Policarpo de Esmirna nació en el último tercio del primer siglo y murió a mediados del segundo. Se dice que estuvo en comunicación con el apóstol Juan y que escribió la Carta de Policarpo a los Filipenses.
¿Había algo en el escrito de Policarpo que señalara a una Trinidad? No; no hay ninguna mención de ella. En realidad lo que él dice concuerda con lo que enseñaron Jesús, sus discípulos y sus apóstoles.
Por ejemplo, Policarpo dijo en su Carta:
“Que el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, y el mismo [...] Hijo de Dios, Jesucristo, os edifique en la fe, en la verdad”[SUP]17[/SUP].
Note que, al igual que Clemente, Policarpo no habla de una relación trinitaria del “Padre” y el “Hijo” como iguales en una divinidad. En vez de eso, habla sobre “el Dios y Padre” de Jesús, no solo del ‘Padre de Jesús’.
Así que distingue entre Dios y Jesús, tal como lo hacen muchas veces los escritores de la Biblia. Pablo dice en 2 Corintios 1:3: “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo”. No dice sencillamente: ‘Bendito sea el Padre de Jesús’, sino: “Bendito sea el Dios y Padre” de Jesús.
Además, Policarpo dice: “Paz de Dios todopoderoso y de Jesucristo nuestro Salvador”[SUP]18[/SUP]. Ahí de nuevo Jesús es diferente del Dios que todo lo puede, no una persona de una Divinidad trina y una con igualdad establecida.
Otro de los padres apostólicos es Hermas, quien escribió en la primera parte del siglo segundo. En su obra El Pastor, ¿dice algo que llevara a uno a creer que para él Dios fuera una Trinidad? Note ejemplos de lo que dijo:
“Ni cuando algún hombre desee que hable, habla el espíritu santo; sino que entonces habla cuando Dios quiere que hable. [...] Dios plantó la viña, a saber, creó al pueblo y lo entregó a su Hijo. El Hijo, a su vez, puso a sus ángeles sobre ellos, para que los conservasen”[SUP]19[/SUP].
“El Hijo de Dios es seguramente anterior a toda su creación”[SUP]20[/SUP].
Ahí Hermas dice que cuando Dios (no simplemente el Padre) desea que el espíritu hable, este habla, lo cual revela que Dios es superior al espíritu.
Y dice que Dios entregó la viña a su Hijo, lo cual indica que Dios es superior al Hijo. También declara que el Hijo de Dios es anterior a sus criaturas —las del Hijo—, es decir, las que el Hijo de Dios creó como el Obrero Maestro de Dios, “porque por medio de él todas las otras cosas fueron creadas en los cielos y sobre la tierra”. (Colosenses 1:15, 16.)
La realidad es que el Hijo no es eterno. Fue creado como criatura celestial de alto rango, antes que las demás criaturas celestiales —como los ángeles— que fueron creadas por medio de él.
J. N. D. Kelly, en su libro Early Christian Doctrines (Doctrinas cristianas primitivas), escribe acerca del punto de vista de Hermas sobre el Hijo de Dios:
“En varios pasajes leemos sobre un ángel que es superior a los seis ángeles que componen el consejo central de Dios, y a quien se describe regularmente como ‘muy venerable’, ‘santo’ y ‘glorioso’.
Este ángel recibe el nombre de Miguel, y es difícil eludir la conclusión de que Hermas vio en él al Hijo de Dios y lo igualó al arcángel Miguel”.
“También hay prueba [...] de que trató de representar a Cristo como un tipo de ángel supremo [...] Respecto a una doctrina de la Trinidad en el sentido estricto, desde luego no hay ninguna señal”[SUP]21[/SUP].
También de Papías se dice que conoció al apóstol Juan. Es probable que él escribiera a principios del siglo segundo, pero hoy día solo existen fragmentos de sus escritos. En ellos no dice nada de una doctrina de la Trinidad.
FUENTE:
17. Fuentes Patrísticas, tomo 1, página 227.
18. Ibíd., página 213.
19. Documentos de la Iglesia primitiva. Los Padres Apostólicos, páginas 428, 444, 445.
20. Ibíd., página 476.
21. Early Christian Doctrines, por J. N. D. Kelly, segunda edición, 1960, páginas 94, 95.