Re: el diccionario biblico adventista, las piramides y el diluvio
Estoy de acuerdo con aquello de santurrón. Solo con leer el antiguo testamento para saber que Dios no es blandito ni santurrón ni le tiembla el pulso a la hora de ejercer justicia.
Coincido contigo que las babosadas religiosas no solo son repulsivas sino asesinas pero las personas son los destinatarios del mensaje de salvación de nuestro Dios.
No tenemos lucha contra carne y sangre.
Esto quiere decir que ningún ser humano es nuestro enemigo, sino aquel que es la misma fuente de la rebelión y la mas grande usina de mentiras.
De todas maneras, igual estrategia no funciona para todos.
Mas allá de toda chachara, la escritura es clara y nos dice que Jesús no vino a condenar sino a salvar lo que se había perdido.
A quien sino fue dirigido aquel: "Padre perdónalos" sino a los seres humanos responsables de su crucifixión?
Sabemos que no pedía el perdón para el diablo pero si para aquellos que se sometieron a sus intereses.
La mansedumbre de Jesús es notoria.
Aún cuando realizó estos juicios demostró en todo momento dominio propio y mansedumbre.
Esto no implica que no debamos denunciar con firmeza el pecado o el engaño.
De todas maneras no fue mi intención juzgar tus motivaciones sino simplemente aportar para la paz.
Como el Señor nos dijo:
Bienaventurados los pacificadores.
Yo no pienso que sea Jesús, pero me consta (y es fácil demostrarlo) que el Jesús santurrón que quieren presentar algunos (entre los que, obviamente, te encuentras) es irreal y, por lo tanto, no hay razón alguna para imitar a un Jesús que algunos han imaginado. Jesús no era así. San Pablo, que no era Jesús, no tuvo ningún problema en llamar "Pared blanqueada" a un corrupto sumo sacerdote de Israel (Hech. 23:3). Por supuesto, yo tampoco soy San Pablo, ni pretendo ser santo, pero la cosa incide en que santurronería no tiene en sí misma ningún valor recomendable. Las babosadas religiosas son repulsivas. Mejor llamar al pan pan y al vino vino. La sopa clara y el chocolate espeso. Lo demás, pamplinas de beatos.
Estoy de acuerdo con aquello de santurrón. Solo con leer el antiguo testamento para saber que Dios no es blandito ni santurrón ni le tiembla el pulso a la hora de ejercer justicia.
Coincido contigo que las babosadas religiosas no solo son repulsivas sino asesinas pero las personas son los destinatarios del mensaje de salvación de nuestro Dios.
No tenemos lucha contra carne y sangre.
Esto quiere decir que ningún ser humano es nuestro enemigo, sino aquel que es la misma fuente de la rebelión y la mas grande usina de mentiras.
De todas maneras, igual estrategia no funciona para todos.
Mas allá de toda chachara, la escritura es clara y nos dice que Jesús no vino a condenar sino a salvar lo que se había perdido.
A quien sino fue dirigido aquel: "Padre perdónalos" sino a los seres humanos responsables de su crucifixión?
Sabemos que no pedía el perdón para el diablo pero si para aquellos que se sometieron a sus intereses.
La mansedumbre de Jesús es notoria.
Aún cuando realizó estos juicios demostró en todo momento dominio propio y mansedumbre.
Esto no implica que no debamos denunciar con firmeza el pecado o el engaño.
De todas maneras no fue mi intención juzgar tus motivaciones sino simplemente aportar para la paz.
Como el Señor nos dijo:
Bienaventurados los pacificadores.