Dilema de Romanos 7 y Romanos 8: "dos hombres y un destino" desde el prisma de la Vida Interior.

El Señor es bueno con nosotros. Sí, sí, sí y sí. Coincido con todo lo dicho por Héctor, David, Pericles y Eraclio. En letra y espíritu.

¿Y sabéis lo liberador de la visión?

Que se acabaron los "cristianitos piadosos y buenitos": la "carne" del más "santo" produce "obras pecaminosas" (cuanto más "santo", más en contra de su conciencia y de su voluntad, pero está ahí SIEMPRE) y sólo en una relación personal con el Espíritu de Dios, puede librarse de esas OBRAS. Es una batalla continua, en mayor o menor intensidad a lo largo de las distintas etapas del creyente entregado. Pero ahí está "eso": TODOS NOSOTROS "bajo lo mismo".

Quizás ahora veamos con otros ojos a los pastores, sacerdotes, etc... e incluso tengamos más misericordia con ellos (y oremos por ellos) al saber la realidad de su vida (aunque ellos no tengan la visión). También tendremos otra visión a la hora de mirar a los que se dan "golpes en el pecho" y se ponen de "ejemplo de beatería y espiritualidad" entre sus hermanos, y sepamos que no lo son (no en "ese" sentido)

A mí me ha resultado francamente liberador y radical para mi propia vida.

¡Su Amor sea con todos vosotros!,
Ibero
 
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El Señor es bueno con nosotros. Sí, sí, sí y sí. Coincido con todo lo dicho por Héctor, David, Pericles y Eraclio. En letra y espíritu.

¿Y sabéis lo liberador de la visión?

Que se acabaron los "cristianitos piadosos y buenitos": la "carne" del más "santo" produce "obras pecaminosas" (cuanto más "santo", más en contra de su conciencia y de su voluntad, pero está ahí SIEMPRE) y sólo en una relación personal con el Espíritu de Dios, puede librarse de esas OBRAS. Es una batalla continua, en mayor o menor intensidad a lo largo de las distintas etapas del creyente entregado. Pero ahí está "eso": TODOS NOSOTROS "bajo lo mismo".

Quizás ahora veamos con otros ojos a los pastores, sacerdotes, etc... e incluso tengamos más misericordia con ellos (y oremos por ellos) al saber la realidad de su vida (aunque ellos no tengan la visión). También seremos más maduros a la hora de mirar a los que se dan "golpes en el pecho" y se ponen de "ejemplo de beatería y espiritualidad" entre sus hermanos, y sepamos que no lo son (no en "ese" sentido)

A mí me ha resultado una visión francamente liberadora y radical para mi propia vida.

Su Amor sea con todos vosotros,
Ibero


Ibero, me acuerdo cuando me fue dado la Gracia de entrar en la Iglesia. Me di cuenta que nuestros sacerdotes cargan para con nosotros ... y nosotros quienes nos damos a tambien cargar para con los demas - tambien seremos parte de ello.
Es una carga espiritual - y a la vez Cristo cuando nos ofrecemos como panes agradables para recibir y dar en Cristo (Juan 14-17) nos ayuda en gran manera! La Iglesia somos todos los que en nuestro corazón confesamos a Cristo como Senor y que Le amamos mas que a nuestras propias vidas - pero tambien todos los bautizados, confirmados etc.
Por tanto somos muchos y grandes son nuestras culpas y mayor la Gracia de parte del Senor ...

:)
Alegria ... alegria y mas Alegria...
 
Así es Ester. Creo que lo que recibiste en aquel entonces fue una revelación del Señor para ti y para la Iglesia. Abunda en ello.

Amor y alegría compartidas,
Ibero
 
Así es Ester. Creo que lo que recibiste en aquel entonces fue una revelación del Señor para ti y para la Iglesia. Abunda en ello.

Amor y alegría compartidas,
Ibero

Creo que mas bien fue una especie de "aclaración" --- lo qué si fue una revelación fue algo que "vi" en el verano del 2004 estaba llena del E. S --- y lo describí en palabras ya que era una Ciudad en una cima.

Te lo dejo en sueco - tal como fue escrito ya que tiene completa relación con todo aquí dicho...

Staden 2004.

Ovan berget när morgonsolens första strålar träffar kupolerna och allt badar i ett gyllene ljus, ser jag den. Du tar min hand, vi går vidare.

Vilken stad är detta, frågar jag.

Ett ögonblick, en sekund så var den bortom bergen. Dess gyllenfärgade kupoler av solen, stod kvar i mitt minne. Det mittersta berget bar staden de andra två stod bredvid och omgav.

