La Sanidad

Re: La Sanidad

Apreciable Faithman:

Al regresar al tema, me tome un tiempo para leer atentamente éste mensaje:

“Bendice, alma mía , a Jehová...


Del cual me resultan algunos comentarios que si me lo permite, me gustaría solo compartirlos con usted y si gusta, leer su respuesta.

Sin embargo, muchos cristianos no se gozan de una fe tan cierta en cuanto a su salud. Son muchos los que sufren año tras año, seguros en su salvación, pero dudosos en la posibilidad que Dios los quiera sanar. La duda no puede conseguir los beneficios de nuestra salvación. Porque, “sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan” (Hebreos 11:6).

Creo que es cierto que algunos cristianos no creen en Dios lo suficiente como para recibir sanidad, sin embargo, el que alguno no consiga sanidad no siempre significa que sea porque duden de que puedan recibirla o dudar de Dios.

Lamentablemente, algunos han decidido que la sanidad física no es un beneficio vigente para el creyente. Inventan argumentos que siembran la duda en el corazón de los cristianos, y una vez sembrada, la duda ahoga la fe que puede conseguir el beneficio de la sanidad de parte del Señor. Uno de los argumentos más usados en contra de la sanidad tiene que ver con el aguijón de Pablo, mencionado en 2 Corintios, capítulo 12. Leamos:

Honestamente, creo que ninguno de nosotros nos atreveriamos a afirmar eso en el tema, la sanidad si es un beneficio vigente para el creyente.
La interpretación de algunos de este pasaje es así: por la grandeza de lo que Pablo escuchó en el tercer cielo, y para que Pablo no se exaltase en esta experiencia, Dios le mandó un aguijón en su carne, esto es, una enfermedad. Pablo rogó al Señor tres veces para que fuese librado de la enfermedad pero el Señor, en otras palabras, le dijo que tenía que soportar la aflicción y así gloriarse en su debilidad.

Bueno, lo que si es cierto, es que no dice que fuera una enfermdad, ni una tentación, ni una lucha ya sea física o espiritual. Se interpreta que pudiera haber sido una enfermedad o también algun pecado, pero no se puede afirmar a ciencia cierta.

Si esta es la interpretación correcta, entonces Pablo representa una excepción al principio de la sanidad física. Eso quiere decir que Dios en su soberanía puede anular una porción de la redención hecho por Cristo y establecer reglas distintas en algunos casos.

La conclusión es obvia. Si Dios puede hacer una excepción en la vida de Pablo, puede hacer lo mismo en la vida tuya y mía, también. Tal vez la enfermedad sea una prueba del Señor. Tal vez Dios quiera que yo le glorifique a través de mi debilidad física. Tal vez no tenga el derecho de pedir la sanidad en cada caso. Si existe la más mínima duda en el corazón del enfermo, entonces la fe para ser sanado no puede existir. La duda destruye la fe.

Esta teología nos lleva a una conclusión inevitable. No es posible orar en fe por los enfermos, ni recibir la sanidad por fe, mientras existe la posibilidad que la enfermedad sea una obra del Señor. Una sola duda puede destruir completamente la certeza de uno de los beneficios ganados por la cruz de Jesucristo.

Creo que en el tema tampoco se ha dicho que la enfermedad sea puesta en el creyente por Dios... sino que siendo sus hijos el permite la prueba fìsica en ocasiones con un fin específico, tales como crecer en la fe (sin enfermdad el creyente no se encontraría desprovisto de la fe necesaria para ser sano, debe crecer en fe), como disciplina por su desobediencia o tipo de vida pecaminosa, pero cualquiera de éstos motivos por los cuales Dios podría permitir el quebranto fìsico de un creyente, el propòsito final es que El sea glorificado a traves de tales circunstancias.

Si alguien atacara la doctrina de la salvación en la misma manera, implicando que en algunos casos el Señor no esté obligado a salvar al pecador arrepentido, el mundo evangélico lo rechazaría sin pensarlo dos veces. Pero, cuando hablamos de la sanidad física, muchos aceptan la idea de una redención parcial, incompleta o débil. Ellos dicen que Dios no sana a todos, o que es imposible saber si la sanidad es su voluntad en cada caso.

No, no se habla de una redención parcial en este caso, ni de una sanidad parcial incompleta o debil, sino de que cuando Dios permite que nuestro cuerpo sea tocado por la enfermedad no es un despropósito (crueldad o injusticia), sino que lo hace con un fin especìfico, ya sea descansar, meditar y estudiar más su Palabra, crecer en fe, limpiar su vida de algún pecado oculto... etc.

Si es así, ¿qué haremos con el mandato divino dado a la iglesia en el libro de Santiago? “¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará...” (Santiago 5:14-15). La palabra “alguno” incluye a todos aquellos en la iglesia. Y la “oración de fe” implica una certeza que no deja lugar para la duda. Hoy en día es difícil encontrar a alguien en la iglesia que no está enfermo. Nos hemos olvidado de uno de los beneficios más preciosos que existe, esto es, la sanidad física.

Es probable que algunas personas olvidasen tal testimonio, pero creo que no es el caso de ninguno aca en el tema.

