Re: LA LEY DEL PECADO vs LA LEY DE CRISTO
PARA QUIENES LES PUEDA INTERESAR
Ni yo tampoco he dicho que lo elimine, pero si te tomaras el trabajo de leer y analizar lo que escribimos, no tendría que corregirte a cada rato. Lo que anteriormente expuse, y concuerda con toda la escritura, es que la ley de Moisés, siendo espiritual, se aplica solo al ámbito de la carne; mientras que la ley de Cristo se aplica a ambos: al ámbito de la carne y al ámbito del espíritu; exactamente como lo narró El menor en su ejemplo.
El intercambio de opiniones en este foro nos da la oportunidad de conocer las múltiples interpretaciones que se pueden dar a un texto bíblico. Por ejemplo, “El que la Ley de Moisés siendo espiritual se aplique al ámbito de la carne y que la ley de Cristo se aplique a ambos: al ámbito de la carne y al ámbito del espíritu” es algo novedoso, al menos para mí.
Afirmar que esta forma de interpretar “concuerda con toda la escritura” suena muy arriesgado más aún cuando sabemos que espíritu y carne son irreconciliables, además de excluyentes. O andamos en el Espíritu o andamos en la carne, no existe punto intermedio como para necesitar una Ley que “sirva para ambos, carne y espíritu”.
Partiendo de esta premisa y, asociando textos bíblicos que refieren a la justicia y no a la justificación o salvación (que son conceptos diferentes), algunos entienden que antes de Cristo la única forma que el hombre podía lograr su salvación era por las obras de las Ley y, después de Cristo, por gracia por medio de la fe.
Si la afirmación anterior fuese cierta entonces ninguno de los hombres que vivieron antes de Cristo será salvo porque la biblia dice claramente que “por las obras de la ley ningún ser humano será justificado”,
Lo real y concreto es que antes de Cristo y después de Cristo el hombre siempre ha alcanzado, alcanza y alcanzará la salvación, por fe. Siempre ha existido un solo camino para que el hombre sea salvo: la fe. Además, una sola Ley.
Dios no juega con el hombre ¿Cómo se puede creer que entre Adán y Moisés, regía una Ley, que entre Moisés y Cristo, otra Ley y que, a partir de Cristo, rige la Ley de Cristo, todas ellas diferentes?.
El evangelio se encuentra impregnado en toda la biblia, desde el Génesis hasta el Apocalipsis, y no solo en el nuevo testamento.
No te parece porque tienes el entendimiento embotado con el velo que cubre a los que siguen obedeciendo a Moisés, torciendo la escritura, como lo haces en tu siguiente análisis:
Obviamente, al tragarte la mitad del pasaje lo tergiversas y entonces concluyes lo que tu humano entendimiento ha creido o lo que tu religión te ha enseñado; no concluyes aquello a lo que el Espíritu te guía; por lo tanto voy a transcribirlo completo para que todos se den cuenta como malinterpretas la escritura al cortarle versículos:
Revisemos primero
Rom 7:14 “Porque sabemos que la Ley es espiritual pero yo soy carnal, vendido al pecado”.
Pablo menciona que no se puede cumplir la Ley porque es espiritual y domina en nosotros nuestra naturaleza pecaminosa (vendidos, esclavo del pecado).
En contraparte, se entiende que si se anda en el Espíritu, libre de la naturaleza pecaminosa, sí se puede cumplir la Ley que también es espiritual.
Con este concepto leamos nuevamente Gálatas:
Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.
Pablo hace contrastes entre Espíritu y Carne. Observemos claramente las ideas que desarrolla:
- Si Espíritu, no carne
- La carne es opuesta al Espíritu.
- El espíritu es opuesto a la carne.
- Si Espíritu, no estamos bajo la Ley [Espíritu]
Queda claro que “si andamos en el Espíritu, no nos domina la carne, no somos esclavos de nuestra naturaleza pecaminosa, NO ESTAMOS BAJO LA LEY DEL PECADO [que no es la Ley de Dios].
Luego concluye que “si somos guiados por el Espíritu no estamos bajo la Ley, o lo que es lo mismo, estamos en armonía con la Ley, no transgredimos la Ley, cumplimos la Ley, porque esta Ley también es Espiritual.
¿Y por qué no transgredimos la Ley?. Porque si andamos y somos guiados por el Espíritu manifestaremos el fruto del Espíritu y la ley solo condena las obras de la carne tal como lo desarrolla Pablo en los siguientes versos cuando refiere a las obras de la carne.
Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
Las obras de la carne transgreden la Ley porque la Ley es Espiritual. Obviamente, si aún andamos en la carne, bajo el dominio de la Ley del pecado, manifestaremos las obras de la carne que son contrarias a la Ley de Dios que es Espiritual y, por contraste, se evidenciará que no andamos en el Espíritu.
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley; pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.
“CONTRA tales cosas no hay ley”. Recordemos el contraste que hace Pablo entre andar en el Espíritu y andar en la carne donde deja muy claro que son excluyentes es decir, si andas en la carne no puedes tener el fruto del espíritu y si tienes el fruto del espíritu no puedes tener los frutos de la carne.
La Ley que es espiritual solo es contraria a las obras de la carne por el antagonismo irreconciliable entre Espíritu y Carne pero, esta misma Ley no puede ser contraria al fruto del Espíritu porque ésta también es espiritual, en consecuencia:
- El fruto del Espíritu cumple con la Ley por lo tanto, contra tales cosas no hay Ley que le sea contraria.
¿Dice el verso que no debemos cumplir con la Ley porque tenemos el fruto del Espíritu?. No, solo dice que no hay Ley que se oponga al fruto del Espíritu, no hay Ley que lo condene, no hay Ley que le sea contraria.
¿Dice el verso que si somos guiados por el espíritu (si tenemos el fruto del espíritu) y quebrantamos la ley, no pecamos?. No, porque es un absurdo. Veamos:
Quebrantar la Ley es manifestar las obras de la carne (adulterar, fornicar . . . etc.) y para el que es guiado por el Espíritu, el que tiene el fruto del Espíritu, es imposible que manifieste obras de la carne es decir, que quebrante la Ley,
Por consiguiente decir que “El que es guiado por el Espíritu y quebranta la ley, no peca” equivale a decir “El que es guiado por el Espíritu
y hace las obras de las carne, no peca” a todas luces no concuerda con la exposición de Pablo,porque ESPIRITU Y CARNE SON OPUESTOS, SON EXCLUYENTES, NUNCA SE MANIFIESTAN NI MANIFESTARÁN JUNTOS.
Claro como el agua, sin necesidad de añadirle o quitarle nada como haces mas adelante, torciendo la escritura.
En consecuencia, Gálatas 5: 22 dice que si andas por el Espíritu, tus obras serán las que se manifiestan cuando se ama al prójimo y se busca su bienestar; y recalca que contra tales cosas no hay ley, ni siquiera el decálogo; pues si este fuera taaaaan importante, lo hubiera mencionado.
El decálogo dice no matarás, no hurtarás, etc.
Según la afirmación anterior, si eres guiado por el espíritu entonces, por: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; puedes: matar, hurtar, fornicar y no pecar, porque ni siquiera el decálogo condenará ni será contrario a dichos actos y lo que es más, el que hace estas cosas, seguro que tendrá la condena de la sociedad, pero, ante Dios “no peca”. DIFICIL DE DIGERIR
Gálatas 5: 18 debe entenderse como lo que escuetamente dice, sin añadirle ni quitarle nada:
si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.
Es responsabilidad de cada uno la decisión de transgredir la Ley creyendo que si lo hacen “guiados por el espíritu” no pecan.