¿Que clase de inmortalidad le asignan al alma? y ¿Que es el alma?

¿No crees que te hallas en conflicto? Pues, si dices que no crees en una resurreccion literal, entonces para ti la muerte es un final. ¿Como va a ir al Paraiso a vivir para siempre si alguno muerto no resucitara?

Porque para entrar en el Paraíso no necesitamos tener este cuerpo.

Baháulláh compara el estado en que vivimos con el estado de un feto en el útero materno.
El feto no tiene la menor idea de lo maravilloso que es el mundo fuera de su madre, ni podría entender cualquier explicación que pudiéramos intentar darle, .
El feto vive en su propio mundo, oscuro, cálido, líquido, nutrido a través de la placenta y cordón umbilical. Durante su estancia en ese mundo desarrolla ojos aunque aún no vea, brazos y piernas aunque aún no corra ni trabaje... pulmones aunque aún no le sirvan aún para respirar.... estómago aunque aún no pueda digerir.

Dicen los psicólogos que el feto quizá conciba su cuerpo, la placenta, el útero y a su madre que lo lleva como un todo, indiferenciable de sí mismo.

Al nacer, sin embargo, tiene que desprenderse de ese mundo en el que se sentía tan cómodo y seguro. Debe dejar atrás no solo el útero, sino desprenderse de la placenta y cordón umbilical que lo nutría y al que percibía como parte de él mismo.

Pero es entonces, en le mundo exterior, lleno de luz, colores, sonidos, sabores, olores... el mundo del lenguaje y de la relación con el otro, que todos los sentidos que desarrolló dentro del útero le habrán de servir.

Nosotros todos somos como fetos que nos desarrollamos en esta existencia material.
Pero este tipo de existencia será transitoria. Algún día habremos de desprendernos de nuestro cuerpo, de nuestro hogar terreno, de nuestro trabajo, de nuestro planeta. "La carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios" (1 Cor 15:50)
Sin embargo, los atributos de carácter que habremos desarrollado nos ayudarán en ese otro "mundo" a seguir nuestro acercamiento a Dios.
 
Porque para entrar en el Paraíso no necesitamos tener este cuerpo.

Baháulláh compara el estado en que vivimos con el estado de un feto en el útero materno.
El feto no tiene la menor idea de lo maravilloso que es el mundo fuera de su madre, ni podría entender cualquier explicación que pudiéramos intentar darle, .
El feto vive en su propio mundo, oscuro, cálido, líquido, nutrido a través de la placenta y cordón umbilical. Durante su estancia en ese mundo desarrolla ojos aunque aún no vea, brazos y piernas aunque aún no corra ni trabaje... pulmones aunque aún no le sirvan aún para respirar.... estómago aunque aún no pueda digerir.

Dicen los psicólogos que el feto quizá conciba su cuerpo, la placenta, el útero y a su madre que lo lleva como un todo, indiferenciable de sí mismo.

Al nacer, sin embargo, tiene que desprenderse de ese mundo en el que se sentía tan cómodo y seguro. Debe dejar atrás no solo el útero, sino desprenderse de la placenta y cordón umbilical que lo nutría y al que percibía como parte de él mismo.

Pero es entonces, en le mundo exterior, lleno de luz, colores, sonidos, sabores, olores... el mundo del lenguaje y de la relación con el otro, que todos los sentidos que desarrolló dentro del útero le habrán de servir.

Nosotros todos somos como fetos que nos desarrollamos en esta existencia material, ignorantes de la gloria de los otros mundos de Dios.
Pero este tipo de existencia será transitoria. Algún día habremos de desprendernos de nuestro cuerpo, de nuestro hogar terreno, de nuestro trabajo, de nuestro planeta. "La carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios" (1 Cor 15:50)
Sin embargo, los atributos de carácter que habremos desarrollado nos ayudarán en ese otro "mundo" a seguir nuestro acercamiento a Dios.
 
