El presidente Maduro, indicó que se relanzó un mecanismo de planificación conjunta y "el trabajo de planificación estratégica", junto al Banco de Desarrollo de China, que el sábado inauguró una sucursal en la capital venezolana.
Venezuela ha incrementado en los últimos ocho años sus relaciones diplomáticas y comerciales con China como parte de la estrategia del gobierno para diversificar su cartera de clientes internacionales, lo que incluye un aumento en las ventas de petróleo.
Gracias a los estrechos vínculos que han desarrollado los dos gobiernos, Venezuela se ha convertido en uno de los mayores socios comerciales de China en América Latina y el primer país de destino de los préstamos chinos en la región.
China y Venezuela han invertido 12,000 millones de dólares en un fondo para desarrollar proyectos conjuntos en sectores como producción petrolera, infraestructura y agricultura. A su vez,
las autoridades chinas han entregado a Caracas préstamos por más de 30,000 millones de dólares, que el gobierno está pagando con petróleo.
Venezuela es uno de los mayores exportadores de crudo del mundo y China uno de los mayores consumidores. El gobierno venezolano vende a Beijing unos 626,000 barriles diarios y para 2016 tiene proyectado elevar las ventas a un millón de barriles diarios.