Det ropar mellan bergen, och morgondiset lättar. Vilken var staden frågar jag på nytt. Plötsligt inser jag att du inte är här för att svara mig.

Jag ser mig om, gröna kullar, morgondaggen ligger på ängar och blommor. Bergen färgas röda av solen som går upp. Värmen. Solen. Den blå himmelen.

En liten stund sätter jag min ner, stillheten blir ett. Väntar.

Du kommer inte så jag börjar gå nedför. Musiken du spelade när min värld föll samman. Har blivit ett med kärleken.

Och för en sekund vet jag inte var jag befinner mig. I eller med eller som ett.

Idag är Herrens dag, och du lät mig inte gå. Du stillar mitt hjärta, väntar fast jag inte kan veta var.

När skuggan av dalen kommer stannar jag upp. Ser upp och ser hur solen plötsligt och fullständigt upplyser sidan av ett berg.

Jag känner din andedräkt i vinden som fläktar kring mitt ansikte. Jag hör dig, närma dig genom musiken. Stilla, sedan högre och högre.

Du skrev i vårt inre, du skrev i vårt hjärta, du skriver på berget.

Morgonen är till ända. Nu kommer folket. De har väntat på dig.

Jag ser din rygg när du går emot dem. Vänder mig om och ser tillbaka. Skuggan leker mot den delen som ännu inte är upplyst.

En gyllen hök med harnesk.
 
Creo que mas bien fue una especie de "aclaración" --- lo qué si fue una revelación fue algo que "vi" en el verano del 2004 estaba llena del E. S --- y lo describí en palabras ya que era una Ciudad en una cima.

Te lo dejo en sueco - tal como fue escrito ya que tiene completa relación con todo aquí dicho...

Staden 2004.

Ovan berget när morgonsolens första strålar träffar kupolerna och allt badar i ett gyllene ljus, ser jag den. Du tar min hand, vi går vidare.

Vilken stad är detta, frågar jag.

Ett ögonblick, en sekund så var den bortom bergen. Dess gyllenfärgade kupoler av solen, stod kvar i mitt minne. Det mittersta berget bar staden de andra två stod bredvid och omgav.

Det ropar mellan bergen, och morgondiset lättar. Vilken var staden frågar jag på nytt. Plötsligt inser jag att du inte är här för att svara mig.

Jag ser mig om, gröna kullar, morgondaggen ligger på ängar och blommor. Bergen färgas röda av solen som går upp. Värmen. Solen. Den blå himmelen.

En liten stund sätter jag min ner, stillheten blir ett. Väntar.

Du kommer inte så jag börjar gå nedför. Musiken du spelade när min värld föll samman. Har blivit ett med kärleken.

Och för en sekund vet jag inte var jag befinner mig. I eller med eller som ett.

Idag är Herrens dag, och du lät mig inte gå. Du stillar mitt hjärta, väntar fast jag inte kan veta var.

När skuggan av dalen kommer stannar jag upp. Ser upp och ser hur solen plötsligt och fullständigt upplyser sidan av ett berg.

Jag känner din andedräkt i vinden som fläktar kring mitt ansikte. Jag hör dig, närma dig genom musiken. Stilla, sedan högre och högre.

Du skrev i vårt inre, du skrev i vårt hjärta, du skriver på berget.

Morgonen är till ända. Nu kommer folket. De har väntat på dig.

Jag ser din rygg när du går emot dem. Vänder mig om och ser tillbaka. Skuggan leker mot den delen som ännu inte är upplyst.

En gyllen hök med harnesk.


Aqui una traducción....

Ciudades 2004.

Sobre la montaña, cuando los primeros rayos del sol de la mañana se encuentran con la cúpula y todo se está bañando en una luz dorada, lo veo. Tomas mi mano, seguimos adelante.

Qué ciudad es esta? pregunto.

Un momento, un segundo, estaba más allá de las montañas. Sus cúpulas doradas del sol quedaron en mi memoria. La montaña del medio llevaba la ciudad y los otros dos se encontraban al lado y rodeando.

Hay ecos de voces entre las montañas, y la luz de la mañana alivia. ¿Cuál fue la ciudad que vi?, vuelvo a preguntar? De repente, me doy cuenta de que no estás aquí para responderme.

Estoy viendo verdes colinas, una mañana por la mañana en prados y flores. Las montañas son coloreadas de rojo por la salida del sol. El calor. El sol. El cielo azul

Un momento y empiezo a bajar, el silencio se convierte en UNO con todo. Espero.

No vienes, así que empiezo a bajar. La música que tocaste cuando mi mundo se vino abajo. Se han convertido en uno con el Amor.

