¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?



No. No podría generlaizar.

Por que si con los catolicos entonces...?

Básicamente como grupo, considero a todos los evangélicos o cristianos como mis hermanos.

Tambien los catolicos dicen ser cristianos...

Sin embargo hay grupos religiosos que pretendiendo ser cristianos tienen diferencias doctrinales tremendas que les hacen caer en la herejía sistematizada,

Eso mismo piensan estos grupos religiosos de "tu grupo religioso" o "del mio"...

entre estos grupos religiosos hay quienes niegan la Trinidad,

Cuentame en ese "grupo", pero venga, no es el tema tratado aqui. Pero estos grupos, incisto, que no piensan como "tu grupo" tal vez piensen lo mismo que tu estas diciendo "tu grupo religioso" sigue doctrinas "que les hacen caer en la herejía..."

o el lago de fuego preparado para Satanás y sus ángeles, o niegan que el Señor vino en carne o creen en fuentes inspiradas de igual o mayor altura que las sagradas escrituras, entre tales grupos estan los unitarios, Testigos de Jehova, Ciencia cristiana, adventistas, mormones, catolico romanos, y un largo etcétera.

Aqui no me incluyo, pero igualmente, estos otros "grupos religiosos" pudieran estar pensando lo mismo de nosotros...

No niego que en tales grupos pueda haber cristianos, nacidos de nuevo y que por diversas razones se encuentran aun ahí, atrapados. A los tales les insto a salir de hai.

Debias saber que en todos los "grupos religiosos" incluyendo el tuyo y el mio, hay "nacidos de nuevo" que lo son y "nacidos de nuevo" que lo dicen...

Por lo anterior tendría que conocer en lo individual a la persona y saber si en el espiritu puedo llamarle o no abiertamente hermano(a).

Pero si Cristo nos dijo: "si amais a los que os aman, que merito teneis..."? Por que no recibirlo (al hermano) como es, con sus defectos y virtudes, si los hay o no...!!!

En el caso concreto de esta amiga adventista, ella es alguien que fue evangélica y que por asuntos relacionados -segun entiendo- con el testimonio de alguien, se fue al grupo de los adventistas, tomó sus doctrinas lamentablemente contaminándose de ellas, pero de algun modo ella había tenido un encuentro personal con Jesucristo. Confío que la obra que empezó el Señor en ella, que El mismo la perfecione y la termine y que un día ella se percate del error doctrinal en que se encuentra, se arrpienta y vuelva a la senda angosta.

Y si esto no llegara a suceder, dejaria de ser tu hermana por eso...?

Sus frutos para conmigo han sodo de amor fraterno y no soy nadie para juzgarla,

Por que juzgar a los hermanos catolicos entonces? No esta ella (tu amiga) segun tu "contaminandose" con la doctrina adventista, sin embargo para ella hay una esclusividad de trato "hermana"; mientras que para un catolico tambien "contaminado" en su doctrina es diferente...
No te parece que debiera ser un mismo trato para con ambos...?

solo espero que ella no se contamine con doctrinas heréticas ni se siga haciendo mas complice de los errores de aquella secta.

Bueno, si esta sembrando arroz, sus pies se enlodaran...


Espero que reflecciones hermano, te quiero citar este texto para que medites no en el texto, sino en mis palabras...

"Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones"


Dios te bendiga!
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

igorcb dijo:
Va denuevo,

No se es hermano de un cristiano por pertenecer a un grupo religioso, puedes ser muy protestante incluso ser pastor, obispo o apostol, ir al culto todos los días, irte de misionero a Irak, repartir tu fortuna entre los pobres, salir en TV haciendo sanidades y liberaciones o ser el cantante de música gospel con más discos vendidos si no tienes a Jesús como tu Señor y Salvador si no crees en Él no eres hermano y si por el contrario no ostentas ningún título religioso y en realidad a eso de la religión poco le entiendes pero Cristo es tu Señor y Salvador entonces si eres hermano ¿ves?

Los catolicos tambien dicen que Cristo es "su Señor y Salvador"

Entonces, son tus hermanos...? Sin embargo, dentro de "tu grupo religioso" te puedo asegurar que los hay que no son tus hermanos, pero tu los llamas hermanos, verdad que si?

en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos; (2 Co. 11:26)

En nuestras iglesias hay falsos hermanos a quienes llamamos hermanos!!!

Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero. (Mt. 13:30)

En nuestras iglesias hay trigo y cizaña, y tambien a la cizaña llamamos hermanos!!!

Entonces, cual es el problema de llamar hermanos a los catolicos...? Porque no piensan como nosotros? Por que tienen que pensar como nosotros...? Estamos nosotros seguros de no estar equivocados...?

Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte. (Pr. 14:12)

Este "chaleco" le podria quedar a cualquier "grupo religioso"...incluyendo los nuestros!!!

Bendiciones!
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Armando Hoyos dijo:
Por que si con los catolicos entonces...?



Tambien los catolicos dicen ser cristianos...



Eso mismo piensan estos grupos religiosos de "tu grupo religioso" o "del mio"...



Cuentame en ese "grupo", pero venga, no es el tema tratado aqui. Pero estos grupos, incisto, que no piensan como "tu grupo" tal vez piensen lo mismo que tu estas diciendo "tu grupo religioso" sigue doctrinas "que les hacen caer en la herejía..."



Aqui no me incluyo, pero igualmente, estos otros "grupos religiosos" pudieran estar pensando lo mismo de nosotros...



Debias saber que en todos los "grupos religiosos" incluyendo el tuyo y el mio, hay "nacidos de nuevo" que lo son y "nacidos de nuevo" que lo dicen...



Pero si Cristo nos dijo: "si amais a los que os aman, que merito teneis..."? Por que no recibirlo (al hermano) como es, con sus defectos y virtudes, si los hay o no...!!!



Y si esto no llegara a suceder, dejaria de ser tu hermana por eso...?



Por que juzgar a los hermanos catolicos entonces? No esta ella (tu amiga) segun tu "contaminandose" con la doctrina adventista, sin embargo para ella hay una esclusividad de trato "hermana"; mientras que para un catolico tambien "contaminado" en su doctrina es diferente...
No te parece que debiera ser un mismo trato para con ambos...?



Bueno, si esta sembrando arroz, sus pies se enlodaran...



Espero que reflecciones hermano, te quiero citar este texto para que medites no en el texto, sino en mis palabras...

"Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones"


Dios te bendiga!

Bendiciones donde sea que te encuentras, entiendo que el deber te llama, pero si puedes ver mi respuesta y por atenciòn a tu comentario te dirè que
particularmente no me siento sincero al llamar a ton y son "hermano" a grupos que se que no son cristianos, o que tienen grandes inconvenientes para estar en un mismo sentir o que se que susu doctrinas son incompatibles con la verdd y no, creeme que no es un asunto de relatividad de como nos vemos los unos a los otros sino como estamos todos conforme a la verdad entendida para mi cono Cristo Jesus.

