Tengan en cuenta que las dos naturalezas ni están mezcladas, ni existe confusión en ellas. Pero ello únicamente ocurre en la persona de Jesús. Al no estar mezcladas, y siendo en verdad que Jesús únicamente como hombre nace de mujer, que no como Dios, por tanto que en su Divinidad es de la misma sustancia que el Padre, y Dios Padre NUNCA SE HA HECHO HOMBRE, nunca ha sido hombre...
No deben olvidar que la Palabra no vino al mundo para ser Dios, sino que vino a tomar lo QUE NO ERA, hombre. Vino a tomar carne, vino a ser carne, no Dios, Dios ya lo hera. No vino como Dios, sino COMO HOMBRE VERDADERO. No nació de mujer para ser Dios, sino HOMBRE VERDADERO. Y este hombre, cohexisten DOS NATURALEZAS, en este hombre que lo es Jesús Y ÚNICAMENTE EN ÉL.