Y por un segundo, no sé dónde estoy. En, o con, o como uno.

Hoy es el día del Señor, y no me dejaste ir. Tu pones a mi corazón, esperando no puedo saber dónde.

Cuando venga la sombra del valle, me detendré. Mirando hacia arriba y viendo cómo el sol ilumina repentina y completamente el lado de una montaña.

Siento tu aliento en el viento que sopla alrededor de mi cara. Te escucho acercarte a la música. Aún así, entonces más y más alto.

Escribiste en nuestros corazones, escribiste en nuestros corazones, escribiste en la montaña.

La mañana es hasta el final. Ahora viene la gente. Te han estado esperando.

Veo tu espalda cuando vas contra ellos. Me da vuelta y mira hacia atrás. La sombra juega contra la parte que aún no está iluminada.

Un halcón dorado con arnés.
 
EXPLICANDO UN POCO MÁS ESTE HILO y mi postura:

Estaba esta tarde sopesando un poco más este tema, y me gustaría aclarar algunos conceptos.

Romanos 7 y 8 no habla de un "pecado personal consciente y voluntario", sino de la solución a un "pecado involuntario que va contra mi propia conciencia y al que aborrezco con la luz del entendimiento de Cristo". Como discutí antes con David, creo que las Escrituras presentan dos tipos de pecados en el hombre. El "voluntario personal" y el "involuntario universal". Romanos 7 y 8 describen las consecuencias del "pecado universal" o "pecado adámico" que todos llevamos encima como una herencia. Hay un "pecado personal voluntario" (que Dios juzga y juzgará) y un "pecado universal adámico" con unos "frutos" que podemos y debemos "matar". Este es el pecado del que habla este tema y que se manifiesta de la forma en que Pablo habla de él en los últimos versículos de Romanos 7. Esta es la experiencia mística de una "ley interior irremediable que me arrastra al error/pecado". Este hilo y la enseñanza de Romanos 7 no habla de la purificación básica de conciencia y de pecados "gruesos" de los que un cristiano se ha apartado cuando conoce a Cristo. Sino de una "tendencia al mal" con unos "frutos de muerte" que el creyente "nacido de nuevo" que se ha apartado del mundo y quiere vivir para Dios encuentra "dentro sí mismo". Es decir, de la batalla entre el bien y el mal dentro del creyente.

Esta lucha contra un "mal inconsciente subyacente" se manifiesta en todos los hombres en mayor o menor medida porque todos sufren el mismo problema, con la diferencia de que aquel que no tiene el Espíritu de Dios no puede "matar estas obras malas irremediables". No tiene el poder de la espada del Espíritu en su vida.

Es decir, este hilo no sirve para justificar el pecado voluntario, ni está hablando de este tipo de pecado. Este hilo no sirve para justificar al que, siendo creyente o no creyente, PRACTICA el pecado (vive absorto en el pecado voluntario y lo disfruta), sino para el que SIN PRACTICAR el pecado y auxiliado por el Espíritu Santo, encuentra algo muy corrupto "dentro de sí" que por su "oscuridad intrínseca" parece negar la Cruz y el Poder de Dios y produce muerte. Cosas que uno creía muertas, sutiles y no, que parecen "revivir". Una extraña "muerte" e "imposibilidad" interior. Y efectivamente, Pablo confirma que hay una "fábrica de obras de muerte" dentro de nosotros, y que lo máximo que podemos hacer con "eso" es MATAR lo que sale de esa fábrica. No podemos "detener" la fábrica ni su línea de producción (aún no ha llegado ese bendito día), pero sí podemos "meter en un incinerador de basura" lo que produce.

Este hilo es para cristianos entregados a Dios que no practican el pecado y que sufren al tal "Adán" en sí mismos en una batalla diaria.

Los místicos católicos (místicos que escasean en las filas protestantes, para su desgracia y vergüenza) hablaban de esto de muchas formas, que no es otra cosa que el proceso de purificación de todo hombre que acepta a Cristo y camina con Él. Estos místicos, (al describir su propio proceso espiritual, como hace Pablo en esta carta), describían "a su manera" esto mismo que Pablo dice de su propia experiencia de purificación con Dios.

Puedo recomendar a varios de ellos. En concreto el libro "Torrentes Espirituales" de Jeanne Guyon (mística católica que fue duramente perseguida por el catolicismo en su época) presenta claramente este proceso de madurez en su propia vida, un proceso que si bien no es el mismo en todos los creyentes, sí contiene elementos "comunes". Quizás Jeanne Guyon sea la persona que más y mejor ha ministrado de estas cuestiones al Cuerpo de Cristo desde la época de los apóstoles.

