“Estarás conmigo en el Paraíso”... ¿dónde? ¿cuándo?

El caso es que, sin las llaves de la muerte y el hades, Jesús no habría cumplido la promesa.

Pero al ser sorbida la muerte en victoria, el alma sobrevive a la muerte, haciendo posible la resurrección y una vida eternda en el reino celestial.

¿Qué efecto puede tener la muerte, si al final también será arrojada al lago de fuego? Por lo tanto, la muerte deja de tener valor en el espacio/tiempo, y eso significa que el ladrón arrepentido está gozando HOY de la presencia de Jesús en el paraíso, bajo un cielo nuevo y una tierra nueva. El cielo y tierra actuales desaparecerán ante la presencia del Juez justo, y la muerte caerá en el olvido.
 
Última edición:
Siempre te leo con la debida atención, sino no podríamos interactuar coherentemente.

No se trata de citar La Biblia para parecer "muy bíblico", sino para demostrar que no estimamos nuestras ideas y pensamientos superiores a Las Sagradas Escrituras:

Porque esto es lo que dice Él Soberano del universo Jehová:

“Porque mis pensamientos no son los pensamientos de ustedes, y los caminos de ustedes no son mis caminos”, afirma Jehová. “Porque, tal como los cielos están por encima de la tierra, así mis caminos están por encima de los caminos de ustedes, y mis pensamientos, de los pensamientos de ustedes. Isa. 55: 8, 9.

Volviendo al tema; Jesús utilizó la expresión "te digo hoy", para enfatizar la solemnidad de sus palabras.

Ejemplos de ello lo podemos hallar en: Deuteronomio 4:26 según la versión Reina-Valera revisión de 1960.

Jeremías 42:19 (LBLA):
-No es el asunto la ocurrencia del "hoy" en las Escrituras, pues ya sabemos que ocurre 41 veces en el texto griego y 2.295 en el hebreo. Lo importante para el lector de Lc 23:43, es que al leerlo naturalmente el "hoy" se refiere a la oportunidad del reencuentro de ambos crucificados y no al momento en que Jesús lo está diciendo. Pausar tras el hoy le quita toda la solemnidad que la frase tiene, pues si el dónde era importante para aquel ladrón, el cuándo era lo que le confería el mayor consuelo.
 
  • Like
Reacciones: Efe-E-Pe y M1st1c0
-Cuando nos casamos, el juez me preguntó si la aceptaba por esposa a la que acababa de emitir su nítido "¡Sí!". Ahí cometí mi última tontería de soltero: queriendo realzar la solemnidad del acto, creí conveniente tomarme unos segundos antes de estallar con mi "¡Sí, quiero!". Hasta el día de hoy, mi esposa recuerda ese momento como uno de los más amargos de su vida, ya que no puede olvidar la angustia que soportó cuando esos segundos se le hicieron siglos pensando que yo me estaba echando atrás.
-Jesús no recargó su "te digo hoy" solemnizando el momento sino la ocasión del pronto reencuentro.
 
-No es el asunto la ocurrencia del "hoy" en las Escrituras, pues ya sabemos que ocurre 41 veces en el texto griego y 2.295 en el hebreo. Lo importante para el lector de Lc 23:43, es que al leerlo naturalmente el "hoy" se refiere a la oportunidad del reencuentro de ambos crucificados y no al momento en que Jesús lo está diciendo.
Lo que observo, es que cuando tu haces referencia a la "lectura natural o leerlo naturalmente", lo haces con la mente en nuestro castellano actual, y pasas por alto los distintos modismos existentes en esa época en el Israel del 1°siglo y el griego koine.

Acá te concedo razón, por el hecho de que el delincuente, hace su solicitud para cuando viniera en su reino.

La Biblia de las Américas Lc. 23: 42.
Y decía: Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino.
Pausar tras el hoy le quita toda la solemnidad que la frase tiene, pues si el dónde era importante para aquel ladrón, el cuándo era lo que le confería el mayor consuelo.
Repitiendo lo anterior: en el griego koiné del primer siglo no le quita ninguna solemnidad, al contrario le agrega, cómo ya te explique en otro comentario.
 
-Cuando nos casamos, el juez me preguntó si la aceptaba por esposa a la que acababa de emitir su nítido "¡Sí!". Ahí cometí mi última tontería de soltero: queriendo realzar la solemnidad del acto, creí conveniente tomarme unos segundos antes de estallar con mi "¡Sí, quiero!". Hasta el día de hoy, mi esposa recuerda ese momento como uno de los más amargos de su vida, ya que no puede olvidar la angustia que soportó cuando esos segundos se le hicieron siglos pensando que yo me estaba echando atrás.
-Jesús no recargó su "te digo hoy" solemnizando el momento sino la ocasión del pronto reencuentro.
Gracias por compartir esa hermosa parte de sus vida.

