LA VENIDA DEL SEÑOR POR SUS SANTOS ES LA ESPERANZA DEL CRISTIANO.
Una pregunta que surge, mayormente en los círculos evangélicos, ajenos a la Sana Doctrina, es esta:
¿PASARÁ LA IGLESIA POR LA GRAN TRIBULACIÓN?
Entendemos que hay Seminarios de dónde salen “Doctores en Divinidad”, “Expertos Teólogos” y toda suerte de personas “preparadas” para dar cátedra como pastores donde la organización a quién pertenecen, los envíe.
Ellos tienen como norma dividir la venida del Señor en posiciones teológicas como, por ejemplo:
1. Pre-tribulacionistas
2. Mid-tribulacionistas
3. Post-tribulacionistas
En primer lugar, el Señor no nos ha mandado a eso.
A nosotros se nos manda a escudriñar la Palabra y aprender de ella para que la Fe una vez dada a los Santos en Cristo, no esté basada en la sabiduría de los hombres, sino en la misma Palabra de Dios.
Y cuando abrimos el Libro respecto a nuestra reunión con él, en el aire (1Ts.4:17; 2Ts.2:1), debemos tener especial cuidado de no confundir este evento con el DÍA DEL SEÑOR, que es la base del ruego del apóstol en su segunda carta a la asamblea de Tesalónica:
2Ts 2:1 Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, Y NUESTRA REUNIÓN CON ÉL, OS ROGAMOS, HERMANOS,
2Ts 2:2 que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, EN EL SENTIDO DE QUE EL DÍA DEL SEÑOR ESTÁ CERCA
Las siguientes Escrituras:
Jua 14:2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.
Jua 14:3 Y si me fuere y os preparare lugar, VENDRÉ OTRA VEZ, Y OS TOMARÉ A MÍ MISMO, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.
Hch 1:9 Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos.
Hch 1:10 Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas,
Hch 1:11 los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, ASÍ VENDRÁ COMO LE HABÉIS VISTO IR AL CIELO.
Flp 3:20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, DE DONDE TAMBIÉN ESPERAMOS AL SALVADOR, al Señor Jesucristo;
Flp 3:21 el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas.
1Ts 1:9 porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos recibisteis, y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero,
1Ts 1:10 Y ESPERAR DE LOS CIELOS A SU HIJO, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera.
Apo 22:7 ¡He aquí, VENGO PRONTO! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro.
Apo 22:12 He aquí YO VENGO PRONTO, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.
Apo 22:20 El que da testimonio de estas cosas dice: CIERTAMENTE VENGO EN BREVE. Amén; sí, ven, Señor Jesús.
Si observamos bien el contexto de estas Escrituras, no hay expresiones de Juicio, de Tinieblas, de Castigo, de Ira, que son las características del “DÍA DEL SEÑOR” que afecten la condición de los santos que aman su venida, más bien hay recompensa, leemos:
2Ti_4:8 Por lo demás, me está guardada LA CORONA DE JUSTICIA, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.
DE MANERA QUE ESTAS ESCRITURAS CONSTITUYEN LA MÁS FIEL EVIDENCIA QUE LA IGLESIA NO ESPERA EL “DIA DEL SEÑOR”, SINO A NUESTRO AMADO SALVADOR.
En segundo lugar:
Los que se adhieren a la enseñanza de la Iglesia pasando por la Gran Tribulación… hacen caso omiso de la severa advertencia apostólica respecto al evangelio de la gracia de Dios revelado a Pablo en esta dispensación de la gracia, leemos:
Gál_1:8 Mas si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, SEA ANATEMA.
Gál_1:9 Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, SEA ANATEMA.
En la actualidad, la nación de Israel no tiene ningún evangelio que predicar, ninguna comisión que cumplir… pero en la Gran Tribulación predicara el evangelio del reino, tal como profetizó el Señor Jesucristo en Mateo 24:14.
El evangelio del reino fue predicado a Israel bajo la ley por el mismo Señor en su condición de Mesías Rey de Israel:
Mat_9:35 Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo
Las Escrituras antiguas señalan los rasgos distintivos de este mensaje de la siguiente manera:
1. Un Cetro (Gén.49:10), que la nación despreció como a un palo cualquiera.
2. Un Rey (Ap.19:16) que la nación crucificó en medio de dos ladrones (Jn.19:19)
3. Un Reino
Luc 1:33 y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.