Confio en que el inocente no se perderà y quien ama y buesca la verdad la encuentra y que la Verdad se llama Jesucristo, asi es que si una persona buesca encontrara, si toca se le abrira y un buen dia todos veremos al Señor cara a cara,por ahora debo ser honesto conmigo mismo y entiendo que no todos son trigo y no es bueno mentir llamandole "hermano" a quien no esta en comuniòn con la Verdad.

Creo que debemos todos apartarnos de iniquidad pues sin santidad nadie vera a Dios, pero si decimos anhelar todo esto y persistimos en la mentira, el engaño, al herejia, sabiendo que nada de esto es bueno, pues...

A eso me refiero y no porque nos ea pecador, pues de los tales yo soy el primero.

Considero hipocresia si, el saber que hay sectas para quienes nosotros los cristianos evangèlicos no somos ni palicamos en calidad de hermanos pero que no dejan de llamarnos insistentemenet "hermanos" en su labor proselitista.

Un saludo
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

OSO dijo:
Bendiciones donde sea que te encuentras, entiendo que el deber te llama, pero si puedes ver mi respuesta y por atenciòn a tu comentario te dirè que
particularmente no me siento sincero al llamar a ton y son "hermano" a grupos que se que no son cristianos, o que tienen grandes inconvenientes para estar en un mismo sentir o que se que susu doctrinas son incompatibles con la verdd y no, creeme que no es un asunto de relatividad de como nos vemos los unos a los otros sino como estamos todos conforme a la verdad entendida para mi cono Cristo Jesus.

Confio en que el inocente no se perderà y quien ama y buesca la verdad la encuentra y que la Verdad se llama Jesucristo, asi es que si una persona buesca encontrara, si toca se le abrira y un buen dia todos veremos al Señor cara a cara,por ahora debo ser honesto conmigo mismo y entiendo que no todos son trigo y no es bueno mentir llamandole "hermano" a quien no esta en comuniòn con la Verdad.

Creo que debemos todos apartarnos de iniquidad pues sin santidad nadie vera a Dios, pero si decimos anhelar todo esto y persistimos en la mentira, el engaño, al herejia, sabiendo que nada de esto es bueno, pues...

A eso me refiero y no porque nos ea pecador, pues de los tales yo soy el primero.

Considero hipocresia si, el saber que hay sectas para quienes nosotros los cristianos evangèlicos no somos ni palicamos en calidad de hermanos pero que no dejan de llamarnos insistentemenet "hermanos" en su labor proselitista.

Un saludo

Como quieras, veo que estas firme en tu postura. Aunque pienso diferente que tu, aun te considero mi hermano, ya vez, tenemos algunas diferencias doctrinales pero sigues siendo mi hermano! Eso mismo pienso acerca de los catolicos, aunque los enfrento y les hablo de sus errores (tambien yo los tengo, no soy el papa, para ellos infalible) con todo y eso los concidero mis hermanos. Pero nada, no quiero ser impertinente, pues que "por nuestras palabras seremos justificados o condenados" (Mt. 12:37)

Un abrazo en Cristo!
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Hola Hermanos: Tal como había dicho, permanecí de comisión fuera de la ciudad, y estuve desconectado varios días. No es que se llame hermano indiscriminadamente por un "sentimentalismo". Si son hermanos los que se salvan, aún muchos paganos que cumplen con la ley interna, y que no les reprocha nada la conciencia, se salvarán. Este es un tema aparte, el cual se puede revisar con calma, por lo pronto, me avoco al enunciado ecuménico en un esquema amplio en cuanto a marco de referencia.

¿Qué es lo que enseña la Iglesia Católica de otras religiones? A continuación transcribo de manera prácticamente integral 2 puntos de la declaración Nostra Aetate, contenida en el libro Concilio Vaticano II.

La Iglesia católica reconoce desde la antigüedad y hasta nuestros días, que en todos los diversos pueblos hay una cierta percepción de aquella fuerza misteriosa que se halla presente en la marcha de las cosas y en los acontecimientos de la vida humana, y a veces también el reconocimiento de la Suprema Divinidad e incluso del Padre. Esta percepción y reconocimiento penetra toda la vida de un íntimo sentido religioso. Las religiones, en contacto con el progreso de la cultura, se esfuerzan por responder a dichos problemas con nociones más precisas y con un lenguaje más elaborado. Así, en el Hinduismo los hombres investigan el misterio divino y lo expresan mediante la inagotable fecundidad de los mitos y con los penetrantes esfuerzos de la filosofía, y buscan la liberación de las angustias de nuestra condición ya sea mediante las modalidades de la vida ascética, ya sea a través de profunda meditación, ya sea buscando refugio en Dios con amor y confianza. En el Budismo, según sus varias formas, se reconoce la insuficiencia radical de este mundo mudable y se enseña el camino por el que los hombres, con un espíritu devoto y confiado, pueden adquirir, el estado de perfecta liberación, o llegar a la suprema iluminación, por sus propios esfuerzos o apoyados en un auxilio superior. Así también las demás religiones que se encuentran en todo el mundo, se esfuerzan por responder de varias maneras a la inquietud del corazón humano, proponiendo caminos, es decir, doctrinas, normas de vida y ritos sagrados.

La Iglesia Católica no rechaza nada de lo que en estas religiones hay de santo y verdadero. Considera con sincero respeto los modos de obrar y de vivir, los preceptos y doctrinas, que, por más que discrepen en muchas cosas de lo que ella profesa y enseña, no pocas veces reflejan un destello de aquella Verdad que ilumina a todos los hombres. Anuncia y tiene la obligación de anunciar constantemente a Cristo, que es "el camino, la verdad y la vida" (Jn., 14, 7), en quien los hombres encuentran la plenitud de la vida religiosa y en quien Dios reconcilió consigo todas las cosas.

Por consiguiente, exhorta a sus hijos a que, con prudencia y caridad, mediante el diálogo y a colaboración con los adeptos de otras religiones, dando testimonio de la fe y la vida cristiana, reconozcan, guarden y promuevan aquellos bienes espirituales y morales, así como los valores socio-culturales que en ellos existen.
(N. A. 2).

No podemos invocar a Dios Padre de todos, si nos negamos a conducirnos fraternalmente con algunos hombres, creados a imagen de Dios. La relación del hombre para con Dios Padre y con los demás hombres sus hermanos están de tal forma unidas, que dice la Escritura: "el que no ama, no ha conocido a Dios, porque Dios es Amor" (I Jn., 4, 8).

