología no es profética, pero puede convertirse realmente en teología viva cuando se nutre de un impulso profético y es iluminada por éste.
Tengamos la esperanza que el tema no termine en las trifulcas habituales.
Bendiciones. Inés