El juicio final tendrá alguna connotación pero solo para los condenados.
Es decir, el diablo se quedará sin mundo al que tentar, y todos los demonios otrora con cierta libertad quedarán encadenados en el infierno recibiendo la retribución de todos los pecados desde el principio de la humanidad aumentando grandemente su sufrimiento, por eso los demonios tiemblan en pesar acerca de aquel dia.
Para los hombres y mujeres perdidos, la condena aumentará en el sentido que ya el diablo no estará distraido destruyendo al mundo, ahora serán 100% su objeto de atención.
Para los salvados, se terminaron las preocupaciones acerca de familiares y sus descendientes su mirada se volcará a la Eternidad sin distracción de su Gloria.