Por cierto, aquí está el origen de la Pascua y la Fiesta de una semana.
Jubileos 17:15-18
15 En el séptimo septenario, en su primer año, en el primer mes, en este jubileo, el doce de este mes, se dijo en los cielos de Abrahán que era fiel en todo lo que se le ordenaba. Dios lo amaba, pues había sido fiel en la adversidad. 16 Llegó el príncipe Mastema y dijo ante Dios: -Abrahán ama a su hijo Isaac y lo prefiere a todo. Dile que lo ofrezca en holocausto sobre el altar y verás si cumple esta orden. Entonces sabrás si es fiel en todo tipo de pruebas. 17 Sabía el Señor que Abrahán era fiel en las tribulaciones, pues lo había probado en su tierra con la miseria, lo había probado con riqueza de reyes, con su mujer, cuando le fue arrebatada, con la circuncisión y con Ismael y su esclava Agar, cuando los despidió. 18 En todo cuanto lo probó lo halló fiel, sin que su espíritu se impacientara ni retrasara el cumplimiento de nada, pues era fiel y amante de Dios.
Jubileos 18:1-19
1 Dijo el Señor a Abrahán:
-Abrahán, Abrahán.
El respondió:
-Aquí estoy.
2 Dios le dijo:
-Toma a tu hijo amado, Isaac, vete a la tierra alta y ofrécelo en sacrificio en un monte que te indicaré.
3 Levantándose de mañana, cargó su asno, tomó consigo a dos siervos y a su hijo Isaac, partió leña para el sacrificio y llegó al sitio en tres días, divisándolo en lontananza. 4 Llegó a un pozo y dijo a sus siervos:
-Quedaos aquí con el asna. El niño y yo seguiremos y, cuando hayamos terminado la adoración, volveremos a vosotros.
5 Reuniendo la leña del sacrificio, se la cargó a su hijo Isaac, tomó él mismo el fuego y el cuchillo, y fueron ambos juntos hasta aquel lugar.
Ó Dijo Isaac a su padre:
-Padre.
Respondió éste:
-Aquí estoy, hijo mío.
Añadió Isaac:
-Aquí hay fuego, cuchillo y leña; pero ¿dónde está la oveja para el holocausto, padre?
7 Respondió Abrahán:
-El Señor proveerá la oveja del holocausto, hijo mío.
Se acercó al lugar en el monte del Señor, 8 levantó el altar, puso la leña sobre él, ató a su hijo Isaac, lo colocó sobre la leña, encima del altar, y tendió la mano hacia el cuchillo para degollar a Isaac.
9 Entonces yo me puse ante él y ante el príncipe Mastema. Dijo el Señor:
-Dile que no abata su mano contra el niño ni le haga nada, pues ya veo que es temeroso de Dios.
10 Lo llamó el Señor desde el cielo:
-¡Abrahán! ¡Abrahán!
El respondió turbado:
-Heme aquí.
11 Añadió Dios:
-No pongas tu mano sobre el niño ni le hagas nada; ahora sé que eres temeroso del Señor, pues no me has negado a tu hijo primogénito.
12 El príncipe Mastema quedó confundido. Abrahán alzó sus ojos y vio un carnero enredado por sus cuernos en la espesura. Fue Abrahán, lo cogió y lo ofreció en holocausto, en lugar de su hijo. 13 Y Abrahán llamó a aquel lugar «Dios ha visto», como se dice ahora, «Dios ha visto (en el
monte)>>, que es el monte Sión. 14 El Señor llamó a Abrahán nuevamente por su nombre, desde el cielo, del mismo modo que había hecho que nos apareciéramos a él para hablarle en nombre del Señor. 15 Le dijo:
-Por mí mismo juro, pues has cumplido esta orden y por mi causa no has compadecido a tu hijo primogénito, al que amas, que te bendeciré y multiplicaré tu descendencia como los astros del cielo y las arenas de la orilla del mar. Tu descendencia heredará las ciudades de tus enemigos
16 y por ella serán benditos todos los pueblos de la tierra, por cuanto escuchaste mi voz. He hecho saber a todos que me eres fiel en cuanto te ordeno. Ve en paz.
17 Abrahán volvió junto a sus esclavos. Se marcharon y fueron juntos a Bersabee, donde moró Abrahán. 18 Celebraba él esta fiesta todos los años siete días, con regocijo, llamándola fiesta del Señor, por los siete días en que había ido y vuelto con bien. 19 Así está escrito y establecido
para Israel y su descendencia en las tablas celestiales: que celebren esta fiesta siete días con regocijo festivo.