La genealogía eclesiástica de los obispos de Roma (es decir, quienes son conocidos como "papas") es indudable.
No.
Es falso.
No existes ninguna genealogía eclesiástica, los doce apóstoles no fueron escogidos para perpetuarse, Jesús pasó toda una noche de rodillas consultando con el Padre, para al otro día seleccionarlos, aquí está el texto:
Luc 6:12 En aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios.
Luc 6:13 Y cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales también llamó apóstoles:
Y uno de ellos, Judas el traidor, era diablo (Jn.6:70).
Ese diablo es la representación de los Papas de la Iglesia católica, pues, así como Judas vendió al Señor por monedas, esto mismo vienen haciendo estos Papas, vendiendo a Jesús por dinero, cobrando por las indulgencias, por misas pagas, por sacadas del purgatorio, por fe de bautismos, por matrimonios, por toda suerte de baratijas, como medallitas, crucifijos, que el agua bendita, que el concordato con tal o cual país, para que le otorgue subvenciones económicas y territoriales para construir sus capillas, basílicas, catedrales, etcétera.
Uno de los argumentos "Papales" para ser obedecido es la bula
Unam Sanctam del papa Bonifacio VIII, expedida el 18 de nov. de 1302, es, tal vez, la expresión más radical del poder superior religioso sobre toda constitución legislativa de cualquier país en el mundo, que esté sometido al pontífice de Roma.
Ese cuento de la sucesión apostólica, o de la genealogía eclesiástica se genera en esta bula pontificia y es solamente para la gente descerebrada que no entiende este pasaje del Salmo 24:1
De Jehová es la tierra y su plenitud;
El mundo, y los que en él habitan.
El Señor tiene todo bajo su control, y no lo ha delegado a ninguna criatura.
Estas llaves dadas a Pedror:
Mat_16:19 Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos
Fueron usadas en su debido momento para incluir a los gentiles dentro del reino como fue el caso de Cornelio.
Pero cuando se excedió y se creyó con autoridad de nombrar apóstoles, como en el caso de Matías, usando un método de azar, le fueron quitadas.
Dios no permitió que lo que le costó a su Hijo toda una noche de rodillas, este impetuoso y apresurado discípulo, lo fuese a convertir en una tirada de dados, por decir algo, pues Dios no juega a los dados.
Ya su impetuosidad había sido controlada cuando le quiso partir la cabeza al siervo del sumo sacerdote, que, si no es porque en el último segundo esquiva el golpe de espada hubiese muerto allí mismo, Jesús recogió la oreja y la colocó en su lugar y le hizo saber que tenía poder para convocar 12 legiones de ángeles que se hallaban observando el transitar de su Creador, instantáneamente.
El método usado por Cristo y el Padre, juntos, para escoger al reemplazo de Judas el traidor, lo contemplamos aquí, en Gálatas:
Gál 1:1 Pablo, apóstol (no de hombres ni por hombre, sino
por Jesucristo y por Dios el Padre que lo resucitó de los muertos),
Gál 1:15 Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia,
No es echando suertes como se elige un apóstol (Hch.1:26), Y MUCHO MENOS POR SUCESIÓN APÓSTOLICA O GENEALOGÍA ECLESIÁSTICA, como engañan a los foristas católicos al obligarlos a arrodillarse ante las bulas pontificias del magisterio católico.
Cuando un Papa, cualquiera que sea, dice que es un sucesor de Pedro, los ingenuos católicos se ven obligados a verlo como a un apóstol que ha heredado la autoridad de Pedro.
Y todo lo que diga, tiene que ser obedecido como si estuviesen obedeciendo a Pedro.
La Genuina Iglesia de Cristo, no solo obedece a Pedro, sino también a todos los demás apóstoles delegados para enseñar la doctrina transmitida por Cristo desde el mismo cielo, como por ejemplo esta declaración de Pablo:
1Co 11:23
Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan;
Pablo, en ese entonces Saulo de Tarso, no era apóstol, más bien su enemigo, tampoco estuvo la noche que fue entregado el Señor, pero el Señor descendió del cielo y lo evangelizó camino a Damasco, y le reveló, que entre él y el Padre lo habían escogido como apóstol desde el vientre de la madre (Gál.1:1, 15)
Y cuando leemos sobre las llaves de la muerte y del infierno:
Apo_1:18 y el que vivo, y estuve muerto; más he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén.
Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
No dudo que a Pedro se las quitaron por el mal uso de ellas, nombrando apóstoles por métodos de suerte.
Así era Pedro, pero una vez muertos todos los apóstoles, ya nadie tiene la autoridad de Pedro, ni de Pablo, ni de ninguno de ellos, porque el fundamento de los apóstoles para la edificación de la Iglesia de Cristo había terminado, con el cierre del canon bíblico.
Esto significa que no hay más sucesores de Pedro, que no hay más apóstoles, que solo los doce lo fueron y que después de ellos, lo que hay son predicadores sujetos a la Palabra escrita, la Biblia.
Nuestros apóstoles siguen siendo ellos, porque, aunque estén en la misma Presencia de Cristo, la doctrina ha quedado impresa para nuestra edificación y obediencia, porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Cristo Jesús, Señor nuestro, no es el Papa, no es María, no es ningún santo de vuestra devoción, es Cristo y solo él, para que en todo, tenga la Preeminencia.
Considera las Escrituras presentadas y que el Señor te dé entendimiento en todo.