Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en vosotros

Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Mat 26:26 Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.
26:27 Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos;
26:28 porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.
26:29 Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Luc 22:14 Cuando era la hora, se sentó a la mesa, y con él los apóstoles.
22:15 Y les dijo: ¡Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca!
22:16 Porque os digo que no la comeré más, hasta que se cumpla en el reino de Dios.
22:17 Y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros;
22:18 porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga.
22:19 Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí.
22:20 De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Gracias al ofrecimiento del Cuerpo y de la Sangre de Cristo, Dios el Padre, segun sus promesas ha derramado el Espíritu Santo sobre nosotros los creyentes que esperamos en él ( Hechos 2: 33 ).
Cristo Jesús voluntariamente se ofreció por nosotros para hacernos partícipes de su Palabra y de su Espíritu, de tal manera que ya no vivamos nosotros, sino que Cristo Jesús sea el que viva en nosotros. Se dió a si mismo para vivir en nosotros, dentro de nosotros. ( Gálatas 2: 20 ).
Y ahora somos Cristo, porque Cristo es en nosotros la esperanza de gloria ( Colosenses 1: 27 ).
Somos su Cuepo, la Iglesia.

PERFUMISTA
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

No querida no estoy hablando de los que ni se enteran que Dios existe ni se convierten sino de los que han sido llamados pero prefieren la obra del maligno. Estoy hablando de la realidad que pasa cuando gente que debería de ser de Dios optan por lo contrario como en el caso de Judas.

Y el infierno no es un cuento para asustar a niños o para tener como un palo a lado de la puerta para que tengas miedo y hagas lo que “piensas correcto” – es una realidad igual que lo maligno es una realidad y presente. Estoy también hablando de la realidad que haya en la carta de Judas que es la última de los Hermanos – una realidad que ahora nos rodea – y por tanto estoy hablando de una lucha que tenemos dentro el cristianismo y también dentro la Iglesia.

No hablo de ello porque tengo miedo – estoy en buenos manos – las de nuestro Salvador… pero también he visto cosas que realmente podían poner los pelos de punta… el Amor es grande… cierto – pero ser ingenuo también es algo “peligroso”.

¿Te has fijado en que no antes que “después” de recibir la eucaristía es cuando entra el maligno en Judas? Te pongo el pasaje de Juan:
13:26 Respondió Jesús: A quien yo diere el pan mojado, aquél es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote hijo de Simón.
13:27 Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: Lo que vas a hacer, hazlo más pronto.
13:28 Pero ninguno de los que estaban a la mesa entendió por qué le dijo esto.
13:29 Porque algunos pensaban, puesto que Judas tenía la bolsa, que Jesús le decía: Compra lo que necesitamos para la fiesta; o que diese algo a los pobres.
13:30 Cuando él, pues, hubo tomado el bocado, luego salió; y era ya de noche.

Y era de noche….

En Cristo
Estimada Kungens Ester... el amor es grande... cierto, en ello estamos de acuerdo... Pero ello no te hace ingenuo... ¿Crees tú que Jesús estaba ingenuo? No, pero Dios le había dado un propósito y Jesús pago el precio para cumplir con lo encomendado. El punto es, también hoy en día cuando los propósitos son de Dios los manifiesta con anterioridad a su ocurrencia y de manera clara, de tal forma que te sobrecoges, por decir algo, cuando ocurren tal y como se te había anunciado.

En cuanto a lo que dices, que después de la comunión es que entra el maligno... ésto es porque Judas se quedó en la ceremonia: El pan (el cuerpo) y el vino (la sangre) de Cristo, se le quedaron en metáfora o en parábola... pero Jesús fue "más lejos" que esa ceremonia y también, estimada, van más lejos aquellos que le aman.

Saludos,

Isle.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Estimada Kungens Ester... el amor es grande... cierto, en ello estamos de acuerdo... Pero ello no te hace ingenuo... ¿Crees tú que Jesús estaba ingenuo? No, pero Dios le había dado un propósito y Jesús pago el precio para cumplir con lo encomendado. El punto es, también hoy en día cuando los propósitos son de Dios los manifiesta con anterioridad a su ocurrencia y de manera clara, de tal forma que te sobrecoges, por decir algo, cuando ocurren tal y como se te había anunciado.