Amor,
Ibero
 
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EXPLICANDO UN POCO MÁS ESTE HILO y mi postura:

Estaba esta tarde sopesando un poco más este tema, y me gustaría aclarar algunos conceptos.


Puedo recomendar a varios de ellos. En concreto el libro "Torrentes Espirituales" de Jeanne Guyon (mística católica que fue duramente perseguida por el catolicismo en su época) presenta claramente este proceso de madurez en su propia vida, un proceso que si bien no es el mismo en todos los creyentes, sí contiene elementos "comunes". Quizás Jeanne Guyon sea la persona que más y mejor ha ministrado de estas cuestiones al Cuerpo de Cristo desde la época de los apóstoles.

Amor,
Ibero

Ibero, no conocía esa mujer... y la tuve que "googlear". Para mi experiencia no existe forma de ver el asunto de que la voluntad nuestra no debe ser ejecutada --- sino que "pasivamente debemos ser guiados por Cristo". Eso para mi no es correcto - para NADA.
Dios en todo respeta nuestras propias decisiones y por tanto no fuerza a nadie a hacer nada...
 
Nuestra muerte EN Cristo no es mística sino real y física.

Nosotros tenemos que ver y tomar nuestra muerte de la misma forma en que fue la muerte de Cristo.
Si la tomamos de otra forma entonces no nos salva.


Por eso digo que Jesús no vino a morir místicamente sino físicamente.

La paga por el pecado exige una muerte real y física y no una muerte mística.
Solo una muerte real paga el pecado.


Nuestra fe debe dirigirse a creer que hemos muerto real y físicamente de la misma forma en que lo hizo Jesús.

La LEY está activa y operando y seguirá activa y operando mientras que nazcan personas en el mundo, porque la LEY opera en el mundo de los vivos y se enseñorea de los hombres mientras estos viven.

Siempre que nazca un hombre la LEY le pondrá la pata encima y no se la sacará hasta que muera.




Pero los creyentes son resucitados.



Son personas que ya murieron físicamente a su vida natural como murió Jesús físicamente a la suya.

Dejaron esta vida y de esta forma murieron, no solo a la LEY sino al pecado.

La LEY ya no puede enseñorearse de ellos porque están muertos físicamente, de la misma forma en que Cristo colgaba en la cruz muerto físicamente.

Lo que sucede hermanos es que muchos le asignan a la muerte del creyente un valor diferente a una muerte física porque la ven con los ojos de la carne y piensan:

"No puede ser una muerte física porque acá estoy yo vivito y coleando."

Entonces piensan que se trata de una muerte metafórica o mística.

Pero el que "mueran por fe" no cambia el tipo de muerte.
Morir por fe no es morir místicamente sino morir físicamente pero por fe.

La muerte es la misma y morir es morir.

El que yo diga que muero por fe no me da el derecho de cambiarle el sentido a la palabra muerte.
 
¡Emocionante sin duda!

El fracaso de Cristo en la cruz se convirtió en nuestra victoria.
¿fracaso de Cristo?
Cristo no fracasó en nada.
Lo que él vino a hacer lo hizo de manera brillante y sin desviarse ni a derecha ni a izquierda.
El que fracasó fue el diablo con todos su hijitus.

Y su ÉXITO ROTUNDO devino en el éxito nuestro.
 
Nuestra muerte EN Cristo no es mística sino real y física.
(...)

Pero el que "mueran por fe" no cambia el tipo de muerte.
Morir por fe no es morir místicamente sino morir físicamente pero por fe.

La muerte es la misma y morir es morir.

El que yo diga que muero por fe no me da el derecho de cambiarle el sentido a la palabra muerte.
Siempre Muerte implica separaciòn.
Adàn y Eva pecaron. Fueron separados del huerto y de la presencia de Dios, enfrentaron la primera muerte y la màs vergonzosa, no tener a Dios en sus vidas. Claro, después de muchos años murieron fìsicamente. Fueron separados de su familia, ya no les vieron caminar ni dejar huella en esa tierra de ese entonces, volvieron al polvo.
Si estamos EN Cristo, es decir, obedeciendo su voluntad, siguiéndole, esperando en Èl, estamos en una muerte, muertos al mundo, en una separaciòn del mundo (deseos de la carne, deseos de los ojos de la vanagloria de la vida 1 Jn 2:16) incluso separados del pecado, muertos al pecado (santificandonos), es posible que nos sorprenda la muerte por cualquiera que sea el motivo (accidental, enfermedad o de manera natural) ahora somos muertos EN Cristo, separados para Èl, para el momento cuando el vuelva junto con los que hayan quedado, para reunirse con Èl.
Si la primera muerte es triste, la segunda muerte (separaciòn eterna en un lago de Fuego) es totalmente devastadora, no hay vuelta atràs, no hay esperanza. Apoc 21:8
 
Nuestra muerte EN Cristo no es mística sino real y física.


