Re: El que come mi carne y bebe mi sangre, habita en mí y yo en él, y tiene vida eter
Bien ya que estoy pongo una carta que escribi en el 09 a las monjas donde me confirmaron - he quitado los nombres y puesto XXXXX solo
pero aqui esta:
Querida Madre PXXXXXXX y Hermana AXXXXXXX – Familia.
Ha llegado la hora – de escribiros, dar gracias y algunas explicaciones breves y contaros mis próximos (si Dios quiere se cumplan) pasos.
En la monición de entrada de mi Confirmación allí en Vuestra Casa, escribió Sebastián en 28/3 2002 - una cita de Lc 21, 14-16:
“Cuando llegó la hora, se puso a la mesa con los apóstoles; y les dijo: Con ansia he deseado comer esta Pascua con vosotros antes de padecer; porque os digo que yo no la comeré hasta que halle su complimiento en el Reino de Dios”.
Os cuento Madre y Hermana… que fui el día de Sta. Clara, 11/8, a Madrid para ver al sacerdote que es el fundador de Los Franciscanos de María – P. Santiago Martín – y celebre misa con ellos (en silencio me llegaron las palabras en mi dentro en ese momento; Con ansia he deseado comer esta cena con vosotros). P Santiago hizo, en su homilía, mención de Clara y Francisco… cuando Clara se vino en búsqueda de Francisco.
Yo no pensé en las palabras de Lucas porque yo en aquel instante me podía recordar de las palabras de Sebastián, sino porque Dios me las di en este instante y yo supe que eso va a ser mi nueva “familia” ya que la Virgen María mediante Su Hijo – me llevo allí (la parroquia del sacerdote se llama María Virgen Madre). Ha sido en vuestra casa, que se llama Inmaculada (mi primera confirmación fue, como sabéis, en la iglesia Sueca donde fui confirmada el 25/3 – Mariakyrkan), las veces que he estado y he venido para estar un tiempo con vosotras allí en vuestra hospedería siempre días muy importantes cada vez con El Señor - aunque jamás he hablado con vosotras de ello. Opte siempre de guardarlo en mi corazón y hacer lo que sabía que El deseaba de mí después de esos pasos. Ha sido mi Camino con El uno en silencio, apartado y en “soledad”. He cumplido con todo que El me ha dicho y pedido! Y ahora he comprendido que mi “niñez” en y con y a través de Dios ha terminado y ha llegado la hora para mi ser “adulta” y llevar mi peso y también dejar la “Casa mis Padres - vosotros” – y trabajar en Su Viña con los que Dios mediante Su Santa Madre ha elegido para ello - para mí. Cuando comprendí eso pedí al (ex) prior de los Dominicos de aquí (el también me ha llevado espiritualmente en todo este tiempo de estudios continuos y demás) –PXXXXXXXXX - que me bendiga para ese paso. Y él ha dicho que me va a dar la bendición de parte de la Familia Dominica el día 9/9 antes de misa – sobre las 11.30 en la capilla de los Dominicos en el convento XXXXXXXXX aquí en LXXXXXX.
Os escribo Madre y Hermana ya que el Amor que tengo a mi familia – la que Dios ha elegido mediante Su Santo Hijo, Jesucristo para mí – “mi Familia Blanca” - es y ha sido un Amor lleno de gratitud y de aprendizaje. He aprendido todo que se de las Sagradas Escrituras por las homilías de mis Hermanos de esta Orden y sus libros y no es poco que se después de atender a Misa todos los días durante los últimos siete años! He vivido y he sido “llevada” por vosotras y vuestras oraciones! Aunque Jesús para mí no es “El Novio” sino mas bien mi Maestro/Gran Amor y Hermano Mayor he hablado con mi Hermano Santiago sobre la posibilidad de ser consagrada. Esa posibilidad existe en esa asociación (los Franciscanos de María) - así que veremos lo que Dios elige al final para mí. … es El que al final ha elegido TODO… yo solo me he limitado a decirle que Si a todo y hacer lo que podía – incluso pasos muy duros y pesados. En fin… como se suele decir no es que vais a perder una hija sino vais a ganar una familia más! Mi corazón será siempre Dominico porque Dios así ha elegido y El Sabe mucho mejor todo lo que allí llevamos – en el corazón! He estado durante todos estos años como estuve en vuestra Iglesia aquel día de mi confirmación; “radiante de alegría- contagiosa y inundada de una gran emoción” porque – aunque he tenido mucho de que llorar y he llorado mucho por dolor y el peso que he llevado – he sido realmente profundamente feliz. Y lo soy! Dios ha, en el real sentido de la palabra, “Colmado mi vaso”. Me es totalmente imposible entender eso viéndome a mí misma, aunque lo entiendo Perfectamente, y lo tomo con calma ya que es la realidad que vivo! El hace lo que Le da la gana, se ve… !
