Estimado Armando.En una ocasión, hace más de 25 años escuché a un "pastor" predicar sobre la embriaguez. Que él había visto a Fulano 'empinando el codo' y que tomar licores o cerveza era además de pecado una desvergüenza, etc etc... No contaré todo el 'sermón'.
En aquél entonces 'no dije ni pío' porque yo tomaba cuando aquello 6 cervezas diarias. Saliendo del trabajo paraba en la bodega de la esquina de mi casa y compraba un 'six pack' (una caja de 6 cervezas), empezaba a cocinar porque mi esposa llegaba después que yo del trabajo y cocinando me tomaba 5, la última era con la comida. Hoy no tengo esa costumbre, mas no por ningún motivo religioso sino porque mi rutina diaria ha cambiado y la labor que realizo requiere de sobriedad constante. Siempre tengo cerveza en el refrigerador, vino y licores al alcance, pero no porque tomo todos los días; ahora sólo tomo ocasionalmente, con un amigo que llegue, una visita o algún día que celebramos algo.
Señores, es cierto que la Palabra dice que los borrachos no heredarán el reino de Dios, pero no se confundan, la Palabra no condena al que se embriaga sino a 'los borrachos', parece lo mismo ¡pero no lo es!
Disfruten unas cervezas con los amigos o una botella de vino, ron o licor, eso no es pecado.
No hagan caso a los "pastores" porque Jesús nuestro Pastor no prohibió las bebidas alcohólicas.
Cordial saludo.
Encontré un artículos sobre los secretos de la longevidad en Japón. Y no la alquimia taoísta.
El SAKE es parte de eso.
El secreto de los centenarios japoneses
El tercer lunes de septiembre, el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón regala cada año en nombre del primer ministro una 'copita de sake' hecha en plata a todos aquell
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