Así se elimina el fundamento de toda teoría o práctica que introduce discriminación entre los hombres y entre los pueblos, en lo que toca a la dignidad humana y a los derechos que de ella dimanan.
La Iglesia, por consiguiente, reprueba, como ajena al espíritu de Cristo cualquier discriminación o vejación realizada por motivos de raza o color, de condición o religión. Por esto, el Sagrado Concilio, siguiendo las huellas de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, ruega ardientemente a los fieles que, "observando en medio de las naciones una conducta ejemplar" (I Ped., 2, 12), si es posible, en cuanto de ellos depende, tengan paz con todos los hombres, para que sean verdaderamente hijos del Padre que está en los cielos.
(Nostra Aetate. 5)

Por consiguiente, solo soy consecuente con lo que creo.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Armando y Francisco Javier.

Jesús es la luz que alumbra todo hombre...a todo hombre. Esto no significa que todo hombre quiera seguir la Luz de Jesús, pues como esta escirto, los hombres prefirieron las tinieblas a la Luz.

La sola idea de "fraternidad universal" es anticristiana. Lo siento.

Un saludo
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

OSO dijo:
Armando y Francisco Javier.

Jesús es la luz que alumbra todo hombre...a todo hombre. Esto no significa que todo hombre quiera seguir la Luz de Jesús, pues como esta escirto, los hombres prefirieron las tinieblas a la Luz.

La sola idea de "fraternidad universal" es anticristiana. Lo siento.

Un saludo
Hola Hno. Oso:
¿Para donde va?
Yo no hablo de fraternidad universal, para nada, eso lo ha dicho usted. Eso hasta me sonó a la fraternidad del quinto sol.

No, más bien me he referido, y desde el principio, a que Dios quiere la unidad ENTRE LOS CRISTIANOS. Si yo me declaro cristiano, y llamo hermanos a los que se declaran cristianos, ¿Que estoy haciendo? Cumpliendo la voluntad de Dios.

Va de nuevo, Según las palabras del Señor, cuando habló con Nicodemos en el evangelio según San Juan, Hay que nacer de nuevo, cierto, pero también es cierto que EL ESPÍRITU SOPLA DONDE QUIERE. No donde dice Oso o Francisco Javier. Además el poder y el amor de Dios no se circunscribe a cierta doctrina o iglesia. Tu y yo estamos de acuerdo en que hay solo una dcotrina verdadera, en consecuencia, hay una sola iglesia verdadera, que en La Biblia viene descrita como columna y valuarte de la verdad. La dificultad ocurre cuando se trata de aterrizar esta doctrina y esta fe, y es esa, la raíz de los mensajes de este y muchos otros foros. CFompartimos y explicamos nuestra fe. Pero ¿Que pasa si negamos que la luz de Dios puede alumbrar donde Él quiera, o que El Espíritu sopla donde quiere?. Nos sentimos con la exclusiva, es decir SOMOS SECTARISTAS. Los sectarios se reconocen porque niegan que Dios tenga poder para actiar en otras partes. Por eso es que en mi aporte anterios pegué dos citas de la carta "Nostra Aetate" que ilustran al respecto. El reconocer la mano de Dios, fuera de tu iglesia, no es signo de debilidad, sino de visión espiritual, consecuencia de creer en La Palabra de Dios.

Dices, y con mucha razón, que los hombres han preferido las tinieblas, PERO ESTO OCURRE SOLO CUANDO HAY COMPARACIÓN. NO PUEDO ELEGIR SI NO SE QUE TENGO ELECCIÓN. Este punto es dificil y cuestionante. Tal vez lo pones por considerar que yo soy quien está es esa situación, y es posible, pero no hay quien se libre de esa posibilidad, gracias a Dios, Jesús es el Juez, con mayúsculas, y el juzgará con conocimiento.

Meditémos un poco la palabra:

"¿Quién eres tú para juzgar al que es siervo de otro? Si cae, o si se mantiene firme, esto pertenece a su amo; pero firme se mantendrá, pues poderoso es Dios para sostenerlo.

Del mismo modo también uno hace diferencia entre día y día, al paso que otro tiene todos los días por iguales, cada uno obre según le dicte su recta conciencia. El que hace distinción de días, la hace para agradar al Señor. Y el que come de todo para agradar al Señor come, pues da gracias a Dios. Y el que se abstiene de ciertas viandas, por respeto al Señor lo hace; y así es que da gracias a Dios.

Como quiera que ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno de nosotros muere para sí.

Que como somos de Dios, si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos para el Señor morimos. Ora, pues, vivamos, ora muramos, del Señor somos. Porque a este fin murió Cristo, y resucitó, para redimirnos y adquirir un soberano dominio sobre vivos y muertos.

Ahora bien, ¿por qué tú que sigues todavía la ley condenas a tu hermano?; o ¿por qué tú que no la sigues desprecias a tu hermano que aún la guarda? No le juzgues, porque todos hemos de comparecer ante el tribunal de Cristo.

Pues escrito está: Yo juro por mí mismo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, y que toda lengua o nación ha de confesar que soy Dios. Así que cada uno de nosotros ha de dar cuenta a Dios de sí mismo. No nos juzguemos, pues, ya más unos a otros; pensad sí, y poned cuidado en no causar tropiezo o escándalo al hermano.

Yo bien sé, y estoy seguro según la doctrina del Señor Jesús, que ninguna cosa es de suyo inmunda, sino que viene a ser inmunda para aquel que por tal la tiene."
Rom. 14, 4-14​

Que si el sábado, que si los camarones y el cerdo, eso es personal. La dificultad empieza al juzgarnos a nosotros mismos. Hay situaciones y doctrinas, pero es lo mismo que con el pecado. Se juzga el pecado, no al pecador, siempre debe haber diferenciación entre pecado y pecador. Dios ama al pecador y lo quiere salvar, aborrece el pecado, cierto, pero no aborrece al pecador.

Hay miles de doctrinas equivocadas. Según tu estás en la cierta, según yo también. Y según cada cual es lo mismo. ¿Cual es entonces el punto?.

Como has dicho, hay una puerta que es Jesús, pero esto es una metáfora, para entrar por esa puerta, hay que caminar como Jesús, en sentido espiritual. El Señor pidió al Padre: "ruego que todos sean una misma cosa; y que como tú, ¡oh Padre!, estás en mí, y yo en ti, así sean ellos una misma cosa en nosotros, para que crea el mundo que tú me has enviado."