Supongo que esto lo dices porque para tí mística significa otra cosa y en ese caso habrá que darte la razón en que nuestra muerte en cristo no es "lo que sea que tu entiendas por mística" sino que es real y física.

Ahora. Convengamos en usar una definición estándar de Mística que todos podamos entender:

La mística (del verbo griego myein, «encerrar», de donde mystikós, «cerrado, arcano o misterioso») designa un tipo de experiencia muy difícil de alcanzar en que se llega al grado máximo de unión del alma humana a lo Sagrado durante la existencia terrenal. Se da en las religiones monoteístas (zoroastrismo, judaísmo, cristianismo, islam), así como en algunas politeístas (hinduismo) y en religiones no teístas (budismo), donde se identifica con un grado máximo de perfección y conocimiento.

En gris lo que es discutible de la definición. (No debatible, sino discutible, ya que por ejemplo el pentecostalismo que es en esencia místico no estará de acuerdo en que es algo difícil de alcanzar y el cristianismo en general evitara asociarlo con la ideología gnostica).

Como ves tu contraposición de Mística y tu identificación de lo real como lo físico es lo que me lleva a catalogarte como Fisicalista (Y creeme cuando te digo que ser fisicalista antropológico y cristiano no es algo que te lleva al infierno, en mi perspectiva, siempre que el fisicalista o el monista se mantenga dentro del evangelio, es una postura discutible pero no anticristiana como sería el materialismo ateo, el cientificismo o el anti-teismo ). Resulta que Dios es real y no es físico y resulta que el amor, la verdad y la gracia son reales y no están compuestas ni por átomos, procesos o fenómenos naturales o históricos.

Tu primer error es asumir que místico se opone a real. Tu segundo error es suponer que lo místico es antónimo de lo físico, cuando por definición es a la inversa. Lo místico es el misterio de algo no-físico que se experimenta en lo físico (terrenal)tal cual la real experiencia de ese que Pablo dice que subió al tercer cielo queda en duda sobre si fue mística (experimentada en el cuerpo físico) o de otra índole (experimentada fuera del cuerpo físico) en 2 de Corintios 2:2. Lo que no se duda nunca es si fue REAL. Quizá lo tuyo sea repulsión porque el termino ha sido apropiado por filosofías como la nueva era... pero no te confundas... tampoco confundas mítico con misticismo. Lo primero es un término que nos ayuda a entender cuando hay un intercambio entre lo sobrenatural y lo terrenal y lo segundo puede ser cualquier sistema, teoría, práctica o conjunto de todo eso para alcanzar esa unión mística con Dios (o con los demonios).

El griego myein es la raíz o base de palabras como místico o misterio y en ese sentido, los misterios de los que Pablo tanto habla podrían también traducirse como "secretos místicos" o "cosas que se callan", esto no solo porque se trata de cosas desconocidas que Dios aveces revela a todos y aveces pide que queden selladas... sino también porque en el ejercicio de la oración y la adoración a Dios hay momentos que deben ser de absoluto silencio y contemplación.

La mayor prueba de que la mística nada tiene que ver con la negación de lo real y físico es la encarnación de Cristo donde Cristo experimento una unión física y real con Dios en su cuerpo de carne y sangre. Al mismo tiempo, Cristo místicamente llevó el pecado de todos nosotros en su cuerpo y no por decir místico estamos hablando de que Cristo llevó nuestros pecados figurativamente. Estamos diciendo que de un modo que escapa el mundo físico y material, Cristo llevó tu pecado y el mio. ¿Crees esto?



Nosotros tenemos que ver y tomar nuestra muerte de la misma forma en que fue la muerte de Cristo.

Precisamente y aquí la Biblia nos dice que tenemos que ver nuestra muerte en la misma forma en que fue la muerte de Cristo. No según tu teoría, sino tal como Pablo nos enseña:

Romanos 6:5
Porque si hemos sido unidos a El en la semejanza de su muerte, ciertamente lo seremos también en la semejanza de su resurrección,

Romanos 6:8
Y si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con El,

Galatas 6:17
De aquí en adelante nadie me cause molestias, porque yo llevo en mi cuerpo las marcas de Jesús.

2 de Corintios 4:10
llevando siempre en el cuerpo por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo.