En cuanto a lo que dices, que después de la comunión es que entra el maligno... ésto es porque Judas se quedó en la ceremonia: El pan (el cuerpo) y el vino (la sangre) de Cristo, se le quedaron en metáfora o en parábola... pero Jesús fue "más lejos" que esa ceremonia y también, estimada, van más lejos aquellos que le aman.

Saludos,

Isle.

Gracias querida…
en casi todo lo que dices te digo que si… efectivamente es así. Pero quiero aclarar algo a cerca de la Eucaristía que es MUY IMPORTANTE.

Ahora creo que hay gente que no entiende lo que hacen cuando reciben la Eucaristía indignamente – no es que Judas (allí no estoy de acuerdo contigo y te digo que no los soy por las cosas que Dios me ha mostrado a cerca de eso) le quedo la Eucaristía en la ceremonia … y eso lo clarifica Juan el apóstol bien en sus escritos – no él era ladrón amador de dinero y un farsante que se hacía pasar como piadoso cuando dice que hubieras sido mejor dar el perfume derramado sobre los pies del Salvador a los pobres. Judas no era un hombre que JAMAS cambio ni tuvo el deseo jamás de hacerlo – su corazón – sino le iba bien el poder, la admiración que recibieron todos juntos a Cristo, y también le iba ser “alguien ante los ojos” de los demás – era un soberbio, un ladrón y un mentiroso… e hijo de mentira como era su padre – el diablo.
Así que … no … Jesucristo está lejos de ser ese blandito con ojos llenos de lagrimas y una carita que te dice “no me pegues mas”, está lejos de ser un hombre que perdona que hagamos con El lo que nos plazca y que nos burlemos de Él. Cierto es que nos da la oportunidad – no una vez sino continuamente pero también sabe quién de nosotros que es el que se aprovecha de eso… deliberadamente.
Los que van – también hoy – que tienen puestos elevados incluso dentro la Iglesia y Le reciben indebidamente en la Eucaristía- beben y comen su muerte como lo hizo Judas… eso es un aspecto que se habla poco pero que es cierto.
Por ello hay que tener TEMOR a Dios que ni eso tienen muchos hoy sino ven que recibir la Eucaristía es como “un derecho humano” como si fuera de la UNO y que nadie se les puede prevenir o debe de prevenírselo… ¿ahora entiendes a lo que voy?
Trae vida al justo y al que ama Dios pero al que no ama Dios ni es justo sino un malvado – trae la perdición.
En Cristo
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Beber la Sangre, es beber del Espíritu Santo.
El Espíritu Santo es el que da Vida, lo mismo que la Sangre en la cual está la vida de toda carne.
La carne de Cristo por lo tanto representa la Palabra, que, llena de Vida por el Espíritu Santo, se convierte en una Palabra Viva y eficaz.
Con el sacrificio expiatorio de Cristo Jesús en la Cruz del Monte Calvario, los creyentes hemos sido hechos partícipes del Cuerpo y de la Sangre derramada por Cristo, lo que quiere decir que Cristo al ofrecerse voluntariamente a si mismo por nosotros, nos dió lo que el es, esto es, a comer de su Palabra y a beber de su Espíritu, para que tengamos en nosotros mismos Su Palabra y su Espíritu, los cuales nos limpian de todo pecado y contaminación y nos hacen partícipes juntamente con Cristo Jesús de la Vida eterna.


PERFUMISTA

exacto
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

jesus no hablo simbolicamente hablo literalmente.

o sino porque muchos les parecio dura esa palabra?
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso


No solo de pan vivirá el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

jesus no hablo simbolicamente hablo literalmente.

o sino porque muchos les parecio dura esa palabra?

Porque no entendían.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Gracias querida…
en casi todo lo que dices te digo que si… efectivamente es así. Pero quiero aclarar algo a cerca de la Eucaristía que es MUY IMPORTANTE.