Quien eso pide al Padre es TU SEÑOR, QUE ES MI SEÑOR. ¿Puedes explicar como en tus conceptos no estás contra este deseo de Jesús? Es eso lo que no acabo de entender. Un fraternal saludo.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Francisco Javier dijo:
Hola Hno. Oso:
¿Para donde va?
Yo no hablo de fraternidad universal, para nada, eso lo ha dicho usted. Eso hasta me sonó a la fraternidad del quinto sol.

No, más bien me he referido, y desde el principio, a que Dios quiere la unidad ENTRE LOS CRISTIANOS. Si yo me declaro cristiano, y llamo hermanos a los que se declaran cristianos, ¿Que estoy haciendo? Cumpliendo la voluntad de Dios.

Va de nuevo, Según las palabras del Señor, cuando habló con Nicodemos en el evangelio según San Juan, Hay que nacer de nuevo, cierto, pero también es cierto que EL ESPÍRITU SOPLA DONDE QUIERE. No donde dice Oso o Francisco Javier. Además el poder y el amor de Dios no se circunscribe a cierta doctrina o iglesia. Tu y yo estamos de acuerdo en que hay solo una dcotrina verdadera, en consecuencia, hay una sola iglesia verdadera, que en La Biblia viene descrita como columna y valuarte de la verdad. La dificultad ocurre cuando se trata de aterrizar esta doctrina y esta fe, y es esa, la raíz de los mensajes de este y muchos otros foros. CFompartimos y explicamos nuestra fe. Pero ¿Que pasa si negamos que la luz de Dios puede alumbrar donde Él quiera, o que El Espíritu sopla donde quiere?. Nos sentimos con la exclusiva, es decir SOMOS SECTARISTAS. Los sectarios se reconocen porque niegan que Dios tenga poder para actiar en otras partes. Por eso es que en mi aporte anterios pegué dos citas de la carta "Nostra Aetate" que ilustran al respecto. El reconocer la mano de Dios, fuera de tu iglesia, no es signo de debilidad, sino de visión espiritual, consecuencia de creer en La Palabra de Dios.

Dices, y con mucha razón, que los hombres han preferido las tinieblas, PERO ESTO OCURRE SOLO CUANDO HAY COMPARACIÓN. NO PUEDO ELEGIR SI NO SE QUE TENGO ELECCIÓN. Este punto es dificil y cuestionante. Tal vez lo pones por considerar que yo soy quien está es esa situación, y es posible, pero no hay quien se libre de esa posibilidad, gracias a Dios, Jesús es el Juez, con mayúsculas, y el juzgará con conocimiento.

Meditémos un poco la palabra:

"¿Quién eres tú para juzgar al que es siervo de otro? Si cae, o si se mantiene firme, esto pertenece a su amo; pero firme se mantendrá, pues poderoso es Dios para sostenerlo.

Del mismo modo también uno hace diferencia entre día y día, al paso que otro tiene todos los días por iguales, cada uno obre según le dicte su recta conciencia. El que hace distinción de días, la hace para agradar al Señor. Y el que come de todo para agradar al Señor come, pues da gracias a Dios. Y el que se abstiene de ciertas viandas, por respeto al Señor lo hace; y así es que da gracias a Dios.

Como quiera que ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno de nosotros muere para sí.

Que como somos de Dios, si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos para el Señor morimos. Ora, pues, vivamos, ora muramos, del Señor somos. Porque a este fin murió Cristo, y resucitó, para redimirnos y adquirir un soberano dominio sobre vivos y muertos.

Ahora bien, ¿por qué tú que sigues todavía la ley condenas a tu hermano?; o ¿por qué tú que no la sigues desprecias a tu hermano que aún la guarda? No le juzgues, porque todos hemos de comparecer ante el tribunal de Cristo.

Pues escrito está: Yo juro por mí mismo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, y que toda lengua o nación ha de confesar que soy Dios. Así que cada uno de nosotros ha de dar cuenta a Dios de sí mismo. No nos juzguemos, pues, ya más unos a otros; pensad sí, y poned cuidado en no causar tropiezo o escándalo al hermano.

Yo bien sé, y estoy seguro según la doctrina del Señor Jesús, que ninguna cosa es de suyo inmunda, sino que viene a ser inmunda para aquel que por tal la tiene."
Rom. 14, 4-14​

Que si el sábado, que si los camarones y el cerdo, eso es personal. La dificultad empieza al juzgarnos a nosotros mismos. Hay situaciones y doctrinas, pero es lo mismo que con el pecado. Se juzga el pecado, no al pecador, siempre debe haber diferenciación entre pecado y pecador. Dios ama al pecador y lo quiere salvar, aborrece el pecado, cierto, pero no aborrece al pecador.

Hay miles de doctrinas equivocadas. Según tu estás en la cierta, según yo también. Y según cada cual es lo mismo. ¿Cual es entonces el punto?.

Como has dicho, hay una puerta que es Jesús, pero esto es una metáfora, para entrar por esa puerta, hay que caminar como Jesús, en sentido espiritual. El Señor pidió al Padre: "ruego que todos sean una misma cosa; y que como tú, ¡oh Padre!, estás en mí, y yo en ti, así sean ellos una misma cosa en nosotros, para que crea el mundo que tú me has enviado."

Quien eso pide al Padre es TU SEÑOR, QUE ES MI SEÑOR. ¿Puedes explicar como en tus conceptos no estás contra este deseo de Jesús? Es eso lo que no acabo de entender. Un fraternal saludo.

Entiendo tu sentir y lo comparto y anhelo tanto como tu que todos lleguemos a la unidad pero quien mas anhela aun esta unidad es Dios.

El problema con la ICR e nuestra relación con ella. Nuestra relación no es buena desde el concilio de Trento y de hecho se ha ido deteriorando con los siglos.

Hay intentonas, si de acercamiento, pero literalmente conforme a Trento la ICR no nos considera hermanos.

Juan Pablo II intenó un acumenismo pero no de fondo, de tal forma que aunque separados nos consideran hermanos, hermnaos separados apra ser mas precisos. En un tipo de "hermandad" separada, no cabe la reconciliación.

Como ves es algo mas complejo de lo que podemos decirnos mutuamente. Como el epígrafe no es si Francisco Javier y OSO son hermanos, que espero que si, sino mas bien el epígrafe versa sobre si los catolicos y los evangélicos, asi en general, como corrientes doctrinales que se tocan y coinciden, en otros aspectos se separan y muchas veces en algunos puntos se oponen literalmente, me resulta muy difícil pensar que pueden ser hermanos.

Pero no seamos nosotros quienes juzguemos esto, pues lo que es imposible para el hombre, es posible para Dios.

Un saludo tambien.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Hola hno. OSO:

Me alegra que las cosas estén mejor, ahora me dispongo a contestar en la forma acostumbrada.

