Tengo malas noticias para todos los anti-Católicos que andan por ahí. La discusión sobre la Justificación en el Catecismo de la Iglesia Católica es perfectamente sana, incluso sobre los principios Protestantes. Como un Protestante Reformado que soy, yo no tendría problemas en afirmar todos y cada uno de los párrafos del CIC, 1987-1995. Debajo hay un resumen de mis pensamientos:
1. El párrafo 1987 afirma que: "La gracia del Espíritu Santo tiene el poder de santificarnos, es decir, de lavarnos de nuestros pecados y comunicarnos ‘la justicia de Dios por la fe en Jesucristo’ y por el Bautismo." Hago notar: 1) Romanos 8, 1-2 directamente atribuye a la obra del Espíritu Santo el que seamos liberados de la condenación. 2) La justificación seguramente incluye la limpieza del pecado (Romanos 4, 7; Hechos 15, 8-11). 3) Certeramente somos justificados mediante la fe (Romanos 5,1) de nuestra parte (en cuanto es algo que hacemos NOSOTROS por la gracia) y por el bautismo (Romanos 6, 4: note el contexto; Hechos 2,38; 22, 16) de parte de Dios (en cuanto el bautismo es algo que se hace PARA nosotros por el Espíritu mediante el Sacramento).
2. El párrafo 1988 afirma que participamos de los beneficios de la Pasión de Cristo y de su resurrección cuando somos unidos a su cuerpo. En otras palabras, es mediante la unión con Criso que participamos de sus beneficios. Quisiera agregar una palabra en relación a los distintos beneficios de la unión legal y mística aquí (las cuales, ambas, proceden de la unión personal con Cristo), pero no hay nada aquí que yo rechazaría como un Protestante.
3. El párrafo 1989 afirma que la conversión es la primera obra de la gracia del Espíritu Santo. También afirma que: "La justificación entraña, por tanto, el perdón de los pecados, la santificación y la renovación del hombre interior" Yo estaría de acuerdo, sólo que quisiera especificar que hay una doble justificación, y que la remisión de los pecados es previa a la santificación y a la renovación, como la causa es previa al efecto. Pero no hay nada en las palabras aquí que no pueda afirmar. No me requiere que base mi aceptación delante de Dios en la santificación y en la renovación del Espíritu.
4. El párrafo 1990 afirma que: "La justificación arranca al hombre del pecado... libera de la servidumbre del pecado" Estoy de acuerdo. Eso es lo que Romanos 6, 7.18-22 enseña directamente. La Justificación remueve la ira de Dios hacia mí. Una manifestación de la ira de Dios es la esclavitud del pecado (Romanos 1, 24.26.28). Por lo tanto, tengo que creer que cuando Dios me acepta en Cristo, como una consecuencia soy liberado de la servidumbre del poder del pecado.
5. El párrafo 1991 afirma que: “La justificación es, al mismo tiempo, acogida de la justicia de Dios por la fe en Jesucristo. La justicia designa aquí la rectitud del amor divino.” Estoy de acuerdo con que este es un aspecto de la justificación. Somos en el mismo momento aceptados en Cristo, e internamente renovados por la Gracia de Dios. Somos en el mismo momento ambas cosas, reputados como justos y hechos justos, por la unión personal con Cristo. Este párrafo se está enfocando en la última parte de la ecuación (pero ya ha hablado de la justificación como perdón y remisión de los pecados en el párrafo 1989).
6. El párrafo 1992 afirma: “La justificación nos fue merecida por la pasión de Cristo, que se ofreció en la cruz como hostia viva, santa y agradable a Dios y cuya sangre vino a ser instrumento de propiciación por los pecados de todos los hombres. La justificación es concedida por el bautismo, sacramento de la fe. Nos asemeja a la justicia de Dios que nos hace interiormente justos por el poder de su misericordia.” ¿Qué Protestante no quisiera gritar Amén! a tan claro pronunciamiento teológico? Se nos dice que: 1) Cristo nos mereció la justificación. 2) La sangre de Cristo es el instrumento de propiciación para todos los hombres (que son realmente justificados debo añadir). 3) La justificación se confiere en el Bautismo (doctrina protestante común). 4) La justificación nos conforma a la justicia de Dios que nos santifica. Nada aquí me requiere que base mi conformidad con la justicia de Dios sobre el hecho de que yo sea hecho justo internamente. El párrafo simplemente afirma que el Dios que hace eso me conforma a su justicia (yo preferiría pensar en imputación aquí), también me hace internamente justo. Incluso si el significado fuese que él me conforma a su justicia POR hacerme internamente justo, yo podría afirmarlo, en cuanto creo que la justificación incluye la transformación actual de la persona internamente (aunque yo no quisiera limitarla a eso, ni siquiera hacer de eso la base de mi aceptación delante de Dios)
7. El párrafo 1993 dice: “La justificación establece la colaboración entre la gracia de Dios y la libertad del hombre” No hay problema ahí. Estoy de acuerdo en que es "la incitación del Espíritu Santo” (Yo preferiría decir la regeneración inicial) que “precede y preserva” el asentimiento humano.
8. El párrafo 1994 dice: “La justificación es la obra más excelente del amor de Dios, manifestado en Cristo Jesús y concedido por el Espíritu Santo.” ¿Qué Protestante no estaría de acuerdo?
9. El párrafo 1995 dice que: “Haciendo nacer al ‘hombre interior’ la justificación implica la santificación de todo el ser.” En el sentido secundario de la regeneración como la nueva vida que empieza con la conversión, yo estaría de acuerdo. Y estaría de acuerdo en que la justificación “implica” dicha santificación, en cuanto aquella es la causa de ésta.