Pero el espíritu lo es lo individual sino lo general.
Es el soplo o fuerza vital pero "nosotros" no vamos ahí.

Estas LOCO DE REMATE Salmito. ¿Quién te está enseñando esta BASURA? Mejor lee y ESTUDIA la Biblia.

Ecl 12:7 y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio.


¿Cúal espíritu? NUESTRO espíritu! ¿y cómo regresa a Dios? En SU CUERPO ESPIRITUAL:

1Co 15:44 se siembra un cuerpo natural, resucita un cuerpo espiritual. Pues si hay un cuerpo natural, hay también un cuerpo espiritual.

NO es el cuerpo espiritual de otro el que resucita junto al espíritu. Es el cuerpo del "YO" que muere en la carne Salmito.

Espíritu + cuerpo espiritual = Alma o ser completo espiritual. Asi es como regresamos a Dios cuando muere nuestra carne.


Entiendelo.

Luis Alberto42
 
Porque para entrar en el Paraíso no necesitamos tener este cuerpo.

Interesante todo lo que describes Alissa, pero no se trata de el como o con que cuerpo. El punto es que si no hay una resurreccion literal nadie va a estar en el Paraiso. El titulo de 1 Corintios todo el Capitulo 15 habla de una resurreccion literal de los muertos. En el hecho de que carne y sangre no heredan, no implica una negacion de resurreccion literal. Claro que se tendra cuerpo, no corruptible ni sangre que se corrompa, pero cuerpo al fin.

En resumen, no tendremos este cuerpo, y segun lo leido en el cap. 15 de 1 Corintios, si que tendremos otro cuerpo incorruptible, y ello es la resurrecion literal.
 
Porque para entrar en el Paraíso no necesitamos tener este cuerpo.

Baháulláh compara el estado en que vivimos con el estado de un feto en el útero materno.
El feto no tiene la menor idea de lo maravilloso que es el mundo fuera de su madre, ni podría entender cualquier explicación que pudiéramos intentar darle, .


Col 2:8 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.


Luis Alberto42
 
1. ¿Que clase de inmortalidad le asignan al alma?
2. ¿Que es el alma?
Alma es la suma del cuerpo físico y el espíritu. Otra, el alma es lo mismo que espíritu... y otra es el resucitado... el mas popular es que alma es la persona misma. Mmm, tiene varios significado el vocablo alma. Por otro lado, que se sepa, no se extingue el yo (pienso, luego existo) después de la muerte. Entonces no se le podría asignarle inmortalidad que no necesita, porque sigue vivo el yo (piensa y existe). Entonces, la inmortalidad del alma, se referirá luego de la resurrección, al espíritu con su nuevo vestido nuevo cuerpo físico.
 
1. ¿Que clase de inmortalidad le asignan al alma?
2. ¿Que es el alma?
ALMA
El uso dado en el contexto bíblico a los términos originales (heb. né·fesch [נֶפֶשׁ]; gr. psy·kjḗ [ψυχή]) muestra que la palabra “alma” se refería tanto a una persona como a un animal o a la vida que hay en ambos.

Sin embargo, la idea que la palabra “alma” comunica hoy a la mayoría de la gente no concuerda con el significado de los términos hebreo y griego que emplearon los escritores bíblicos inspirados.

Estees un hecho cada vez más reconocido. Ya en 1897, después de un análisis detallado del uso de né·fesch, el profesor C. A. Briggs hizo la siguiente observación en el Journal of Biblical Literature (vol. 16, pág. 30): “El uso que en la actualidad se le da en inglés a la palabra alma por lo general transmite un significado muy diferente de נפשׁ [né·fesch] en hebreo, y es fácil que el lector incauto la interprete mal”. Lo mismo pudiera decirse respecto al uso de la palabra “alma” en nuestro idioma.

