Re: ¿OBJECIONES AL CASTIGO ETERNO? Autor: Jessie Harzter
No no no no. El tema no es cual es este castigo que podemos tratarlo despues aqui mismo, pero el tema es si hay alguna objecion al castigo eterno.
No puede haber castigo eterno si el alma un dia sera aniquilada.
El castigo no es aniquilacion porque sino eso seria castigo de una hora o castigo de un dia, pero nunca castigo eterno.
1 Yo soy el [SUP]
a[/SUP]
Alfa y la Omega, [SUP]
b[/SUP]
Cristo el Señor; sí, soy él, el principio y el fin, el Redentor del mundo. 2 Habiendo ejecutado y [SUP]
a[/SUP]
cumplido la voluntad de aquel de quien soy, a saber, el Padre, tocante a mí —habiéndolo hecho para [SUP]
b[/SUP]
sujetar a mí todas las cosas—
3 reteniendo todo [SUP]
a[/SUP]
poder, aun el de [SUP]
b[/SUP]
destruir a Satanás y sus obras al [SUP]
c[/SUP]
fin del mundo, y el último gran día del juicio que pronunciaré sobre los habitantes del mundo, [SUP]
d[/SUP]
juzgando a cada hombre de acuerdo con sus [SUP]
e[/SUP]
obras y las cosas que haya hecho.
4 Y en verdad, todo hombre tiene que [SUP]
a[/SUP]
arrepentirse o [SUP]
b[/SUP]
padecer, porque yo, Dios, soy [SUP]
c[/SUP]
sin fin.
5 Por tanto, no [SUP]
a[/SUP]
abrogaré los juicios que pronuncie, sino que sobrevendrán los lamentos, lloros, [SUP]
b[/SUP]
gemidos y crujir de dientes, sí, a los que se hallaren a mi [SUP]
c[/SUP]
izquierda.
6 Sin embargo, [SUP]
a[/SUP]
no está escrito que no tendrá fin este tormento, sino que está escrito [SUP]b[/SUP]tormento sin fin.
7 Además, está escrito
[SUP]a[/SUP]condenación eterna; de modo que es más explícito que otras Escrituras, a fin de que obre en el corazón de los hijos de los hombres, enteramente para la gloria de mi nombre.
8 Os explicaré, por tanto, este misterio, porque os conviene saber, así como a mis apóstoles.
9 Os hablo a vosotros que sois escogidos en esto, como si fueseis uno, para que entréis en mi [SUP]
a[/SUP]
reposo.
10 Pues he aquí, el [SUP]
a[/SUP]
misterio de la divinidad, ¡cuán grande es! Porque, he aquí,
yo soy sin fin, y el castigo que por mi mano se da es castigo sin fin, porque [SUP]b[/SUP]Sin Fin es mi nombre. De ahí que:
11 [SUP]
a[/SUP]
Castigo eterno es castigo de Dios.
12 Castigo sin fin es castigo de Dios.
13 Por lo que, te mando que te arrepientas y guardes los [SUP]
a[/SUP]
mandamientos que en mi nombre has recibido de las manos de mi siervo José Smith, hijo;
14 y es por mi omnipotencia que los has recibido;
15 así que, te mando que te arrepientas; arrepiéntete, no sea que te hiera con la vara de mi boca, y con mi enojo, y con mi ira, y sean tus [SUP]
a[/SUP]
padecimientos dolorosos; cuán dolorosos no lo sabes; cuán intensos no lo sabes; sí, cuán difíciles de aguantar no lo sabes.
16 Porque he aquí, yo, Dios, he [SUP]
a[/SUP]
padecido estas cosas por todos, para que no [SUP]
b[/SUP]
padezcan, si se [SUP]
c[/SUP]
arrepienten;
17 mas si no se arrepienten, tendrán que [SUP]
a[/SUP]
padecer así como yo;
18 padecimiento que hizo que yo, Dios, el mayor de todos, temblara a causa del dolor y sangrara por cada poro y padeciera, tanto en el cuerpo como en el espíritu, y deseara [SUP]
a[/SUP]
no tener que beber la amarga copa y desmayar.
19 Sin embargo, gloria sea al Padre, bebí, y [SUP]
a[/SUP]
acabé mis preparativos para con los hijos de los hombres.
20 Por lo que otra vez te mando que te arrepientas, no sea que te humille con mi omnipotencia; y que [SUP]
a[/SUP]
confieses tus pecados para que no sufras estos castigos de que he hablado, los cuales en muy pequeño grado, sí, en grado mínimo probaste en la ocasión en que retiré mi Espíritu.
21 Y te mando que [SUP]
a[/SUP]
no prediques más que el arrepentimiento, y que [SUP]
b[/SUP]
no muestres estas cosas al mundo hasta que me sea prudente.
22 Porque por ahora no pueden [SUP]
a[/SUP]
tolerar carne, sino que deben recibir [SUP]
b[/SUP]
leche; por tanto, no deben saber estas cosas, no sea que perezcan.