Afortunadamente, la inmensa mayoría de los gobiernos del mundo respetan la libertad de religión como nunca antes en la historia humana.
Da gracias a Dios, Miniyo, que puedes postear en este foro de Internet sin que corras peligro de que te manden a la hoguera.
Algo que ignoran los conspiranoicos cristianos es que esta época de la historia humana es radicalmente distinta a las demás.
- Antes los disidentes enfrentaban tiranía por todas partes. Hoy encuentran democracia.
- Antes intolerancia a ideas opuestas. Ahora, diálogo.
- Antes, superstición sin importar tu nivel educativo. Ahora, acceso al conocimiento.
- Antes, exclusión de las mujeres (la mitad de la humanidad, nada menos). Ahora, inclusión.
- Antes, imposibilidad de salir de la pobreza. Ahora, posibilidades inusitadas para tu prosperidad económica personal.
- Antes, una ciencia incipiente, impulsada por esfuerzos aislados. Ahora, proyectos multinacionales y multidisciplinarios enormes.
En los tiempos en que se escribió la Biblia, la sociedad era dirigida por personas que generalmente compartían la misma ignorancia, la misma enfermedad, la misma calidad de vida que la plebe. Un rey defecaba en condiciones tan poco higiénicas como un mendigo. Su mesa era abundante en cantidad, pero no tenía más calidad que del campesino más pobre. Era tan analfabeta como el más humilde de sus vasallos (y si era educado, era la excepción, y se hacía notorio por "sabio"). Era tan misógino, homófobo, o racista como uno de sus esclavos de palacio. Y sobre todo, desconocía profundamente al mundo. No viajaba, no se informaba, no debatía con otros reyes. Su mundo era un mundo diminuto, oscuro, trágico y breve.
La vida diaria de Salomón, con toda su magnificiencia, no podría compararse con la calidad de un profesor de primaria promedio de tu ciudad.
El Sanedrín, en sabiduría, no podría compararse con el consejo de ancianos que administra tu congregación.
No someterse a la autoridad, en tales circunstancias, era generalmente la única forma de hacer valer la verdad.
Así las cosas.
Así es
Lamentablemente en la cabeza de un conspiranóico no hay conexión de la realidad, de esto que tan claramente has dicho, sino buscan respaldar sus hilarantes ideas aun con la Biblia. Es decir, no les importa ser sediciosos lo cual es un pecado gravísimo, sino en su propias historias, uno de ellos "Titán" alegó que Jesucristo sería catalogado como conspiranóico, ahora el Miniyo creyéndose Daniel en el foso de los leones, cree que revelarse contra las autoridades es algo avalado por Dios.
En fin, no hay argumento que valga, no es posible razonar con ninguno de ellos, pues su idea fija esta fuera de la realidad.
La realidad para ellos solo es un concepto, lo importante es su realidad, y en su realidad, uno es Daniel, el otro quizás David o creerán que hacen como Cristo, es decir, el auto engaño en ellos mismos es total. Unos se creen muy listos, otros se creen héroes, otros se creen cristianos ejemplares, otros incluso se creen que desde su irrealidad pueden juzgar y satanizar personas, gobiernos, científicos, médicos, laboratorios, etc.
La pérdida de la realidad como antesala de la psicosis es un asunto delicado, esta alteración puede afectar no solo a quien la padece sino a personas cercanas y, lamentablemente con la Internet, a toda una sociedad.
Lamentablemente quien padece este mal es la última persona en notarlo.