Colosenses 2:12
habiendo sido sepultados con El en el bautismo, en el cual también habéis resucitado con El por la fe en la acción del poder de Dios, que le resucitó de entre los muertos.

Pero como tu mismo has dicho estos son "metáforas", "fromas de hablar" o "declaraciones de fe", pues hasta que no muramos real y físicamente (lo que pone las metáforas, las formas de hablar y la fe en el plano de lo irreal o ilusorio) no habremos tomado nuestra muerte en la misma forma que la muerte de Cristo. ¿es así o me equivoco?


Si la tomamos de otra forma entonces no nos salva.

Precisamente. Por eso mejor la tomamos místicamente como una experiencia real en nuestras vidas y no esperamos a que hayamos muerto para aceptar el misterio de la Reconciliación.

Por eso digo que Jesús no vino a morir místicamente sino físicamente.

Todos morimos y moriremos físcamente, pero ninguno de nosotros llevara todos los pecados de la humanidad y ninguno de nosotros podrá resucitar sin la intervención de Cristo. Si la muerte de Cristo es meramente física entonces sepamos que nuestra fe es vana y Cristo no ha resucitado. Nuestros pecados no han sido perdonados y todo no son más que "formas de hablar" y "metáforas" que es lo que más o menos entiendo que tu llamas "mística".


La paga por el pecado exige una muerte real y física y no una muerte mística.

Como Mísitica para ti significa alguna cosa que desconozco asumiré en este punto la definición dada arriba. Entonces, si la muerte mística no es una muerte real, la fuerza de tu argumento nos lleva a pensar que en efecto pagamos nuestros pecados al morir real y físicamente, pero eso de que existen quienes mueren EN (dentro de, unidos a, metidos en) CRISTO es solo una "metafora" irreal.
 
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¿fracaso de Cristo?
Cristo no fracasó en nada.
Lo que él vino a hacer lo hizo de manera brillante y sin desviarse ni a derecha ni a izquierda.
El que fracasó fue el diablo con todos su hijitus.


Y su ÉXITO ROTUNDO devino en el éxito nuestro.

Es un gazapo :)
 
Siempre Muerte implica separaciòn.
Claro... Seguro.
El chorro al "separar" (matar) al hombre lo separó de sus seres queridos.
Aquel tipo fue preso 25 años por "separar" a una nena de dos balazos.
Mi abuela se separó de cáncer.
Mi tiá se separó de un ACV.
Solo lo que llamamos muerte espiritual es separación.
La muerte física es muerte.

Dejémonos de pavadas.

Adàn y Eva pecaron. Fueron separados del huerto y de la presencia de Dios, enfrentaron la primera muerte y la màs vergonzosa, no tener a Dios en sus vidas. Claro, después de muchos años murieron fìsicamente. Fueron separados de su familia, ya no les vieron caminar ni dejar huella en esa tierra de ese entonces, volvieron al polvo.
Si estamos EN Cristo, es decir, obedeciendo su voluntad, siguiéndole, esperando en Èl, estamos en una muerte, muertos al mundo, en una separaciòn del mundo (deseos de la carne, deseos de los ojos de la vanagloria de la vida 1 Jn 2:16) incluso separados del pecado, muertos al pecado (santificandonos), es posible que nos sorprenda la muerte por cualquiera que sea el motivo (accidental, enfermedad o de manera natural) ahora somos muertos EN Cristo, separados para Èl, para el momento cuando el vuelva junto con los que hayan quedado, para reunirse con Èl.
Si la primera muerte es triste, la segunda muerte (separaciòn eterna en un lago de Fuego) es totalmente devastadora, no hay vuelta atràs, no hay esperanza. Apoc 21:8
Con todo el respeto del mundo yo no estoy hablando de eso.
Y esto que decís desvirtúa completamente lo que estoy diciendo.


Cristo en la cruz no estaba muerto al mundo, en una separación del mundo, crucificando sus deseos carnales, separado del pecado, muerto al pecado, santificándose...
Mucha poesía que no hace otra cosa que tirar por tierra la cruz y su efecto.
Al final no los salvamos por su muerte física sino por la nuestra mística.
Porque nos negamos a nuestra carne....
Cualquiera.
 
Ibero, no conocía esa mujer... y la tuve que "googlear". Para mi experiencia no existe forma de ver el asunto de que la voluntad nuestra no debe ser ejecutada --- sino que "pasivamente debemos ser guiados por Cristo". Eso para mi no es correcto - para NADA.
Dios en todo respeta nuestras propias decisiones y por tanto no fuerza a nadie a hacer nada...

