Buenos días, Ricardo.
Bueno, ahí volveríamos al tema de que si el Dios de mi vecino es mi Dios, o que si su Cristo es mi Cristo.
Ya hemos hablado de que los discursos teológicos sobre Dios o sobre Cristo varían entre las religiones, e incluso entre miembros de una misma religión, pero que eso hace necesariamente que su Dios o su Cristo sean diferentes a mi Dios y a mi Cristo.
En última instancia, hay solo dos "dioses" o "amos": el Dios verdadero, que nos conduce a lo bueno, y el falso (con todos sus disfraces), que nos conduce a lo malo. Hay solo un Cristo verdadero (el que nos conduce a Dios) y un falso (el que nos aleja de Dios).
Creo que es sobre esta base que deberíamos examinar si el Jesucristo que visualizan colgado del madero no es en realidad Jesucristo, o si lo que pasa es tienen algunas ideas erróneas sobre Jesucristo. Y este sería asunto de otro debate. En este epígrafe, se ha estado examinando ideas sobre la forma de staurós. Todos concordamos con que es un palo vertical con un palo transversal, pero ellos y quizá algunos otros, continúan pensando que es solo un palo vertical.
Tal idea, aunque sea equivocada, no significa que sean enemigos de la cruz ni que nieguen el valor del sacrificio de Jesús.
Transcribo de su página web oficial:
"El sacrificio de Jesús es el medio que Jehová emplea para liberar, o salvar, a la humanidad del pecado y la muerte. La Biblia dice que la sangre de Jesús fue el precio que se pagó como rescate (Efesios 1:7; 1 Pedro 1:18, 19). Por eso, Jesús dijo que vino “a dar su vida como rescate por muchos” (Mateo 20:28, Biblia de Jerusalén, 1998)."