Y ya ni hablamos de Juan Pablo II...
Y ya ni hablamos de Juan Pablo II...
A
Tobi:
Tobi: Las encontrarás en los temas paralelos. Incluso puede que en este mismo.
Así, que, esmérate y leelos
No tengo tiempo. O soy muy vago o son muchas letras…
A
Daniel Sapia:
Por ende, con la muerte de Cristo no alcanza, sino que hace falta otra condición: la "limpieza" que otorga el Purgatorio
No hace falta otra condición, como si hubiera dos opciones (purificación o no purificación). Estás afirmando que falta otra condición, cuando
no hay condiciones: quien no está completamente limpio, se limpia. Tu quieres atribuir a los católicos la pretensión de que la muerte de Cristo no basta sola para entrar en el cielo cuando esto no es así. La purificación para quien no está completamente limpio es anticipo de que estamos salvados (para entrar en el infierno no hay que limpiarse), como pasar por el umbral de una puerta es previo a entrar en la siguiente habitación (no puedes pasar a una habitación si no se pasa por la puerta). Pero… poniéndome en el punto de vista protestante, y sabiendo que hay pecados de muerte y pecados que no son de muerte, ¿éstos últimos condenan al infierno?. Pues veo dos opciones: si se es estricto, sí se va al infierno; y si se transige con ir manchado con estos pecados que no son mortales, pues se puede acceder al cielo con lamparones en la camisa. Para el protestantismo, no hay servicio de lavandería en el cielo y se entra con esas manchas que no son de muerte. Pero como no soy protestante, ¿qué pasa, una vez muerto, con esos pecados que no son de muerte?.
¿desde cuándo la Iglesia es fundamento de Jesucristo?
Es que cuando yo puse “la Iglesia también es fundamento de la verdad”, no puse verdad con mayúsculas. Lo que te dije en el mensaje anterior referido a la palabra “fundamento” también lo puedo ampliar a “verdad”. No te confundas con las palabras y no des categorías de nombre propio al nombre común, porque una cosa muy distinta es Juan 14, 6 (Yo soy el Camino, y la Verdad, y la Vida) y otra aplicar estos nombres propios como si fueran sinónimos del nombre de Jesús (Ingenieros de Jesús, canales y puertos). (Aparte, también la Iglesia es el cuerpo de Cristo, fundamento de la
verdad?)
Los apóstoles no son fundamento de la Iglesia. A lo sumo podrán ser denominados como primogénitos en la predicación o (si vale el término) primicias de la Iglesia
”Por tanto, ya no sois extranjeros y huéspedes, sino conciudadanos de los santos y familiares de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo”. Yo creo que sigues empecinado en el mismo error de dar nombre propio a lo que sólo es nombre común (y en tus explicaciones, has olvidado a los profetas, ¿también primicias de la Iglesia o primeros miembros?). Y de la misma confusión de nombres propios y comunes, queréis imputar a los católicos que cuando el catecismo afirma que el Papa es
principio y fundamento perpetuo y visible de unidad, tanto de los obispos como de la muchedumbre de los fieles, con decir esto se está contra 1 Cor 3, 11 (o cuando dice que el
Señor hizo de San Pedro el fundamento visible de su Iglesia. Le dio las llaves de ella). Vanas imputaciones. Al igual que en el ejemplo sarcástico que he puesto antes, os vais a creer que los ingenieros de caminos han estudiado teología.
Está muy claro. Recomiendo Mateo 16, 17-19.
El tema no pasa por mayúsculas o minúsculas
Sí, si pasa por mayúsculas y minúsculas y de eso he estado hablando en los párrafos anteriores. Vuelvo a copiar el punto 756 del catecismo:
”El Señor mismo se comparó a la piedra que desecharon los constructores, pero que se convirtió en la piedra angular. Los apóstoles construyen la Iglesia sobre ese fundamento, que le da solidez y cohesión”; donde se aclara que “ese” fundamento es Jesús, piedra angular, pero no será la palabra fundamento relacionada exclusivamente con Jesucristo. Confundir fundamento con Fundamento como confundir verdad con Verdad (o amor con Amor) os va a equivocar en vuestras conclusiones. Como fundamento (en minúscula) era por lo que yo me refería que el protestantismo está fundamentado (claro) en las doctrinas de Lutero, Calvino…
Y ahora el muerto en pecado mortal:
a) Hablé de alguien que muere de manera instantánea, perfectamente factible
La muerte instantánea es perfectamente factible (y de hecho pasa,

), pero no es lo corriente, y el caso que has cogido, ha sido con alfileres.
b) Patética la explicación del Catecismo que cita, RamónJ. O sea: Dios me perdona si hago "contrición perfecta" por las mías, pero si y solo si me comprometo a ir de un cura ni bien pueda. Realmente me reservo la calificación de este procedimiento, obviamente articulado de manera (claramente) forzada para tapar el hueco que dejaría la "no posibilidad" de confesarse ante un cura VERSUS la necesidad de un cura para absolver los pecados "en nombre de Dios".
Si no haces contrición, ni perfecta ni nada, ¿de qué va a perdonarte Dios?. Y según te has arrepentido de corazón (¿por qué hablo en segunda persona si tú no eres católico?), ¿de qué angustia terrible hablas?. El hecho que te pille o le pille a otro un coche, no quita la firme voluntad de arrepentimiento y de recibir el sacramento de la reconciliación para quien no quiere vivir más en pecado. El accidente del coche es eso, un accidente. Sin él, el sujeto hubiera recibido el sacramento.