Más recientemente, cuando la Sociedad de Publicaciones Judías de América editó una nueva traducción de la Torá —los cinco primeros libros de la Biblia—, el jefe de redacción, H. M. Orlinsky, de la universidad Hebrew Union, dijo que la palabra “alma” casi se había eliminado de dicha traducción porque “la palabra hebrea que se trata aquí es ‘nefesch’”.

Añadió que ‘otros traductores habían interpretado que esta significa “alma”, algo completamente inexacto.

La Biblia no dice que tengamos un alma. “Nefesch” es la persona misma, su necesidad de alimentarse, la mismísima sangre de sus venas, su propio ser’. (The New York Times, 12 de octubre de 1962.)

La dificultad estriba en que los significados que se suelen atribuir a la palabra “alma” no se derivan principalmente de las Escrituras Hebreas o de las Griegas Cristianas, sino de la antigua filosofía griega, que en realidad es pensamiento religioso pagano.

El filósofo griego Platón, por ejemplo, puso en boca de Sócrates las siguientes palabras: “El alma, [...] que se separa pura, sin arrastrar nada del cuerpo, [...] se va hacia lo que es semejante a ella, lo invisible, lo divino, inmortal y sabio, y al llegar allí está a su alcance ser feliz, apartada de errores, insensateces, terrores, [...] y de todos los demás males humanos, [...] para pasar de verdad el resto del tiempo en compañía de los dioses”. (Fedón, 80 d, e; 81 a.)

En contraste directo con la enseñanza griega de que psy·kjḗ (alma) es inmaterial, intangible, invisible e inmortal, las Escrituras muestran que cuando psy·kjḗ y né·fesch se utilizan con respecto a las criaturas terrestres, ambas se refieren a lo que es material, tangible, visible y mortal.

La New Catholic Encyclopedia (1967, vol. 13, pág. 467) dice: “Nepes [né·fesch] es un término mucho más abarcador que nuestro vocablo ‘alma’, pues significa vida (Éx 21.23; Dt 19.21) y sus diversas manifestaciones vitales: respiración (Gé 35.18; Job 41.13[21]), sangre (Gé 9.4; Dt 12.23; Sl 140[141].8), deseo (2Sa 3.21; Pr 23.2).

El alma en el AT [Antiguo Testamento] no significa una parte del hombre, sino el hombre completo: el hombre como ser viviente.

De manera similar, en el NT [Nuevo Testamento] significa la vida humana: la vida de la persona, el sujeto consciente (Mt 2.20; 6.25; Lu 12.22-23; 14.26; Jn 10.11, 15, 17; 13.37)”.

La traducción católica romana The New American Bible, en su “Glosario de términos de la teología bíblica” (págs. 27, 28), dice: “En el Nuevo Testamento, ‘salvar uno su alma’ (Mr 8:35) no significa salvar alguna parte ‘espiritual’ del hombre, como algo en oposición a su ‘cuerpo’ (en el sentido platónico), sino a la persona completa, destacando el hecho de que la persona vive, desea, ama y ejerce su voluntad, etc., además de ser algo concreto y físico” (publicada por P. J. Kenedy & Sons, Nueva York, 1970).
 
Voy a darle un punto de vista de hombre de campo a este tema. La mayor parte del pueblo hebreo era al fin y al cabo agricultor y ganadero, y las metáforas utilizadas constantemente en la Biblia abundan en este criterio.

Si ustedes han plantado un árbol, una viña o una flor en algún momento han tomado una semilla y la han insertado en una maceta o en una pequeña parcela de terreno. Vamos a suponer, a efectos de explicar mi forma de verlo, que la pequeña parcela es la Creación en su parte terrenal, la que nosotros conocemos. Lo primero que hace la planta es echar raíces, buscando agua y nutrientes. Esa raíz es nuestro cuerpo material, la parte de la planta que está en este plano.