OSO dijo:
Entiendo tu sentir y lo comparto y anhelo tanto como tu que todos lleguemos a la unidad pero quien mas anhela aun esta unidad es Dios.

El problema con la ICR e nuestra relación con ella. Nuestra relación no es buena desde el concilio de Trento y de hecho se ha ido deteriorando con los siglos.

Si, eso lo se. La relación es siempre tormentosa, y resulta irónico que en conciencia tomemos más en cuenta el juicio del Señor en cuanto a ser frios o calientes, y nos olvidemos de que toda la ley se resume en amar a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a uno mismo. Yo me incluyo, porque en no pocas ocasiones he generado ambiente poco favorable, y eso te consta, pero vamos, no es la intención, y es consecuencia de mis limitantes personales. Si eso lo multiplicamos por los que aquí estamos, es facil y sencillo entender lo que ocurre aquí. Sin embargo, hay que luchar por la unidad, por lo menos en el sentir. Hay que favorecer las tareas mutuas, o la oración por algún hermano o situación, como se ve aquí para gloria de Dios.

OSO dijo:
Hay intentonas, si de acercamiento, pero literalmente conforme a Trento la ICR no nos considera hermanos.

Juan Pablo II intenó un acumenismo pero no de fondo, de tal forma que aunque separados nos consideran hermanos, hermnaos separados apra ser mas precisos. En un tipo de "hermandad" separada, no cabe la reconciliación.

Cierto, hermanos separados de la ICAR, no de la gracia de Dios. Las citas que menciono de Nostra aetate hablan con claridad de esto, y me dispongo a añadir más al respecto, solo necesito desempacar mis libros, porque hace poco me mudé por fin a una casa de mi propiedad, que aún esta en construcción. Solo un poco de paciencia.

OSO dijo:
Como ves es algo mas complejo de lo que podemos decirnos mutuamente. Como el epígrafe no es si Francisco Javier y OSO son hermanos, que espero que si, sino mas bien el epígrafe versa sobre si los catolicos y los evangélicos, asi en general, como corrientes doctrinales que se tocan y coinciden, en otros aspectos se separan y muchas veces en algunos puntos se oponen literalmente, me resulta muy difícil pensar que pueden ser hermanos.

Eso lo entiendo, gracias a Dios, si para el no hay imposibles, menos cosas difíciles. Lo único que le puede frenar en el corazón de quienes nos decimos cristianos, es la cerrazón del corazón y del alma (o mente). Así vemos como la historia se ha plagado de división por gente llena de soberbia que busca gobernar como los reyes de este mundo, y sacar provecho de ello. Los católicos creemos en la infalibilidad del papa en cuestiones doctrinales, pero vemos con tristeza como no son impecables, y muchas veces los toma el enemigo en su soberbia, y por cuestiones de intereses políticos o económicos, le dan al mundo lo que pertenece a Dios, y en ocasiones piden para Dios lo que pertenece al mundo. Bueno, no es el tema, lo dejo.

OSO dijo:
Pero no seamos nosotros quienes juzguemos esto, pues lo que es imposible para el hombre, es posible para Dios.

Un saludo tambien.

Ok. Muchas gracias hermano. Cuando se está reparando una calle, se pone un letrero que dice algo así.

Gente trabajando, perdone las molestias que esto le ocasiona.

Se abren zanjas en la calle, se desvía el tráfico y se hacen cosas semejantes. Hoy te digo lo mismo, estoy en construcción, perdona las molestias que te haya ocasionado. El pecado de soberbia y todos los demás también se pueden anidar en mi, como en cualquiera. QDTB+

PD: Un poco de paciencia, tiene como dos semanas que tengo intención de entrar al plano doctrinal, pero solo tengo a la mano una Biblia en CD y aún no tengo disponibles mis demás documentos y herramientas.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

La respuesta es sencillísima.
Los evangélicos y católicos que hallan nacido de nuevo son hermanos en Cristo.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Bueno, pues a levantar las manos caidas, las rodillas entumidas, a reparar brechas y portones, enderezar caminos y no cojear. hacer ésto lo necesitamos todos, en verdad. Seguir adelante, nuestra mente en Dios, el corazón dispuesto, las manos abiertas para recibir al prójimo y los ojos puestos en Jesús, autor y consumador de nuestra fe.

¿"Solo" tienes una Biblia en CD? si, si, pero además de Su Palabra en CD, tienes: tu corazón dispuesto, la mente de Cristo, la dirección de Su Santo Espiritu ¿hay algo mas que te pueda faltar? Tienes, mucho...muchísimo y ademas nos tienes a nosotros.

Un saludo
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

rafael7 dijo:
La respuesta es sencillísima.
Los evangélicos y católicos que hallan nacido de nuevo son hermanos en Cristo.


Muy sencillo, tienes razón Rafael. El problema es que algunos evangélicos no creen que haya católicos nacidos de nuevo, y no crean que haya evangélicos que realmente no han nacido de nuevo. Es increíble que este tema lleve tantas páginas de discusión.

Saludos y Bendiciones Rafael,
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

He leído al azar varias de las posturas escritas aquí. Agregaré mi opinión, esperando ser respetuoso con todos:

Primero, <b>a nivel personal</b>, quiero indicar que estoy absolutamente de acuerdo con la postura de la persona que abrió primero este epígrafe. Pero pasaré a explicarme mejor sobre el por qué más adelante.

Segundo, <b>a nivel social</b>, he encontrado que una de las mayores barreras que tenemos en la comunicación, especialmente entre quienes profesamos una religión, es la incapacidad de apreciar los dos lados de una misma moneda. Es decir, que con frecuencia dos personas estamos hablando de lo mismo y estamos de acuerdo en ello, pero somos incapaces de percibirlo y creemos que estamos en desacuerdo. Como grupos, desarrollamos una terminología particular para designar las cosas que puede contribuir poderosamente a reforzar esta incapacidad. Por ejemplo, el bautista dice "Jesús murió en una cruz", mientras que el testigo de Jehová dice "Jesús murió en un madero". Ambos están de acuerdo en lo esencial, que Jesús murió sacrificado y entonces se ponen a discutir sobre un asunto de menor importancia, enfocándose en las diferencias y no en lo que es verdaderamente fundamental. El problema se resuelve cuando uno es capaz de practicar la virtud cristiana de la empatía, la cual aconseja vestir, por un momento, el calzado de otro y comprender su punto de vista antes de responder, lo cual permite responderle con una comprensión tal que la respuesta siempre será bien recibida. Pablo de Tarso usó de este modelo en el magistral discurso que se encuentra en Hechos 17: primero dio una vuelta por los edificios atenienses, se empapó de sus creencias, y luego, sin criticarlas en absoluto, sin tratar de destruir su creencia en otros dioses, les habló de un nuevo Dios, de un Dios no conocido, al cual él anunciaba. Este discurso es modelo de lo que los demás cristianos debemos de hacer: escuchar primero y hablar después, sin propósito de destruir, sino de edificar para fomentar la comprensión.

