Re: La doctrina de 1844, preguntas y textos perdidos
Estimado conet. Saludos cordiales.
Tú dices:
Respondo: Los adventistas no somos como los tj, que tienen su cuerpo gobernante que escriben y dan pautas de lo que debe creer y hacer cada miembro. Nosotros nos atenemos a la Biblia y como sabes, tenemos además el plus del "espíritu de profecía" para obrar de acuerdo a nuestras conciencias.
"Los ministros que han predicado la verdad con todo celo y fervor pueden apostatar y unirse a las filas de nuestros enemigos; acaso ¿transforma esto la verdad de Dios en mentira? "Pero -dice el apóstol- el fundamento de Dios está firme." (2 Tim 2: 19.) Pueden cambiar la fe y los sentimientos de los hombres; pero nunca la verdad de Dios. Se está proclamando el mensaje del tercer ángel; es infalible." 1 JT. 590
Fíjate en las tonterías que dijo Cottrell: "Fue verdad presente después del gran chasco de octubre 22 de 1844. No es verdad presente en el año de nuestro Señor 2002."
Es decir ¿una verdad tan clara ya no lo es?
"la doctrina tradicional del santuario fue un importante activo para estabilizar la fe de los desengañados adventistas. En la actualidad, es un pasivo igualmente importante y un obstáculo para la fe, la confianza, y la salvación de los bíblicamente instruidos, adventistas y no adventistas por igual. Fue verdad presente después del gran chasco de octubre 22 de 1844. No es verdad presente en el año de nuestro Señor 2002."
Pero se olvida que: El fundamento de Dios está firme
“Pero (sin embargo, no obstante) el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo”. 2 Timoteo 2:19.
Timoteo debería usar bien (correctamente) la palabra (2:14-3:9). ¿Cómo?
A. Debería evitar a las personas nombradas por Pablo, como también ciertas doctrinas y prácticas. Debería evitar vanas “palabrerías” (2:16). Eran discusiones interminables acerca de genealogías y ciertos puntos de la ley, no para entender y practicar la ley, sino más bien para menospreciarla. Tales discusiones no edifican, sino que su palabra carcomerá (se extenderá, Lit., pasto tendrá, FL) como gangrena (podredumbre o corrupción del tejido causada por la falta de sangre; si no se quita el tejido o miembro afectado, la enfermedad se extiende a otras partes del cuerpo y destruye hasta los huesos).
1. Probablemente ya habían comenzado a hacer lo mismo con las enseñanzas de Pablo, discutiéndolas no para aprender la verdad y ser salvos, sino con el fin de “interpretarlas” a su modo para destruir la fe de los que las aceptaban.
2. Hoy en día algunos hermanos hacen lo mismo. Por ejemplo, dicen que el “adulterio” de Mat. 5:32; 19:9 no es adulterio literal (físico) sino el adulterar el matrimonio al divorciarse y volver a casarse (dicen que los culpables pueden arrepentirse de ese “adulterio” y seguir viviendo en nuevas nupcias).
3. Algunos (por ejemplo, Himeneo y Fileto) se desviaron de la verdad. En la primera carta (1 Tim. 1:3), le había dicho, “que mandases a algunos (por ejemplo, Himeneo y Alejandro, 1 Tim. 1:20) que no enseñen diferente doctrina” (por ejemplo, que la resurrección ya se efectuó. Es posible que estuvieran bajo la influencia gnóstica de que la materia es mala y, por eso, puesto que según ellos el cuerpo es malo, no resucitará. También es posible que hablaran de la resurrección espiritual (Rom. 6:3, 4; Col. 2:12; 3:1). Pablo, sin embargo, enseñó claramente la resurrección corporal (1 Cor. 15:1-4, 12-19; 1 Tes. 4:13-18; 2 Tes. 2:1-3).
La falta de fe en la resurrección acarrea consecuencias desastrosas. Los que rechazan la resurrección literal rechazan la fe (“si no hay resurrección de los muertos, entonces Cristo no ha resucitado, entonces nuestra predicación es vana, vuestra fe es vana … todavía estáis en vuestros pecados”, 1 Cor. 15:13-17). Si no habrá resurrección ¿por qué sufrir por Cristo?
4. Pablo y sus compañeros estaban dispuestos a sufrir y aun morir por el evangelio puro, pero “estos trastornan la fe de algunos” (CS). Pablo estaba ocupado salvando almas y ellos estaban ocupados destruyendo almas. (Aporte de Giovanni Cabrera)
Entonces: Raymond Cottrell actuó de la misma manera que Himeneo y Alejandro, y sabemos que grandes estrellas, consideradas como luminarias pueden apostatar, pero esto no cambia el mensaje del tercer ángel, el hombre puede fallar no así el mensaje de Dios, ¡es infalible!"
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.
Estimado conet. Saludos cordiales.
Tú dices:
veamos que dicen los grandes de la iglesia adventista.
La Asociación General designó un “Comité para el Análisis de Problemas del Libro de Daniel”, que debía preparar un informe sobre cómo resolver las dificultades de Daniel 8:14. Sus catorce integrantes estudiaron el asunto durante cinco años, pero no*lograron llegar a una solución consensuada. En*1980, Cottrell, miembro del comité, dijo que la mayoría de ellos opinaba que la interpretación adventista de Daniel 8:14 podía “consolidarse satisfactoriamente” aceptando una serie de “supuestos”, y que “deberían olvidarse” los problemas. Añadió: “Recuérdese que el nombre del grupo era Comité para el Análisis de Problemas del Libro de Daniel, y que la mayoría propuso olvidar los problemas y no*decir nada al respecto”. Aquello habría equivalido a “admitir que no*teníamos respuestas”. Por consiguiente, la minoría se negó a respaldar el criterio mayoritario, y no*se emitió un informe oficial. Los problemas doctrinales quedaron sin resolver.
