Que significado tiene la frase que proniuncia Jesús en Lucas 27-19

Re: Que significado tiene la frase que proniuncia Jesús en Lucas 27-19

Allí encuentro la frase: “En cuanto a mis enemigos, esos que no me quieren por rey, traedlos y degolladlos en mi presencia”.
Francamente me sorprende mucho tal expresión en Jesús, quien siempre he identificado con alguien lleno de misericordia y probablemente justo.
Quizá no tengo claro el contexto, aunque leí todo el capítulo, y no entiendo que buscaba él al decir esto. Me evoca la actitud soberbia y prepotente de alguien con una muy limitada visión.

Primero debes entender que dice que es una parábola.

Luc 19:11 Oyendo ellos estas cosas, prosiguió Jesús y dijo una parábola, por cuanto estaba cerca de Jerusalén, y ellos pensaban que el reino de Dios se manifestaría inmediatamente.

Las parábolas narran una historia ficticia que echa a un lado un mensaje, pero que no hay una correspondencia en cada punto y cada cosa que dice la historia de la parábola, sino en un punto en particular (o más de uno, pero no necesiariamente todos).

El objetivo de las parábolas no es hacer claro el mensaje, sino oscurecerlo.

En cuanto a que no se van a salvar todos, es algo sabido, ya que dice que la blasfemia contra el espíritu santo no será perdonada.
Y justamente ahí está hablando de los líderes que no querían que él reine, los religiosos de su época, que en un momento dijo que habían cometido ese pecado y los llamó hijos del diablo.
 
Apreciado fando1

Apreciado fando1

Obviamente me refiero a la cita de mateo que mencionó Norberto7

Capítulo 22

Parábola de la fiesta de bodas
22:1 Respondiendo Jesús, les volvió a hablar en parábolas, diciendo:
22:2 El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo;
22:3 y envió a sus siervos a llamar a los convidados a las bodas; mas éstos no quisieron venir.
22:4 Volvió a enviar otros siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, he preparado mi comida; mis toros y animales engordados han sido muertos, y todo está dispuesto; venid a las bodas.
22:5 Mas ellos, sin hacer caso, se fueron, uno a su labranza, y otro a sus negocios;
22:6 y otros, tomando a los siervos, los afrentaron y los mataron.
22:7 Al oírlo el rey, se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos homicidas, y quemó su ciudad.
22:8 Entonces dijo a sus siervos: Las bodas a la verdad están preparadas; mas los que fueron convidados no eran dignos.
22:9 Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis.
22:10 Y saliendo los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos y buenos; y las bodas fueron llenas de convidados.
22:11 Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí a un hombre que no estaba vestido de boda.
22:12 Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin estar vestido de boda? Mas él enmudeció.
22:13 Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.
22:14 Porque muchos son llamados, y pocos escogidos.


A esta clase de invitados ingratos es que deguellan las tropas romanas de Tito (ejecutor del juicio divino) en la destrucción de Jerusalén en el 70 dC. También pudieron ser ejecutados otros que no eran homicidas como aquellos por permanecer en la ciudad pece a las adverténcias de Jesús en el sermón del monte de los olivos. Estos perecieron por incredulidad a Jesús y sus discípulos y creer a los falsos profetas.