Ahora creo que hay gente que no entiende lo que hacen cuando reciben la Eucaristía indignamente – no es que Judas (allí no estoy de acuerdo contigo y te digo que no los soy por las cosas que Dios me ha mostrado a cerca de eso) le quedo la Eucaristía en la ceremonia … y eso lo clarifica Juan el apóstol bien en sus escritos – no él era ladrón amador de dinero y un farsante que se hacía pasar como piadoso cuando dice que hubieras sido mejor dar el perfume derramado sobre los pies del Salvador a los pobres. Judas no era un hombre que JAMAS cambio ni tuvo el deseo jamás de hacerlo – su corazón – sino le iba bien el poder, la admiración que recibieron todos juntos a Cristo, y también le iba ser “alguien ante los ojos” de los demás – era un soberbio, un ladrón y un mentiroso… e hijo de mentira como era su padre – el diablo.
Así que … no … Jesucristo está lejos de ser ese blandito con ojos llenos de lagrimas y una carita que te dice “no me pegues mas”, está lejos de ser un hombre que perdona que hagamos con El lo que nos plazca y que nos burlemos de Él. Cierto es que nos da la oportunidad – no una vez sino continuamente pero también sabe quién de nosotros que es el que se aprovecha de eso… deliberadamente.
Los que van – también hoy – que tienen puestos elevados incluso dentro la Iglesia y Le reciben indebidamente en la Eucaristía- beben y comen su muerte como lo hizo Judas… eso es un aspecto que se habla poco pero que es cierto.
Por ello hay que tener TEMOR a Dios que ni eso tienen muchos hoy sino ven que recibir la Eucaristía es como “un derecho humano” como si fuera de la UNO y que nadie se les puede prevenir o debe de prevenírselo… ¿ahora entiendes a lo que voy?
Trae vida al justo y al que ama Dios pero al que no ama Dios ni es justo sino un malvado – trae la perdición.
En Cristo

Este precioso valor es, pues, para vosotros los que creéis; pero para los que no creen, LA PIEDRA QUE DESECHARON LOS CONSTRUCTORES, ESA, EN PIEDRA ANGULAR SE HA CONVERTIDO, Y: Piedra de tropiezo, y roca de escándalo a los que tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; para lo cual fueron también ordenados. 1 Pedro 2:7-8
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

No solo de pan vivirá el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.


Justo… es así efectivamente…
y por esa razón usa Juan el evangelista el “nombre” Logos – el Verbo de Dios para denominar lo que es Cristo en Su totalidad.
Y en ello marca CAMINO… para la Unidad con, en y mediante Cristo Jesús para el creyente.
Te pongo un escrito antiguo de Justino el mártir aquí… es muy bello para dar algo de luz a lo que dije:

Participación de las criaturas racionales en el Logos
El punto céntrico de la apologética de Justino consiste en demostrar que Jesús Cristo es el Logos del cual todos los filósofos hablaron, y, por lo tanto, la medida que participan del Logos llegando a expresar una verdad parcial - viendo la verdad de modo obscuro - gracias a la semilla del Logos que en ellos fue depositada pueden decirse cristianos. Pero una cosa es poseer una semilla y otra es el propio Logos:

“Aprendimos que Cristo es el primogénito de Dios y que es el Logos, del cual participa todo el género humano” (Justino - Apol. Prima, 46).
“Consecuentemente, aquellos que vivieron antes de Cristo, pero no según el Logos, fueron malos, enemigos de Cristo (...) al contrario aquellos que vivieron y viven conforme el Logos son cristianos, y no están sujetos a miedos y perturbadores” (Justino – I Apologia).

Toda persona, creada como ser racional, participa del Logos, que lleva desde la gestación y puede, por lo tanto percibir la luz de la verdad.

Justino, convencido de que la filosofía griega tiende para Cristo, "cree que los cristianos pueden servirse de ella con confianza" y en conjunto, la figura y la obra del apologista "señalan a decidida opción de la Iglesia antigua en favor de la filosofía, en vez de ser a favor de la religión de los pagaos", con la cual los primeros cristianos "rechazaron con fuerza cualquier compromiso".

Justino, en particular, principalmente en su primera Apologia, condujo una crítica implacable con relación a la religión pagana y a sus mitos, que él consideraba como «caminos falsos» diabólicos en el camino de la verdad.

Así, Justino, y con él los otros apologistas, marcaron la toma de posición nítida de la fe cristiana por el Dios de los filósofos contra los falsos dioses de la religión pagana. Era la elección por la verdad del ser, contra el mito de la costumbre.