Tercero, <b>a nivel doctrinal</b>, y tomando en cuenta lo anterior, me temo que la mayoría de los cristianos estamos poco familiarizados con la doctrina de la adopción, y lo que esta significa. Es demasiado amplia para abarcarla ahora en su integridad, pero trataré de resumir algunos elementos esenciales. Antes de introducirme, quisiera compartir otra barrera frecuente de la comunicación: la incapacidad de aceptar que un término, según su contexto, puede tener diferentes acepciones. Por ejemplo, la palabra "gloria" recibe en la Biblia más de una acepción, refiriéndose en muchos casos al honor ("la gloria del rey Salomón") y en otros a la energía radiante que emana del cuerpo de Dios ("la gloria de Dios llenó el templo").

Un caso semejante ocurre con la palabra "hijo". Se entiende por hijo el que fue procreado por otro. En este caso, la palabra hijo puede usarse, en la Biblia, en más de un sentido. Por lo tanto, somos hijos de Dios en más de una forma:

a) Somos hijos de Dios porque somos su creación
b) Somos hijos de Dios porque descendemos de Adán, que en la Biblia es llamado hijo de Dios
c) Si atendemos a Pablo, que llama a Dios en Hebreos 12, "el Padre de los espíritus", somos también hijos espirituales de Dios

Por lo menos en una de las tres acepciones anteriores, somos hijos literales de Dios. Esa es una interpretación literal. Según esa interpretación, todos somos hijos de Dios, sin importar nuestra particular filosofía o preferencia, lo cual incluye al negro tan bien como al blanco, al musulmán tan bien como al cristiano, al hombre tan bien como a la mujer y al niño con síndrome de Dawn tan bien como al sano de entendimiento.

En ese sentido literal, todos somos hijos de Dios y todos somos hermanos. La aplicación de la palabra hermano no es restrictiva en su forma literal.

Pero hay también una segunda acepción en sentido espiritual. El evangelio de Juan nos informa que

Joh 1:12-13
(12) Mas á todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, á los que creen en su nombre:
(13) Los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, mas de Dios.

Esta definición aprovecha el significado amplio de la palabra "hijo": el que es engendrado por otro. En este caso se está hablando de un nuevo nacimiento, de tipo espiritual, que es promovido a través de la fe en Jesucristo, y que no hay otra manera de alcanzar. Es decir, que sólo son hijos de Dios aquellos que han nacido de él nuevamente a través de la aceptación de Cristo y del bautismo. Al tener ese nuevo nacimiento somos adoptados por el Padre en Cristo Jesús, y entonces nuestro espíritu clama ¡Abba Padre!. Esta acepción espiritual es restrictiva, porque indica que sólo los cristianos pueden ser considerados en ella.

Lo que tenemos que entender, al márgen de otras situaciones, es que todas estas interpretaciones son correctas, sin ser mutuamente excluyentes, es decir, que no se contraponen una a la otra y que debemos aceptarlas todas, por ser bíblicas. El creer que todos somos hijos de Dios (en el sentido literal) no implica que todos lo seamos en el sentido espiritual, porque estamos hablando de cosas distintas, pero los dos lados forman parte de la misma moneda.

En este epígrafe se ha armado desde el principio tremendo rebumbio, pero se ha mostrado un desconocimiento total de la verdadera situación. Si no tomamos en cuenta lo anterior, la diferencia entre la interpretación literal y la espiritual y que no son mutuamente excluyentes, sino incluyentes, entre sí, no hay manera en que se pueda llegar a una comprensión. Una vez tomado en cuenta lo anterior, un cristiano sabio sería capaz de distinguir cuándo se está hablando de una cosa y cuándo de la otra, y responder de manera acorde.

El resto, por supuesto, dependerá de lo que cada quién defienda como su definición de lo que es cristiano, pero eso no es lo que se está considerando en este epígrafe, porque está fuera del planteamiento original.

Si dos interpretaciones en la Biblia de la palabra "hijo" nos parecen excesivas, nos sorprenderá quizás saber que hay una tercera, una extensión de la doctrina de la adopción por la cual se nos llama "hijos de Abraham" , o de Moisés, o de Aarón, o de Israel, etc., y que es la razón fundamental por la cual fue Pablo de Tarso enviado a los gentiles. Según esta acepción, los cristianos, los musulmanes y los judíos somos forzosamente hermanos, por ser los integrantes de todos estos grupos descendientes de Abraham. Aquí podríamos volver a discutir sobre lo que dijo Juan el Bautista y lo que se encuentra en Gálatas, sobre que la descendencia de Abraham no es escogida por causa de la descendencia literal sino de la fidelidad. Nuevamente, sin embargo, ambas interpretaciones no resultan excluyentes.

Paz, y esperando que como cristianos podamos demostrar mayor entendimiento. Saludos.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

He leído al azar varias de las posturas escritas aquí. Agregaré mi opinión, esperando ser respetuoso con todos:

Primero, <b>a nivel personal</b>, quiero indicar que estoy absolutamente de acuerdo con la postura de la persona que abrió primero este epígrafe. Pero pasaré a explicarme mejor sobre el por qué más adelante.

Segundo, <b>a nivel social</b>, he encontrado que una de las mayores barreras que tenemos en la comunicación, especialmente entre quienes profesamos una religión, es la incapacidad de apreciar los dos lados de una misma moneda. Es decir, que con frecuencia dos personas estamos hablando de lo mismo y estamos de acuerdo en ello, pero somos incapaces de percibirlo y creemos que estamos en desacuerdo. Como grupos, desarrollamos una terminología particular para designar las cosas que puede contribuir poderosamente a reforzar esta incapacidad. Por ejemplo, el bautista dice "Jesús murió en una cruz", mientras que el testigo de Jehová dice "Jesús murió en un madero". Ambos están de acuerdo en lo esencial, que Jesús murió sacrificado y entonces se ponen a discutir sobre un asunto de menor importancia, enfocándose en las diferencias y no en lo que es verdaderamente fundamental. El problema se resuelve cuando uno es capaz de practicar la virtud cristiana de la empatía, la cual aconseja vestir, por un momento, el calzado de otro y comprender su punto de vista antes de responder, lo cual permite responderle con una comprensión tal que la respuesta siempre será bien recibida. Pablo de Tarso usó de este modelo en el magistral discurso que se encuentra en Hechos 17: primero dio una vuelta por los edificios atenienses, se empapó de sus creencias, y luego, sin criticarlas en absoluto, sin tratar de destruir su creencia en otros dioses, les habló de un nuevo Dios, de un Dios no conocido, al cual él anunciaba. Este discurso es modelo de lo que los demás cristianos debemos de hacer: escuchar primero y hablar después, sin propósito de destruir, sino de edificar para fomentar la comprensión.

