Sí hemos dado buenas explicaciones de por qué no seguimos esta falsa doctrina de un rapto secreto de la iglesia.Después de leer mucho lo que los foristas expresan acerca del arrebatamiento, creo que los argumentos que tienen mayor peso son de los que creen positivamente, como también yo. Los que no creen en tal doctrina, no dan explicación ni buena ni suficiente acerca de los detalles de 1-Ts.4
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1. El verso que más usan los que apoyan esta locura es 1ra. de Tesalonicenses 4:13-18. Si ese verso apoya un rapto "secreto" de la iglesia, se presenta un gran problema. El mismo apóstol Pablo sostiene que "el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios," (1 Tesalonicenses 4:16) descenderá del cielo. Entonces, esa "voz de mando", esa "voz de arcángel" o esa "trompeta de Dios" ¿no va a ser escuchada por todo el planeta? Estoy seguro que sí. No va a ser tan "secreto" entonces. 1er gran problema.
2. La descripción que hace Pablo de la reaparición de Jesús en 1 Tesalonicenses 4 es una versión llena de color de lo que expresa en otros dos pasajes: 1 Corintios 15:51–54 y Filipenses 3:20–21. En la “venida” o “manifestación” de Jesús, los que aún estén vivos serán “cambiados” o “transformados” de modo que sus cuerpos mortales se volverán incorruptibles, inmortales. Eso es todo lo que Pablo pretende decir en Tesalonicenses, pero aquí toma prestadas imágenes —tanto de fuentes bíblicas como políticas— para reforzar su mensaje. Poco imaginaba cuán malinterpretadas serían sus ricas metáforas dos milenios después (N.T. Wright).
3. La mejor prueba de que esto de un rapto "secreto" en el que el Señor se llevará a su iglesia del mundo para que no sufran la gran tribulación no va a ocurrir fue la pandemia. Muchos miles de cristianos murieron a causa del COVID durante ese tiempo, y muchos otros sufrieron mucho por falta de trabajo, o por otras razones conectadas a la pandemia. El Señor no vino a buscarnos para que no pasáramos por ese sufrimiento. Todos tuvimos que sufrir con los que sufren. Sufrimos como Cristo sufrió. Dios no ha planeado separarnos de la realidad del dolor de la vida. Tenemos que pasar por los malos momentos, como todos los demás. Bien dijo nuestro Señor Jesucristo que Dios "hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos." (Mateo 5:45). Esto significa que todo lo que acontece en el mundo, sea bueno o malo, nos afectará a todos. Si viene una gran tribulación, todos a vamos a sufrir. Así que preparense.
Un rapto secreto nunca va a ocurrir. La promesa es que ocurrirá una resurrección de los muertos, y Jesucristo va a aparecer y establecer su reino. Eso es lo que vendrá. Amén.