Paul Owen.
Traducido por mí sin permisos del autor.
Fuente: The Catholic Catechism on Justification
El tip para Alvin Kimel.
1. El párrafo 1987 afirma que: "La gracia del Espíritu Santo tiene el poder de santificarnos, es decir, de lavarnos de nuestros pecados y comunicarnos ‘la justicia de Dios por la fe en Jesucristo’ y por el Bautismo." Hago notar: 1) Romanos 8, 1-2 directamente atribuye a la obra del Espíritu Santo el que seamos liberados de la condenación. 2) La justificación seguramente incluye la limpieza del pecado (Romanos 4, 7; Hechos 15, 8-11). 3) Certeramente somos justificados mediante la fe (Romanos 5,1) de nuestra parte (en cuanto es algo que hacemos NOSOTROS por la gracia) y por el bautismo (Romanos 6, 4: note el contexto; Hechos 2,38; 22, 16) de parte de Dios (en cuanto el bautismo es algo que se hace PARA nosotros por el Espíritu mediante el Sacramento).
2. El párrafo 1988 afirma que participamos de los beneficios de la Pasión de Cristo y de su resurrección cuando somos unidos a su cuerpo. En otras palabras, es mediante la unión con Criso que participamos de sus beneficios. Quisiera agregar una palabra en relación a los distintos beneficios de la unión legal y mística aquí (las cuales, ambas, proceden de la unión personal con Cristo), pero no hay nada aquí que yo rechazaría como un Protestante.
3. El párrafo 1989 afirma que la conversión es la primera obra de la gracia del Espíritu Santo. También afirma que: "La justificación entraña, por tanto, el perdón de los pecados, la santificación y la renovación del hombre interior" Yo estaría de acuerdo, sólo que quisiera especificar que hay una doble justificación, y que la remisión de los pecados es previa a la santificación y a la renovación, como la causa es previa al efecto. Pero no hay nada en las palabras aquí que no pueda afirmar. No me requiere que base mi aceptación delante de Dios en la santificación y en la renovación del Espíritu.
4. El párrafo 1990 afirma que: "La justificación arranca al hombre del pecado... libera de la servidumbre del pecado" Estoy de acuerdo. Eso es lo que Romanos 6, 7.18-22 enseña directamente. La Justificación remueve la ira de Dios hacia mí. Una manifestación de la ira de Dios es la esclavitud del pecado (Romanos 1, 24.26.28). Por lo tanto, tengo que creer que cuando Dios me acepta en Cristo, como una consecuencia soy liberado de la servidumbre del poder del pecado.
5. El párrafo 1991 afirma que: “La justificación es, al mismo tiempo, acogida de la justicia de Dios por la fe en Jesucristo. La justicia designa aquí la rectitud del amor divino.” Estoy de acuerdo con que este es un aspecto de la justificación. Somos en el mismo momento aceptados en Cristo, e internamente renovados por la Gracia de Dios. Somos en el mismo momento ambas cosas, reputados como justos y hechos justos, por la unión personal con Cristo. Este párrafo se está enfocando en la última parte de la ecuación (pero ya ha hablado de la justificación como perdón y remisión de los pecados en el párrafo 1989).
6. El párrafo 1992 afirma: “La justificación nos fue merecida por la pasión de Cristo, que se ofreció en la cruz como hostia viva, santa y agradable a Dios y cuya sangre vino a ser instrumento de propiciación por los pecados de todos los hombres. La justificación es concedida por el bautismo, sacramento de la fe. Nos asemeja a la justicia de Dios que nos hace interiormente justos por el poder de su misericordia.” ¿Qué Protestante no quisiera gritar Amén! a tan claro pronunciamiento teológico? Se nos dice que: 1) Cristo nos mereció la justificación. 2) La sangre de Cristo es el instrumento de propiciación para todos los hombres (que son realmente justificados debo añadir). 3) La justificación se confiere en el Bautismo (doctrina protestante común). 4) La justificación nos conforma a la justicia de Dios que nos santifica. Nada aquí me requiere que base mi conformidad con la justicia de Dios sobre el hecho de que yo sea hecho justo internamente. El párrafo simplemente afirma que el Dios que hace eso me conforma a su justicia (yo preferiría pensar en imputación aquí), también me hace internamente justo. Incluso si el significado fuese que él me conforma a su justicia POR hacerme internamente justo, yo podría afirmarlo, en cuanto creo que la justificación incluye la transformación actual de la persona internamente (aunque yo no quisiera limitarla a eso, ni siquiera hacer de eso la base de mi aceptación delante de Dios)
7. El párrafo 1993 dice: “La justificación establece la colaboración entre la gracia de Dios y la libertad del hombre” No hay problema ahí. Estoy de acuerdo en que es "la incitación del Espíritu Santo” (Yo preferiría decir la regeneración inicial) que “precede y preserva” el asentimiento humano.
8. El párrafo 1994 dice: “La justificación es la obra más excelente del amor de Dios, manifestado en Cristo Jesús y concedido por el Espíritu Santo.” ¿Qué Protestante no estaría de acuerdo?
9. El párrafo 1995 dice que: “Haciendo nacer al ‘hombre interior’ la justificación implica la santificación de todo el ser.” En el sentido secundario de la regeneración como la nueva vida que empieza con la conversión, yo estaría de acuerdo. Y estaría de acuerdo en que la justificación “implica” dicha santificación, en cuanto aquella es la causa de ésta.
Paul Owen.
Traducido por mí sin permisos del autor.
Fuente: The Catholic Catechism on Justification
El tip para Alvin Kimel.