Como última cosa os cuento uno de esos pasos importantes que ha tenido lugar en vuestra Iglesia… Madre tu no estabas pero tu Hermana AXXXXXX – cuando padre Feliz me pidió estar sentada al lado del altar en vuestra Iglesia a su lado para la epifanía 2008 (cuando estuve en Valencia con mi hijo mayor unos días)…. Y Sebastián dijo también en su monición de entrada en el 2002 (tengo una copia): Después del abrazo, después de reconocer nuestros extravíos y confesar que nos somos dignos hijos suyos; después de pedir perdón, porque lo necesitamos; después de dejar que, en con su misericordia abrace nuestras miseria, porque tanto más lo necesitamos cuanto menos lo merecemos, el nos lleva a casa, nos pone un vestido nuevo, nos sienta a su mesa, junto a él, en la silla vacía siempre dispuesta esperando esa hora.
Estuve allí al final ante toda la Familia “en esa silla vacía que había estado dispuesta para justo esa hora” cuando padre Feliz en su homilía de repente dijo; soy padre Dominico – estas hermanas son Hermanas dominicas nosotros nos conocemos – tu también nos conoces? Y dije allí sentada al lado del altar; si os conozco! No sé si Sebastián aquella vez cuando nos venimos la primera vez y estuvimos en ese locutorio contigo Madre te conto que las monjas a las que me fui en Benaguacil antes de llegar a la oficina de Sebastián en Caritas y luego a vosotras me habían dicho – “no te podemos recibir aquí ya que no te conocemos”. Y Jesús mediante su Servidor – padre Feliz – puso todo bien… hizo todo bien aquel día ante todos. Yo jamás lleve rencor o estaba enfadada con ellos ya que siempre veía todo como la Voluntad de Dios y un derroche ya que lo que El al final elige siempre es mejor de lo que había o hubiera elegido yo. Aunque, algo herida si me he sentido, ya que no he podido entender bien porque los Suyos no me recibían ya que El mismo me había recibido y me Amaba. Y eso hermanas ES mi Camino con El. El me lleva a donde El quiere y ve que es mejor para mi – para dar y recibir – y yo Le he seguido fiel y feliz! Ya que El Amor es justo eso; dar y recibir sabiendo que uno mismo no lo merece jamás y quizás tampoco los a los que se da el amor que uno tiene. Pero es como yo solía decir a Sebastián en aquel entonces (y es un dicho de mi tierra); ámame más cuando menos lo merezco, ya que es cuando más lo necesito. Es verdaderamente difícil pero mediante Dios se puede ya que El da primero a que luego uno puede repartir eso que se ha recibido. Ahora me ha llevado a una Familia que tiene como carisma – el agradecimiento. Que ha sido como si fuera “mi lema” durante todo este tiempo con El – ahora hace unos 12 años ya – 7 en la Iglesia. Felicidad y Agradecimiento.
Mi Camino, del cual no os he contado mucho mi Amada Familia, que Dios ha elegido para mi, encaja bien en el salmo (asi lo dice mi Papa Dios); 118 y sobretodo ha sido (casi a pie de la letra) en papel de discípulo - viviendo el Evangelio de Juan.
Salmo 118 (117)
CANTO PROCESIONAL DE ACCIÓN DE GRACIAS
1 ¡Aleluya!
Invitación a la acción de gracias
¡Den gracias al Señor, porque es bueno,
porque es eterno su amor!