Ya te digo, dices eso con la mente en nuestro actual castellano, y pasas por alto los modismos existente del griego koiné del primer siglo.
 
“Jesús le dijo: ‘Verdaderamente te digo hoy estarás conmigo en el Paraíso.’”—Luc. 23:42, 43,

¿Precisamente en qué paraíso pensaba Jesús?
¿Fue un paraíso en la Tierra como aquel de que el lector espera disfrutar, o fue algo diferente?

Además, piense en esto:
¿Cuándo estaría ese malhechor u otras personas en el paraíso? ¿Qué quiso decir Jesús por “hoy”?
En un lecho de muerte el creer que uno va a un lugar mejor es en si mismo un paraiso. Es una de las tantas cosas que la biblia no escribio literalmente, como la resureccion despues de tres dias.
 
Lo que observo, es que cuando tu haces referencia a la "lectura natural o leerlo naturalmente", lo haces con la mente en nuestro castellano actual, y pasas por alto los distintos modismos existentes en esa época en el Israel del 1°siglo y el griego koine.

Acá te concedo razón, por el hecho de que el delincuente, hace su solicitud para cuando viniera en su reino.

La Biblia de las A méricas Lc. 23: 42.
Y decía: Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino.

Repitiendo lo anterior: en el griego koiné del primer siglo no le quita ninguna solemnidad, al contrario le agrega, cómo ya te explique en otro comentario.
-El delincuente solamente pidió que se acordara de él para cuando viniera en su reino, cosa que él no tenía como prever (y nosotros tampoco), pero Jesús no accede a eso puntualmente sino que excede en tiempo y ocasión a su pedido pues la respuesta es un reencuentro de pocas horas y en el mismísimo Paraíso (Hades).
-No, no explicas solemnidad alguna con tu frase del Mensaje # 2.929: "Volviendo al tema; Jesús utilizó la expresión "te digo hoy", para enfatizar la solemnidad de sus palabras" sino que solamente pretendes colar esa idea. La solemnidad estuvo en la prontitud del reencuentro prometido.
 
Gracias por compartir esa hermosa parte de sus vida.

Ya te digo, dices eso con la mente en nuestro actual castellano, y pasas por alto los modismos existente del griego koiné del primer siglo.
-Las variantes del castellano actual producidas a través de los siglos, nunca representaron problema real a los lectores cultos. Lo mismo puede decirse del koiné y demás idiomas europeos conocidos.
-No sirve cambiar una lectura con histórica credibilidad por la peregrina idea de mudanzas de lenguaje. Con tal pretexto, a los textos de la literatura clásica se les podría hacer decir cualquier cosa.
 
sin embargo tu correligionario dice:

Ramón70 dijo:
Lo que pasas por alto, es que Juan está relatando VISIONES, no realidades.
Te refieres al libro de Apocalipsis? Claro, Juan tuvo visiones que puso por escrito. Las "visiones" era usadas por Jehová para dar a conocer su voluntad o lo que sucederá.

"Y en los últimos días —dice Dios— derramaré parte de mi espíritu sobre todo tipo de personas. Sus hijos y sus hijas profetizarán, sus jóvenes tendrán visiones y sus mayores tendrán sueños," (Hch 2:17)

Se la da la visión a Juan:

"Una revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para mostrarles a sus esclavos las cosas que tienen que suceder dentro de poco. Jesucristo envió a su ángel y, por medio de este, se la presentó en señales a su esclavo Juan," (Apo 1:1)
 
-El delincuente solamente pidió que se acordara de él para cuando viniera en su reino, cosa que él no tenía como prever (y nosotros tampoco), pero Jesús no accede a eso puntualmente sino que excede en tiempo y ocasión a su pedido pues la respuesta es un reencuentro de pocas horas y en el mismísimo Paraíso (Hades).
En primer término, en el Hades no existe ni jamás existió un paraíso, eso lo sacas de la parábola, porque en ningún lado se vuelve a repetir.

Y cómo ya sabes, para que algo sea creíble se necesita al menos (2) dos testigos.

Y cómo también sabes, Jesús estuvo 40 días acá en la Tierra antes de ascender al cielo, así que es imposible, que él con el ladrón estuvieran ese mismo día en el paraiso.
-No, no explicas solemnidad alguna con tu frase del Mensaje # 2.929: "Volviendo al tema; Jesús utilizó la expresión "te digo hoy", para enfatizar la solemnidad de sus palabras" sino que solamente pretendes colar esa idea. La solemnidad estuvo en la prontitud del reencuentro prometido.
Idem anterior.