El Día del culto de los cristianos
Justino afirma que los cristianos guardaban como día sagrado a Dios el Domingo, pues fue este día que Jesus Cristo resucitó de los muertos:

“Reunimo-nos todos el día del Sol [el primer día de la semana era denominado de día de Sol en el Imperio Romano hasta el siglo IV], no sólo porque fue el primer día en que Dios, transformando las tinieblas y la materia, creó el mundo, pero también porque este mismo día Jesus Cristo, nuestro Salvador, resucitó de los muertos. Lo crucificaron en la víspera del día de Saturno; y el día siguiente a este, o sea, el día del Sol, apareciendo a sus apóstolos y discípulos, les enseñó todo lo que también nosotros os propusimos como digno de consideración” (Justino I – Apologia Cap. 66-67 : PG 6,427 - 431).

Descripción del culto de los cristianos
“El llamado día del Sol, se reúnen en un mismo lugar todos los que viven en las ciudades o en los campos. Se leen las memorias de los apóstolos o los escritos de los profetas, en la medida en que el tiempo permite. Terminada la lectura, aquel que preside toma la palabra para aconsejar y exhortar los presentes a la imitación de tan sublimes enseñamientos.
Después, levantamo-nos todos juntos y elevamos nuestras plegarias; como ya dijimos arriba, al acabemos de rezar, se presentan pan, vino y agua. Entonces lo que preside eleva al cielo, con todo su fervor, plegarias y acciones de gracias, y el pueblo aclama: Amén. Enseguida, se hace entre los presentes la distribución y el reparto de los alimentos que fueron eucaristizados, que son también enviados a los ausentes por medio de los diáconos.
Los que poseen muchos bienes dan libremente lo que les agrada. Lo que se recoge es colocado a la disposición del que preside. Este socorre los huérfanos, las viudas y los que, por enfermedad u otro motivo se hallan en dificultad, así como los prisioneros y los huéspedes que llegan de viaje; en una palabra, él asume el gravamen de todos los necesitados” (Justino - I Apologia Cap. 66-67 : PG 6,427 - 431).

Eucaristía
La Fe de los cristianos primitivos en la eucaristía: Cuerpo y Sangre de Cristo:

"Designamos este alimento eucaristía. A nadie es permitido de él participar, sin que crea en la verdad de nuestra doctrina, que ya haya recibido el bautismo de remisión de los pecados y del nuevo nacimiento, y viva conforme los enseñamientos de Cristo. Pues no tomamos estas cosas como pan o bebida comunes; sino, que así como Jesus Cristo, hecho carne por la palabra de Dios, tuvo carne y sangre para salvarnos, así también el alimento hecho eucaristía (...) es la Carne y la Sangre de Jesús encarnado. Así nos enseñaron." (primer libro de las Apologias de Justino, pag. 65-67.)



En Cristo
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Beber la Sangre, es beber del Espíritu Santo.
El Espíritu Santo es el que da Vida, lo mismo que la Sangre en la cual está la vida de toda carne.
La carne de Cristo por lo tanto representa la Palabra, que, llena de Vida por el Espíritu Santo, se convierte en una Palabra Viva y eficaz.
Con el sacrificio expiatorio de Cristo Jesús en la Cruz del Monte Calvario, los creyentes hemos sido hechos partícipes del Cuerpo y de la Sangre derramada por Cristo, lo que quiere decir que Cristo al ofrecerse voluntariamente a si mismo por nosotros, nos dió lo que el es, esto es, a comer de su Palabra y a beber de su Espíritu, para que tengamos en nosotros mismos Su Palabra y su Espíritu, los cuales nos limpian de todo pecado y contaminación y nos hacen partícipes juntamente con Cristo Jesús de la Vida eterna.