¿Y qué del aguijón de Pablo? ¿Existe una explicación bíblica que puede traer fe al corazón? Gracias al Señor, la respuesta es, “sí.” Pablo fue “arrebatado al paraíso”, donde oyó palabras inefables. Aún cuando él no fue permitido expresar las mismas palabras que había escuchado, sabemos de que se trató “la grandeza de las revelaciones.” “Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre; pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo” (Gálatas 1:11-12). Pablo había recibido una revelación soberana del evangelio, y la autoridad para predicar este evangelio en todo lugar. Pablo fue elegido por Dios, que le había apartado desde el vientre de su madre para que él predicase entre los gentiles. (Gálatas 1:15-16)

Hay dos puntos buenos aqui, reconocer que de hecho si había un aguijón, no sabemos de que naturaleza, pero Dios lo permitió en su vida. El pidio a Dios que se lo quitara si quisiera o si no, pues a sufrirlo (asunto con el cual usted bien pudiera estar bien en contra). La segunda, que no habìa despropósito de Dios a través de tal "aguijón", pues todo el tiempo le sirvió para fortalecer su ministerio, su pensamiento y su espiritu, por éso pensar que en todos los casos, la enfermedad sería contraria a la obra de Dios (la obra a través de los creyentes en el mundo) sería pensar que en Pablo tampoco hubiera habido beneficio de sufrir en su carne (ya sea fisicamente o como ataque) ese aguijón y si fuera contrario a la voluntad de Dios... pues no lo hubiera permitido, considerando que Pablo si tenía suficiente fe para creer en que Dios, de quererlo, lo limpiaria de ello.

Antes de que sigamos, hagamos algunas preguntas. ¿Quién llevó a Pablo al tercer cielo? Dios. ¿Para qué? Para enseñarle el evangelio. ¿Por qué? Para que Pablo pudiera predicar, según la revelación, el evangelio a los gentiles. ¿Quién va a sufrir daño como resultado del ministerio del Pablo? El diablo. Entonces, ¿quién va a hacer todo lo posible para desanimar, obstaculizar y arruinar el impacto de la revelación que Pablo había recibido? El diablo.

Temeroso del significado de la revelación, y para que esta revelación no sea exaltada y aceptada en todo lugar, el diablo le mandó a Pablo un aguijón en la carne, esto es, un mensajero de Satanás para abofetearle. La palabra “mensajero” es la misma palabra traducida como “ángel” en el Nuevo Testamento, y se refiere en este caso a un demonio.

La frase, “aguijón en la carne”, era un dicho en aquel tiempo similar al dicho de hoy en día, “un dolor de cabeza”, esto es, una molestia. El mismo concepto aparece en el Antiguo Testamento en tres ocasiones:

“Y si no echareis a los moradores del país de delante de vosotros, sucederá que los que dejareis de ellos serán por aguijones en vuestros ojos y por espinas en vuestros costados, y os afligirán sobre la tierra en que vosotros habitareis” (Números 33:55).

... sabed que Jehová vuestro Dios no arrojará más a estas naciones delante de vosotros, sino que os serán por lazo, por tropiezo, por azote para vuestros costados y por espinas para vuestros ojos, hasta que perezcáis de esta buena tierra que Jehová vuestro Dios os ha dado” (Josué 23:13).

“Por tanto, yo también digo: No los echaré de delante de vosotros, sino que serán azotes para vuestros costados, y sus dioses os serán tropezadero” (Jueces 2:3).

En cada caso, Dios usa el simbolismo para ilustrar lo que el enemigo hará si Israel no lo echa fuera de la tierra. Serán por aguijones y por espinas en sus costados. No es un lenguaje literal, y en ninguna forma implica que la nación de Israel sufrirá de las enfermedades. No se trata de una enfermedad, sino de la molestia crónica del enemigo.

Es lo mismo en el caso de Pablo. La Biblia no dice que Dios enfermó a Pablo para mantenerle humilde, sino que Satanás le envió a un demonio para abofetearle en su ministerio. La palabra “abofetear” en el griego significa, “pegar y dar puñetazos.” Pablo mismo habla de las molestias que había experimentado.

... en trabajos más abundante; en azotes sin número; en cárceles más; en peligros de muerte muchas veces. De los judíos cinco veces he recibido cuarenta azotes menos uno. Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado como náufrago en alta mar; en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos; en trabajo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez;... si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi debilidad” (2 Cor. 11:23-27,30).

Yo creo que solamente un mensajero de Satanás podría causar tantos problemas en la vida de un solo hombre. Es interesante notar que en todas las molestias que Pablo había experimentado, él no mencionó las enfermedades. Es notable por su ausencia. Y el declaró que todas sus experiencias difíciles representaron su debilidad.

Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; por que cuando soy débil, entonces soy fuerte” (2 Cor. 12:10). La debilidad de Pablo no era una enfermedad, sino un mensajero de Satanás que le perseguía constantemente para obstaculizar en cualquier forma el avance del evangelio.

Y, ¿qué de su petición que el Señor le quite el aguijón? Ya hemos establecido que el aguijón no se trataba de una enfermedad, sino de un mensajero de Satanás. ¿Es bíblico pedir que el Señor nos quite al diablo? No. ¿Existe una promesa en el Nuevo Pacto que declara que podemos ser libres de las molestias del enemigo? No. Por eso, Dios le dijo, “Bástate mi gracia.” Esta respuesta no significa que Pablo simplemente tenía que soportar los ataques de Satanás hasta el fin. Significa que la gracia de Dios es suficiente para alcanzar la victoria en cada circunstancia. ¿Qué significa la gracia del Señor? Veamos una definición que se encuentra en la misma carta de Pablo: “Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundeís para toda buena obra” (2 Cor. 9:8). La gracia de Dios representa la abundancia de Dios para cumplir con toda buena obra. “Bástate mi gracia.” Esto es, “bástate la abundancia de los recursos que te he provisto abundantemente para cumplir con el mandato que te he dado.”

Jesús le había dado a Pablo la misma autoridad que nos ha dado a nosotros. “He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará” (Lucas 10:19).

Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros” (Santiago 4:7) Pablo tenía acceso al mismo escudo de la fe por lo cual podría apagar todo los dardos de fuego del enemigo. (Efesios 6:16)

Jesús oró por sus discípulos antes de su crucifixión en esta manera; “No ruego que los quites del mundo sino que los guardes del mal” (Juan 17:15). Pablo poseía los recursos espirituales necesarios para dominar la obra del mensajero de Satanás en su vida. Pero no fue lícito pedir que el Señor lo quitara de él. Su gracia es suficiente.

