Cuando los ángeles se han aparecido
lo han hecho como hombres
Nunca como mujeres o niños
Así como hay cuerpos físicos visibles y palpables,
también los hay espirituales, que son invisibles
y están fuera del alcance de los sentidos humanos
Los cuerpos de los seres espirituales (Dios, Cristo, los ángeles) son gloriosos)
Cuando el apóstol Pablo tuvo una simple vislumbre
de la manifestación de Jesucristo después de haber sido resucitado,
cayó al suelo y quedó cegado por el resplandor,
de modo que fue necesario un milagro para devolverle la vista. (Hch 9:3-5, 17, 18; 26:13, 14.)
De igual manera, los ángeles son mucho más poderosos que los hombres. (2Pe 2:11.)
Son seres gloriosos, esplendorosos, y así es como han aparecido cuando se han manifestado en forma física.
(Mateo 28:2-4) Y resultó que había ocurrido un gran terremoto, porque el ángel de Jehová
había bajado del cielo, se había acercado a la tumba y había hecho rodar la piedra;
y ahora estaba sentado en ella.
3 El ángel brillaba como un relámpago y su ropa era blanca como la nieve.
4 De hecho, los guardias se asustaron tanto que se pusieron a temblar y quedaron como muertos.
(Lucas 2:9) Y, de repente, se les apareció el ángel de Jehová
y la gloria de Jehová brilló alrededor de ellos, y les dio mucho miedo.
Estos hijos espíritus de Dios tienen una visión suficientemente poderosa
como para ver y aguantar el esplendor del Dios Todopoderoso.
(Lucas 1:19) Y el ángel le respondió:
“Yo soy Gabriel, el que está de pie delante de Dios,
y fui enviado para hablar contigo y comunicarte estas buenas noticias.