PERFUMISTA
Mmmm... sí, pero no hay que olvidar algo: "Quien no toma su cruz y me sigue no es digno de mí"... La fe en Dios es una fe que obra.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Justo… es así efectivamente…
y por esa razón usa Juan el evangelista el “nombre” Logos – el Verbo de Dios para denominar lo que es Cristo en Su totalidad.
Y en ello marca CAMINO… para la Unidad con, en y mediante Cristo Jesús para el creyente.
Te pongo un escrito antiguo de Justino el mártir aquí… es muy bello para dar algo de luz a lo que dije:

Participación de las criaturas racionales en el Logos
El punto céntrico de la apologética de Justino consiste en demostrar que Jesús Cristo es el Logos del cual todos los filósofos hablaron, y, por lo tanto, la medida que participan del Logos llegando a expresar una verdad parcial - viendo la verdad de modo obscuro - gracias a la semilla del Logos que en ellos fue depositada pueden decirse cristianos. Pero una cosa es poseer una semilla y otra es el propio Logos:

“Aprendimos que Cristo es el primogénito de Dios y que es el Logos, del cual participa todo el género humano” (Justino - Apol. Prima, 46).
“Consecuentemente, aquellos que vivieron antes de Cristo, pero no según el Logos, fueron malos, enemigos de Cristo (...) al contrario aquellos que vivieron y viven conforme el Logos son cristianos, y no están sujetos a miedos y perturbadores” (Justino – I Apologia).

Toda persona, creada como ser racional, participa del Logos, que lleva desde la gestación y puede, por lo tanto percibir la luz de la verdad.

Justino, convencido de que la filosofía griega tiende para Cristo, "cree que los cristianos pueden servirse de ella con confianza" y en conjunto, la figura y la obra del apologista "señalan a decidida opción de la Iglesia antigua en favor de la filosofía, en vez de ser a favor de la religión de los pagaos", con la cual los primeros cristianos "rechazaron con fuerza cualquier compromiso".

Justino, en particular, principalmente en su primera Apologia, condujo una crítica implacable con relación a la religión pagana y a sus mitos, que él consideraba como «caminos falsos» diabólicos en el camino de la verdad.

Así, Justino, y con él los otros apologistas, marcaron la toma de posición nítida de la fe cristiana por el Dios de los filósofos contra los falsos dioses de la religión pagana. Era la elección por la verdad del ser, contra el mito de la costumbre.

El Día del culto de los cristianos
Justino afirma que los cristianos guardaban como día sagrado a Dios el Domingo, pues fue este día que Jesus Cristo resucitó de los muertos:

“Reunimo-nos todos el día del Sol [el primer día de la semana era denominado de día de Sol en el Imperio Romano hasta el siglo IV], no sólo porque fue el primer día en que Dios, transformando las tinieblas y la materia, creó el mundo, pero también porque este mismo día Jesus Cristo, nuestro Salvador, resucitó de los muertos. Lo crucificaron en la víspera del día de Saturno; y el día siguiente a este, o sea, el día del Sol, apareciendo a sus apóstolos y discípulos, les enseñó todo lo que también nosotros os propusimos como digno de consideración” (Justino I – Apologia Cap. 66-67 : PG 6,427 - 431).

Descripción del culto de los cristianos
“El llamado día del Sol, se reúnen en un mismo lugar todos los que viven en las ciudades o en los campos. Se leen las memorias de los apóstolos o los escritos de los profetas, en la medida en que el tiempo permite. Terminada la lectura, aquel que preside toma la palabra para aconsejar y exhortar los presentes a la imitación de tan sublimes enseñamientos.
Después, levantamo-nos todos juntos y elevamos nuestras plegarias; como ya dijimos arriba, al acabemos de rezar, se presentan pan, vino y agua. Entonces lo que preside eleva al cielo, con todo su fervor, plegarias y acciones de gracias, y el pueblo aclama: Amén. Enseguida, se hace entre los presentes la distribución y el reparto de los alimentos que fueron eucaristizados, que son también enviados a los ausentes por medio de los diáconos.
Los que poseen muchos bienes dan libremente lo que les agrada. Lo que se recoge es colocado a la disposición del que preside. Este socorre los huérfanos, las viudas y los que, por enfermedad u otro motivo se hallan en dificultad, así como los prisioneros y los huéspedes que llegan de viaje; en una palabra, él asume el gravamen de todos los necesitados” (Justino - I Apologia Cap. 66-67 : PG 6,427 - 431).