Mira lo que dice Pablo en su última carta, un poco antes de su muerte. “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe... el Señor estuvo a mi lado, y me dio fuerzas, para que por me fuese cumplida la predicación, y que todos los gentiles oyesen. Así fui librado de la boca del león” (2 Tim. 4:7, 17). ¡Aleluya! Pablo encontró que la gracia del Señor fue suficiente. El cumplió su misión y fue librado de la boca del mensajero de Satanás.

Es cierto que el diablo puede enfermar al creyente, sin embargo, también es bíblico afirmar que no podrá hacerlo más allá de lo que se le permita.
Dice: - el Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas - Creo que con éso basta para aceptar que, no estamos solos en ésta batalla espitual, ni desarmados, ni abandonados, no somos desmenuzados porque el Señor esta a nuestro lado y nos da fuerzas.

A pesar de la evidencia bíblica que hemos presentado, algunos siguen en su lucha para el derecho de estar enfermo.

Esto es un mal entendido, no es que tengamos derecho a estar enfermos o a morir de alguna enfermdad, es una condición humana y gracias o debido a la muerte en la cruz de nuestro Señor, podemos recibir la sanidad. Pero creemos que tal sanidad proviene de Dios, en su misericordia y de acuerdo a su gracia inefable, es que clamamos a El y el nos concede el favor de ser librados del ataque del enemigo, de las consecuencias de nuestros desmandes o de su disciplina. La enfermedad, en todo caso podría verse como un instrumento que perfecciona la fe, al creyente se le dice - alguno el falta fe? PIDALA -

Es importante notar que el aguijón de Pablo no obstaculizó la fe de muchos para recibir sanidad a través de su ministerio. ¿Por qué lo usan hoy en día para robar la fe de algunos para ser sano?

Creo que pudiera haber quienes, desconociendo cuales son los beneficios de ser hechos hijos de Dios, pudiera pretender que Dios no quiere que sea sano nunca, pero señalar que el proveedor de tal sanidad, el que tiene autoridad para sanar es Dios, no es robar la fe, sino poner la fe en quién debe estar puesta, no en mi, no en el predicador, no en mis hermanos y sus poderosas oraciones, sino en el Todopoderoso Dios.

Si ésto para usted es el equivalente de "robar la fe", creo que nos ha malinterpretado gravemente.

En serio, nos ha malentendido por completo.

Bendiciones,
 
Re: La Sanidad

Apreciable Faithman:

Dado que me perdí del tema unos días, tenía que revisar todos los mensajes desde donde me quede hasta aca, creo que las cosas se pusieron, por decir lo menos, muy feas. Los personalismos parecieran haber ocupado el primer lugar y la doctrina, pasó a otro lado.

Humildemente creo que estaria fallando a un punto esencial si no lo dijera, que no se defiende la sana doctrina atacando la vida personal de los foristas.

Espero que todos pudieramos tomar una buena dosis de moderación, en lo personal le suplico me disculpe si en ocasiones anteriores fui demasiado severa con usted, creo que me tomaron por sorpresa muchas de sus afirmaciones que espero en este ultimo mensaje yo haya podido analizar y responder sin acusarle injustamente, al menos éso :)

Nuevamente me despido, en el amor del Señor,
 
Re: La Sanidad

Lulis,

Saludos,

Gracia por leer el tema. Es algo que escribí hace varios años y lo añadí al foro porque el tema del aguijón salió y no tengo el tiempo para responder a cada post. No está dirigido a ningun forista personalmente. Creo que uno de los puntos más importante es lo siguiente.

La frase, “aguijón en la carne”, era un dicho en aquel tiempo similar al dicho de hoy en día, “un dolor de cabeza”, esto es, una molestia. El mismo concepto aparece en el Antiguo Testamento en tres ocasiones:

“Y si no echareis a los moradores del país de delante de vosotros, sucederá que los que dejareis de ellos serán por aguijones en vuestros ojos y por espinas en vuestros costados, y os afligirán sobre la tierra en que vosotros habitareis” (Números 33:55).

“... sabed que Jehová vuestro Dios no arrojará más a estas naciones delante de vosotros, sino que os serán por lazo, por tropiezo, por azote para vuestros costados y por espinas para vuestros ojos, hasta que perezcáis de esta buena tierra que Jehová vuestro Dios os ha dado” (Josué 23:13).

“Por tanto, yo también digo: No los echaré de delante de vosotros, sino que serán azotes para vuestros costados, y sus dioses os serán tropezadero” (Jueces 2:3).

En cada caso, Dios usa el simbolismo para ilustrar lo que el enemigo hará si Israel no lo echa fuera de la tierra. Serán por aguijones y por espinas en sus costados. No es un lenguaje literal, y en ninguna forma implica que la nación de Israel sufrirá de las enfermedades. No se trata de una enfermedad, sino de la molestia crónica del enemigo.



Cuando permitimos que la Biblia se interprete a si misma, no es tan complicado a entender. "Aguijón en la carne" es un dicho. No es una enfermedad, sino un metáforo para 'un enemigo crónico' como en los tres ejemplos del Antiguo Testamento. Cuando tratamos de forzar otra interpretación, pierde sentido y salimos con una doctrina equivocada. En los 3 ejemplos arriba, no creo que nadie va a concluir que Israel sufría una enfermedad. Es todo simbólico.



lulis;930196]Apreciable Faithman:

Al regresar al tema, me tome un tiempo para leer atentamente éste mensaje:



Del cual me resultan algunos comentarios que si me lo permite, me gustaría solo compartirlos con usted y si gusta, leer su respuesta.

Con mucho gusto.



Creo que es cierto que algunos cristianos no creen en Dios lo suficiente como para recibir sanidad, sin embargo, el que alguno no consiga sanidad no siempre significa que sea porque duden de que puedan recibirla o dudar de Dios.

