Clemente de Roma
Clemente de Roma, de quien se dice que fue "obispo" de esa ciudad, es otra fuente temprana de escritos sobre el cristianismo.
Se cree que murió alrededor de 100 E.C. En el material que supuestamente escribió, él no menciona una Trinidad, ni directa ni indirectamente.
La Carta primera de San Clemente a los Corintios declara:
"Que la gracia y la paz se multipliquen entre vosotros de parte de Dios omnipotente por mediación de Jesucristo".
"Los Apóstoles nos predicaron el Evangelio de parte del Señor Jesucristo; Jesucristo fué enviado de Dios.
En resumen, Cristo de parte de Dios, y los Apóstoles de parte de Cristo".
"Por lo demás, el Dios que todo lo ve, el Dueño de los espíritus y Señor de toda carne, el que escogió al Señor Jesucristo y a nosotros por Él para pueblo peculiar suyo, conceda a toda alma que invoca su magnífico y santo nombre, fe, amor, paz, paciencia, longanimidad"6.
Clemente no dice que Jesús ni el espíritu santo sean iguales a Dios.
Presenta al Dios que todo lo puede (no lo llama solo "Padre") como un ser diferente del Hijo.
Alude a Dios como superior, puesto que Cristo es "enviado" de Dios, y Dios "escogió" a Cristo.
Clemente muestra que Dios y Cristo son dos personajes distintos y desiguales, al decir:
"Con constante oración y súplica pediremos al Hacedor de todas las cosas, conserve íntegro el número contado de sus escogidos en todo el mundo, por su amado Hijo y Siervo, Jesucristo [...] Para conocerte a Ti [Dios], el solo Altísimo en las alturas [...] Tú sólo eres el bienhechor de los espíritus y Dios de toda carne".
"Conozcan todos los pueblos que Tú eres el solo Dios, y Jesucristo tu Hijo y Siervo"7.
Clemente llama a Dios "Altísimo" (no solo "Padre"), y se refiere a Jesús como el "Hijo" de Dios.
También señala tocante a Jesús: "Él, que, siendo el esplendor de su grandeza, es tanto mayor que los ángeles cuanto ha heredado nombre más excelente"8.
Jesús refleja el esplendor de Dios, pero no lo iguala; tal como la Luna refleja la luz solar, pero no iguala a la fuente de esa luz: el Sol.
Si el Hijo de Dios fuera igual a Dios —quien es el Padre celestial—, habría sido innecesario que Clemente dijera que Jesús era mayor que los ángeles, ya que eso habría sido obvio.
Y sus palabras muestran que reconoce que aunque el Hijo es mayor que los ángeles es inferior al Dios que todo lo puede.
El punto de vista de Clemente es muy claro: El Hijo es inferior al Padre y está en posición secundaria respecto a él.
Clemente nunca vio a Jesús como parte de una divinidad con el Padre.
Muestra que el Hijo depende del Padre, es decir, de Dios, y dice claramente que el Padre es ‘el solo Dios’, que no comparte Su posición con nadie.
Y en ningún lugar iguala Clemente el espíritu santo a Dios.
Por consiguiente, no hay ninguna Trinidad en los escritos de Clemente.
https://m.monografias.com/trabajos23/doctrina-trinidad/doctrina-trinidad.shtml#enseñaron