Eucaristía
La Fe de los cristianos primitivos en la eucaristía: Cuerpo y Sangre de Cristo:

"Designamos este alimento eucaristía. A nadie es permitido de él participar, sin que crea en la verdad de nuestra doctrina, que ya haya recibido el bautismo de remisión de los pecados y del nuevo nacimiento, y viva conforme los enseñamientos de Cristo. Pues no tomamos estas cosas como pan o bebida comunes; sino, que así como Jesus Cristo, hecho carne por la palabra de Dios, tuvo carne y sangre para salvarnos, así también el alimento hecho eucaristía (...) es la Carne y la Sangre de Jesús encarnado. Así nos enseñaron." (primer libro de las Apologias de Justino, pag. 65-67.)



En Cristo
Estimada Kungens Ester. No coincido con este tipo de creencias... no pertenezco a la ICAR...

Porque me remito a lo que escrito está: "Nadie puede poner otro fundamento que no sea Cristo"... me ciño a ello. Así que coincidiremos en lo que compete a la Sagradas Escrituras.

Saludos y bendiciones,

Isle.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Sí, no estoy diciendo que en la vida cada vez que alguien dice que va a comer algo quiere decir que va a conocer algo, ni tampoco que en la Biblia cada vez que se habla de comer se refiere siempre a conocer, sino que en el modo de hablar oriental bíblico, muchas veces cuando se usa la expresión comer y beber se refiere a conocer.

Quisiera decir que el término "conocer" para la cultura hebrea no se considera válido sin la ejecución de la teoría... Para ellos, si no la aplicas no sabes nada.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Quisiera decir que el término "conocer" para la cultura hebrea no se considera válido sin la ejecución de la teoría... Para ellos, si no la aplicas no sabes nada.

No entendí que quisiste decir.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Mmmm, dame un momento que piense una mejor manera para plantearlo.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

No entendí que quisiste decir.

Me refería a que el significado e interpretación de las palabras cambia dependiendo de la influencia "cultural" con que lo veas.

Por ejemplo: Para un inglés denota falta de control emocional, en muchos contextos, la comunicación con exceso de gesticulación y movimientos de las manos. Mientras que para un italiano la gesticulación, los movimientos y la expresión de las emociones es de lo más normal y además necesario para establecer una buena comunicación... y así, muchísimos ejemplos por el estilo.

Pero mi observación se refiere o, mejor, considera la forma del pensamiento hebreo... que es el primer pueblo elegido por Dios. Pego a continuación un artículo que traje alguna vez en otro tema, pues no se poner el enlace exacto del post que quiero.

“Para aprender sabiduría e instrucción, para discernir dichos profundos, para recibir instrucción en sabia conducta, justicia, juicio y equidad” Proverbios 1:2-3
Para Aprender – ¿Qué significa “aprender sabiduría?
Bien, si eres griego, significa que retendrás información asociada con un tema. En este caso, el tema es sabiduría por lo que podría concluir que conocer sabiduría es conocer lo que necesito saber para lograr que la vida funcione de la manera en que debe funcionar.
En el mundo griego, las personas me llamarían sabio si soy capaz de tomar las decisiones adecuadas.
Usualmente asociamos sabiduría con valores morales. Un hombre sabio es quién discierne correctamente la diferencia entre lo bueno y lo malo. Así que desde la perspectiva griega, conocer sabiduría es saber la diferencia entre lo bueno y lo malo. ¿Comienza a parecerte familiar?

¿Cómo cambia esta explicación si doy pasos dentro del mundo hebreo? A fin de cuentas, los proverbios de Salomón no han sido escritos desde la perspectiva griega. El énfasis cambia dramáticamente, de comprender la información sobre el bien y el mal hacia la experiencia de la práctica de tomar decisiones santas.

En la perspectiva hebrea, estoy consciente cuando hago esto. Por lo tanto, el conocimiento viene como resultado de la acción, no de la comprensión intelectual.
Poseer sabiduría es actuar justamente. Hasta que mi pensamiento se convierte en acción, en realidad no sé nada. El saber es el proceso de internalizar personalmente aquello de lo que me percato para que mi comportamiento se transforme según ese conocimiento. Para el hebreo, el saber siempre es personal. No es recaudación de hechos. Es aquello que altera como vivimos.