Tercero, <b>a nivel doctrinal</b>, y tomando en cuenta lo anterior, me temo que la mayoría de los cristianos estamos poco familiarizados con la doctrina de la adopción, y lo que esta significa. Es demasiado amplia para abarcarla ahora en su integridad, pero trataré de resumir algunos elementos esenciales. Antes de introducirme, quisiera compartir otra barrera frecuente de la comunicación: la incapacidad de aceptar que un término, según su contexto, puede tener diferentes acepciones. Por ejemplo, la palabra "gloria" recibe en la Biblia más de una acepción, refiriéndose en muchos casos al honor ("la gloria del rey Salomón") y en otros a la energía radiante que emana del cuerpo de Dios ("la gloria de Dios llenó el templo").

Un caso semejante ocurre con la palabra "hijo". Se entiende por hijo el que fue procreado por otro. En este caso, la palabra hijo puede usarse, en la Biblia, en más de un sentido. Por lo tanto, somos hijos de Dios en más de una forma:

a) Somos hijos de Dios porque somos su creación
b) Somos hijos de Dios porque descendemos de Adán, que en la Biblia es llamado hijo de Dios
c) Si atendemos a Pablo, que llama a Dios en Hebreos 12, "el Padre de los espíritus", somos también hijos espirituales de Dios

Por lo menos en una de las tres acepciones anteriores, somos hijos literales de Dios. Esa es una interpretación literal. Según esa interpretación, todos somos hijos de Dios, sin importar nuestra particular filosofía o preferencia, lo cual incluye al negro tan bien como al blanco, al musulmán tan bien como al cristiano, al hombre tan bien como a la mujer y al niño con síndrome de Dawn tan bien como al sano de entendimiento.

En ese sentido literal, todos somos hijos de Dios y todos somos hermanos. La aplicación de la palabra hermano no es restrictiva en su forma literal.

Pero hay también una segunda acepción en sentido espiritual. El evangelio de Juan nos informa que

Joh 1:12-13
(12) Mas á todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, á los que creen en su nombre:
(13) Los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, mas de Dios.

Esta definición aprovecha el significado amplio de la palabra "hijo": el que es engendrado por otro. En este caso se está hablando de un nuevo nacimiento, de tipo espiritual, que es promovido a través de la fe en Jesucristo, y que no hay otra manera de alcanzar. Es decir, que sólo son hijos de Dios aquellos que han nacido de él nuevamente a través de la aceptación de Cristo y del bautismo. Al tener ese nuevo nacimiento somos adoptados por el Padre en Cristo Jesús, y entonces nuestro espíritu clama ¡Abba Padre!. Esta acepción espiritual es restrictiva, porque indica que sólo los cristianos pueden ser considerados en ella.

Lo que tenemos que entender, al márgen de otras situaciones, es que todas estas interpretaciones son correctas, sin ser mutuamente excluyentes, es decir, que no se contraponen una a la otra y que debemos aceptarlas todas, por ser bíblicas. El creer que todos somos hijos de Dios (en el sentido literal) no implica que todos lo seamos en el sentido espiritual, porque estamos hablando de cosas distintas, pero los dos lados forman parte de la misma moneda.

En este epígrafe se ha armado desde el principio tremendo rebumbio, pero se ha mostrado un desconocimiento total de la verdadera situación. Si no tomamos en cuenta lo anterior, la diferencia entre la interpretación literal y la espiritual y que no son mutuamente excluyentes, sino incluyentes, entre sí, no hay manera en que se pueda llegar a una comprensión. Una vez tomado en cuenta lo anterior, un cristiano sabio sería capaz de distinguir cuándo se está hablando de una cosa y cuándo de la otra, y responder de manera acorde.

El resto, por supuesto, dependerá de lo que cada quién defienda como su definición de lo que es cristiano, pero eso no es lo que se está considerando en este epígrafe, porque está fuera del planteamiento original.

Si dos interpretaciones en la Biblia de la palabra "hijo" nos parecen excesivas, nos sorprenderá quizás saber que hay una tercera, una extensión de la doctrina de la adopción por la cual se nos llama "hijos de Abraham" , o de Moisés, o de Aarón, o de Israel, etc., y que es la razón fundamental por la cual fue Pablo de Tarso enviado a los gentiles. Según esta acepción, los cristianos, los musulmanes y los judíos somos forzosamente hermanos, por ser los integrantes de todos estos grupos descendientes de Abraham. Aquí podríamos volver a discutir sobre lo que dijo Juan el Bautista y lo que se encuentra en Gálatas, sobre que la descendencia de Abraham no es escogida por causa de la descendencia literal sino de la fidelidad. Nuevamente, sin embargo, ambas interpretaciones no resultan excluyentes.

Paz, y esperando que como cristianos podamos demostrar mayor entendimiento sobre lo que, en común, profesamos y que es nuestra creencia universal, por ser parte de la Biblia. Saludos.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

He leído al azar varias de las posturas escritas aquí. Agregaré mi opinión, esperando ser respetuoso con todos:

Primero, <b>a nivel personal</b>, quiero indicar que estoy absolutamente de acuerdo con la postura de la persona que abrió primero este epígrafe. Pero pasaré a explicarme mejor sobre el por qué más adelante.

Segundo, <b>a nivel social</b>, he encontrado que una de las mayores barreras que tenemos en la comunicación, especialmente entre quienes profesamos una religión, es la incapacidad de apreciar los dos lados de una misma moneda. Es decir, que con frecuencia dos personas estamos hablando de lo mismo y estamos de acuerdo en ello, pero somos incapaces de percibirlo y creemos que estamos en desacuerdo. Como grupos, desarrollamos una terminología particular para designar las cosas que puede contribuir poderosamente a reforzar esta incapacidad. Por ejemplo, el bautista dice "Jesús murió en una cruz", mientras que el testigo de Jehová dice "Jesús murió en un madero". Ambos están de acuerdo en lo esencial, que Jesús murió sacrificado y entonces se ponen a discutir sobre un asunto de menor importancia, enfocándose en las diferencias y no en lo que es verdaderamente fundamental. El problema se resuelve cuando uno es capaz de practicar la virtud cristiana de la empatía, la cual aconseja vestir, por un momento, el calzado de otro y comprender su punto de vista antes de responder, lo cual permite responderle con una comprensión tal que la respuesta siempre será bien recibida. Pablo de Tarso usó de este modelo en el magistral discurso que se encuentra en Hechos 17: primero dio una vuelta por los edificios atenienses, se empapó de sus creencias, y luego, sin criticarlas en absoluto, sin tratar de destruir su creencia en otros dioses, les habló de un nuevo Dios, de un Dios no conocido, al cual él anunciaba. Este discurso es modelo de lo que los demás cristianos debemos de hacer: escuchar primero y hablar después, sin propósito de destruir, sino de edificar para fomentar la comprensión.

