El verdadero comunismo está en la Biblia.
Hechos 2:42-44
Vida de la primera comunidad cristiana
42 Todos se mantenían constantes a la hora de escuchar la enseñanza de los apóstoles, de compartir lo que tenían, de partir el pan* y de participar en la oración.
43 Todo el mundo estaba impresionado a la vista de los numerosos prodigios y señales realizados por los apóstoles.
44 En cuanto a los creyentes, vivían todos de mutuo acuerdo y todo lo compartían.
Los primeros cristianos eran solidarios, altruistas, caritativos, igualitarios y cooperativos. Daban sin esperar recibir nada a cambio. Lo que sobraba a unos, era entregado a los que les faltaba. Su estilo de vida se basaba en la distribución y compartición de la riqueza. Esto es el verdadero socialismo y el verdadero comunismo.
Todo lo demás son errores, confusiones y desviaciones. El socialismo científico o "marxismo" y el anarcocomunismo pueden tener parte de la razón en su crítica del sistema capitalista. Pero se equivocan en gran parte en su materialismo y las alternativas que proponen. Uno de los peores errores tanto de "marxistas" como de anarcocomunistas es querer prescindir de la religión. La fe, la esperanza y la caridad basadas en la religión cristiana dan un poder especial para desarrollar el socialismo y el comunismo verdaderos. Sin estas virtudes se hace mucho más difícil.
Hay que regresar a los valores, ideales i virtudes del cristianismo primitivo.