Re: LA LEY Y LA GRACIA
13:1 Habló Jehová a Moisés y a Aarón, diciendo:
13:2 Cuando el hombre tuviere en la piel de su cuerpo hinchazón, o erupción, o mancha blanca, y hubiere en la piel de su cuerpo como llaga de lepra, será traído a Aarón el sacerdote o a uno de sus hijos los sacerdotes.
13:3 Y el sacerdote mirará la llaga en la piel del cuerpo; si el pelo en la llaga se ha vuelto blanco, y pareciere la llaga más profunda que la piel de la carne, llaga de lepra es; y el sacerdote le reconocerá, y le declarará inmundo. Levíticos 13;1-3.
Además, la persona que tocare alguna cosa inmunda, “inmundicia de hombre”, o animal inmundo, o cualquier abominación inmunda, y comiere la carne del sacrificio de paz, el cual es de Jehová, aquella persona será cortada de entre su pueblo. Levíticos 7:21.
La ley prohíbe tocar a quien fue declarado inmundo.
8:1 Cuando descendió Jesús del monte, le seguía mucha gente.
8:2 Y he aquí vino un leproso y se postró ante él, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.
8:3 Jesús extendió la mano y le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante su lepra desapareció. Mateo 8:1-3.
Si hubiese estado bajo la ley, con el hecho de tocar al leproso delinquió según la ley.
¿Otro?
El más debatido por doquier y que no reconocen estando tan claro.
La ley dice:
20:9 Seis días trabajarás, y harás toda tu obra;
20:10 mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas.
Según la palabra de Dios, Cristo vino a ser siervo de la circuncisión, a predicar el arrepentimiento, a anunciar el reino de Dios, a mostrarnos su nombre, etc. etc…
Parte de esa obra son los milagros.
Esa es la obra que Cristo vino a hacer en el mundo.
¿No es una obra?
¿Cuándo descansó en sábado de hacer esa obra a la que fue designado?
Abiertamente aceptó que también el sábado trabajaba haciendo esa obra, y la ley dice que no debes de hacer ninguna obra.
Si Cristo hubiera estado bajo la ley, según la ley Él era un pecador y merecía ser lapidado, es el castigo que designa la ley para ese pecado.
Él hacia una obra en sábado, y la ley dice, no harás obra alguna el sábado.
Y te voy a decir porque Cristo hacia lo que hacía.
Él vivía conforme al fruto del Espíritu que es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza.
Y debes de saber que contra tales cosas no hay ley.
Eso significa que Cristo no estaba sujeto a la ley, estaba sujeto al fruto del Espíritu.
Y si no estaba sujeto a la ley, no nació bajo la ley.
Porque todo aquel que nace bajo la ley nace en sujeción a la ley.