COMENZANDO POR QUE LA IGLESIA DE CRISTO NO ES LA CASA DE JACOB
De manera que someter a la Iglesia a pasar la gran tribulación del DÍA DEL SEÑOR es colocarla bajo otro evangelio, es convertirse en anatema tal como advirtió el apóstol.
El rasgo distintivo del mensaje del evangelio de la gracia de Dios revelado a Pablo:
ál 1:11 Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre;
Gál 1:12 pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, SINO POR REVELACIÓN DE JESUCRISTO.
No es un Cetro, no es un Rey, no es un Trono, no es un Reino... es Cristo y este crucificado, leemos:
1Co 2:1 Así que, hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría.
1Co 2:2 Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, Y A ÉSTE CRUCIFICADO.
En tercer lugar:
Al creyente no se le enseña a esperar la muerte, al contrario, se le dice en 1Cor. 15:51 que no todos dormiremos, sino que seremos transformados en el momento de nuestra reunión con él.
Esta transformación de nuestros cuerpos está relacionada con la naturaleza celestial de la Iglesia, somos ciudadanos celestiales (Fil3:20)
Y el “DÍA DEL SEÑOR” con sus juicios, y castigos no son para los ciudadanos celestiales sino, como bien enseña la Escritura, para los moradores de la tierra, leemos:
Apo_13:12 Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada.
Apo_13:14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió.
Apo_14:6 Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo,
En cuarto lugar:
Nosotros esperamos de los cielos a Jesús quien nos libra de la ira venidera contenida en la Gran Tribulación… las siguientes Escrituras nos brindan confianza:
1Ts 5:2 Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá, así como ladrón en la noche;
A nosotros, su Iglesia, no nos sorprende la venida de Señor por cuanto lo estamos esperando y amamos su venida.
1Ts 5:4 Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón.
1Ts 5:5 Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas.
1Ts 5:9 Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo
DE MANERA QUE BASADOS EN LA PROMESA DE CRISTO:
“VENDRÉ OTRA VEZ Y OS TOMARÉ A MÍ MISMO”
PODEMOS ESTAR SEGUROS QUE EL ARREBATAMIENTO DE LA IGLESIA OCURRE ANTES DE LA IRA VENIDERA (1Ts.1:10)
Esta revelación de nuestra reunión con el Señor Jesucristo en el aire (1Ts,4:17) no se encuentra en el AT, lo que se encuentra allí es una confirmación de nosotros descendemos con él en un escenario de Juicio cuando sus pies se posen en el Monte de los Olivos, leemos:
Zac 14:4 Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur.
Zac 14:5 Y huiréis al valle de los montes, porque el valle de los montes llegará hasta Azal; huiréis de la manera que huisteis por causa del terremoto en los días de Uzías rey de Judá; y vendrá Jehová mi Dios, Y CON EL TODOS SUS SANTOS.
¿CÓMO LLEGARON ESTOS SANTOS AL CIELO?
Es el cumplimiento de su promesa de nuestra reunión con él
“VENDRÉ OTRA VEZ Y OS TOMARÉ A MÍ MISMO”
Y dónde está el Rey de reyes y Señor de señores, está la Reina.
Porque manifiesto es que luego del Tribunal de Cristo donde se galardona la Novia, viene las Bodas del Cordero y nosotros descendemos con él, leemos:
Apo 19:7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.
Apo 19:8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.
Fijémonos en el vestido de la Novia: “lino fino, limpio y resplandeciente” que es el mismo de los ejércitos celestiales acompañando al Rey de reyes para juzgar el mundo y establecer su Reino Milenial, leemos:
Apo 19:14 Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos.
Esto significa de nuevo, que donde está el Rey, está la Reina.
Hay otras consideraciones, pero creo que estas son suficientes para entender que la Iglesia de Cristo no pasa por la Gran Tribulación.
En estos días de cuarentena mundial a causa de la peste, se acrecienta mucho más nuestro anhelo de la venida del Señor por su Iglesia.
¿ESTAMOS LISTOS PARA REUNIRNOS CON ÉL?
Que el Señor prospere Su Palabra.