¿No conocías a Madame Guyon?

Una de las estrellas más brillantes del firmamento desde los tiempos de los apóstoles... y al mismo tiempo una gran desconocida.

Es curioso que los católicos desconozcan a sus mayores santos. Os pasáis el día canonizando a "santos mediocres"... y casi nadie sabe quién es Miguel de Molinos, Jeanne Guyon o François Fénelon. Qué curioso... es casi una cómica ironía lo vuestro. Como mujer católica tienes una gran deuda con ellos. Todos murieron abrazando el catolicismo mientras sufrían en sus carnes los mordiscos de odio de su "madre" en tiempos convulsos donde cualquier palabra de renovación espiritual la tachaban de "luteranismo". Sufrieron esa época de envidias y luchas políticas donde la religión era una excusa más para mantener o aumentar el poder. Por supuesto, los tres fueron "alabados" dentro del seno del catolicismo y después, cuando su influencia espiritual era tan grande que ponía en riesgo los sucios negocios de muchos pecadores (dentro y fuera de la Iglesia)... los metieron en cárceles y/o mataron.

A Jeanne Guyon no esperes conocerla por la Wikipedia. Para empezar a conocer a esta mujer, primero hay que leer su biografía terrenal, y después su biografía espiritual. Esta mujer causó tal revuelo en la Francia de Luis XIV (cuya mera presencia ponía nerviosos a todos) y tal avivamiento reformador, que puso media Europa patas arriba y llegó a sacudir el Vaticano en sus cimientos. Su doctrina del "puro amor" (es decir, el Evangelio) originó tal debate a nivel cardenalicio que casi ocasiona un segundo cisma (otro caso al estilo "Lutero") en el seno de la Romana Católica Iglesia.... en y dentro de Roma. En este caso, la discusión fue entre cardenales, aunque sin cismas políticos como el cisma protestante. Pero hubo tal división entre ellos mismos por razón del "puro amor" (unos estaban a favor, otros en contra) que casi se divide de nuevo la Católica Iglesia. La vida de Madame Guyón es una de esas obras escondidas de Dios (virtualmente desconocida) que sacude al mundo entero. La influencia de esta mujer no sólo llegó hasta el propio protestantismo... sino hasta el Nuevo Mundo y nuestros días. No conocer a Madame Guyon es renunciar a conocer lo más selecto del catolicismo, en el mejor y buen sentido. Es como ignorar a San Juan de la Cruz o a Teresa de Jesús. Una de esas extrañas "benditas mártires" del catolicismo martirizada por el propio catolicismo, y que demuestra que Dios siempre os ha enviado Sus siervos y que no tendréis excusa para pasar de "esto" (beata superficialidad) a "aquello" (realidad de amor en Cristo Jesús).

¡Amor!,
Ibero
 
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Nuestra muerte EN Cristo no es mística sino real y física.

Nosotros tenemos que ver y tomar nuestra muerte de la misma forma en que fue la muerte de Cristo.
Si la tomamos de otra forma entonces no nos salva.


Por eso digo que Jesús no vino a morir místicamente sino físicamente.

La paga por el pecado exige una muerte real y física y no una muerte mística.
Solo una muerte real paga el pecado.


Nuestra fe debe dirigirse a creer que hemos muerto real y físicamente de la misma forma en que lo hizo Jesús.

La LEY está activa y operando y seguirá activa y operando mientras que nazcan personas en el mundo, porque la LEY opera en el mundo de los vivos y se enseñorea de los hombres mientras estos viven.

Siempre que nazca un hombre la LEY le pondrá la pata encima y no se la sacará hasta que muera.




Pero los creyentes son resucitados.



Son personas que ya murieron físicamente a su vida natural como murió Jesús físicamente a la suya.

Dejaron esta vida y de esta forma murieron, no solo a la LEY sino al pecado.

La LEY ya no puede enseñorearse de ellos porque están muertos físicamente, de la misma forma en que Cristo colgaba en la cruz muerto físicamente.

Lo que sucede hermanos es que muchos le asignan a la muerte del creyente un valor diferente a una muerte física porque la ven con los ojos de la carne y piensan:

"No puede ser una muerte física porque acá estoy yo vivito y coleando."

Entonces piensan que se trata de una muerte metafórica o mística.

Pero el que "mueran por fe" no cambia el tipo de muerte.
Morir por fe no es morir místicamente sino morir físicamente pero por fe.

La muerte es la misma y morir es morir.

El que yo diga que muero por fe no me da el derecho de cambiarle el sentido a la palabra muerte.
Un poco lioso todo, salmo51. Yo llegué a la conclusión de que la Biblia es literal (en cuanto al texto), pero no en cuanto a la interpretación (afortunadamente).
 