Con respecto al estancamiento que ocurrió, el doctor Cottrell dice: “Aún tenemos ante nosotros la cuestión de Daniel 8:14, porque hasta la fecha nos ha faltado la voluntad de reconocer que existe un problema exegético muy claro. Esta cuestión no*va a desaparecer en tanto sigamos pretendiendo que no*existe ninguna dificultad y escondiendo la cabeza, tanto individual como colectivamente, bajo la arena de nuestras ideas preconcebidas”. (Spectrum, publicación de la Asociación de Foros Adventistas.)
Como pueden ver, las grandes piezas adventistas del ajedrez ya cayeron y fueron sacadas de la batalla. No esperen ahora ustedes ganar a fuerza de peones la partida para establecer una doctrina de error.
no defiendan lo indefendible.
saludos.
Respondo: Los adventistas no somos como los tj, que tienen su cuerpo gobernante que escriben y dan pautas de lo que debe creer y hacer cada miembro. Nosotros nos atenemos a la Biblia y como sabes, tenemos además el plus del "espíritu de profecía" para obrar de acuerdo a nuestras conciencias.
"Los ministros que han predicado la verdad con todo celo y fervor pueden apostatar y unirse a las filas de nuestros enemigos; acaso ¿transforma esto la verdad de Dios en mentira? "Pero -dice el apóstol- el fundamento de Dios está firme." (2 Tim 2: 19.) Pueden cambiar la fe y los sentimientos de los hombres; pero nunca la verdad de Dios. Se está proclamando el mensaje del tercer ángel; es infalible." 1 JT. 590
Fíjate en las tonterías que dijo Cottrell: "Fue verdad presente después del gran chasco de octubre 22 de 1844. No es verdad presente en el año de nuestro Señor 2002."
Es decir ¿una verdad tan clara ya no lo es?
"la doctrina tradicional del santuario fue un importante activo para estabilizar la fe de los desengañados adventistas. En la actualidad, es un pasivo igualmente importante y un obstáculo para la fe, la confianza, y la salvación de los bíblicamente instruidos, adventistas y no adventistas por igual. Fue verdad presente después del gran chasco de octubre 22 de 1844. No es verdad presente en el año de nuestro Señor 2002."
Pero se olvida que: El fundamento de Dios está firme
“Pero (sin embargo, no obstante) el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo”. 2 Timoteo 2:19.
Timoteo debería usar bien (correctamente) la palabra (2:14-3:9). ¿Cómo?
A. Debería evitar a las personas nombradas por Pablo, como también ciertas doctrinas y prácticas. Debería evitar vanas “palabrerías” (2:16). Eran discusiones interminables acerca de genealogías y ciertos puntos de la ley, no para entender y practicar la ley, sino más bien para menospreciarla. Tales discusiones no edifican, sino que su palabra carcomerá (se extenderá, Lit., pasto tendrá, FL) como gangrena (podredumbre o corrupción del tejido causada por la falta de sangre; si no se quita el tejido o miembro afectado, la enfermedad se extiende a otras partes del cuerpo y destruye hasta los huesos).
1. Probablemente ya habían comenzado a hacer lo mismo con las enseñanzas de Pablo, discutiéndolas no para aprender la verdad y ser salvos, sino con el fin de “interpretarlas” a su modo para destruir la fe de los que las aceptaban.
2. Hoy en día algunos hermanos hacen lo mismo. Por ejemplo, dicen que el “adulterio” de Mat. 5:32; 19:9 no es adulterio literal (físico) sino el adulterar el matrimonio al divorciarse y volver a casarse (dicen que los culpables pueden arrepentirse de ese “adulterio” y seguir viviendo en nuevas nupcias).
3. Algunos (por ejemplo, Himeneo y Fileto) se desviaron de la verdad. En la primera carta (1 Tim. 1:3), le había dicho, “que mandases a algunos (por ejemplo, Himeneo y Alejandro, 1 Tim. 1:20) que no enseñen diferente doctrina” (por ejemplo, que la resurrección ya se efectuó. Es posible que estuvieran bajo la influencia gnóstica de que la materia es mala y, por eso, puesto que según ellos el cuerpo es malo, no resucitará. También es posible que hablaran de la resurrección espiritual (Rom. 6:3, 4; Col. 2:12; 3:1). Pablo, sin embargo, enseñó claramente la resurrección corporal (1 Cor. 15:1-4, 12-19; 1 Tes. 4:13-18; 2 Tes. 2:1-3).
La falta de fe en la resurrección acarrea consecuencias desastrosas. Los que rechazan la resurrección literal rechazan la fe (“si no hay resurrección de los muertos, entonces Cristo no ha resucitado, entonces nuestra predicación es vana, vuestra fe es vana … todavía estáis en vuestros pecados”, 1 Cor. 15:13-17). Si no habrá resurrección ¿por qué sufrir por Cristo?
4. Pablo y sus compañeros estaban dispuestos a sufrir y aun morir por el evangelio puro, pero “estos trastornan la fe de algunos” (CS). Pablo estaba ocupado salvando almas y ellos estaban ocupados destruyendo almas. (Aporte de Giovanni Cabrera)
Entonces: Raymond Cottrell actuó de la misma manera que Himeneo y Alejandro, y sabemos que grandes estrellas, consideradas como luminarias pueden apostatar, pero esto no cambia el mensaje del tercer ángel, el hombre puede fallar no así el mensaje de Dios, ¡es infalible!"
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.