La semilla es para mí el alma en su potencia, limpia y virginal, introducida en el cuerpo para poder germinar. A medida que la planta florece toma forma, buscando la luz. De igual manera, a medida que crecemos, siendo aún alma en potencia, inocentes como un niño, empezamos a tomar decisiones que van delimitando la forma que tendremos como planta, por así decirlo nuestra forma espiritual. En lo físico nuestras raíces crecen hasta los límites de cada especie. En lo espiritual, crecemos en función de nuestras decisiones. Como plantas no podemos vernos a nosotros mismos en lo espiritual, nos limitamos a evolucionar a partir de nuestras decisiones, del lugar en que estamos plantados y de las características que tenemos.

En nosotros conservamos la capacidad original de la semilla para impulsarnos por nuevos caminos. Para seguir dando fruto y mejorar. Para escuchar y aprender. La planta sigue creciendo y adaptando su forma durante toda su vida, con el propósito de dar fruto según la cualidad de cada especie. Esto es lo que el enemigo quiere evitar, que seamos diferentes, que aprendamos y mejoremos y que demos fruto. Le interesa que seamos estáticos, porque así nos puede controlar mejor, como hojas marchitas. Siempre debemos buscar el calor de la inocencia infantil.

Nuestro cuerpo, que sería el vehículo terrenal para la potencia del alma es caduco. El propósito que tendría sería hacer germinar la planta para que, llegado el momento de la cosecha, el Creador mande a sus ángeles a recolectar, para poder tomar los frutos e introducirlos en el Reino para su dicha eterna, en una maravillosa colección de increíble variedad basada en el libre albedrío.

Más ay, entró el pecado. El pecado como plaga, como enfermedad. Las hojas se estropearon, se marchitaron. Los frutos enfermaron. En su forma enferma tendrían que ser desechados, no serían santos como el Creador. El Señor, en su eterno amor decide buscar una manera de rescatar su cultivo, de eliminar la plaga, basándose nuevamente en el libre albedrío. Quiere separar la luz de las tinieblas, como se hizo desde el principio.

Con tal propósito dictó primero la Ley y luego vino el Redentor. Como cura para la enfermedad. El dolor y sufrimiento del Ungido recuerda al dolor y sufrimiento que uno se imagina que sufre una planta cuando se le arrancan las hojas enfermas. Por decirlo de una manera torpe, cargó el pecado en sí, lo tomó para sí, y sabe cómo eliminarlo, como cura y esperanza.

Antes de él todos los frutos estaban apartados, en el Seol. Estaban manchados, de una forma u otra. Él los limpió, listos para la gloria celestial, y separó los buenos de los malos.

La principal cualidad de las criaturas vivas, aparte de reproducirse - que según nuestros científicos define a un ser vivo y que de forma curiosa se opone al celibato -, es la de tomar decisiones. Nos pasamos todo el día tomando decisiones. Incluso lo que sale de nuestra boca al hablar es fruto de la toma de decisiones. Por eso es sano pensar en la forma de nuestro espíritu y no en las necesidades de la carne.

Me gusta esta metáfora porque permite sacar muchas conclusiones adicionales, aunque se que es imperfecta. La verdad sólo el Señor nos la puede transmitir.
 
1. ¿Que clase de inmortalidad le asignan al alma?
2. ¿Que es el alma?
No podemos comprender eso desde la mente. La mente esta sujeta a la dimension espacio/tiempo que vivimos en esta experiencia que llamamos "vida" aunque la vida va mas alla de ella. Nuestra consciencia es atemporal y no esta sujeta solamente a esta dimension sino a otras, tambien atemporales. En la epoca de Jesus, la vida eterna era una forma de explicar la dimension atemporal en la que tambien existimos como seres multidimensionales. Por ejemplo; los sueños, eso que la ciencia ha tratado como "un misterio" del cerebro, no es tal, sino la manifestacion de nuestra consciencia en otros planos de existencia. El plazo mas comun es el plano mental, creado todo por nuestra mente.
 
Señor Salmo, con todo respeto, de acuerdo al epigrafe quise suponer que Ud., estaba interesado en averiguar qué es lo que dice respecto a este tema, Los Sagrados Escritos, no supuse que Ud., quería centrarse en opiniones humanas y filosofías.

