III
-Tomando como referencia nuestro Nuevo Testamento, es interesante que en el mundo helénico, la conversación era algo que estaba relacionado con el vivir, la conducta, el caminar, el andar, y no solamente con el hablar. Buscando en una Concordancia las palabras “conversación” y “conversar”, se podrá comprobar esto, ya que así se traduce a nuestro idioma desde una media docena de términos griegos que conllevan también el sentido señalado. Se infiere de aquí, que para ser un buen conversador, es menester también ser una buena persona. Dicho de otra manera, el descuidado en el hablar probablemente también lo sea en su vivir.
-Por experiencia propia tengo comprobado que actualmente no se sabe conversar, pues tal parece que a nadie se le ocurrió que fuera algo que habría que aprender, sino que surgía naturalmente en el individuo siguiendo al balbuceo del bebé que por imitación comenzaba a hablar. Para colmo de males, todavía, abundan los inconscientes padres que creen facilitar el aprendizaje del habla, acomodándose ellos al incipiente balbuceo, pronunciando expresamente mal las palabras, o llamando las cosas de modo impropio. Quienes tan mal empiezan, difícilmente lleguen luego a conversar bien. Parece ser que en esta escuela del hogar, los abuelos son mejores maestros que los padres.
-Nuestros lectores tienen bien a mano dos formas de comprobar lo que se lleva dicho: el periodismo televisivo y este mismo Foro;
a) En los telenoticieros y en programas de entrevistas a personalidades públicas, podemos ver y oír a periodistas profesionales egresados de una Facultad o Escuela de Periodismo, interpelando al entrevistado de un modo que provoca “vergüenza ajena”. En ocasiones se hace una pregunta tonta o capciosa; en otras, parece que el periodista busca promocionarse a expensas del entrevistado, pues la formulación de su pregunta le lleva prácticamente todo un discurso. Cuando el reportado está lúcido, a veces deja en ridículo al reportero contestando en pocas palabras lo que el otro preguntó con muchas frases. Es terrorífico cuando solo se responde con un Sí o con un No.
b) Aquí en el Foro, es todo un maestro en el arte del responder con pocas palabras una extensa exposición el forista Novo Hispano. Otros, son bien conocidos por decir siempre lo mismo y adosar a sus aportes una extensa lista de versículos bíblicos, como si ellos refrendasen lo que lleva dicho.
Cordiales saludos