Klauddia;n3147560 dijo:
Saludos Miguel Loayza:
Sólo para agregar información; la resurrección es de los cuerpos, no de las almas.
La resurrección está completamente ligada en referencia al cuerpo.
Eze. 18:4: “El alma que esté pecando... ella misma morirá.” (Las versiones
VV (1977),
Str, TA y
NC vierten la palabra hebrea
neʹ
phesh “alma” en este versículo, y así indican que es
el alma lo que muere.
Algunas traducciones que vierten
neʹ
phesh “alma” en otros pasajes usan las expresiones “el hombre” o “aquel” en este versículo.
De modo que
neʹ
phesh, el alma, es la persona, no una parte inmaterial de esta que sobreviva cuando el cuerpo muere.)
Sal. 146:4: “Sale su espíritu, él vuelve a su suelo; en ese día de veras perecen sus pensamientos.” (La palabra hebrea que se traduce “espíritu” aquí es un derivado de
ruʹ
ach.
Algunos traductores la vierten “aliento”. Cuando esta
ruʹ
ach —o fuerza vital activa— sale del cuerpo, los pensamientos de la persona perecen; no continúan en otra región o esfera.)
Ecl. 3:19-21: “Hay un suceso resultante con respecto a los hijos de la humanidad y un suceso resultante con respecto a la bestia, y ellos tienen el mismo suceso resultante. Como muere el uno, así muere la otra; y todos ellos tienen un solo espíritu, de modo que no hay superioridad del hombre sobre la bestia, porque todo es vanidad. Todos están yendo a un solo lugar. Todos procedentes del polvo han llegado a ser, y todos están volviendo al polvo.
Si se presta la debida atención, sin anteponer conceptos preconcebidos, se podrá llegar a la comprensión que lo que muere es 'el alma', no se se dice así, con respecto al "espiritu" del que se dice que vuelve a Dios.
Pero tampoco se halla ningún verso, que diga algo referente al espíritu de alguien que haya muerto, como en el caso de las "almas" debajo del altar en Apocalipsis, donde cualesquier persona ducha en Los Sagrados Escritos, advertirá que realmente no son almas, sino la sangre de los mártires.