No cree Ud., que El Dios que nos creo, sabe perfectamente nuestra constitución?

Cuando Dios condenó a Adán en qué momento hablo respecto a su "alma"?
 
Josa Fructuoso

(IES “Gerardo Molina” de Torre Pacheco, Murcia)



RESUMEN

La psicología como ciencia se erige sobre un concepto tan poco científico como el “alma”, un concepto fundamental en el pensamiento occidental y que, desde su categoría de mito, se inserta en la filosofía, recorriéndola a lo largo de toda su historia.

En sus orígenes prefilosóficos y homéricos, el mito del alma es aún un concepto emergente y disperso que, antes de pasar a convertirse en el principio de inmortalidad atrapado en la cárcel mortal del cuerpo, propio de la corriente órfica y de la escuela pitagórica, carece de una denominación clara.

En los filósofos milesios el alma es un principio vital extensivo a la materia en su totalidad, que terminará desarrollándose como principio de movimiento y de sensibilidad, de conocimiento, por tanto. La asociación del alma con el conocimiento dará lugar a una teoría selectiva y aristocrática, en la que sólo alcanzarán la inmortalidad las almas que logren un conocimiento racional, que encontrará su máximo nivel de exposición en la teoría platónica.

En oposición a esta concepción y asociada al materialismo, el atomismo ofrece una teoría subjetivista de las sensaciones en una línea empírica más próxima a lo experimental.

En esta misma línea, Aristóteles insistirá en el tratado de las sensaciones sin abandonar tampoco la concepción tripartita platónica del alma.

El hedonismo esbozará, por último, una teoría homeostática de la sensación como búsqueda del placer.

Ya que al parecer, a Ud. no le interesa lo Bíblico, acá tiene lo que le deleita.
 
Señor Salmo, con todo respeto, de acuerdo al epigrafe quise suponer que Ud., estaba interesado en averiguar qué es lo que dice respecto a este tema, Los Sagrados Escritos, no supuse que Ud., quería centrarse en opiniones humanas y filosofías.

No cree Ud., que El Dios que nos creo, sabe perfectamente nuestra constitución?

Cuando Dios condenó a Adán en qué momento hablo respecto a su "alma"?

Tú interpelación al forista Salmo51 es bastante injusta. Y eso que es mortalista como tú.
 
Señor Salmo, con todo respeto, de acuerdo al epigrafe quise suponer que Ud., estaba interesado en averiguar qué es lo que dice respecto a este tema, Los Sagrados Escritos, no supuse que Ud., quería centrarse en opiniones humanas y filosofías.

No cree Ud., que El Dios que nos creo, sabe perfectamente nuestra constitución?

Cuando Dios condenó a Adán en qué momento hablo respecto a su "alma"?
Hola Solo.
No estoy entrando al foro estos días.
No quiero centrarme en opiniones humanas sino en las escrituras.
Y creo que Dios nos conoce como nadie.
Por otro lado yo creo que el hombre es carne.
Y no creo que alma sea sinónimo de hombre.
 
Josa Fructuoso

(IES “Gerardo Molina” de Torre Pacheco, Murcia)



RESUMEN

La psicología como ciencia se erige sobre un concepto tan poco científico como el “alma”, un concepto fundamental en el pensamiento occidental y que, desde su categoría de mito, se inserta en la filosofía, recorriéndola a lo largo de toda su historia.

Uno pensaría, como han hecho creer, que despues de haber declarado occidente la "muerte de Dios" y con ello haber aceptado como cierta la acusación de que el Cristianismo es la "más decadente de todasas religiones" las cosas irían mejor.