De acuerdo. Pero veo una diferencia entre el conocimiento de la voluntad de Dios, y lo que es la verdadera fe para conseguir la voluntad de Dios. Hablo por mi propia experiencia. Yo puedo enseñar el tema de la sanidad todo el día y 'creo' 100% que la sanidad es la voluntad de Dios para mi vida, pero eso no es fe. La fe es espiritual, no mental ni emocional. La fe para recibir de Dios, sea el perdón de los pecados o la sanidad, brota de una palabra 'oida' en el corazón. La verdadera fe es una convicción que nada ni nadie puede frenar. No existen preguntas, ni dudas. La fe de Dios es proactiva, como el caso de al mujer con el flujo de sangre.

Sin embargo, la fe proactiva no es la única manera para recibir la sanidad. Mis hermanos del foro (aparentamente) quieren limitar a Dios a una sola forma (la imposición de manos) la cual no es correcto ni Bíblico. Es como decir que uno solamente puede mojarse por la lluvia. Pero yo puedo mojarme en muchas maneras; en el lago, en la ducha, etc. La sanidad se puede conseguir por el don de la sanidad, por la Palabra, por la imposición de manos y la fe de los ancianos, por orar los unos por los otros, por creer y recibir, etc.



Honestamente, creo que ninguno de nosotros nos atreveriamos a afirmar eso en el tema, la sanidad si es un beneficio vigente para el creyente.

Honestamente, no tengo claro lo que creen a los otros hermanos. Uno me habla de la imposición de manos, pero después me dice que Dios sana a quien quiere, no importa las manos ni la fe. Otro dice que el Señor sana, pero no siempre, basando su argumento en las experiencias de otras personas y no en la Palabra de Dios. A mi parecer, quieren ajustar la Palabra para caber dentro de sus experiencias.

Lo que tengo claro es que la incredulidad puede frenar la sanidad, tanto como impide la salvación. Dios no impone la salvación y no impone la sanidad.


Bueno, lo que si es cierto, es que no dice que fuera una enfermdad, ni una tentación, ni una lucha ya sea física o espiritual. Se interpreta que pudiera haber sido una enfermedad o también algun pecado, pero no se puede afirmar a ciencia cierta.

Como ya mencioné, creo que los ejemplos del antiguo testamento nos revelan que el mensajero de Satanás era un demonio asignado a Pablo por el diablo, en el sentido que andaba provocando la intensa persecucción que Pablo sufría durante el curso de su ministerio. La lista de sus aflicciones es impresionante, pero no menciona que andaba cronicamente enfermo ni ciego. La 'gracia' del Señor nos ha provisto la autoridad para resistir al diablo, pero Pablo como cualquier hombre se cansaba en su lucha y pedía al Señor que le quitara el enemigo. Pero no....Su gracia (autoridad y provisión espiritual) era suficiente.



Creo que en el tema tampoco se ha dicho que la enfermedad sea puesta en el creyente por Dios... sino que siendo sus hijos el permite la prueba fìsica en ocasiones con un fin específico, tales como crecer en la fe (sin enfermdad el creyente no se encontraría desprovisto de la fe necesaria para ser sano, debe crecer en fe), como disciplina por su desobediencia o tipo de vida pecaminosa, pero cualquiera de éstos motivos por los cuales Dios podría permitir el quebranto fìsico de un creyente, el propòsito final es que El sea glorificado a traves de tales circunstancias.

Bueno, en eso no vamos a estar de acuerdo. La fe no es por pruebas. La fe es por el oír la Palabra de Dios. Las pruebas 'revelan' la fe o la incredulidad, pero no producen la fe. No creo que el Señor usa las enfermedades para ningun motivos. Es Su Palabra que nos perfecciona (2 Tim. 3:16-17). Si Cristo llevó nuestras enfermedades y por Su llaga fuimos sanados, El no va a usar estas mismas maldiciones para perfeccionarnos. Su Palabra y Su Espíritu nos instruyen. Cristo es glorificado por la sanidad, la fe, la victoria, el triunfo, etc. No por las enfermedades. El nunca enfermó a nadie y nunca dejó a un enfermo en su aflicción. Ni siquiera hizo una entrevista antes de sanar. Las enfermedades representan un enemigo visible, como el pecado representa un enemigo invisible. El no usa el pecado para perfeccionar nuestro espíritu o alma, y no usa las enfermedades para perfeccionarnos tampoco.

No, no se habla de una redención parcial en este caso, ni de una sanidad parcial incompleta o debil, sino de que cuando Dios permite que nuestro cuerpo sea tocado por la enfermedad no es un despropósito (crueldad o injusticia), sino que lo hace con un fin especìfico, ya sea descansar, meditar y estudiar más su Palabra, crecer en fe, limpiar su vida de algún pecado oculto... etc.

Sigo en desacuerdo. Es un temo largo...pero creo que Dios permite lo que nosotros permitimos. Es la ley de sembrar y cosechar. Si es Dios que 'permite' cosas malas para perfeccionarnos, entonces es un Dios bastante injusto porque Sus obras de perfección no se han distribuidos igualmente entre todos. Y muchos que no sufren enfermedades son lejos de la perfección. No. Las enfermedades tienen varias fuentes, pero Dios no las permite.

Debemos pensar en las enfermedades como pensamos en el pecado. Es como decir que Dios permite que pequemos para enseñarnos algo. Obviamente, no es así. Tampoco con las enfermedades. Vienen para robar, matar y destruir.



Es probable que algunas personas olvidasen tal testimonio, pero creo que no es el caso de ninguno aca en el tema.



Hay dos puntos buenos aqui, reconocer que de hecho si había un aguijón, no sabemos de que naturaleza, pero Dios lo permitió en su vida. El pidio a Dios que se lo quitara si quisiera o si no, pues a sufrirlo (asunto con el cual usted bien pudiera estar bien en contra). La segunda, que no habìa despropósito de Dios a través de tal "aguijón", pues todo el tiempo le sirvió para fortalecer su ministerio, su pensamiento y su espiritu, por éso pensar que en todos los casos, la enfermedad sería contraria a la obra de Dios (la obra a través de los creyentes en el mundo) sería pensar que en Pablo tampoco hubiera habido beneficio de sufrir en su carne (ya sea fisicamente o como ataque) ese aguijón y si fuera contrario a la voluntad de Dios... pues no lo hubiera permitido, considerando que Pablo si tenía suficiente fe para creer en que Dios, de quererlo, lo limpiaria de ello.

