Una explicación para los cristianos que leen este epígrafe.
Guardar La ley:
Guardar la ley es ser obedientes a todos los mandamientos, todos los días de tu vida. Eso solo lo pueden hacer los judíos, pues a ellos Dios les dio la ley. Nosotros no fuimos invitados a ese pacto.
Cumplir la ley:
La ley se cumple una sola vez, Cristo lo hizo con su vida (pago el precio): vengo a cumplir la ley, “no a abrogarla” dijo. Entonces la ley está vigente completita el día de hoy.
A cumplir la ley si fuimos invitados. (Nuevo pacto)
Primero a los Judíos:
El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.
Después a todos:
Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan, Hechos 17:30.
Se nos extendió una invitación de ir a la cruz juntamente con Cristo, y así morir juntamente con El. Esto por fe.
Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo.
No murió en nuestro lugar como muchos ven las palabras, “murió por nosotros”.
“Murió por nosotros”, significa: murió por causa nuestra, para que nosotros pudiéramos morir juntamente con El.
Al morir (con El), la justicia de la ley (la muerte del pecador), se cumple en nosotros, así Dios hace justicia, Dios nos ve colgados de un madero juntamente con El (en la fe). De esta manera somos la justicia de Dios en El.
Es lo mismo, cuando dice, que por nosotros se hizo maldición, juntamente con El fuimos malditos y colgados en la Cruz juntamente con El.
Aquí es donde el adventista no está de acuerdo, pues ellos prefieren estar sujetos a la ley, que morir juntamente con Cristo, y así cumplir la ley. Prefieren la ley a morir con Cristo, desechando así la gracia de Dios.
Pablo dice: porque yo por la ley, soy muerto para la ley, a fin de vivir para Dios Galatas 2:19.
Así también vosotros, hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo. Romanos 7:4.
Así se cumplió la ley, con la muerte.
Por eso me ama el Padre, porque Yo pongo mi vida, para volverla a tomar.
Nadie me la quita, sino que Yo de mi mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre. Juan 10: 17-18.
Fue lo que dijo Jesús, vengo a cumplir la ley. No a abrogarla.
O a caso no testifica eso nuestro bautismo. Que morimos con Cristo. La vida toda de Pablo pendía de este hecho federal, como testificó a Pedro. “CON CRISTO HE SIDO CRUCIFICADO; Y YA NO VIVO YO, MAS VIVE CRISTO EN MI “. Galatas 2:20.
Nuestra verdadera identificación con la muerte de Cristo debería ser la que Pablo expuso en Romanos 6:1-13.
Versículo 2: porque los que hemos muerto al pecado.
Versículo 3: hemos sido bautizados ha su muerte.
Versículo 4: porque somos sepultados juntamente con El para muerte por el bautismo.
Versículo 5: fuimos plantados juntamente con El en la semejanza de su muerte.
Versículo 6: que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con El
Versículo 7: porque el que ha muerto, ha sido justificado del pecado.
Versículo 8: morimos con Cristo.
Versículo 11: consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios.
Versículo 13: presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos.
La escritura relaciona el bautismo con la muerte, no con la limpieza; con la sepultura, no con la exaltación; CON EL FIN DE UNA RELACION ANTERIOR PARA QUE PODAMOS ENTRAR EN UNA NUEVA.
¿O ignoráis que todos los que fuimos bautizados a Cristo Jesús, fuimos bautizados a su muerte?
Mas ahora Pablo refiriéndose a la resurrección, dice así: que el Padre y no el Hijo. Abrogó el mandamiento (la ley) dado a Israel.
Sepultados con El en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con El, mediante “la fe” en el poder de Dios que le levantó de los muertos los muertos. Colosenses 2:12.
Anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz. Col. 2:14.
Como vez, en este mundo existimos dos tipos de personas, unas que ya cumplimos la ley, muriendo con Cristo en la cruz, que ya no pertenecemos a este mundo, pero que todavía existimos en el formando el cuerpo de Cristo (la iglesia). Pero pertenecientes al reino de los cielos.
Para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales. Efesios 3: 15.
Y las otras personas, que no han cumplido la ley (no han muerto con Cristo en la cruz), que pertenecen todavía a este mundo con su ley.
A las cuales hay que predicar el evangelio.
Resumiendo:
¡La ley está vigente completa!
¡La ley está abrogada, para quien ya la cumplió! (muriendo a ella juntamente con Cristo en la cruz)
Pues, auque vive en este mundo, no es de este mundo, tiene otra ciudadanía.
¡El cristianismo comienza en la resurrección!
Cristo habla del cumplimiento de la ley por medio de un pago (su vida).
Pablo habla de la abrogación de la ley en la resurrección del creyente juntamente con Cristo.
Con lo que queda claro que ni Cristo, ni Pablo se contradicen. Como los adventistas pretenden hacer ver. Y tratan de dividir la ley en dos.
En el bautismo que ellos practican (si acaso lo practican) quedan medios muertos. (Pues quieren morir a una parte de la ley solamente)
Bendiciones.