Re: El sabado no es eterno
Estimado manuel5. Saludos cordiales.
Tú dices.
Estimado Gabriel47:
...
..Pedí un versículo en el que el Señor hubiera revelado que en "los últimos tiempos" (como llamáis a la época en la que vivimos) Dios dijera que no le agradaba que su pueblo comiera carne.
...
....Aún no me dijeron el versículo....
...
..Tratando de resumir, con pocas palabras, lo que acabas de escribir diré que significa:
...
....que el pueblo de Dios está en el día del ayuno (Expiación), actualmente, y que ese día no se come carne.
...
...Ninguna de las dos cosas son ciertas .
...
...Si crees que en la Sagrada Biblia está la Revelación de Dios,...te faltan las citas bíblicas que lo confirme. (No tus razonamientos y tu interpretación.Jeremías 17: 5a,7a y 9a) .
...
..Saludos.
Respondo:
Tú como ex adventista debes saber que el remanente está rumbo a la Canaán celestial. El viaje final requiere cierta preparación, como la que tuvo que pasar el profeta Elías.
“Y mientras ellos iban caminando y hablando, de pronto apareció un carro de fuego, con caballos también de fuego, que los separó, y Elías subió al cielo en un torbellino.” 2 Reyes 2: 11.
La Palabra de Dios dice:
“
Mirad, yo os envío al profeta Elías, antes que venga el grande y terrible día del Señor. El convertirá el corazón de los padres a los hijos y el corazón de los hijos a los padres. No sea que yo venga y hiera la tierra con maldición...”(Malaquías 4: 5,6)
El mensaje de Elías traerá el poder del amor y bendición a las familias que lo reciban y maldición a las que lo rechacen (Malaquías 4:6).
“Yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen. Pero trato con invariable amor por mil generaciones a los que me aman y guardan mis Mandamientos” (Éxodo 20: 5,6)
Observe cómo el ángel Gabriel expresa la profecía en Lucas 1:16,17:
“Hará volver a muchos israelitas al Señor su Dios. Precederá al Señor con el espíritu y poder de Elías, para volver el corazón de los padres a los hijos y de los rebeldes a la prudencia de los justos; a fin de preparar para el Señor un pueblo bien dispuesto.”
Así que en un sentido espiritual, el mensaje de Elías también contribuirá a la unión de los desobedientes hijos terrenales con su Padre Celestial.
Elías y Juan el Bautista mantenían una dieta y estilo de vida sencillos.
Elías - “Te ruego me traigas también un bocado de pan en tu mano” 1 Reyes 17:11.
Juan - “ y comía langostas y miel silvestre” Marcos 1:6 (u.p)
Elías y Juan eran conocidos por su dieta simple y su modo de vida rústica. Estos rigores básicos mantenían sus facultades mentales claras y sus cuerpos fuertes capacitándolos para la tarea especial que Dios los llamó a realizar.
Del mismo modo, en los últimos días, la iglesia debe despertar a la verdad acerca de la conexión estrecha entre cuerpo y espíritu. Lo que comemos y bebemos, al igual que nuestros hábitos personales de vida, tienen un efecto directo en nuestra claridad mental y habilidad para discernir la verdad. El poder para resistir la tentación puede remontarse en parte a una dieta simple y un estilo de vida moderado. Recuerde que el pecado sobrevino a la raza humana como resultado de comer algo equivocado.
“¡Dichosa, tú, tierra, cuando tu rey es hijo de nobles y tus príncipes comen a su hora, para reponer sus fuerzas y no por banquetear!” (Eclesiastés 10:17)
“
El que hace caso del día, lo hace para el Señor; y el que no hace caso del día, para el Señor no lo hace. El que come, para el Señor come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor no come, y da gracias a Dios.
Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí.” Romanos 14: 6,7.
“Así si coméis o bebéis o hacéis otra cosa hacedlo todo para la gloria de Dios” (1 Corintios 10:31).
Su vestimenta era sencilla y modesta.
Elías - “Un varón vestido de un manto de pelo y un cinto de cuero.” (2 Reyes 1:8).
Juan - “Juan llevaba un vestido de pelo de camello y un cinto de cuero en la cintura.” (Marcos 1:6).
En un tiempo en que los reyes y sacerdotes solían usar adornos lujosos y túnicas largas y ornamentadas, la modestia y sencillez de Elías y Juan constituían un reproche punzante.
Vivimos en una época en la que nunca antes se ha dado tanta atención a la moda y a la ostentación en forma tan arrogante. La meta principal de los diseñadores de modas modernos es destacar la sexualidad de la persona. Tristemente, todo es permitido -desde las perforaciones corporales hasta los tatuajes- aún entre cristianos profesos. Una vez más, la iglesia necesita desesperadamente a los Elías de los últimos días que den testimonio de Cristo dando un ejemplo de humildad y sencillez a través de vestimenta y apariencia modesta.
“Y vestíos del nuevo hombre, creado para ser semejante a Dios en justicia y santidad” (Efesios 4:24). “También que las mujeres se atavíen con ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni con oro, ni con perlas o vestidos costosos” (1 Timoteo 2:9)
Creían en hacer discípulos.
Elías- “Elías partió de allí y encontró a Eliseo y Elías pasó ante él y echó sobre él su manto” (1 Reyes 19:19).
Juan- “Los discípulos de Juan le dieron la noticia de todas estas cosas” (Lucas 7:18).