En el mundo tendremos aflicciones y persecuciones por nuestra fe. Por eso Dios nos ha equipado con Su Nombre, Su Espíritu, fe, dones, sangre, Palabra, autoridad, promesas, etc. El quiere que tengamos victoria y que manifestemos Su gloria y poder en todas partes. El aguijón era un mensajero del 'dios de este siglo.' Pablo tenía la capacidad de resistir y apagar sus dardos de fuego. Al final, lo hizo y dio la gloria a Dios (en 2 Tim), pero en el camino se cansaba, sin duda, y buscaba un alivio permanente. Pero tal rescate no existe en nuestro pacto. Es nuestra responsibilidad vencer al diablo. Cristo ya lo venció. Por Su redención, podemos hacer lo mismo.



Es cierto que el diablo puede enfermar al creyente, sin embargo, también es bíblico afirmar que no podrá hacerlo más allá de lo que se le permita.

De nuevo, no estoy de acuerdo que Dios 'permite' estas cosas. Son cosas de la vida en un mundo caído. Dios nos ha dado la autoridad para actuar en Su Nombre. O lo hacemos, o no lo hacemos.

Dice: - el Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas - Creo que con éso basta para aceptar que, no estamos solos en ésta batalla espitual, ni desarmados, ni abandonados, no somos desmenuzados porque el Señor esta a nuestro lado y nos da fuerzas.

Ahora sí, esto es mi punto.

Esto es un mal entendido, no es que tengamos derecho a estar enfermos o a morir de alguna enfermdad, es una condición humana y gracias o debido a la muerte en la cruz de nuestro Señor, podemos recibir la sanidad. Pero creemos que tal sanidad proviene de Dios, en su misericordia y de acuerdo a su gracia inefable, es que clamamos a El y el nos concede el favor de ser librados del ataque del enemigo, de las consecuencias de nuestros desmandes o de su disciplina. La enfermedad, en todo caso podría verse como un instrumento que perfecciona la fe, al creyente se le dice - alguno el falta fe? PIDALA -

Creo que Su gracia ha provisto la salvación y la sanidad para todo el mundo. Dios no está activamente salvando ni sanando a nadie. La gracia para ambas cosas ya existe por medio del evangelio. Cada uno, (el perdón y la sanidad) suceden cuando 'oímos' las buenas nuevas y las creemos con el corazón. Es como una casa con enchufes de electricidad. No pedimos que la empresa de electricidad nos prenda las luces. Ellos ya nos han provisto la energía. Ahora nos toca a nosotros prender las luces. El Espíritu Santo ya fue derramado sobre toda carne. La salvación y la sanidad están aquí. Es simplemente un asunto de anunciar el evangelio a todo hombre para que pueden 'oir' y creer el mensaje.

Creo que pudiera haber quienes, desconociendo cuales son los beneficios de ser hechos hijos de Dios, pudiera pretender que Dios no quiere que sea sano nunca, pero señalar que el proveedor de tal sanidad, el que tiene autoridad para sanar es Dios, no es robar la fe, sino poner la fe en quién debe estar puesta, no en mi, no en el predicador, no en mis hermanos y sus poderosas oraciones, sino en el Todopoderoso Dios.

El poder reside en la Palabra de Dios. Es como la vida de la semilla existe en la semilla. Al sembrar la semilla, Dios no la concede vida del cielo. No. La semilla lleva en si su propia vida. Al encontrar la tierra, se activa. Así es con la Palabra de Dios acerca de la salvación (por eso predicamos el evangelio - Rom. 10) y así es con el tema de la sanidad (Lucas 5:15).




Si ésto para usted es el equivalente de "robar la fe", creo que nos ha malinterpretado gravemente.

En serio, nos ha malentendido por completo.

Bendiciones,


Es una cosa decir que la sanidad es posible. Es otra cosa decir que es para todos. Y es otra cosa decir que Dios no sana a todos. Es otra cosa declarar que es solamente por la imposición de manos, y después declarar que aún así es solamente un capricho de Dios. Mis hermanos han dicho muchas cosas confusas. Yo sigo en lo mismo. La sanidad existe para todos tanto como la salvación. La fe puede recibir la sanidad.

Gracias otra vez por tu tiempo.

Bendiciones
 
Re: La Sanidad

Apreciable Faithman:

Dado que me perdí del tema unos días, tenía que revisar todos los mensajes desde donde me quede hasta aca, creo que las cosas se pusieron, por decir lo menos, muy feas. Los personalismos parecieran haber ocupado el primer lugar y la doctrina, pasó a otro lado.

Humildemente creo que estaria fallando a un punto esencial si no lo dijera, que no se defiende la sana doctrina atacando la vida personal de los foristas.

Espero que todos pudieramos tomar una buena dosis de moderación, en lo personal le suplico me disculpe si en ocasiones anteriores fui demasiado severa con usted, creo que me tomaron por sorpresa muchas de sus afirmaciones que espero en este ultimo mensaje yo haya podido analizar y responder sin acusarle injustamente, al menos éso :)

Nuevamente me despido, en el amor del Señor,

Es siempre un placer compartir con calma con alguién que no me trata como el diablo, jajjaaja. Como he dicho aquí varias veces....mi 'crimen' es que yo creo que la sanidad es para todos. La reacción es algo que no tiene sentido, y sin duda me he defendido con la misma agresividad que los ataques han llevados. No es mi temperamento para nada. Espero que todos nosotros podamos seguir en paz.

Gracias por tu comprensión.
 
