Tobías (Tobit). Es la historia de Tobit, un judío piadoso de la tribu de Neftalí deportado a Nínive que se queda ciego al caerle excremento de pájaro en ambos ojos. Tobit envía a Media a cobrar una deuda a su hijo Tobías, a quien un ángel que había tomado forma humana conduce a Ecbátana (Ragués, según algunas versiones). En el camino, Tobías logra pescar un pez, al que quita el corazón, el hígado y la hiel para quedárselos. Más tarde, se encuentra con una mujer que, aunque se había casado siete veces, seguía siendo virgen, pues el demonio Asmodeo había ocasionado la muerte de cada uno de sus siete esposos la misma noche de bodas. Animado por el ángel, Tobías se casa con la virgen viuda y ahuyenta al demonio quemando el corazón del pez y el hígado. A su regreso, hace que su padre recupere la vista valiéndose de la hiel del pez.
Es probable que el libro se escribiera originalmente en arameo alrededor del siglo III a. E.C. Dado el componente de superstición y error que hay en el relato, está claro que no fue inspirado por Dios. Entre las inexactitudes que contiene, se puede mencionar la siguiente: el relato afirma que Tobit vio en su juventud la revuelta de las diez tribus norteñas, un acontecimiento ocurrido en 997 a. E.C., después de la muerte de Salomón (Tobías 1:4, 5, BJ), y que más tarde fue deportado a Nínive con la tribu de Neftalí, lo que ocurrió en 740 a. E.C. (Tobías 1:10-13, NC, 732 a. E.C., nota.) De ser así, esto significaría que habría vivido más de doscientos cincuenta y siete años, cuando el caso es que en Tobías 14:1-3 (14:11, NC) se informa que Tobit murió a la edad de ciento cincuenta y ocho años.