Uno hasta escucha esos discursos y piensa que ahora que "el alma" ya no es creída más que por minorías religiosas y grupitos de "engañados", la gente valoraría más la vida. De hecho nos vendieron el mito de que en la antiguedad la vida valía menos, se asesinaba más y se era más cruel porque la gente creía en la "inmortalidad del alma". ¿No era más fácil pasar a alguien a espada si lo envíabas a mejor (o peor) vida? Después de todo... Aquí se habría hecho "justicia" y "allá" también.

Pero es una mentira. Lo cierto es que si antes era fácil asestarle un golpe a tu hermano con la quijada de un asno... Hoy en la era donde nadie se preocupa por la existencia de un "alma", matar es gratis. Jesús había dicho que solo Dios podía destruir el alma y que por ello no había que temer a los que matan el cuerpo. Pero hoy se mata el alma destruyendo, mutilando y violentando el cuerpo. Después de todo... Dejámos de existir y ai dejamos de existir... Nuestra responsabilidad, acciones, pasiones, pensamientos y creencias deaaparecen de la existencia con nosotros. No. La vida no vale nada...¿Será coincidencia?.
Decía Dios :

"El que derrame sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada, porque a imagen de Dios hizo El al hombre."

Pero ¿Cuál imagén de Dios? Si en el último aliento el hombre desaparece con su persona y solo queda su cadáver?. Dicen: "el alma es la persona misma"... Pero luego dicen: "el alma deja de existir".

Siempre aparece alguien en los foros proclamando su evangelio: "Los muertos no existen". Fundamentan su argumento y camuflan su verdadero mensaje acusando a "Platón" y jugando a ambiguedades con la palabra "alma". Se les destruye su amiguedad y aflora su furia.

Digan la verdad. Ustedes pregonan la nada, una nada que es más que Dios. Prueba de ello es que el mismo Dios se las tiene que arreglar para hacerle trampa (aunque lo llaman "Omnipotencia") haciendo copias de los que ya no existen y a eso llaman "resurrección". Muy fácil jugar al epicureismo y al cristianismo (=saduceismo) reacomodando significados y abusando de las palabras.
Pero tranquilos...si es verdad lo que dicen, no pasará nada. Quizá lo más parecido es que el poder de Dios se reduzca a formar otro cuerpo, llamarlo DavidRomero, implantarle los recuerdos que alguna vez fueron mios y decirse a si mismo "Lo he resucitado, y ese es David porque yo soy Dios y es lo que me da la gana de llamar "verdad".

Así, no hay problema... Mi réplica recibirá el pago de mi recompenza pensando que en verdad él es yo y yo soy él. Y ante cualquier duda bastará repetir el mantra "eso es un razonamiento de hombre, mejor razonemos según la "Biblia" (de los mortalistas por supuesto).
 
Última edición:
Y ahora resulta que uno es el de poca fe y los mortalistas tienen la verdadera porque solo dependen de la resurrección de los muertos. Jejej. Ironías de la vida.

Los que ya dejaron de existir, Dios les devolverá la existencia.

Un argumento muy coherente. (Sarcasmo obviamente).
 
Tú interpelación al forista Salmo51 es bastante injusta. Y eso que es mortalista como tú.

Uno pensaría, como han hecho creer, que despues de haber declarado occidente la "muerte de Dios" y con ello haber aceptado como cierta la acusación de que el Cristianismo es la "más decadente de todasas religiones" las cosas irían mejor.

Uno hasta escucha esos discursos y piensa que ahora que "el alma" ya no es creída más que por minorías religiosas y grupitos de "engañados", la gente valoraría más la vida. De hecho nos vendieron el mito de que en la antiguedad la vida valía menos, se asesinaba más y se era más cruel porque la gente creía en la "inmortalidad del alma". ¿No era más fácil pasar a alguien a espada si lo envíabas a mejor (o peor) vida? Después de todo... Aquí se habría hecho "justicia" y "allá" también.