Re: La Sanidad

Baja las armas, hermana. No soy tu enemigo.

Solo tengo un arma, esta: Heb 4:12 "Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón".

Solo un enemigo puede decirme que deje de usar esta arma. Piensa , medita, recapacita lo que dices.

Bendiciones.

Manhattan.
 
Re: La Sanidad

Tal vez tanta productividad en un día te asusta. Pero es la verdad, hermano. Me acuesto a las 10, me levanto a las 5:30, y lo disfruto. Yo contesto cartas de preguntas teológicas. Cada carta es diferente. Tengo algunas respuestas ya preparadas porque muchas veces las preguntas son las mismas. Algunas cartas requieren 2 minutos, otras 20 minutos. Entre medio enseño a 350 alumnos, y normalmente una vez cada semana enseño 3 horas en la noche también. Eso de veras me cansa. Pero el ministerio es glorioso y es un privilegio servir al Señor así. Recién llegué del trabajo.

Sigue sin cuadrar, Faithman, con lo cual va dejando en claro que por una parte miente, y por la otra y lo que es peor, que no dedica ni un minuto a la oración y mucho menos a escudriñar la Escritura. Vaya vergüenza de siervo del Señor que no dedica ni un solo minuto a estar a solas con Él.

Verá, si se acuesta a las 10 y se levanta a las 5:30, tenemos aquí 7:30 h. Si a ello le sumamos los desplazamientos, su aseo personal y sus necesidades.... usted no dedica a estar con el Señor ni un solo minuto de su vida diaria. Ya ve que obrá podrá estar llevando a cabo si no le dedica ni un solo minuto al Señor.

Y lo que me parece ya tremendamente grave es que usted responda a cada cual en base a esquemas establecidos, con lo cula muestra que usted no se preocupa en absoluto de los problemas de cada cual, sino que para usted todos son como estadísticas. Grave ello, y tanto. Sin olvidar su continuo predicarse así mismo, lo cual, ya le descalifica de forma alarmante.

Hermanos, no entiendo la amargura y hasta el odio hacia mi persona, pero está bien. Simplemente quiero ver a los enfermos recibir su herencia en Cristo. La salvación de los pecados es lo más importante, pero la sanidad es parte de la herencia, y los enfermos merecen saberlo.

Salvación de los pecados?... esta es una de sus nuevas doctrinas. ¿De donde saca la salvación de los pecados?. Y de nuevo empieza con el descrédito, ello no puede faltar.

Lamento que no podamos ser mejores amigos y hermanos en la fe. Tal vez podamos mejorar nuestra comunicación y dejar al lado las acusaciones y palabras feas.

Verá, está escrito:

2Jn. 9 Cualquiera que pretenda avanzar más allá de lo que Cristo enseñó, no tiene a Dios; pero el que permanece en esa enseñanza, tiene al Padre y también al Hijo. 10 Si alguno va a visitarlos a ustedes y no lleva esta enseñanza, no lo reciban en casa ni lo saluden; 11 porque quien lo salude se hará cómplice de sus malas acciones.
 
Re: La Sanidad

Si, salen las cuentas. Añadiste 8 horas demás. El curso está en Avril, no anoche. :)

Sigue sin cuadrar, Faithman, con lo cual va dejando en claro que por una parte miente, y por la otra y lo que es peor, que no dedica ni un minuto a la oración y mucho menos a escudriñar la Escritura. Vaya vergüenza de siervo del Señor que no dedica ni un solo minuto a estar a solas con Él.

Verá, si se acuesta a las 10 y se levanta a las 5:30, tenemos aquí 7:30 h. Si a ello le sumamos los desplazamientos, su aseo personal y sus necesidades.... usted no dedica a estar con el Señor ni un solo minuto de su vida diaria. Ya ve que obrá podrá estar llevando a cabo si no le dedica ni un solo minuto al Señor.

NO MIENTA, Faithman. No mienta.
 
Re: La Sanidad

Osea, Dios no respeta el libre albedrio, tengo que entender por este tema, Dios favorece a unos pocos elegidos con la sanidad, la elite de la elite o como queráis llamarlo, los más esforzados lo que sea, y favorece a esas personas, interfiere en sus vidas, como son sus siervos y se lo han ganado, interviene en sus vidas y concede privilegios, mientras día a día, consiente que niños mueran de hambre, que gente muera en guerras, mueran por el egoísmo de otros, permite catástrofes como la de Haiti, hace oidos sordos a todas esas desgracias e injusticias. Pero a unos pocos les permite no enfermar.

Si tuviera que creerme eso, pensaría que Dios en realidad huele a Azufre y lleva tridente, pero bueno, directamente no me lo creo.
 
Re: La Sanidad

Osea, Dios no respeta el libre albedrio, tengo que entender por este tema, Dios favorece a unos pocos elegidos con la sanidad, la elite de la elite o como queráis llamarlo, los más esforzados lo que sea, y favorece a esas personas, interfiere en sus vidas, como son sus siervos y se lo han ganado, interviene en sus vidas y concede privilegios, mientras día a día, consiente que niños mueran de hambre, que gente muera en guerras, mueran por el egoísmo de otros, permite catástrofes como la de Haiti, hace oidos sordos a todas esas desgracias e injusticias. Pero a unos pocos les permite no enfermar.

Si tuviera que creerme eso, pensaría que Dios en realidad huele a Azufre y lleva tridente, pero bueno, directamente no me lo creo.


Tienes la razón. Dios no es así. Dios ha dado al hombre el regalo de la justiica, el amor, el perdón, la autoridad, la sanidad y mucho más, y ahora depende del hombre si lo va a recibir y aplicar a su vida o no.

Dios dio este mundo al hombre (Ps. 115:16) y el dominio (Gen. 1:26-28, Ps. 8) y puso todo bajo sus pies. Dios es el dueño, pero el hombre es el administrador, y Dios respeta el libre albedrío del hombre.