Nuestra muerte EN Cristo no es mística sino real y física....

Tú eres como los católicos, que como no aceptan ni digieren espiritualmente lo místico de Cristo, realizan un rito antropofágico con la galleta. Tu estructura mental es la misma, pero en "versión protestante 3.0"... Me resulta curioso y fascinante lo que hace el protestantismo. Como quedáis huérfanos de la galleta física (rechazáis ese sacramento), tenéis una cosa parecida que llamáis "fe". ¡Usáis "la fe" como el católico usa "la galleta"! No sé si os dáis cuenta de este detalle. El equivalente al "Cristo-galleta" católico es el "Cristo-fe" protestante... pero la ceguera y el error subyacente es el mismo. UN RITO MENTAL MUERTO. Para vosotros "la fe" es una especie de talismán con el que invocar gasolina, cigarrillos, casas, hijos... o botellas de vino.

Yo me pregunto qué enseñan realmente en las iglesias protestantes, si es que os enseñan algo.

:)

Amor,
Ibero
 
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Claro... Seguro.
El chorro al "separar" (matar) al hombre lo separó de sus seres queridos.
Aquel tipo fue preso 25 años por "separar" a una nena de dos balazos.
Mi abuela se separó de cáncer.
Mi tiá se separó de un ACV.
Solo lo que llamamos muerte espiritual es separación.
La muerte física es muerte.

Dejémonos de pavadas.

No se dònde le hayas lo de pavadas a lo que te digo.
Cuando uno muere (físicamente) es separado, aunque me lo matices de con comillas,
si, uno muere, es separado de esta tierra, para dejar el cuerpo y partir con el Señor o partir al infierno.
A lo mejor eres de los que piensan que ahì en el fèretro, en el cuerpo inerte sigue ahì el fulano de tal
y que le puedes decir "good bye" y que tal vez te oye.
Lo que hay ahì no es más que una mortaja fría y tiesa, presta a que se la coman los gusanos.
Muerte fìsica tambièn es separaciòn no sòlo la muerte espiritual.
Cuando pendía de la cruz, una vez dijo: "en tus manos encomiendo mi espìritu" Expirò. Lc 23:46
Abandonò su cuerpo, se separò para ir a las partes màs bajas de la tierra. Ef 4:9
 
Tú eres como los católicos, que como no aceptan ni digieren espiritualmente lo místico de Cristo, realizan un rito antropofágico con la galleta. Tu estructura mental es la misma, pero en "versión protestante 3.0"... Me resulta curioso y fascinante lo que hace el protestantismo. Como quedáis huérfanos de la galleta física (rechazáis ese sacramento), tenéis una cosa parecida que llamáis "fe". ¡Usáis "la fe" como el católico usa "la galleta"! No sé si os dáis cuenta de este detalle. El equivalente al "Cristo-galleta" católico es el "Cristo-fe" protestante... pero la ceguera y el error subyacente es el mismo. UN RITO MENTAL MUERTO. Para vosotros "la fe" es una especie de talismán con el que invocar gasolina, cigarrillos, casas, hijos... o botellas de vino.

Yo me pregunto qué enseñan realmente en las iglesias protestantes, si es que os enseñan algo.

:)

Amor,
Ibero
Aunque yo no crea en la transubstanciación jamás llamaria galleta a lo que ellos usan para rememorar el cuerpo de Cristo.
Esas son las cosas que les quitan seriedad.
Galleta, bebe de probeta, carne espacial...
Vos no estas con la Iglesia católica y te reis de los protestantes...
¿Sos el remanente?
 
No se dònde le hayas lo de pavadas a lo que te digo.
Cuando uno muere (físicamente) es separado, aunque me lo matices de con comillas,
si, uno muere, es separado de esta tierra, para dejar el cuerpo y partir con el Señor o partir al infierno.
A lo mejor eres de los que piensan que ahì en el fèretro, en el cuerpo inerte sigue ahì el fulano de tal
y que le puedes decir "good bye" y que tal vez te oye.
Lo que hay ahì no es más que una mortaja fría y tiesa, presta a que se la coman los gusanos.
Muerte fìsica tambièn es separaciòn no sòlo la muerte espiritual.
Cuando pendía de la cruz, una vez dijo: "en tus manos encomiendo mi espìritu" Expirò. Lc 23:46
Abandonò su cuerpo, se separò para ir a las partes màs bajas de la tierra. Ef 4:9
Olvidate lo de pavadas. Disculpá. No creo que vos digas pavadas. Punto.