Esta diferencia es esencial a la comprensión del concepto Neo testamentario de “conocer a Cristo.” Si mi vida no se ve alterada, si no hay señales de transformación según el carácter de Yeshua, entonces desde la perspectiva hebrea, nunca lo conocí. Mi declaración de comprender los datos sobre Jesús no significa nada. A menos que mi vida cambie, no sé quién es El.

Ahora este cambio también tiene implicaciones para comprender la Palabra de Dios. Conlleva la implicación de sabiduría que viene después de la relación, no antes. Implica que conocer a Dios es lo mismo que alinear mi vida con Su dirección. En otras palabras, la obediencia precede la comprensión.
Obedezco para ser capaz de comprender, no porque comprendo. Mientras retengo mi obediencia, permaneceré en la oscuridad. No puedo adquirir sabiduría hasta que obedezca primero.

Esto es exactamente inverso a nuestra epistemología (como sabemos) basada en el esquema griego. En el mundo griego, recogemos información antes de tomar una decisión. Pero en el mundo hebreo, decidimos antes de comprender. Piénsalo por un minuto. Parece locura. ¿Cómo puedo saber que debo decidir a menos que tenga la información correcta?

¿Quién propondría una teoría sobre las funciones del universo sin observar primero los hechos del universo? Esta clase de ciencia inversa lleva a teorías como la tierra plana y la alquimia. ¿Acaso la Biblia realmente sugiere que la ciencia debe llevarse a cabo sin evaluar los hechos?
¡Claro que no! Pero la epistemología de la Biblia no se interesa en el método científico. Se interesa en la santidad. Y en cuanto a la santidad, yo no puedo contestar la pregunta, “¿Qué debo hacer para estar en la relación correcta con Dios?” examinando primero los datos sobre mí y el mundo. Para responder esa pregunta, debo someterme a Su declaración antes de comprender la transformación espiritual.
En otras palabras, en lo referente a la santidad, la respuesta me es revelada, no la descubro. Por lo tanto, solo aprendo después de obedecer. Acepto la evaluación de Dios y Su juicio en vez del mío. Confío en Su Palabra en vez de confiar en mi determinación. Es entonces cuando me revela el resto.

Si alguna vez te has preguntado porque hay tantas personas que dicen, “intenté leer la Biblia pero no comprendo nada,” ahora ya conoces la respuesta. La obediencia viene primero. Dios viene a mí, me confronta y solicita mi obediencia. Hasta que acepte su propuesta, nada tendrá mucho sentido. Después que obedezco, descubro verdades que han estado presentes pero escondidas de mis ojos.
¿Quieres conocer sabiduría? Comienza donde Dios te pide que te sometas a Él. De nada sirve intentar evitarlo. Si deseas aprender la verdad, primero debes hacer la verdad que te muestran.
Dr. Skip Moen.
Traducción: Betsy Bendaña

Bendiciones,

Isle.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

No entendí que quisiste decir.

Me refería a que el significado e interpretación de las palabras cambia dependiendo de la influencia "cultural" con que lo veas.

Por ejemplo: Para un inglés denota falta de control emocional, en muchos contextos, la comunicación con exceso de gesticulación y movimientos de las manos. Mientras que para un italiano la gesticulación, los movimientos y la expresión de las emociones es de lo más normal y además necesario para establecer una buena comunicación... y así, muchísimos ejemplos por el estilo.

Pero mi observación se refiere o, mejor, considera la forma del pensamiento hebreo... que es el primer pueblo elegido por Dios. Pego a continuación un artículo que traje alguna vez en otro tema, pues no se poner el enlace exacto del post que quiero.

“Para aprender sabiduría e instrucción, para discernir dichos profundos, para recibir instrucción en sabia conducta, justicia, juicio y equidad” Proverbios 1:2-3
Para Aprender – ¿Qué significa “aprender sabiduría?
Bien, si eres griego, significa que retendrás información asociada con un tema. En este caso, el tema es sabiduría por lo que podría concluir que conocer sabiduría es conocer lo que necesito saber para lograr que la vida funcione de la manera en que debe funcionar.
En el mundo griego, las personas me llamarían sabio si soy capaz de tomar las decisiones adecuadas.
Usualmente asociamos sabiduría con valores morales. Un hombre sabio es quién discierne correctamente la diferencia entre lo bueno y lo malo. Así que desde la perspectiva griega, conocer sabiduría es saber la diferencia entre lo bueno y lo malo. ¿Comienza a parecerte familiar?

