Y en el 380 el Papa Dámaso de la religión constantiniana, establece el canon bíblico que tu veneras
Según el diablo.
Pero según Cristo, nos dejó la datación de cada documento oficial de la biblia, comenzando por el Pentateuco, siguiendo por los evangelios y las cartas epistolares.
Si en los primeros años de la Iglesia, en el escenario después de Pentecostés, los oradores eran judíos y los apóstoles de Cristo, tenían escrituras judías, y la revelación doctrinal que aún no había sido escrita, pero doctrina, al fin y al cabo,
ya la Iglesia tenía su propio canon, leemos:
Hch 2:42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.
Un canon completamente judío, porque la idea de evangelizar a los gentiles ni siquiera había recibido consideración.
Y cuando uno de sus apóstoles fue comisionado por Cristo mismo para evangelizar un gentil, fue llamado públicamente a que diera explicaciones de una acción que parecía tan extraña y errónea.
Hch 11:3 diciendo: ¿Por qué has entrado en casa de hombres incircuncisos, y has comido con ellos?
Este es el verdadero Canon de Cristo, que va en desarrollo hasta abarcar las Epistolas Apostólicas, escritas posteriormente y finalizando con Apocalipsis.
Todos esos documentos tienen su fecha de datación.
El diablo del catolicismo romano está impedido de meter sus narices engañando a sus hijos, con el cuento de que ellos son los poseedores del canon.
Y ninguna parte del Canon de Cristo encontramos las enseñanzas corrompidas y blasfemas dl magisterio católico.
Y esto ya lo saben ustedes, pero como fieles hijos de Satanás, cambian al Cristo de las Escrituras por el cristo de yeso que colocan en su santuario idolátrico, donde resalta con mayor énfasis la estatua de la reina del cielo como la corredentora de ustedes los religiosos paganos.
No vale siquiera continuar invitándoles a que abandonen ese camino al infierno, porque no creen, piensan que estamos atacando a la "virgencita", al purgatorio, a san Pedro, al argentino Bergoglio, a vuestra pedofilia, y muerden la mano que les extendemos para salvación por medio de Cristo Jesús, nos consideran enemigos de vuestro sistema religioso y no hombres deseosos que se salven y vengan a los pies, contritos y humillados, del Cristo de Dios, del Cristo de la Biblia.