Tercero, <b>a nivel doctrinal</b>, y tomando en cuenta lo anterior, me temo que la mayoría de los cristianos estamos poco familiarizados con la doctrina de la adopción, y lo que esta significa. Es demasiado amplia para abarcarla ahora en su integridad, pero trataré de resumir algunos elementos esenciales. Antes de introducirme, quisiera compartir otra barrera frecuente de la comunicación: la incapacidad de aceptar que un término, según su contexto, puede tener diferentes acepciones. Por ejemplo, la palabra "gloria" recibe en la Biblia más de una acepción, refiriéndose en muchos casos al honor ("la gloria del rey Salomón") y en otros a la energía radiante que emana del cuerpo de Dios ("la gloria de Dios llenó el templo").

Un caso semejante ocurre con la palabra "hijo". Se entiende por hijo el que fue procreado por otro. En este caso, la palabra hijo puede usarse, en la Biblia, en más de un sentido. Por lo tanto, somos hijos de Dios en más de una forma:

a) Somos hijos de Dios porque somos su creación
b) Somos hijos de Dios porque descendemos de Adán, que en la Biblia es llamado hijo de Dios
c) Si atendemos a Pablo, que llama a Dios en Hebreos 12, "el Padre de los espíritus", somos también hijos espirituales de Dios

Por lo menos en una de las tres acepciones anteriores, somos hijos literales de Dios. Esa es una interpretación literal. Según esa interpretación, todos somos hijos de Dios, sin importar nuestra particular filosofía o preferencia, lo cual incluye al negro tan bien como al blanco, al musulmán tan bien como al cristiano, al hombre tan bien como a la mujer y al niño con síndrome de Dawn tan bien como al sano de entendimiento.

En ese sentido literal, todos somos hijos de Dios y todos somos hermanos. La aplicación de la palabra hermano no es restrictiva en su forma literal.

Pero hay también una segunda acepción en sentido espiritual. El evangelio de Juan nos informa que

Joh 1:12-13
(12) Mas á todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, á los que creen en su nombre:
(13) Los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, mas de Dios.

Esta definición aprovecha el significado amplio de la palabra "hijo": el que es engendrado por otro. En este caso se está hablando de un nuevo nacimiento, de tipo espiritual, que es promovido a través de la fe en Jesucristo, y que no hay otra manera de alcanzar. Es decir, que sólo son hijos de Dios aquellos que han nacido de él nuevamente a través de la aceptación de Cristo y del bautismo. Al tener ese nuevo nacimiento somos adoptados por el Padre en Cristo Jesús, y entonces nuestro espíritu clama ¡Abba Padre!. Esta acepción espiritual es restrictiva, porque indica que sólo los cristianos pueden ser considerados en ella.

Lo que tenemos que entender, al márgen de otras situaciones, es que todas estas interpretaciones son correctas, sin ser mutuamente excluyentes, es decir, que no se contraponen una a la otra y que debemos aceptarlas todas, por ser bíblicas. El creer que todos somos hijos de Dios (en el sentido literal) no implica que todos lo seamos en el sentido espiritual, porque estamos hablando de cosas distintas, pero los dos lados forman parte de la misma moneda.

En este epígrafe se ha armado desde el principio tremendo rebumbio, pero se ha mostrado un desconocimiento total de la verdadera situación. Si no tomamos en cuenta lo anterior, la diferencia entre la interpretación literal y la espiritual y que no son mutuamente excluyentes, sino incluyentes, entre sí, no hay manera en que se pueda llegar a una comprensión. Una vez tomado en cuenta lo anterior, un cristiano sabio sería capaz de distinguir cuándo se está hablando de una cosa y cuándo de la otra, y responder de manera acorde.

El resto, por supuesto, dependerá de lo que cada quién defienda como su definición de lo que es cristiano, pero eso no es lo que se está considerando en este epígrafe, porque está fuera del planteamiento original.

Si dos interpretaciones en la Biblia de la palabra "hijo" nos parecen excesivas, nos sorprenderá quizás saber que hay una tercera, una extensión de la doctrina de la adopción por la cual se nos llama "hijos de Abraham" , o de Moisés, o de Aarón, o de Israel, etc., y que es la razón fundamental por la cual fue Pablo de Tarso enviado a los gentiles. Según esta acepción, los cristianos, los musulmanes y los judíos somos forzosamente hermanos, por ser los integrantes de todos estos grupos descendientes de Abraham. Aquí podríamos, a gusto, volver a discutir por lo que dijo Juan el Bautista y lo que se encuentra en Gálatas, sobre que la descendencia de Abraham no es escogida por causa de la descendencia literal sino de la fidelidad. Nuevamente, sin embargo, ambas interpretaciones no resultan excluyentes; tratándose una de la procreación o el linaje literal y la otra de la adopción, reafirmación o reconocimiento espiritual.

Paz, y esperando que como cristianos podamos demostrar mayor entendimiento sobre lo que, en común, profesamos y que es nuestra creencia universal, por ser parte de la Biblia. Saludos.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Pido perdón por el involuntario posteo triple y ruego al webmaster que me ayude a borrar los duplicados. Shela.
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

Hno ReyBenjamin:

Me ha provocado una sonrisa sus comentarios, no de burla, sino de darme cuenta de que es muy sencillo y muy cierto. Sin embargo, para adquirir sabiduría, es necesario meditar y analizar cuidadosamente, y esto no es fácil de hacer siempre y por todos. Mas adelante, Dios mediante, veremos el aspecto doctrinal de acuerdo a la ICAR. Y no es con otro objetivo mas que explicar la doctrina católica, no la interpretación tan solo, por ello, citaré el catecismo.

Espero contar con sus opiniones. Hno. OSO, sigamos adelante, muchas gracias. QDTB+
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

rafael7 dijo:
La respuesta es sencillísima.
Los evangélicos y católicos que hallan nacido de nuevo son hermanos en Cristo.


jejejejej....................asi es .........mas claro ni el agua!:sacalen:
 
Re: ¿Los católicos y los evangélicos son hermanos?

rafael7 dijo:
La respuesta es sencillísima.
Los evangélicos y católicos que hallan nacido de nuevo son hermanos en Cristo.
Los que no nacieron denuevo también son hermanos entre ellos, porque son hijos del diablo.