Pero es una mentira. Lo cierto es que si antes era fácil asestarle un golpe a tu hermano con la quijada de un asno... Hoy en la era donde nadie se preocupa por la existencia de un "alma", matar es gratis. Jesús había dicho que solo Dios podía destruir el alma y que por ello no había que temer a los que matan el cuerpo. Pero hoy se mata el alma destruyendo, mutilando y violentando el cuerpo. Después de todo... Dejámos de existir y ai dejamos de existir... Nuestra responsabilidad, acciones, pasiones, pensamientos y creencias deaaparecen de la existencia con nosotros. No. La vida no vale nada...¿Será coincidencia?.
Decía Dios :

"El que derrame sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada, porque a imagen de Dios hizo El al hombre."

Pero ¿Cuál imagén de Dios? Si en el último aliento el hombre desaparece con su persona y solo queda su cadáver?. Dicen: "el alma es la persona misma"... Pero luego dicen: "el alma deja de existir".

Siempre aparece alguien en los foros proclamando su evangelio: "Los muertos no existen". Fundamentan su argumento y camuflan su verdadero mensaje acusando a "Platón" y jugando a ambiguedades con la palabra "alma". Se les destruye su amiguedad y aflora su furia.

Digan la verdad. Ustedes pregonan la nada, una nada que es más que Dios. Prueba de ello es que el mismo Dios se las tiene que arreglar para hacerle trampa (aunque lo llaman "Omnipotencia") haciendo copias de los que ya no existen y a eso llaman "resurrección". Muy fácil jugar al epicureismo y al cristianismo (=saduceismo) reacomodando significados y abusando de las palabras.
Pero tranquilos...si es verdad lo que dicen, no pasará nada. Quizá lo más parecido es que el poder de Dios se reduzca a formar otro cuerpo, llamarlo DavidRomero, implantarle los recuerdos que alguna vez fueron mios y decirse a si mismo "Lo he resucitado, y ese es David porque yo soy Dios y es lo que me da la gana de llamar "verdad".

Así, no hay problema... Mi réplica recibirá el pago de mi recompenza pensando que en verdad él es yo y yo soy él. Y ante cualquier duda bastará repetir el mantra "eso es un razonamiento de hombre, mejor razonemos según la "Biblia" (de los mortalistas por supuesto).
Estás equivocado.
 
Creo que vos entendés que una vida no puede detenerse y volver a correr sin que esa vida no sea otra.
O sea que si se deja de vivir no se puede volver a ser.
Y si se vuelve a vivir después de haber muerto entonces ya no se es el mismo.
Por eso, según vos, no hay muerte ni resurrección sino un estado de vida sin cuerpo hasta la reasignación de un cuerpo.
¿Es así?
 
....
 
Creo que vos entendés que una vida no puede detenerse y volver a correr sin que esa vida no sea otra.
Lo lamento Salmo51 pero lo que tu crees que entiendo no es lo que yo entiendo. Equiparas insistentemente "vida" con existencia.

Para que una vida pueda detenerse y volver a correr, necesitas que algo permanezca en la existencia. Asi funcionan las cosas en el mundo que Dios creó aunque haya quienes quieran imaginar que Dios es capáz hasta de crear contradicciones y mentiras.

Una existencia no puede ser otra existencia. Si la existencia se detiene queda.... Nada.


O sea que si se deja de vivir no se puede volver a ser.


Nop. Ese es tu juego de palabras. No el mio.
Debiste decir: "Osea que si se deja de existir no se puede volver a ser". O al menos : "si uno dejará de existir en un punto de la historia, puede volver a ser la misma persona en otro punto".
Yo --> nada <-- Yo

Pero lo entiendo.
Es muy similar al tipo de ateo que dice "cuando muera todo se acabó" pero en verdad no lo cree. Cree que irá a una especie de vacío existencial, de oscuridad en la que no podrá pensar o caminar, hablar o expresarse. Osea a existir de otra manera, como un ser inerte... Como una roca. Si realmente creyera que dejará de existir, entendería al menos que "todo se acabo" significa que la muerte no es ni un viaje, ni una transición, ni una experiencia.