Lo cierto (y muy cierto) es que debe ser terrible ser católico y vivir con la angustia de no saber si morirá de manera instantánea (¿un infarto?) sin poder confesarse ante un cura ni tampoco tener la menor posibilidad de ningún "acto de contrición perfecta".
¿Por qué?. ¿Quién prohíbe el acto de contrición?. Si muere de un infarto nada más cometer el pecado mortal sin contrición alguna, ¿es que se ha arrepentido acaso?. Quien comete un pecado mortal y así lo asume, o se arrepiente (y busca un sacerdote, le atropelle un coche o no) o no se arrepiente, y entonces, adios.
¿Cuál es la solución a esto?. Según la Iglesia Católica: No pecar, y si lo hace.. correr a confesarse ante un cura. En lo posible todos los días (por las dudas)
Efectivamente, pero dudo mucho que haya seres tan viles de pecar mortalmente todos los días y al mismo tiempo se arrepientan de ese pecado mortal que han cometido (¿tu conoces muchos?). Si una persona tiene conciencia de haber cometido pecado mortal y no se confiesa, es porque le trae al fresco su alma, su fe, su Dios y su todo (y seguro que es así). Peor para él.
A
Tobi:
Tobi: Yo me pregunto: ¿y RamonJ me preguntó que respuestas no había respondido Eddy Gonzalez?
No me entendiste. Lo que tú creías que te decía a ti, era un párrafo
tuyo propio dirigido a mí (“
Ya que te has permitido entrar allí donde Eddy González dió la callada por respuesta, ¿por que no respondes las preguntas que Eddy no respondió?”). Ya veo que no soy el único que no se acuerda de lo que escribe.
El dilema (pequeño):
“¿En ambos casos de que NARICES sirve el sacerdote?”. El sacerdote actúa en nombre de Dios y Dios no es tonto como para absolver (en el primer caso) a alguien que no cree, o como para condenar o no absolver (en el segundo caso) a alguien que si cree y se ha arrepentido de corazón. El sacerdote es un instrumento, pero el que perdona es Dios. Y ahora dirás, ¿para qué NARICES sirven los instrumentos?. Pues de ellos sale una música exquisita (y dependiendo del autor de la partitura, claro)
Nuevamente a
Daniel Sapia:
"Si la "absolución sacerdotal" de los pecados no responde meramente a una formalidad externa, sino a un VERDADERO ARREPENTIMIENTO del pecador, el Sacerdote Católico, como JUEZ QUE ES (según el Pbro. Carballo), ¿cómo puede saber cuando REALMENTE obra en el interior del pecador un VERDADERO arrepentimiento? ¿Puede acaso este Sacerdote (como bien puede el Dios Creador) "ver" en el interior del corazón del hombre?
Pues más o menos ya he contestado a Tobi en párrafos anteriores. Solo Dios puede ver el verdadero arrepentimiento. El sacerdote perdona en nombre de Dios, porque si fuera en nombre suyo, debería saber y conocer el interior de la otra persona para saber si se ha arrepentido de verdad o no. Pero Dios si lo sabe.
Si entonces el humano Sacerdote de ninguna manera puede "ver" el interior del pecador, y por consiguiente ignorar si el arrepentimiento fue sincero o no... ¿cuán válida puede ser su absolución?
El pecador no es tonto, y sabe que si está haciendo teatro, Dios no le va a perdonar y está engañado al sacerdote. Pero ¿hay alguien que intente engañar a Dios engañando al cura?; ¿existe alguien así?. Si existe será muy infantil. Lo de menos es lo que piense el sacerdote, que está para lo que está. Para leer las conciencias y perdonar, está Dios.
Si entonces el perdón impartido por el Sacerdote no responde a una formalidad externa, sino a lo que realmente sucede EN EL INTERIOR DEL PECADOR.. ¿para qué es necesaria la intervención del Sacerdote?
Pues igual que el tema que estamos llevando en otro foro (la Eucaristía). Se trata de
Sacramentos. El mismo Tobi me preguntó qué significaba sacramento (no sé si en este foro o en de la Eucaristía. Una vez escrito este mensaje iré al foro de la Eucaristía a ver que “habéis dejado por allí”). Sacramento significa según el diccionario:
“Cada uno de los siete signos sensibles de un efecto interior y espiritual que Dios obra en nuestras almas”. Por alguna razón Jesucristo ha impuesto unos sacramentos que son unos signos visibles y, como dice el diccionario, son “sensibles”. Referido a este sacramento (penitencia o reconciliación), Jesucristo otorgó a los apóstoles el poder para perdonar o retener los pecados a las personas. ¿Por qué, si éstas personas no necesitaban de los apóstoles (o obispos, o sacerdotes) para obtener el perdón de Dios?. Acabo este aporte con una pregunta. Las respuestas no las podré leer hasta dentro de dos semanas. Y es que cuando algunos vuelven de vacaciones, otros las empezamos…

Claro que, dentro de dos semanas sólo pararé unas horas en Madrid y es casi seguro que no miraré por estos foros, y luego me iré otra semana por ahí...