2 Que lo diga el pueblo de Israel:
¡es eterno su amor!
3 Que lo diga la familia de Aarón:
¡es eterno su amor!
4 Que lo digan los que temen al Señor:
¡es eterno su amor!
Reconocimiento de la ayuda recibida
5 En el peligro invoqué al Señor,
y él me escuchó dándome un alivio.
6 El Señor está conmigo: no temeré;
¿qué podrán hacerme los hombres?
7 El Señor está conmigo y me ayuda:
yo veré derrotados a mis adversarios.
8 Es mejor refugiarse en el Señor
que fiarse de los hombres;
9 es mejor refugiarse en el Señor
que fiarse de los poderosos.
10 Todos los paganos me rodearon,
pero yo los derroté en el nombre del Señor;
11 me rodearon por todas partes,
pero yo los derroté en el nombre del Señor;
12 me rodearon como avispas,
ardían como fuego en las espinas,
pero yo los derroté en el nombre del Señor.
13 Me empujaron con violencia para derribarme,
pero el Señor vino en mi ayuda.
14 El Señor es mi fuerza y mi protección;
él fue mi salvación.
15 Un grito de alegría y de victoria
resuena en las carpas de los justos:
"La mano del Señor hace proezas,
16 la mano del Señor es sublime,
la mano del Señor hace proezas".
17 No, no moriré:
viviré para publicar lo que hizo el Señor.
18 El Señor me castigó duramente,
pero no me entregó a la muerte.
Entrada solemne en el Santuario
19 "Abran las puertas de la justicia
y entraré para dar gracias al Señor".
20 "Esta es la puerta del Señor:
sólo los justos entran por ella".
21 Yo te doy gracias porque me escuchaste
y fuiste mi salvación.
22 La piedra que desecharon los constructores
es ahora la piedra angular.
23 Esto ha sido hecho por el Señor
y es admirable a nuestros ojos.
24 Este es el día que hizo el Señor:
alegrémonos y regocijémonos en él.
25 Sálvanos, Señor, asegúranos la prosperidad.
26 ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!
Nosotros los bendecimos desde la Casa del Señor:
27 el Señor es Dios, y él nos ilumina.
"Ordenen una procesión con ramas frondosas
hasta los ángulos del altar".
28 Tú eres mi Dios, y yo te doy gracias;
Dios mío, yo te glorifico.
29 ¡Den gracias al Señor, porque es bueno,
porque es eterno su amor!
Os lo digo ahora para que también vosotras podéis entender algo de lo que han sido estos años para mí – con, en y a través de Jesucristo, Nuestro Padre (y al final bajo la Cruz) con mi Nueva Madre – la virgen María.
Dios también me ha dado MUCHO AMOR y lo poco que puedo, y he podido, devolver a otros – intentare de dar de la forma que El Quiere mediante esa Familia XXXXXXX y con XXXXX –mi nuevo Hermano.
Dios me dio una Familia (mi Familia Blanca) donde crecer y aprender, donde estar bajo Sus Alas y para que la Sagrada Palabra de Dios fermente en mí – Jesús mismo mediante Su Palabra ha llegado a darme… mucha Vida. Ahora incluso El me ha dado Su Madre y un Hermano para poder trabajar - según mi Hermano XXXXXXX vea que pueda usarme. Habéis tenido mis oraciones como sé que he tenido las vuestras – y se que todo fruto que dará mi trabajo ha nacido de vuestro huerto. Queridas, término pues como empecé – con las palabras de Sebastián en su monición de entrada de mi confirmación:
Llego la hora. Nunca es tarde si la dicha es buena, decimos. No es tarde, es la hora: la hora de Dios y la hora del hombre Dios nunca llega tarde a sus citas. Él llama primero. Y llega siempre primero, cuando llega la hora y llegamos a su encuentro, él ya estaba, siempre ha estado, nos esperaba…
Os Ama profundamente, Unida por Dios a Vosotras Siempre En, Por y A Través de Cristo y por María nuestra Madre – os abraza y saluda Vuestra “hija” y hermanita…
XXXX