La inexistencia, hasta donde entiendo ni es un lugar, ni es un tiempo. No se puede ir y venir de la inexistencia. Decir "Volver a vivir" tiene sentido si se entiende que todo lo que vive existe, pero no todo lo que existe está vivo. Pero "volver a existir" solo tiene sentido si la nada es algo y algo funcional (y eso aparte de controversial es un oximorón).

Digamos que no existían los vasos de vidrio hasta que se creó el primero de ellos. A partir de ahí hay vasos que se rompen y desaparecen. Algunos son creados a partir de "cero" empezando el proceso de nuevo. Pero hoy en la era del reciclaje, se pueden crear vasos con el material de aquellos que desparecieron. No. No son el mismo vaso. Nunca lo serán.
Ahora. Los vasos pueden estar vacios y ser llenados. Puedo tomar el agua de un vaso con mi nombre y echarla en otro recipiente. Ahora el vaso marcado está vacio. Puedo llenarlo con la misma agua. Decir "volver a llenarlo con la misma agua" tiene sentido. Puedo botar el agua vieja y llenar el vaso con agua nueva. Tiene sentido decir "volver a llenarlo con la misma agua". Pero el vaso se cae y se quiebra en pedazos de modo que no queda ni rastro de él. Tiro los escombros a la basura. Pero decido recuperar mi vaso. Voy a la basura y reuno todos los pedazos dispersos. Compro una máquina mágica y meto en ella todos mis pedazos y tatan... ¡Es mi vaso otroa vez!.... Y hasta con mi nombre marcado. Ahora lo lleno de agua y ahí esta ¿He vuelto a llenar el vaso que había desaparecido?

Es cierto que Dios puede crear algo de la nada. Pero a eso creado de la nada se le llama "algo nuevo", algo que no existía hasta que Dios lo creó. Tantos años demostrando lo mismo y aun no lo captas. O más bien, lo ignoras a propósito para no tener que renunciar a tu doctrina.


Y si se vuelve a vivir después de haber muerto entonces ya no se es el mismo.

Para ser el mismo requieres continuidad. No hay continuidad en la inexistencia. La nada no es algo. Así que uno puede volver a vivir si uno existe.


Por eso, según vos, no hay muerte ni resurrección sino un estado de vida sin cuerpo hasta la reasignación de un cuerpo.
¿Es así?

Para que haya resurreción o más bien, que haya revivificación se requiere que algo que estuvo vivo, ahora esté muerto y vuelva a vivir.

La clave que desarma el significado que le adjudicas a las palabras y nos despierta a la realidad es el verbo "estar". El verbo estar presupone otra acción: La de ser. Para estar hay que ser. No hay algo que sea y no esté en algún tiempo o lugar. Por eso decimos "Ser o estar". En cambio la nada ni es, ni está. La única forma es que la nada sea algo y eso ya es contradecirse o simplemente ponerle a algo que ES, existe o está el nombre "nada".
Equiparas Vida con existencia para poder parecer que tu argumento tiene sentido. Pero no lo tiene. Si la muerte es inexistencia, entonces "muerte" no es más que un recurso lingüistico para decir "nada" o "inexistencia". Y si es así y tú tienes razón... La muerte no existe (para que no te enrredes, la muerte es la inexistencia absoluta). Decir "esta muerto" es como decir "está en un estado de inexistencia" o "está en un estado donde es nada". Y ya vimos que "nada" ni es, ni está.
Salvo la nada sea algo y la muerte sea un estado de existencia diferente a la vida.
 
Claro , Dios nos conoce a cada uno

Lucas 12:7 Pues aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis, pues; más valéis vosotros que muchos pajarillos.
Yo creo que aqui hay una lección para los "animalistas" que creen que la vida animal vale lo mismo que la humana, para esos que ni comen pollo.

Todo en su justa medida, la tarea de sojuzgar la tierra incluye aprovechar responsablemente sus recursos vivos también, sin faltar por ello a la piedad.