Dios Hijo se hizo hombre para nuestra salvación, pero en María y por María.
Sin embargo Jesús , habiendo alegado que aún no había llegado su hora, cambia súbitamente tras las palabras: "Haced cuanto os diga", y realiza el milagro de cambiar el agua en vino.
-Cierto, y por ello desde entonces y hasta ahora todas las generaciones la tenemos por bienaventurada (Lc 1:48). Solamente podemos ser devotos o piadosos en relación con Dios (Hch 10:7). No podemos los cristianos ser devotos a ángeles o humanos sino solo a Dios.
-No sugiere el texto de Juan ningún cambio de actitud en Jesús sino que más bien parece reprochar la ansiedad de su madre anticipándose a lo que Él haría.
Saludos cordiales