APRENDAMOS QUÉ NOS DICE LA NARRATIVA OFICIAL II
Ocupando dos cuadras de la ciudad desde la Séptima Avenida hasta la Octava Avenida y desde las calles 31 a 33 en Midtown Manhattan, el edificio original de la estación Penn fue diseñado por McKim, Mead & White y se completó en 1910. La estación permitía el acceso ferroviario directo a la ciudad de Nueva York desde el al sur por primera vez.
Con una superficie de aproximadamente 8 acres (3,2 ha), tenía fachadas de 788 pies (240 m) a lo largo de las calles laterales y 432 pies (132 m) de largo a lo largo de las avenidas principales. El terreno ocupaba unos 800 pies (240 m) a lo largo de las calles 31 y 33.
Su casa principal y el cobertizo del tren se consideraron una obra maestra del estilo Beaux-Arts y una de las grandes obras arquitectónicas de la ciudad de Nueva York. La estación contenía 11 plataformas que servían a 21 vías, aproximadamente en el mismo diseño que la Penn Station actual.
El edificio original fue una de las primeras estaciones en incluir salas de espera separadas para los pasajeros que llegaban y salían, y cuando se construyeron, se encontraban entre los espacios públicos más grandes de la ciudad.
La estructura original estaba compuesta por 14.000 m3 de granito rosa, 1.700 m3 de piedra interior, 27.000 toneladas cortas de acero, 48.000 toneladas cortas de ladrillo y 30.000 focos.
El edificio tenía una altura promedio de 69 pies (21 m) sobre la calle, aunque su altura máxima era de 153 pies (47 m). Unas 25 acres (10 ha) de vías rodeaban Penn Station. En el momento de la finalización de Penn Station, The New York Times lo llamó "el edificio más grande del mundo jamás construido al mismo tiempo".
Vea y asómbrese... todo esto vilmente destruído!
Pero, ¿porqué lo hicieron? Es decir, ¿qué es lo que querían esconder? ¿Porqué destruyeron todo ésto?
Bueno. Digamos que si yo soy liberado de una prisión y se me dá la oportunidad de nuevo de morar en la tierra, yo trato de destruir toda la evidencia que muestren a los nuevos pobladores de la tierra que aquél imperio que ahora yo sustituí, era mejor que el mío y así evito que la gente haga comparaciones.
También, si se me ha dado la posibilidad de yo engañar a las naciones, una gran parte del engaño va a estar alrededor de una nueva historia, cambiar la historia. Hacer nuevos monumentos, tomar estatuas que en los tiempos de Tartaria que talvez fueron del reino milenial de Cristo y darles nombres diferentes, asignarlos a países como que fueron los libertadores y por supuesto, reutilizar muchas de esas edificaciones que por estar salpicadas alrededor del mundo y no haber sido fruto de la destrucción sostenida, malvada, demoníaca a la que fueron sometidas, entonces reutilizarlas para cortes, para lugares de las sedes de los gobiernos, para congresos, también para iglesias, etc.