-El no resistir al malo, seguramente que implica sometimiento a Dios, confianza y obediencia; el ofrecer la otra mejilla debe implicar mucho más todavía.
Yo NO ESTOY HABLANDO de RESIGNACIÓN... NI DE BUSCAR el MARTIRIO... sino de BATALLAR... JUNTO CON/EN... el ESPÍRITU de DIOS... y para ello HAY QUE SOMETERSE a DIOS... y ESTE SOMETIMIENTO NO ES RESIGNACIÓN... SINO FE/CONFIANZA en DIOS... y OBEDIENCIA a lo que DIOS DISPONGA.