Es por fe que recibimos de El y salimos de la corrupción que hay en el mundo.

Bendiciones
 
Re: La Sanidad

Sigue sin cuadrar, Faithman, con lo cual va dejando en claro que por una parte miente, y por la otra y lo que es peor, que no dedica ni un minuto a la oración y mucho menos a escudriñar la Escritura. Vaya vergüenza de siervo del Señor que no dedica ni un solo minuto a estar a solas con Él.

Verá, si se acuesta a las 10 y se levanta a las 5:30, tenemos aquí 7:30 h. Si a ello le sumamos los desplazamientos, su aseo personal y sus necesidades.... usted no dedica a estar con el Señor ni un solo minuto de su vida diaria. Ya ve que obrá podrá estar llevando a cabo si no le dedica ni un solo minuto al Señor.

NO MIENTA, Faithman. No mienta.


Raul, no debo de responderte por razones obvias, pero tus posts son tan chistosos que es dificíl no responder en medio de las lagrimas de las risas. Paso todo el día en oración, amigo. Es como paso todo el día casado. Siempre estoy con Dios, siempre le hablo, y siempre me habla. Estoy en Su Palabra por horas cada día. Siempre estoy rodeado de Bíblias. Amo la Palabra y amo al Señor. Siempre estoy orando en el Espíritu. Es comunión constante.

Pero gracias por tu preocupación.

Saludos
 
Re: La Sanidad

Tienes la razón. Dios no es así. Dios ha dado al hombre el regalo de la justiica, el amor, el perdón, la autoridad, la sanidad y mucho más, y ahora depende del hombre si lo va a recibir y aplicar a su vida o no.

Dios dio este mundo al hombre (Ps. 115:16) y el dominio (Gen. 1:26-28, Ps. 8) y puso todo bajo sus pies. Dios es el dueño, pero el hombre es el administrador, y Dios respeta el libre albedrío del hombre.

Es por fe que recibimos de El y salimos de la corrupción que hay en el mundo.

Bendiciones

Buenas, un terremoto no se aplica a la vida, no forma parte del libre albedrio, has eludido el tema sin decir porque Dios interviene, dando privilegios merecidos o lo que sea a algunos fieles, mientras consiente esas cosas, tu que estás en constante comunión y que hablas con él constantemente y le escuchas, quizás te haya explicado el porque.

Te "escucho".
 
Re: La Sanidad

Buenas, un terremoto no se aplica a la vida, no forma parte del libre albedrio, has eludido el tema sin decir porque Dios interviene, dando privilegios merecidos o lo que sea a algunos fieles, mientras consiente esas cosas, tu que estás en constante comunión y que hablas con él constantemente y le escuchas, quizás te haya explicado el porque.

Te "escucho".


Aquí puedes leer un tema que escirbí acerca de las tragedias, etc. Espero que te ayude: http://barrybennett.org/contenido/articulos-de-ensenanza/es-dios-responsable-por-las-tragedias


Bendiciones
 
Re: La Sanidad

Bueno, he leído el texto y aunque muy elaborado con alguna pequeña variación, lo de las tormentas y eso, es un poco la argumentación de siempre. Este tema es difícil cada vez que debato sobre religión con algún amigo o forero de creencias ateas (evidentemente hablo de debate basado en el respeto), si el ateo en cuestion es mínimamente hábil me lleva a este tema, y me "acorrala", nunca se que decir, a la pregunta sobre por que Dios desde su omnipotencia, permite esas cosas y otras muchas, tengo que admitir que no tengo la respuesta, y que desearía que hiciese una "tregua de libre albedrio". Llevo mucho tiempo intentado buscar la forma de argumentarlo, y no la encuentro, yo no encuentro la respuesta, y nadie es capaz de darme una que me convezca.

Siempre se achaca al libre albedrio, en tu texto hablas del pecado y de las consecuencias, el mundo inestable por ese pecado, ok, pero lo sigue permitiendo, y claro volvemos a lo mismo, libre albedrio, pero ahora el libre albedrio choca con el tema de la sanidad que explicas, ¿Dios interviene o no?, si interviene para lo de la sanidad "admite" que es una forma de intervenir, al menos a ojos humanos un tanto "caprichosa", eso sí, pero las catastrofes no. ¡jo!, eso es "cruel".

Y luego está el tema de la imagen y semejanza, para explicarme voy ha hacer un simil en el que compararé parte de mis experiencias con la actuación de Dios, pero aclaro que es un ejemplo, no pretendo ni mucho menos compararme con el Señor. Yo cuando un familiar mio crece, trato de orientarle, ser una influencia positiva en su vida, las personas crecen, actuan mejor, y actuan peor, los errores forman parte de la vida y del aprendizaje, y hay que estar ahí en todo momento (hasta ahora el simil puede ser similar a la actuación de Dios para con nosotros cuando pecamos), pero yo aunque respete el libre albedrio de mi familiar, si está en peligro y puedo salvarle, lo hago, por un momento interfiero con el libre albedrio si es posible, para salvarlo, ¿porqué Dios parece no hacerlo?, ell nos creó, nosotros pecamos, pero fuimos hechos así, con ese "fallo" de diseño, ¿no?

Y bueno aparte, sin ánimo alguno de ofender, opino que todo el tema del arca de Noe no puede ser tomado de forma literal, el mensaje que lleva está bien, es un buen mensaje, pero no se "cualquier persona minimamente inteligente" (va totalmente sin acritud eh, no interpretéis que por pesar distinto a mí, estoy diciendo que no sois inteligentes) sabe que no pudo meter una pareja de cada especie en un barco de madera, por varios motivos, no caben, y no hablemos ya de las provisiones, con una pareja se extinguen todas las especies.
 
