Carta de Albert Pike, famoso francmasón.
"La Tercera Guerra Mundial debe fomentarse aprovechando las diferencias provocadas por el "agentur" de los "Illuminati" entre los políticos sionistas y los líderes del mundo islámico. La guerra debe llevarse a cabo de tal manera que el Islam (el Islam) mundo árabe) y el sionismo político (el Estado de Israel) se destruyen mutuamente. Mientras tanto, las otras naciones, una vez más divididas sobre esta cuestión, se verán obligadas a luchar hasta el punto del completo agotamiento físico, moral, espiritual y económico... los nihilistas y los ateos, y provocaremos un formidable cataclismo social que, con todo su horror, mostrará claramente a las naciones el efecto del ateísmo absoluto, origen del salvajismo y de las más sangrientas agitaciones. Entonces, en todas partes, los ciudadanos, obligados a defender contra la minoría mundial de revolucionarios, exterminarán a esos destructores de la civilización, y a la multitud, desilusionada del cristianismo, cuyos espíritus deístas quedarán desde ese momento sin brújula ni dirección, ansiosos de un ideal, pero sin saber dónde rendir su adoración, Recibirán la luz verdadera a través de la manifestación universal de la doctrina pura de Lucifer, presentada finalmente a la vista del público. Esta manifestación será el resultado del movimiento reaccionario general que seguirá a la destrucción del cristianismo y del ateísmo, ambos conquistados y exterminados al mismo tiempo."