Las Escrituras relatan que Elías no sólo convirtió a Eliseo en su discípulo, sino que también visitaba las escuelas de los profetas (también traducido “los discípulos de los profetas”) que estaban esparcidas por toda la tierra de Israel (2 Reyes: 2). Estos centros de entrenamiento combinaban la instrucción espiritual con la práctica de destrezas de trabajo y los jóvenes entrenados allí iban por todo Israel a enseñar a otros los caminos de Dios.
Juan también propagaba su fe al enseñar a sus seguidores. Tanto Juan como Elías dedicaron la mayor parte de su tiempo a enseñar a gente común, no a los sacerdotes y levitas. En forma similar, el último gran movimiento de Dios no será dirigido únicamente por el clero, sino por laicos llenos del Espíritu. Es por esto que el mensaje de Elías debe concentrarse en entrenar, hacer discípulos y movilizar a cada miembro de la iglesia de Dios.
Predicaban un bautismo de arrepentimiento y muerte al yo.
Elías- “Y Elías le dijo: Te ruego que te quedes aquí, porque el Señor me envía al Jordán” (2 Reyes 2:6).
Juan- “Y acudían a él de Jerusalén, de todo Judá y de toda la región del Jordán. Y al confesar sus pecados, eran bautizados por él en el Jordán” (Mateo 3: 5,6).
Una de las señales distintivas del mensaje de Elías es el llamado al pueblo hacia el río Jordán -símbolo de arrepentimiento y bautismo. Los hijos de Israel tuvieron que cruzar el Jordán para entrar a la Tierra Prometida, así como nosotros entramos a las aguas del bautismo y cruzamos a una nueva vida. La gran encomienda de Jesús a la iglesia tendrá su mejor momento en el futuro, cuando una vez más los Elías modernos bauticen a los conversos a Cristo en cantidades masivas como ocurría en Pentecostés.
“El entonces descendió. Se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios y su carne se volvió como la de un niño y quedó limpio” (2 Reyes 5:14).
“Por tanto, id a todas las naciones, haced discípulos bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19).
Ambos manifestaron humildad.
Elías- “Y Elías subió a la cumbre del Carmelo, se postró en tierra, con su rostro entre las rodillas” (1 Reyes 18:42).
Juan- “El que viene después de mí, cuyas sandalias no soy digno de llevar, es más poderoso que yo” (Mateo 3:11).
Antes de que Cristo vuelva, el pueblo de Dios habrá aprendido a reflejar el carácter manso y humilde de Jesús en una época de arrogancia y orgullo.
“Oh, hombre, el Señor te ha declarado qué es lo bueno y qué pide de ti. Sólo practicar la justicia, amar la bondad y andar humildemente con tu Dios” (Miqueas 6:8).
Los dos sufrieron persecución religiosa.
Elías- “Entonces Jezabel envió un mensajero a decir a Elías: Que los dioses me traten con todo rigor si mañana a esta hora no he puesto tu persona como la de ellos (que habían sido asesinados)” (1 Reyes 19:2).
Juan- “Ella preguntó a su madre (Herodías):¿Qué pediré? Y ella dijo: La cabeza de Juan el Bautista”(Marcos 6:24).
En el Antiguo Testamento, una reina pagana llamada
Jezabel se casó con Acab, rey de Israel. Jezabel y su hija, Atalía, persiguieron al pueblo de Dios e intentaron convencer a Acab para que matara a Elías y a otros profetas.
En el Nuevo Testamento,
Herodías, la esposa pagana del rey Herodes, y su hija Salomé lograron convencer a Herodes para que matase a Juan el Bautista.
La persecución sufrida por Elías y Juan pronto se repetirá. En los últimos días, “
la madre de las rameras” y sus hijas perseguirán al remanente del pueblo de Dios, a los Elías de los días postreros, según nos relata Apocalipsis.
“Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer y fue a combatir al resto de la descendencia de ella, los que guardan los Mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo” (Apocalipsis 12:17).
“Y en su frente tenía escrito un nombre, un misterio:
La gran Babilonia, madre de las rameras y las abominaciones de la tierra. Y vi a la mujer ebria de la sangre de los santos y de los mártires de Jesús” (Apocalipsis 17:5,6).
Así como Dios capacitó a Elías, Eliseo y Juan el Bautista para realizar una tarea de reavivamiento y preparación, Dios hoy está preparando un ejército de los Elías de los últimos días para realizar un gran reavivamiento. Hechos Asombrosos/Amazing Facts le invita a tomar parte en la difusión de este gran mensaje de Elías para el tiempo del fin -“para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto” (Lucas 1:17).
Cristo va a venir en las nubes y con grande gloria. Le acompañará una multitud de ángeles resplandecientes. Vendrá para resucitar a los muertos y para transformar a los santos vivos de gloria en gloria. Vendrá para honrar a los que le amaron y guardaron sus mandamientos, y para llevarlos consigo. No los ha olvidado ni tampoco ha olvidado su promesa. Volverán a unirse los eslabones de la familia. Cuando miramos a nuestros muertos, podemos pensar en la mañana en que la trompeta de Dios resonará, cuando "los muertos serán levantados sin corrupción, y nosotros seremos transformados." Aun un poco más, y veremos al Rey en su hermosura. Un poco más, y enjugará toda lágrima de nuestros ojos. Un poco más, y nos presentará "delante de su gloria irreprensibles, con grande alegría." Por lo tanto, cuando dio las señales de su venida, dijo: "Cuando estas cosas comenzaren a hacerse, mirad, y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca."
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.