Re: La Sanidad

Tienes la razón. Dios no es así. Dios ha dado al hombre el regalo de la justiica, el amor, el perdón, la autoridad, la sanidad y mucho más, y ahora depende del hombre si lo va a recibir y aplicar a su vida o no.
Dios sigue siendo el justo, Dios sigue siendo el que ama, Dios sigue teniendo autoridad y Dios es el que sana todavía.!!! Del hombre depende solamente la obediencia. No depende la justicia, no depende el perdón, no depende el amor, no depende la autoridad, ni depende la sanidad. Todo sigue dependiendo de Dios, no del hombre. Dios sigue estando al control de todo.

Dios dio este mundo al hombre (Ps. 115:16) y el dominio (Gen. 1:26-28, Ps. 8) y puso todo bajo sus pies. Dios es el dueño, pero el hombre es el administrador, y Dios respeta el libre albedrío del hombre.
Veamos lo que realmente dicen los versículos que trae, pues usted siempre les cambia el sentido:

Salmo 115:

"Jehová se acordó de nosotros; nos bendecirá; Bendecirá a la casa de Israel; Bendecirá a la casa de Aarón. Bendecirá a los que temen a Jehová, A pequeños y a grandes. Aumentará Jehová bendición sobre vosotros; Sobre vosotros y sobre vuestros hijos. Benditos vosotros de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra. Los cielos son los cielos de Jehová; Y ha dado la tierra a los hijos de los hombres."

El salmo 115 habla de los hijos de Israel y la tierra de la que habla es de la tierra que les heredó para habitar. Cualquiera que haya leido el antiguo testamento sabe que en todo él se le llama tierra a la heredad de Israel.

Salmo 8.

"Le hiciste señorear sobre las obras de tus manos; Todo lo pusiste debajo de sus pies: Ovejas y bueyes, todo ello, Y asimismo las bestias del campo, Las aves de los cielos y los peces del mar; Todo cuanto pasa por los senderos del mar. !!Oh Jehová, Señor nuestro, Cuán grande es tu nombre en toda la tierra!

Este salmo habla del dominio que Dios dió al hombre sobre los animales, solamente.

Genesis 1:26-28

"Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra."

Aquí Genesis refuerza lo dicho en el Salmo 8. Dios puso al hombre sobre los animales, únicamente.

Es por fe que recibimos de El y salimos de la corrupción que hay en el mundo.

Bendiciones
De Dios recibimos por fe o por gracia, pues el da a quien quiere, cuando quiere y lo que quiera. Y no es posible para el hombre salir de la corrupción que hay en el mundo, si el mismo Dios no le saca.

Usted Faithman siempre trata de manipular y darle otro sentido a la palabra escrita.

Dios le bendice!

Greivin.
 
Re: La Sanidad

Greivin, yo no veo una "manipulación" distinta a la tuya o la mía, lo he dicho antes, a pesar de que muchos foreros dicen que la palabra de Dios tiene que ser interpretada literalmente, luego a la hora de interpretarla, parece que cada uno lo entiende de una manera :S.
 
Re: La Sanidad

Raul, no debo de responderte por razones obvias, pero tus posts son tan chistosos que es dificíl no responder en medio de las lagrimas de las risas. Paso todo el día en oración, amigo. Es como paso todo el día casado. Siempre estoy con Dios, siempre le hablo, y siempre me habla. Estoy en Su Palabra por horas cada día. Siempre estoy rodeado de Bíblias. Amo la Palabra y amo al Señor. Siempre estoy orando en el Espíritu. Es comunión constante.

Pero gracias por tu preocupación.

Saludos[/QUOTE

Si medallas lo le faltarán. Pero no sale a cuentas. Ahora resultará que también nos tiene que enseñar que es la comunión y la oración. En las próxima vez, al menos, cuente las horas antes, porque no cuadran de modo alguno.
 
Re: La Sanidad

No quedó bien.

Raul, no debo de responderte por razones obvias, pero tus posts son tan chistosos que es dificíl no responder en medio de las lagrimas de las risas. Paso todo el día en oración, amigo. Es como paso todo el día casado. Siempre estoy con Dios, siempre le hablo, y siempre me habla. Estoy en Su Palabra por horas cada día. Siempre estoy rodeado de Bíblias. Amo la Palabra y amo al Señor. Siempre estoy orando en el Espíritu. Es comunión constante.

Pero gracias por tu preocupación.

Saludos

Si medallas lo le faltarán. Pero no sale a cuentas. Ahora resultará que también nos tiene que enseñar que es la comunión y la oración. En las próxima vez, al menos, cuente las horas antes, porque no cuadran de modo alguno.

Y Fatihman, que el día tiene 24 h. Y ya las ha sobrepasado hace mucho, para que aun le añada más horas cuando se ve acorralado al dejar en claro que no le presta atención alguna ni a la oración, ni a la lectura de la Biblia. No venga con mentiras, es un sano consejo.
 
Re: La Sanidad

Raul, no debo de responderte por razones obvias, pero tus posts son tan chistosos que es dificíl no responder en medio de las lagrimas de las risas. Paso todo el día en oración, amigo. Es como paso todo el día casado. Siempre estoy con Dios, siempre le hablo, y siempre me habla. Estoy en Su Palabra por horas cada día. Siempre estoy rodeado de Bíblias. Amo la Palabra y amo al Señor. Siempre estoy orando en el Espíritu. Es comunión constante.

Mire es es arrogante y soberbio, que ya se cree superior a Jesucristo mismo, el Señor. Ya se cree más capaz que Él mismo para estar en comunión con Dios, y Él, cada día oraba y por varias horas. Se retiraba por varias horas, y usted viene a presumir de ser mejor que Él.

Faithman, es un soberbio. Ya le dije que está enfermo, pero ni se da cuenta.
 
Re: La Sanidad

Tengo un cuchillo, y estoy seguro que puede "cortar el ambiente"
Y yo tengo una espada que es más cortante que tu cuchillo.!! Hay que presentar batalla contra todo aquel que se levante en contra de la verdad.!!!

Dios te bendice!

Greivin.