¿Cómo cambia esta explicación si doy pasos dentro del mundo hebreo? A fin de cuentas, los proverbios de Salomón no han sido escritos desde la perspectiva griega. El énfasis cambia dramáticamente, de comprender la información sobre el bien y el mal hacia la experiencia de la práctica de tomar decisiones santas.

En la perspectiva hebrea, estoy consciente cuando hago esto. Por lo tanto, el conocimiento viene como resultado de la acción, no de la comprensión intelectual.
Poseer sabiduría es actuar justamente. Hasta que mi pensamiento se convierte en acción, en realidad no sé nada. El saber es el proceso de internalizar personalmente aquello de lo que me percato para que mi comportamiento se transforme según ese conocimiento. Para el hebreo, el saber siempre es personal. No es recaudación de hechos. Es aquello que altera como vivimos.

Esta diferencia es esencial a la comprensión del concepto Neo testamentario de “conocer a Cristo.” Si mi vida no se ve alterada, si no hay señales de transformación según el carácter de Yeshua, entonces desde la perspectiva hebrea, nunca lo conocí. Mi declaración de comprender los datos sobre Jesús no significa nada. A menos que mi vida cambie, no sé quién es El.

Ahora este cambio también tiene implicaciones para comprender la Palabra de Dios. Conlleva la implicación de sabiduría que viene después de la relación, no antes. Implica que conocer a Dios es lo mismo que alinear mi vida con Su dirección. En otras palabras, la obediencia precede la comprensión.
Obedezco para ser capaz de comprender, no porque comprendo. Mientras retengo mi obediencia, permaneceré en la oscuridad. No puedo adquirir sabiduría hasta que obedezca primero.

Esto es exactamente inverso a nuestra epistemología (como sabemos) basada en el esquema griego. En el mundo griego, recogemos información antes de tomar una decisión. Pero en el mundo hebreo, decidimos antes de comprender. Piénsalo por un minuto. Parece locura. ¿Cómo puedo saber que debo decidir a menos que tenga la información correcta?

¿Quién propondría una teoría sobre las funciones del universo sin observar primero los hechos del universo? Esta clase de ciencia inversa lleva a teorías como la tierra plana y la alquimia. ¿Acaso la Biblia realmente sugiere que la ciencia debe llevarse a cabo sin evaluar los hechos?
¡Claro que no! Pero la epistemología de la Biblia no se interesa en el método científico. Se interesa en la santidad. Y en cuanto a la santidad, yo no puedo contestar la pregunta, “¿Qué debo hacer para estar en la relación correcta con Dios?” examinando primero los datos sobre mí y el mundo. Para responder esa pregunta, debo someterme a Su declaración antes de comprender la transformación espiritual.
En otras palabras, en lo referente a la santidad, la respuesta me es revelada, no la descubro. Por lo tanto, solo aprendo después de obedecer. Acepto la evaluación de Dios y Su juicio en vez del mío. Confío en Su Palabra en vez de confiar en mi determinación. Es entonces cuando me revela el resto.

Si alguna vez te has preguntado porque hay tantas personas que dicen, “intenté leer la Biblia pero no comprendo nada,” ahora ya conoces la respuesta. La obediencia viene primero. Dios viene a mí, me confronta y solicita mi obediencia. Hasta que acepte su propuesta, nada tendrá mucho sentido. Después que obedezco, descubro verdades que han estado presentes pero escondidas de mis ojos.
¿Quieres conocer sabiduría? Comienza donde Dios te pide que te sometas a Él. De nada sirve intentar evitarlo. Si deseas aprender la verdad, primero debes hacer la verdad que te muestran.
Dr. Skip Moen.
Traducción: Betsy Bendaña

Bendiciones,

Isle.
 
Re: Juan 6: 53.. Si no coméis mi carne, y no bebéis mi sangre, no tenéis vida en voso

Lo siento que se duplicó.