Re: La Nación de Israel bajo Fuego.
<header class="entry-header" style="margin: 0px; padding: 0px; border: 0px; outline: 0px; font-size: 12px; vertical-align: baseline; list-style: none; color: rgb(153, 153, 153); font-family: 'PT Sans', sans, serif; line-height: 20px; background-image: initial; background-attachment: initial; background-size: initial; background-origin: initial; background-clip: initial; background-position: initial; background-repeat: initial;">
El Hamás mata 30 civiles y ajusticia otras docenas pero “eso no es noticia” – por Ilan Eichner
Jul 30, 2014</header>
Lamentablemente, se suman a la lista de muertos civiles inocentes en la Franja de Gaza un mínimo 30 palestinos (por errores en sus disparos de cohetes contra Israel), cosa que los medios de comunicación masiva, maestros del doble estándar moral, no reportarán ya que en esta ocasión no tienen la posibilidad de responsabilizar a las Fuerzas de Defensa de Israel, que avanzan con determinación y seguridad en su lucha contra el terrorismo radical islámico de la agrupación Hamás, opresora principal del pueblo palestino con residencia en la franja de Gaza.
Murieron 30 personas y se convertirán en una estadística más, pasarán de manera desapercibida al olvido – no es que no haya sido así en todas las otras ocasiones, dónde lo importante no es la pérdida de vidas sino la demonización de la “entidad sionista” – porque seguramente ningún país u organización pseudo-defensora de los derechos humanos, como por ejemplo la UNRWA, que suelen ser muy selectivas en lo que confiere a su concepto de justicia y derechos humanos, condenarán lo sucedido; deja de ser importante cuando el objetivo no es deslegitimar la única democracia del medio oriente, Israel.
De acuerdo con fuentes palestinas, el grupo terrorista islámico Hamás ha ejecutado brutalmente a más de 30 gazatíes acusados de colaborar con Israel en el vecindario de Shejaiya dentro de la Franja. Se ha reportado también la captura por parte de la organización terrorista de docenas, centenas quizás, de sospechosos de estar ‘implicados’ de alguna forma u otra en supuestamente cooperar con el estado judío. “Los 30 presuntos colaboradores fueron ejecutados” de manera inhumana tras sufrir una serie de torturas y humillaciones dignas del terrorismo islámico de Hamás, después de una breve investigación y sin juicio, reportó el pasado lunes el ‘Times’ de Israel, citando una agencia de noticias Palestina.
Las tres decenas de civiles palestinos gazatíes e inocentes fueron condenados a muerte por el grupo terrorista Hamás, por haberse hallado tarjetas SIM de una compañía israelí en sus teléfonos celulares.El terrorista Hamás declaró que los ejecutados eran culpables argumentando que a través de las tarjetas SIM proveían a la Fuerza Aérea Israelí de inteligencia para elegir objetivos que alcanzar dentro de Gaza, teoría de tal nivel disparatico que no vale la pena desarmar por su nivel de incoherencia y raciocinio ilógico y amarillista.
El Canal 10 de Israel reportó hoy que 20 palestinos fueron ejecutados el día lunes por haber participado en una protesta en favor de la paz en Gaza, una manifestación de ‘verdadera’ liberación palestina, liberación del yugo del terrorista Hamás, no como las que suceden en Francia o Turquía con un objetivo estrictamente antisemita, de propiciar los disturbios y atentar contra el orden social, bajo el argumento de ser activos colaboradores del Estado de Israel. No es seguro — de hecho, es altamente improbable — que los últimos 20 mencionados estén incluidos dentro del conteo de los 30 ejecutados que anunció de manera oficial la agrupación terrorista Hamás.
Con una situación como esta, dónde hay palestinos matando palestinos y el mundo se hace de la vista gorda porque ‘no hay noticia’ (desde luego que no es noticia que el grupo terrorista Hamás mate civiles palestinos, es su práctica rutinaria más común), no es difícil poner en tela de juicio los criterios para la definición de los ‘derechos humanos’ y de la justicia de organizaciones como la UNRWA y propiamente las Naciones Unidas, un grupo meramente elitista, de mayoría árabe y poco interesado por la paz o el progreso en el Medio Oriente. No amerita ni siquiera hacer un juicio para convencernos de la subjetividad de la prensa y los medios masivos. Situaciones como estas, que suceden a menudo, nos sirven para tener presentes dos cosas, en primer lugar, que el verdadero opresor del pueblo palestino es el grupo terrorista Hamás y su ideología islámica radical, no cabe la menor duda, y en segundo lugar, no menos importante, el hecho de que el ciego y desorientado apoyo al pueblo palestino de la mayoría del mundo debería apuntar a la condena del grupo terrorista y no a la deslegitimación del estado de Israel, que busca, a toda costa, la paz.
http://hatzadhasheni.com/el-hamas-m...enas-pero-eso-no-es-noticia-por-ilan-eichner/